Página Oficial de la ATEPAC
Miembros de la OLAT,
Causa Común sin Fronteras
Haz
de la Donación de Órganos, una Nueva Cultura ®
Esta página pretende
ciber-publicar los manuales, libros, panfletos, testimoniales, escritos
que circulan por la República Mexicana o que amablemente nos envían
referentes a lo que es la hemodiálisis, diálisis, trasplante
y post trasplante.
"...Chela regresa a su
casa. Parecía imposible imaginarla preparando la comida, haciendo
la tarea con sus hijas, platicando con su esposo todo lo que ha pasado,
tomándose la medicina, corriendo al mercado porque ya es casi la
hora de comer, viendo el mar, sintiendo el sol, y darse cuenta que pudo
no haber regresado..."
"...y en el hospital cada día era una nueva historia, ¿dónde había estado yo antes? ¿En qué mundo vivía? ¿Por qué tanta gente en espera? ¿En dónde están los órganos de las personas, que teniendo conciencia, donaron y prepararon a la familia para que en el momento de la muerte se hagan los trámites necesarios? Descubrí que lo que no tenemos en nuestras narices no nos importa en realidad. Pues aunque no la vemos existe muchísima gente con la vida en un hilo, pero pensamos, ya habrá otras personas que les donarán. Pareciera que todo esto no existe hasta que nos sucede a nosotros..." Un testimonio de vida©® Por Miriam Ortíz Delgado Hola Miriam, soy la Doctora encargada de la anestesia... te puedes voltear de tu lado izquierdo. Mientras me doy la vuelta recuerdo que le quería preguntar por el cirujano. Se me había olvidado pedirle lo más importante: que me hiciera una cicatriz estética. Volteo para decirlo, siento algo muy extraño en toda la mitad de mi cuerpo. Trato de recorrerlo con la mente, y descubro que hay algo extraño como un medio círculo en todo mi estómago y termina en la espalda. ¡Parece como si me hubieran atado las manos! ¿Por qué no las puedo mover?, algo tengo en mi boca. Creo me está haciendo efecto la anestesia; eso me impide hablar, quiero hablar, trato de poner toda la atención en lo que está sucediendo, trato de abrir los ojos no me es fácil, ¿y esto que tengo en el cuello? Por favor déjenme pedirle al cirujano que me haga una herida bonita! Escucho voces. Pregunto, ¿qué es esto que tengo en la boca? Es el oxígeno no se lo quite por favor. ¿Ya me operaron? ¡Ya me operaron! Tengo frío, me hicieron una herida grandísima. Estoy despierta o es un sueño, me pregunto, vuelvo a abrir los ojos y sigo ahí, veo una luz muy intensa frente a mi, Señorita tengo frío. Por favor no se quite el oxígeno la voy a acercar más a la luz. ¿Por qué está tan frío este lugar? parece una bodega vacía, necesito una cobija, hago un esfuerzo por darme cuenta en dónde estoy, qué ha pasado. Pregunto por mi hermana, todavía no sale del quirófano; en cuanto salga yo le aviso, me parece estar divagando, y ¿estas mangueras? Sí, tengo razón, ya me operaron! Sí ya me operaron! Vuelvo a preguntar: señorita y mi hermana, ¿dónde está mi hermana? Todavía no sale, ya no tarda, en cuanto esté aquí le avisamos, Tengo frío. ¿por qué tengo esto aquí en el cuello? le pusimos un catéter. ¿Por qué? a mi nadie me dijo que me pondrían un catéter. Se movió la raquea y tuvimos que ponértelo. Recuerdo que lo único que podía ver era el techo inmenso y una luz “Cómo es posible que la enfermera piense que esa luz me va a calentar... a nadie le importa que esté yo aquí, a nadie le interesa saber que soy Miriam y que tengo frío”. ¿por qué me siento tan sola?. Ya te vamos a llevar al cuarto, tu hermana está bien, ¿dónde está? Está aquí y todo salió bien. No estoy segura si quiero dormir, lo que quiero es abrir los ojos, ¿estaré soñando?. Abro los ojos, y veo a mi mamá, a mi papá, a Pepe, a la tía Chelo. No llores, ya estás aquí y todo salió bien. Pero es que me duele. Ya todo está bien, me dicen. ¿cómo es que me pasaron a la cama? No recuerdo nada. Mi mamá me dice que Chela ya está en su cuarto. El tiempo es algo tan extraño en estos momentos, pareciera que no existe, en realidad ya era otro día y a Chela ya la habían subido a su cuarto, 10 horas después de haber terminado la cirugía. Mi mamá continúa diciendo, ¡ya está en su habitación y su riñón está funcionando! ¡Ya hizo pipí! Dormí tan profundamente cómo si no hubiera dormido en años. Ya tenía Chela sintiéndose mal como unos cinco o seis meses. Dolores de cabeza muy fuertes, sin energía para hacer cualquier cosa, ella cuenta que el tiempo se le hacía muy largo y con gran esfuerzo apenas si podía hacer ni la cuarta parte de lo que acostumbraba. Viene a la ciudad de México, y empiezan los análisis y entre doctores y hospitales, cada vez más demacrada. Todos nos preguntábamos ¿qué tendrá? Pero nadie decía nada, cuando no se sabe bien que está pasando y se tiene miedo, la pregunta se queda atorada en algún lugar en la garganta, parece como si quisiera salir, se sienten los sonidos pero ella no se atreve a salir por temor a que las dudas se hagan reales. Esas preguntas nunca llegan a la boca de nadie... por el momento. Hasta que un día al regresar Chela del doctor, me dice: tengo insuficiencia renal crónica, y en un mar de lágrimas continúa, necesito un transplante de riñón. ¿Qué? Sí, necesito un riñón, parece ser que mis riñones no funcionan. Dicen que pudo haber empezado desde hace mucho tiempo pero como no duelen, uno no se da cuenta, y cuando ya no funciona uno, el otro hace el trabajo de los dos. Me preguntó el doctor si tenía hermanos, cuando le dije que siete, me respondió que tenía mucha suerte, pues la lista de espera de un órgano es muy larga. ¿De que estás hablando? ¿Uno en vida te puede dar un riñón? Pues parece ser que sí, me contestó llorando, y yo con qué cara podría pedir un riñón. Inmediatamente pregunté, ¿qué, tenemos dos? ¿si con uno puedo vivir, para qué tenemos dos entonces? Y sin pensar en nada más le dije: de qué te preocupas, yo te lo doy. Mientras escucho todo esto, trato de acomodar las ideas en mi cabeza y razonar qué tan grave era toda esta situación. Buscaba una solución tratando de llegar a algo que no me incomodara. Sé bien que ella en ese momento ni siquiera oyó lo que le dije, la abracé y me fui. Supongo, aunque