Los orígenes de muchas empresas del sector automotriz han comenzado o tenido vínculos con constructores de carrocerías. Uno de estos casos fué el de Ambrois , que comenzó carrozando buses Kenworth para luego pasar a comercializar (y en algún momento armar) vehículos Jeep y Mercedes Benz hasta la transferencia de dicha representación a su actual importador. Una de las primeras empresas que utilizó autobuses carrozados por Ambrois fué la efímera AMSA (Autobuses Montevideanos S. A.). Esta funcionó con menos de ochenta unidades, marca Kenworth equipadas con motores Buda. Fueron en su momento coches súper modernos y confortables, con dos puertas y sin plataforma, más anchos y espaciosos que los de CUTCSA. Conservaban sí la cabina individual para el chofer, casi la norma hasta mitad de los cuarenta. Estos ómnibus cubrían en mitad de los años sesenta las líneas 71 y 79, y a esa altura subir a ellos era como hacerlo a una coctelera enloquecida de hierros y de vidrios. El ruido era infernal, por lo que no eran pocos quienes evitaban deliberadamente tomarlos. En la foto adjunta se ve una de dichas unidades en la Rambla de la la Playa Ramírez. Pero luego de la Segunda Guerra Mundial , la demanda de transporte , especialmente urbano , hacía que A.M.de T. comprase numerosas unidades como la que se ve en la fotografía , detenida en la Estación Goes. Al igual que la unidad de AMSA , se trata de una carrocería Ambrois sobre chasis Kenworth equipado con motor Buda.