no lo sé de cierto, que todos los hermanos dijimos lo mismo en cuanto nos fuimos enterando. En realidad todos sabemos que vamos a morir, pero cuando alguna circunstancia te hace ‘darte cuenta’ de lo inevitable de la muerte, comienzan a surgir los miedos, las dudas, las reflexiones. ¿qué significa estar a punto de morir? Chela se pregunta: ¿Por qué a mí? Tengo un esposo, dos hijas que adoro, acabamos de construir nuestra casa, quiero y respeto mucho a mi familia, soy católica, y siempre procuro no herir a las personas. Como una pregunta sin interés, mi mamá le dice: ¿y por qué no a ti? Venían a mi cabeza innumerables ideas y opiniones propias y ajenas, algunas parecían verdades, y otras ni siquiera llegaban a expresarse lo suficientemente bien como para ser convincentes. ¿Es mío mi cuerpo? Parece que la pregunta está mal planteada. ¿Nos pertenece el cuerpo físico? ¿Puedo yo decidir sobre él? Cómo en un susurro escucho miles de voces diciendo: ‘tú cuerpo no te pertenece’ ¿dónde está la verdad? ¿A dónde me dirijo para conseguir orientación? ¿Acaso es el momento de hacer preguntas?. Parece que sí, la familia y los amigos también hacen preguntas, ¿por qué da esto? ¿Cuáles son los síntomas? ¿por qué no hacen esto? ¿por qué no buscan más opiniones? El teléfono empieza a sonar casi cada minuto, oigo los comentarios típicos que se dan en estas situaciones. Yo no lo haría, yo sí lo daría, bueno quién sabe, tú no lo donarías pues siempre has sido muy cobarde... y cuántos comentarios y opiniones más. En situaciones ajenas todos tenemos una opinión muy clara de lo que haríamos. Mi mamá está llena de energía, va y viene del doctor, hace la comida, recibe visitas, da explicaciones a todo el que llama, mi papá es el jefe de esta familia, parece estar metido en un mundo hermético y protegido, dentro de su corazón sabe bien que esta vez él no podrá tomar la decisión por nadie más. Los dos estaban dispuestos a ser el donadores, pero personas mayores de 60 años ya no son una buena opción. A la semana siguiente de la noticia, Chela empieza a sentirse más enferma que antes. En días pasados habíamos tratado de hacer como si la palabra transplante se hubiera borrado del diccionario. La hospitalizan y le hacen la diálisis, son unas mangueras en el estómago conectadas al peritoneo en donde se tiene que poner una cierta clase de agua y cambiarla 4 veces al día por el resto de su vida o hasta que se haga el transplante. El doctor nos dice que la diálisis es buena pues te permite vivir, aunque te va desgastando físicamente y emocionalmente, nos dice también, que se deberá de acondicionar un cuarto perfectamente aislado y esterilizado lo mejor posible, para hacerse debidamente los cambios de agua. Comienza la fuerza de la unión, llega mi hermana la mayor. Toño, otro hermano que vive fuera de la ciudad, llega también. Decidimos hacer una junta para ver quién está dispuesto en realidad a donar su riñón. Hay una especie de confusión, todos queremos tomar decisiones y hablamos, tal vez para que los otros no piensen mal de uno. El tiempo continúa corriendo y aún después de dos meses de diálisis, Chela sigue teniendo dolores de cabeza terribles, las ideas empiezan a fallarle, su mirada está como ausente, debe seguir una dieta muy estricta: no sal, no mucha azúcar, medio vaso de agua al día, no grasas, no leche y sus derivados... ¡esos ni olerlos siquiera! Su esposo a quien siempre le ha costado muchísimo separarse de ella aun por unas cuantas horas, tendrá que regresar a su casa con sus hijas, Bibi y Bere, que son cuatitas y tienen 10 años, tendrán que continuar su vida y organizarse, ¿quién les hará de comer? ¿Quién les ayudará a hacer la tarea? Por el momento nadie pone atención a tan simples cosas de la vida. Siempre le he tenido miedo al dolor, a las agujas y la sangre. Hoy me pregunto de dónde viene la fuerza y cómo es que soportamos y pasamos a través de todo esto, tal vez porque son tan sólo pasajeros. Nos hicimos los primeros análisis, para ver qué tipo de sangre tenemos, los ocho tenemos el mismo tipo de sangre, después vinieron los segundos análisis, que no tuvieron nada que ver con los primeros, éstos ya eran en ayunas, teníamos que estar a las 7 AM en el Hospital “Instituto Nacional de la Nutrición Salvador Zubirán”, donde nos operaron y donde el trato, la dedicación de todo el personal hacia los pacientes fue uno de los puntos clave para hacer todo esto posible. Regresando a los piquetes, sólo 3 de los 7 hermanos llegamos a estos análisis. La mañana era fría y ahí nos encontrábamos en los laboratorios del hospital, los cuatro, seres comunes y corrientes. A esa hora, ya había mucha gente, estaba también una familia, que llamó mi atención, ¿Por qué estaban todos aquí?, estaban también en el proceso de algún transplante. Les pregunté cuál era su problema y la mamá nos dijo; estamos aquí para ver quien es más compatible ya que nuestro hijo necesita médula ósea y ni yo, ni su papá somos compatibles. Pregunté, ¿los niños, no son muy pequeños? Sí dijo, pero por el momento no hay otra opción, ellos tienen 7 y 5 años y vamos a ver si alguno de ellos es compatible. En ese momento me di cuenta, que no éramos los únicos que enfrentábamos un problema de tal magnitud, me parecía otro mundo, había oído hablar y sabía de gente enferma, que sufría grandes dolores, pero todo era nuevo para mí. A la semana siguiente llamé al Hospital y pregunté por mis resultados de compatibilidad. ¿Es usted la Srita. Miriam? Sí, contesté inmediatamente, pues felicidades: usted salió 100% compatible y sus hermanos 50%. Yo no sabía si llorar o reír, en ese momento no se sabe qué pensar, qué sentir, con quién hablar, si rezar o esconderse. Hice como si nada hubiera pasado, salí de la oficina, tomé el coche y manejé a algún lugar lejos, dónde pudiera estar sola y pensar o mejor dicho tomar una decisión entre ser la mala de la película o la heroína, nunca antes me había puesto la vida en tal situación, esperaba encontrar una respuesta clara. Regresé a la casa y dije; salí 100% compatible, tendremos que ir a platicar con el doctor para que nos explique y oriente. Nos dijo que un riñón 50% compatible podría durar unos 15 años aproximadamente y uno 100%, 20 o más años, además de que la medicina sería prácticamente la mínima. Y sintiendo más miedo que nunca, dije: sí, yo te doy mi riñón. En realidad no puedo recordar el momento en que tomé la decisión. Me parecía como si toda mi vida hubiera sido una preparación para ese momento, como si ya hubiera estado planeado de antemano. ¿No era la vida la que me ponía en tal dilema?, ¿No era la vida la que estaba tomando la decisión? Ahí estaba la respuesta, uno no puede cambiar ni resolver las situaciones que se nos van presentando, todo surge y se desarrolla como debe, pero sí podemos cambiar nuestra actitud hacia ellas. Qué importaba como me vieran los demás, lo más importante era cómo me veía yo ante mi misma. ¡Mi actitud era la clave! En esos días, difíciles para todos, las dudas eran como puñaladas por la espalda, era verlas sin verlas. Chela enferma se sentía culpable por todo, hasta por el hecho de haberse enfermado. Hoy en día todavía tengo esa impresión. Si ella se diera cuenta, qué no fue ella quien provocó su enfermedad, por lo menos conscientemente, ¿se sentiría menos culpable?. La psicología moderna acepta que inconscientemente el ser humano se daña a sí mismo por alguna razón que desconoce. Si la ‘falta’ no es consciente, ¿por qué tendríamos que sentir culpa alguna? Creo que es una actitud muy común. Otra de mis hermanas tuvo el valor de decir: yo me formo a la cola. Si no hay nadie más, pues yo lo intentaré. Claro está, que ella también tiene su dotación de culpas. ¿cómo quitarnos tantas culpas que llevamos encima? ¿cómo aprender a no culpar a nadie y mucho menos a nosotros mismos? ¿será qué se vale aprender a ser feliz? Son los doctores los que saben, los que han estudiado y se han preparado; es en ellos en quienes voy a dejar toda la responsabilidad, uff!! Una responsabilidad menos, así que a ellos me dirijo para encontrar respuestas; ¿Doctor, como será mi vida? ¿Qué riesgos corro? ¿Podré hacer ejercicio? ¿Podré comer de todo como hasta ahora? El doctor nos dice, hay mucha gente que vive con un riñón. En ese entonces yo no conocía a nadie que viviera con un riñón. El doctor continúa, el riesgo que corres durante la cirugía es el mismo que cuando tomas un avión y sufres un accidente. La comida será normal, hemos tenido pacientes que hasta se vuelven más sanos ya que toman conciencia que con un riñón o dos, todos debemos cuidar nuestro cuerpo, ¿tú planeas tener hijos? Por el momento no está en mis planes, contesté, bueno en caso de que algún día tengas hijos hay un pero, si alguno llegará a necesitar un riñón no podrás dárselo. Todos nos reímos pero el doctor tenía razón, ahí había un pero. El doctor continuó, tienes todo el derecho a arrepentirte y decir no en cualquier momento, he conocido algunas personas que en el momento de la operación dicen no y no pasa nada. Es una decisión que siempre se respeta, todos sabemos lo que esto implica. así que por favor en el momento que tú quieras estamos aquí para ayudarte y respetar cualquiera que sea tu decisión. También nos dijo que el protocolo había empezado, otra palabra nueva en nuestro vocabulario, y que éste duraba de 3 a 4 meses. Si después de todas las pruebas todo salía bien y estaban seguros de que nada me iba a pasar a mí, y que era una buena opción para mi hermana, se fijaría la fecha para el transplante. El doctor también nos dijo que como médicos querían aliviar a una persona, mas nunca enfermar a otra, que habían tenido años de estudios y prácticas y que la mayoría de los donadores no habían presentado problema alguno. ¿Qué significa exactamente el protocolo? doctor, pregunté, esto ya es el protocolo y continúa con los análisis, pruebas para ver que todo esté bien, y que tu riñón, tu cuerpo y tu estado emocional estén en optimas condiciones para la donación. Te revisarán psicólogos, cardiólogos, oncólogos, y muchos otros especialistas y entre todos nos aseguraremos de tu salud y se hará todo lo posible para que tu hermana lo acepte lo mejor posible, hoy en día hay muchos medicamentos que ayudan a prevenir cualquier rechazo. Tuvo que pasar algún tiempo antes que todos empezáramos a retomar el problema, y de que tratáramos de ser más analíticos que emocionales. Cada uno vivíamos el problema desde nuestra perspectiva, la tensión, la preocupación y la visión de lo que significaba este nuevo ambiente familiar. Muchas discusiones y largas esperas. Los doctores nos dieron una lista interminable de pruebas y análisis. Lo de las agujas y los piquetes habían pasado a la historia, mi dignidad también; es algo que los enfermos conocen bien, los doctores te ven, te abren, te revisan, te voltean y uno se siente como un objeto. Ayunos, purgas, lavados intestinales, y yo me preguntaba ¿con qué se come eso? Algunas mañanas después de los análisis íbamos a desayunar y reíamos y nos apoyábamos unos en los otros. No sé por qué tendrá uno que vivir estos graves problemas para valorar y disfrutar con tanta intensidad el simple hecho de tomar un rico café en una linda mañana fría. Hoy de lejos, veo cuánto amor se requiere y ganas de luchar juntos por la vida, sólo para vivir y levantarte cada mañana y asomarte para ver si el Sol está ahí todavía. Busqué orientación, pero no se tiene el tiempo y la tranquilidad suficientes. ¿En dónde puedo platicar con alguien que haya donado un riñón, quién ha escrito algo? Empecé a oír que la hermana de la cuñada de un amigo había donado un riñón. Que un amigo había donado médula ósea a su hermano, y en el hospital cada día era una nueva historia, ¿dónde había estado yo antes? ¿En qué mundo vivía? ¿Por qué tanta gente en espera? ¿En dónde están los órganos de las personas, que teniendo conciencia, donaron y prepararon a la familia para que en el momento de la muerte se hagan los trámites necesarios? Descubrí que lo que no tenemos en nuestras narices no nos importa en realidad. Pues aunque no la vemos existe muchísima gente con la vida en un hilo, pero pensamos, ya habrá otras personas que les donarán. Pareciera que todo esto no existe hasta que nos sucede a nosotros. Las opiniones y comentarios decían “yo sí lo donaría”, o “no yo no lo donaría”, pero muy pocos o mejor dicho a una sola persona oí comentar: ¿y si soy yo la próxima en necesitar un órgano?. Había noches en que la angustia propia y colectiva me ahogaban, otras veces parecía olvidarme de que el Sol volvería a brillar y era aquélla tan sólo una pasajera tarde nublada. Alguien me dijo “los cobardes y los valientes sienten el mismo miedo, la única diferencia entre ambos es que el valiente lo logra”. En ese entonces aquellas palabras fueron de gran ayuda, pues yo creía que el miedo que me acorralaba y paralizaba era síntoma de que no lo lograría. Que para una persona valiente esto sería pan comido, pero para mí significaba que yo no era capaz de algo así, y que era el momento de que una miedosa como yo, dijera no... y que, por lo menos, lo hiciera a tiempo. Yo no quería que Chela me viera llorar o sufrir pues, con toda la razón, el miedo de ella saldría a flote, ¿y si se arrepiente? Imaginaba yo por un momento como toda la esperanza de la vida se alejaba al verme tambalear o dudar. Nadie quería que yo sufriera, que fuera a ser algo terrible para mí, llegó a mi mente una pregunta, ¿si yo no doy mi riñón y por alguna razón algo sale mal, cómo sería mi vida? ¿podría vivir bien y mantenerme sin culpas? Se había caído el monstruo. Me di cuenta que el deseo de ayudar a alguien más no era más que el deseo de ayudarme a mi misma, que lo que yo estaba pensando de ayudar a alguien más no era el móvil, sino más bien ayudarme a mi misma. De alguna manera, todo esto, me estaba dando el regalo de conocerme, de valorarme, de saber y sentirme útil en la vida, y dentro de estos laberintos también encontré el permiso para ser feliz. Hubo mucho que aprender y tal vez, ésta fue una de las enseñanzas más hermosas que tuve. Han pasado dos días y me dicen que todo está bien. Yo todavía no me he levantado de la cama, también me dicen que Chela está como nueva, que sus ojos tiene una luz muy especial otra vez, que come de todo hasta con sal, que platica y platica y que pregunta mucho por mí. No puede venir a verme pues, como le bajaron las defensas, necesita estar aislada. Se deben tomar todas las precauciones posibles. Se me hace imposible caminar hasta allá, son dos cuartos de distancia. Al tercer día me animan, me dicen que debo caminar, me armo de fuerza y voy hasta allá, cada paso me parecía haber subido a la cima del Popocatépetl. La veo y no puedo creerlo, camina, se ríe, ¿y yo? ¿Qué es lo que pasó? Trato de que no se note. Hermanita, ¿cómo estás tú? Me pregunta sonriendo. ¿Estará fingiendo? ¿estará haciendo un gran esfuerzo para que yo me sienta bien? Estoy bien amolada y me duele todo, le digo. Una enfermera que está por ahí me dice, ¡y cómo no, si te partimos a la mitad! Chela comenta, es lo que nos dijeron los doctores, que tú estarías peor al principio, pero que te mejorarías sin ningún problema. Para mí, la operación no fue tan complicada pero sí es muy delicada, a mí me pusieron tu riñón aquí enfrente en el estómago, tócalo ¡lo puedes sentir!. En mis primeras visitas al hospital pensaba que estos eran los lugares más horribles del mundo, qué poco sabía yo, en el hospital uno se siente muy segura, todo está dispuesto para que un enfermo tenga cierta comodidad, hay enfermeras, personas que saben cómo levantarte y qué darte en caso de dolor, y cuando llega el día que te dan de alta valoras todo esto, llegué a mi casa y lo primero que vi fueron las escaleras, al llegar a mi cama me di cuenta que no tenía un barandal para apoyarme y levantarme, el baño está lejísimos, no hay ni paredes cercanas a mi alrededor, y si necesito algo... Qué mal hemos diseñado todo, nadie ha pensado en los enfermos; en la regadera no hay ni dónde sentarte, y la toalla, ¿dónde puedo ponerla cerca y que no tenga que agacharme o estirarme?. ¡Qué vulnerables somos, cuánto necesitamos de los demás! Mi orgullo se enfrenta a su peor pesadilla, ¿Yo, necesitar de los demás?. Nadie, ningún doctor mencionó que esto sería así. Mariana mi sobrinita de 9 años llena de ternura, se apiadó de mí y me puso crema en todo el cuerpo, ¡qué sensación más rica!. Me dicen que Chela está mal, que parece que tiene un rechazo, me cae la noticia como una tonelada de agua fría sobre mi cara, y pienso en todo por lo que estoy pasando y que tal vez no sirva de nada. Mi corazón se detiene, no puedo oír la voz de mi madre diciendo; será lo que Dios quiera. Tengo sed, pero una sed que no se alivia con el agua. Mientras yo me recupero día a día y no tengo que levantarme para ir al hospital, Chela tiene que ir diario, para ella la batalla no ha acabado, la veo luchar poniendo la vida en cada paso y ante cada nuevo dolor, la familia se debate entre la locura y la sensatez para salir adelante, uno no se da cuenta, pero la fuerza de la voluntad está ahí, siempre con nosotros lo sepamos o no, de qué otra manera podríamos explicarnos cómo es que uno sale adelante en este tipo de situaciones. Han pasado seis meses desde la cirugía, Chela regresa a su casa. Parecía imposible imaginarla preparando la comida, haciendo la tarea con sus hijas, platicando con su esposo todo lo que ha pasado, tomándose la medicina, corriendo al mercado porque ya es casi la hora de comer, viendo el mar, sintiendo el sol, y darse cuenta que pudo no haber regresado. Yo no tuve que imaginarla: la vi, y en ese momento lo supe, aunque hubiera sido un sólo día más de tenerla junto a mí, habría valido la pena. Solté un gran peso que había venido cargando desde que todo comenzó. Pase lo que pase, existe una fuerza más grande que nosotros que siempre sabe lo que está haciendo y por qué lo está haciendo. Comprendí que hay cosas que no se pueden agarrar con las manos, pero sí detenerlas en el corazón. El frío se me quitó, me sentí cobijada y protegida y supe también, que no estamos solos. Todo estuvo dispuesto para darle este regalo de vida, las sabias manos de los doctores, la fuerte voluntad y esmero de Chela, el cariño y las ganas de ayudar de todos los amigos y de toda la familia. Sigo aprendiendo a reconocerlo, se llama Amor. Miriam.
SEGUNDO
GANADOR EN LA CATEGORÍA DONANTE INTRAFAMILIAR
El jueves 30 de noviembre
del 2000, a las 7 p.m., en el Auditorio de Suramericana (Colombia),
se
En total se recibieron 73 testimonios provenientes de 7 países: Colombia, Venezuela, Ecuador, Chile, Argentina, México y España. El jurado escogió 16 testimonios ganadores en las categorías · TRASPLANTADOS:
personas que han recibido un trasplante de cualquier órgano o tejido.
Agregado a este sitio el
26 de diciembre del 2000 con el permiso de la autora Miriam C. Ortíz
Delgado.
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Sistema Estatal de Salud del Estado de Puebla Centro Estatal de Trasplantes Trasplante Renal Manual para el paciente y su familia Dr. Jaime M. Justo Janeiro
Dr. José Luis
Medina
Dr. Jesús Mier
Naylor
Dr. Carlos Colchero
Garrido
Dr. Guillermo Victoria
Morales
LIC. MANUEL BARTLETT
DÍAZ
DR. EDUARDO VÁZQUEZ
VALDÉS
DR. JAIME M. JUSTO
JANEIRO
1998
índice
Presentación
Puede haber sido un pariente cercano tuyo o un desconocido; sea quien fuere, realizó una acción de enorme contenido moral y lo menos que podemos pedirte es que estés muy consciente del sacrificio de otro por ti y que esto te obliga a cuidarte y a seguir las instrucciones de los médicos que pronto serán tus amigos, indudablemente. A ningún profesional de la Medicina le puedes pagar de mejor forma que recuperándote totalmente. Es también indispensable que valores el esfuerzo que la sociedad ha hecho al poder desarrollar centros públicos y privados en donde se realizan trasplantes de riñón: Ha sido un larguísimo y con frecuencia amargo camino el que hemos recorrido en Puebla para poder tener un sistema consolidado que permita esto que hoy es casi rutina, pero que llevó muchos años perfeccionar. Asimismo valora el esfuerzo de tus médicos: el sacrificio que han hecho durante horas y horas de estudio y de trabajo es algo que difícilmente puedes imaginar pero, en Puebla, los profesionales de la Medicina se encuentran entre los mejores del mundo y tú podrás comprobar cómo, con su afecto y entrega, harán de tu vida y la de tus familiares algo totalmente diferente a lo que habías imaginado. El afecto y desprendimiento de quienes conforman un equipo de trasplantes es un ejemplo para todos. Por último, el esfuerzo del Gobernador Manuel Bartlett Díaz, su compromiso con Puebla, su compromiso con quienes sufren marginación, pobreza o, como en tu caso, enfermedades tan difíciles de tratar, hicieron posible desarrollar el Sistema Poblano de Trasplantes. En nuestro estado hoy no importa si tienes o no derecho a la seguridad social o suficientes recursos económicos: Siempre que lo necesites, está al alcance de tu mano la respuesta a tus necesidades. Puebla es, gracias a Bartlett Díaz, ejemplo nacional: 99 de cada 100 poblanos tiene acceso a servicios de salud, y en todos los hospitales de la entidad se pueden diagnosticar enfermedades como la tuya y realizarse un trasplante en muchos de ellos. La forma como puedes retribuir un poco a ese esfuerzo, es orientando a cualquier enfermo que se acerque a ti, hacia las unidades del Sistema Estatal de Salud para que se pueda atender de manera adecuada. ¡Enhorabuena y a cuidarse
y recuperarse!.
Objetivo
Los temas que veremos son los relativos a tu enfermedad, la posibilidad del trasplante, quién será tu mejor donador, la evaluación del donador y receptor, el tratamiento antes del trasplante, la cirugía y el tratamiento posterior, los cuidados que deberás tener en casa y las complicaciones pudieran surgir, la forma de reconocerlas y su tratamiento. Es muy importante que leas
atentamente este manual, que lo discutas con tu familia y cualquier duda
o aclaración que tengas se la presentes a tu médico tratante
quien tiene la obligación de resolverla con toda amplitud y a tu
entera satisfacción, te sugerimos que las preguntas que te surjan
las anotes para que se las hagas a tu médico en la próxima
entrevista que tengas con él.
introducción
El éxito del trasplante depende inicialmente del estado del paciente al momento de la operación, por lo que es de primordial importancia que estés en un buen estado nutricional, bien dializado, seas una persona ordenada y obediente en tus tratamientos y dietas; la disciplina es parte fundamental en tu tratamiento tanto antes como después del trasplante. Pese a lo complejo que pudiera
parecer, el orden y la disciplina lo hacen todo, y ello está sólo
en tus manos, el apoyo de tu familia será fundamental.
el equipo de trasplante
En el hospital hay un comité de que evaluará tu caso y determinará la factibilidad del trasplante y la idoneidad de tu donador, también vigilará tu manejo y evolución, de manera que se haga con toda claridad. La mayor parte de los pacientes renales crónicos son candidatos a un trasplante de riñón. El equipo de trasplante incluye:
nefrólogo, cirujanos, urólogo, anestesiólogos, enfermeras,
nutrióloga, trabajadoras sociales y el coordinador de trasplantes.
evaluación pretrasplante
Por lo general un buen candidato a recibir un trasplante un riñón en trasplante sólo debe estar enfermo de insuficiencia renal, por lo que la evaluación pretrasplante incluye la detección de otras enfermedades, especialmente las infecciosas, y otras como enfermedades del corazón, pulmones y del hígado. También es importante el tipo de diálisis que tienes y, de acuerdo con el programa de evaluación que se haga, determinar si seguirás en ese tipo de diálisis u otra (peritoneal o hemodiálisis). Otra evaluación importante es la relativa a determinar quién es el mejor donador y su grado de compatibilidad contigo, toda vez que ello determina el tipo de tratamiento que tendrás después del trasplante. En general los estudios que se deben realizar son: de sangre, orina, excremento, expectoración, radiología, inmunología, ginecología (en caso de ser mujer), endoscopías (gastrointestinal y urológica), urología, odontología, otorrinolaringología, evaluación psicológica, de trabajo social y nutricional. Después de completar
tu estudio, el caso se presenta ante el comité de trasplantes del
hospital, donde se determinará la posibilidad del trasplante de
acuerdo con tu enfermedad de base, con tu estado de salud y con tu donador;
casi todos los pacientes con insuficiencia renal crónica terminal
son candidatos a trasplante, siempre vigilando la observancia de las normas
éticas y médicas que rigen a los trasplante de órganos.
el donador
En caso de que no tengas un donador aceptable en tu familia, debemos integrarte a la lista de espera de pacientes en espera de un riñón de cadáver. Dentro del estudio pretrasplante también es muy importante la evaluación del donador, quien debe de ser completamente sano para poder donar, también se requiere de una gran cantidad de estudios de laboratorio y gabinete que nos dirán que no existe riesgo de quitarle un riñón, que no existe riesgo de transmitir una enfermedad con el órgano donado y que éste será bien aceptado por el receptor. El donador vivo no tiene ningún riesgo por quedarse sin un riñón, desde luego se trata de una cirugía mayor y deberá estudiarse y prepararse para ella, tratándose de un individuo previamente sano con estudios exhaustivos previos, incluyendo del cardiólogo, lo que disminuye notablemente el riesgo propio de la cirugía. Desde luego, se trata de una cirugía mayor que requiere una recuperación postoperatoria de dos a tres semanas de incapacidad. Cuando se toma el órgano de un donador vivo, la cirugía se programa en forma electiva cuando sea el mejor momento para ello, pero de entrar a la lista de espera de donador cadavérico, la cirugía se realiza de urgencia, por lo que es indispensable que tengamos siempre una muestra de tu sangre vigente (debes entregarla si falta en el hospital cada dos meses), tu estudio como receptor deberá estar completo y deberemos tener todos los teléfonos y direcciones de los lugares en donde te podemos localizar siempre. En el trasplante renal de donador cadavérico el tiempo es un factor muy importante, por lo que tu localización debe ser rápida y simple. Cuando se te da el aviso
de acudir al hospital porque existe un donador, sólo estamos tomando
en cuenta que pertenece a tu mismo grupo sanguíneo y aún
debemos realizar estudios de compatibilidad, por lo que puede ocurrir que
después de ellas se determine que no eres compatible con el donador
y no se realice el trasplante en ese momento.
el trasplante
Ingresarás a un cuarto aislado tres días antes del trasplante para iniciar con los medicamentos de inmunosupresión, a partir de entonces las visitas estarán restringidas y tendrás que usar un cubre bocas todo el tiempo. El donador se ingresa un día antes y no requiere ningún cuidado especial ya que se encuentra completamente estudiado. Ambas cirugías (retirar
el riñón del donador y colocarlo en el receptor) se realizan
simultáneamente y duran aproximadamente 5 horas. No se extraen los
riñones originales y en caso de existir un catéter peritoneal,
se extrae antes de la cirugía. El riñón trasplantado
se coloca en la parte baja y anterior de tu abdomen y puede ser del lado
derecho o izquierdo.
El tiempo de tu estancia hospitalaria dependerá del funcionamiento de tu nuevo riñón y de tu recuperación del procedimiento . Durante tu estancia en el
hospital es muy conveniente que aprendas todo lo relativo a los medicamentos
que tomarás, su fórmula, su dosis, nombre comercial, presentación
y horarios para tomarlos; cualquier cambio deberá ser indicado sólo
por el médico que te trata. Si requieres tomar medicamentos que
sean recetados por otro médico, siempre deberás consultarlo
con tu médico tratante ya que pueden interferir con los que tomas
para evitar el rechazo de tu nuevo riñón.
inmunosupresión
Los medicamentos usados en la inmunosupresión son para tomarse TODA LA VIDA aunque poco a poco y bajo la dirección de tu médico tratante, la dosis se irá disminuyendo, esto requiere un estrecho control ya que la posibilidad de un rechazo aumenta con dosis bajas de inmunosupresión. No podrás alterar las dosis ni los horarios sin la indicación estricta de tu médico tratante. Algunos medicamentos inmunosupresores usados con más frecuencia son: Azatioprina, nombre comercial: Imuran, se presenta en tabletas de 50 mg. y deberás tomarla para TODA LA VIDA, a menos que los efectos secundarios sean tan intensos que debas suspenderlo, en caso de ocurrir esto tu médico tratante te dará otro medicamento para suplir el efecto de la Azatioprina. Actúa en la médula ósea impidiendo la fabricación de glóbulos blancos (especialmente linfocitos). Algunos de sus efectos secundarios son vómito, caída del cabello, anemia y disminución importante de la cantidad de leucocitos en la sangre (esto último es lo que podría hacer que se suspenda su administración), sus efectos se vigilan tomando análisis periódicamente (biometría hemática). Prednisona, nombre comercial: Meticorten, se presenta en tabletas de 5, 20 y 50 mg. (es muy importante fijarse en la cantidad marcada ya que las cajas son exactamente iguales). Es un corticoide que tiene muchos efectos secundarios a dosis altas pero, poco a poco, se disminuyen hasta llegar a tomar de 10 a 25 mgs. por día. Algunos de sus efectos secundarios
son:
Otros efectos secundarios que notarás son: acné y a muy largo plazo la aparición de cataratas. Ciclosporina, nombre comercial: Sandimun Neoral, se presenta en solución para tomar por vía oral y contiene 100 mgs. por ml., el frasco contiene 50 ml., también se presenta en cápsulas de 25, 50 y 100 mgs. Lo tomarás sólo un tiempo después del trasplante dependiendo del grado de compatibilidad entre el donador y el receptor. Este medicamento requiere un manejo delicado ya que a pesar de protegerte contra el rechazo, uno de sus efectos secundarios más importantes es la toxicidad para el riñón, por lo tanto la dosis se debe ajustar cuidadosamente de acuerdo al peso y edad del paciente y de la función del riñón, se deben tomar análisis de sangre para saber cuál es la concentración del medicamento y ajustar la dosis. La absorción del medicamento depende de muchos factores, especialmente el horario, el tipo de envase y el jugo con el que se toma; les pedimos que lo tomen a las 9: 00 y 21: 00 hrs. en un envase de plástico (no debe ser de unicel o vidrio) y acompañado de 1/2 vaso de jugo de manzana o naranja. Algunos de sus efectos secundarios son: Crecimiento del vello corporal,
especialmente en los brazos y la cara.
A pesar de presentarse los efectos mencionados, están relacionados con las dosis y desaparecen al suspenderse el tratamiento, esto sólo lo podrá indicar tu médico tratante NUNCA DEBERÁS DISMINUIR LA DOSIS 0 SUSPENDER EL MEDICAMENTO SIN INDICACIÓN DE TU MEDICO TRATANTE. Después de abrir el frasco sólo dura 2 meses, debes tener cuidado también con la fecha de caducidad que marca el límite de utilidad del mismo. Una gran cantidad de medicamentos
incrementan los niveles en la sangre de la ciclosporina y esto afecta tu
riñón. Antes de tomar cualquier medicamento que interactúe
con la ciclosporina se te deberá ajustar la dosis y vigilar su cantidad
en la sangre.
cuidados en casa
Dieta: después del trasplante en general existen pocas restricciones para comer o beber, si eres diabético requieres una dieta para diabético, en caso de permanecer con presión alta deberás disminuir la ingesta de alimentos con sal; debido a la prednisona, tu apetito aumentará y, si no te cuidas, aumentará también tu peso. Dentro de la evaluación pretrasplante y para ayudarte después del trasplante, en el equipo existe una nutrióloga que trabaja en conjunto con el equipo médico y te ayudará a controlar tu peso y a alimentarte sanamente sin perjudicar a tu nuevo riñón, se te proporcionará una dieta especial para tu peso y estado físico al salir del hospital, pero en general algunos alimentos que debes ingerir con medida son: Altos en sodio: tocino, salchichas, sopas enlatadas, papas fritas, cebollas y sal. Altos en azúcar: gelatinas, pasteles, dulces, helados, galletas, pan dulce. Harinas: pan y tortillas. Altos en calcio: leche, yogurt, queso, almendras, salmón. Altos en potasio: plátano, naranja, todos los cítricos, pasas, fresas y picante. Líquidos: si la función de tu nuevo riñón es normal, en general no existe restricción en cuanto a la cantidad de líquidos que deberás tomar, incluso deberás aumentar la cantidad de los que regularmente tomas para mantener en buen funcionamiento el riñón. Una buena cantidad son más de 2 litros de agua libre al día, aparte de lo que ingieras con tus alimentos. Alcohol: las bebidas alcohólicas pueden ser tomadas con moderación y ocasionalmente, solo bebidas fermentadas como la cerveza o vino y no más de tres vasos por semana, recuerda que son líquidos altos en calorías y contribuyen a aumentar tu peso. Temperatura: siempre ten a la mano un termómetro, si te sientes con temperatura alta (más de 37.8 grados) y persiste por más de 24 hrs. avisa de inmediato a tu médico tratante. Peso: todos los pacientes trasplantados suben de peso, debido a los esteroides (prednisona) que toman, al incremento del apetito y a la falta de ejercicio inicial, además antes del trasplante te encontrarás con cierto grado de desnutrición, el aumento de peso indica una rápida recuperación pero deberá ser medido cuidadosamente, ya que incrementos importantes de acuerdo con tu peso ideal también provocan problemas de salud. La dietóloga del equipo te ayudará a llevar un control adecuado de tu peso en conjunto con tu dieta Actividad física: existen pocas restricciones después del trasplante, lo más recomendable es llevar una vida normal; es recomendable no realizar esfuerzos físicos intensos antes de cumplir 5 semanas de operado. Tu trabajo habitual lo realizarás después de 2 meses y podrás manejar, caminar o correr, nadar, etc., es conveniente no practicar deportes de contacto físico intenso como basquetbol, fútbol americano, box, karate, etc., recuerda que tu nuevo riñón no tiene la protección de las costillas y se encuentra casi por debajo de la piel, un golpe directo puede dañarlo. Sexo y embarazo: La enfermedad renal disminuye el apetito sexual pero se recupera paulatinamente después del trasplante, en general no existen restricciones, pero deberás tener cuidado con tus parejas sexuales, recuerda que eres más susceptible a las infecciones. Una mujer que no ha entrado en la menopausia sufre trastornos menstruales e inclusive puede dejar de menstruar con la enfermedad. Después del trasplante la actividad hormonal se regulariza, puede ovular e iniciar un embarazo, en caso de desear embarazarse debes consultar a tu médico y planearlo, requieres un control estricto y se recomienda esperar más de un año con buena función renal para embarazarse. Puede haber trastornos menstruales también después del trasplante por efecto de los medicamentos que tomarás, al disminuir las dosis y conforme pasa el tiempo tus ciclos se normalizarán. Oculista: debes realizar visitas rutinarias al oftalmólogo ya que el uso prolongado de esteroides a dosis altas puede afectar tu agudeza visual. Dentista: el cuidado de la dentadura se inicia antes del trasplante y deberá mantenerse después. Para los procedimientos habituales como obturaciones (tapaduras) y limpiezas no requieres ningún cuidado especial y puede administrarse anestesia sin riesgos adicionales; en caso de ser sometido a otro tipo de procedimientos que pudieran afectar la. integridad de tus encías como extracciones, es conveniente iniciar con ampicilina 500 mgs. cada 6 hrs. un día ante del procedimiento y continuar con ella durante 7 días más, en caso de ser sensible a la ampicilina, se administrarán sulfas a las dosis habituales. Vacunas: existen una gran
cantidad de vacunas que pueden aplicarse antes o después del trasplante,
es necesario que antes de administrarte cualquiera de ellas, y consultes
con tu médico tratante.
Infección
Los cuidados y precauciones habituales incluirán: lavado de manos antes de comer y después de ir al baño, baño diario en regadera, evitar el contacto con personas enfermas, no tener contacto cercano con animales domésticos, no tener alfombra en tu habitación, limpiar con cloro el excusado antes de usarlo, tomar sólo agua purificada de buena calidad, cocinar todas las verduras, lavar bien los alimentos y cocinarlos con agua purificada, no ingerir alimentos en la calle. Los primeros meses después del trasplante deberás ser más cuidadoso, no deberá permanecer más de una persona en tu habitación contigo y usando cubre bocas, sólo saldrás de tu habitación para lo indispensable y si debes acudir al laboratorio o a cita con tu médico tratante, deberás de cubrirte muy bien. Si se presenta fiebre y dura más de 24 hrs. avisa de inmediato a tu médico tratante. En caso de ser menor de edad,
se debe avisar a los profesores o funcionarios escolares que avisen de
inmediato a los padres ante cualquier caso de enfermedades contagiosas
en la escuela (como varicela, hepatitis, etc.).
rechazo
Los datos que te pueden indicar que existe un rechazo son: - Fiebre (después
de haber descartado una infección).
En caso de presentar uno o más de los datos anteriores, deberás comunicarte de inmediato con tu médico tratante, el rechazo puede ser leve, moderado o severo y puede ser necesaria hasta una biopsia, el diagnóstico y manejo dependerán de la decisión de tu médico tratante después de evaluarte y ver tus exámenes de laboratorio. El presentar uno o varios
episodios de rechazo no significa que tu riñón esté
perdido, en cambio, la falta de diagnóstico y el tratamiento oportuno
SI puede ocasionar que lo pierdas.
citas al laboratorio
Deberás de ir a laboratorio
o gabinete de rayos X bien cubierto y usando cubre bocas, recuerda que
otros enfermos estarán contigo en ese momento. Indícale al
personal de laboratorio que eres un paciente trasplantado para que se te
tome la muestra a la hora exacta y de preferencia rápidamente para
que regreses a tu casa de inmediato.
CITAS Fecha
dosis y horarios de medicamentos
Nombre comercial
Directorio de médicos
el programa estatal de trasplantes Tu actividad posterior al trasplante será ilimitada, podrás desarrollar cualquier prácticamente cualquier actividad de acuerdo con tu edad y capacidad física, podrás dedicarte a trabajar, estudiar, al hogar, casarte, tener hijos, etc., con las restricciones ya mencionadas acerca de los deportes de contacto físico intenso. El costo de tu trasplante estará cubierto esencialmente por la sociedad, aún siendo pagado en un hospital privado; las campañas de información, las de promoción a la donación de órganos y otras, las cubre la sociedad que te ha dado a ti la oportunidad de recuperar tu salud y convertirte en un ser productivo; es por ello que te pedimos que hagas un análisis de conciencia y recapacites acerca de lo que puedes tú mismo, ahora, retribuirle a los miembros de la sociedad que te apoyaron, seres humanos que como tú tienen la desgracia de perder la salud, pero que al mismo tiempo tienen la oportunidad de recuperarla y convertirse a su vez en seres productivos. No se trata de dar dinero, se trata de colaborar voluntariamente, de dar un poco de tu valioso tiempo, aprovechando tu experiencia, convirtiéndote esencialmente en un promotor de los trasplantes en tu estado, tú eres la mejor muestra de que desde hace mucho tiempo pasó la etapa experimental y son una alternativa de tratamiento útil y eficaz, no pierdas la oportunidad de convertirte en un factor de cambio en tu sociedad Los miembros del equipo de
trasplantes, el Centro Coordinador Estatal y los Servicios de Salud en
el Estado de Puebla están para apoyarte en cualquier cosa que necesites
para lograr lo que te solicitamos.
Coordinación de Promoción y Difusión de los Programas de Salud. Responsable de Edición:
Lic. Ivette Rivera Guzmán
Edición 1,000 ejemplares Derechos Reservados Puebla, Puebla, México. 1998. |
INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO
SOCIAL
MANUAL PARA DONADOR RENAL Dr. Armando Flores Guerrero
PREFACIOEste folleto fue escrito para las personas que están siendo evaluadas para la donación de un riñón. Es decir voluntariamente. Dar un riñón a un ser querido, es una decisión importante y puede ser una experiencia de extrema satisfacción. El trasplante de un riñón de un pariente donador vivo, tiene entre un 90 y 95% de probabilidades de éxito.Para la persona con enfermedad crónica del riñón es la mejor esperanza para una buena salud y un estilo normal de vida. Este manual le aclara las
dudas que sobre el trasplante renal pudiesen surgir. Y fue elaborado
por el personal que forma el grupo de trasplante.
CONSIDERACIONES IMPORTANTES DE LA DONACIONEvaluación de la Familia
COSTOS DE DONACIONSi usted es elegido como el posible donante, tendrá que considerar su objetivo de donación, ya que los costos económicos correrán a cargo del Instituto Mexicano del Seguro Social como son: cirugía, pruebas, estancia en hospital, consultas médicas, hasta el tratamiento de complicaciones que pudieran surgir por la cirugía. La mayoría de los donantes deberán pensar en dejar de trabajar por cuatro o seis semanas.RIESGOS A LA SALUDEl dar un riñón implica poco riesgo para el donador, aparte de los riesgos relacionados con una cirugía mayor, la recuperación de la cirugía por lo general es igual que una cirugía común y las complicaciones son raras. Las probabilidades de que el donador desarrolle una enfermedad renal, no son mayores que antes de la cirugía, el único riesgo es el de lesionar el riñón restante.Por esto, los donantes no deben participar en deportes de contacto (FUTBOL, BOX, KARATE, BASQUETBOL, LUCHA) ni otras actividades que pudieran afectar al riñón. Una forma de reducir sus
riesgos es estar en buen peso, con buena alimentación y con actividad
física. Si existe duda en relación a la alimentación
podrá pasar al departamento de Dietología para una información
más amplia y consejos de nutrición.
ANTES DE LA CIRUGIAEvaluación MédicaSi usted es elegido como posible donante, se le hará una evaluación médica minuciosa para determinar su estado de salud y los posibles riesgos específicos asociados a la donación. Esta evaluación se hará en la consulta externa, los resultados de esta evaluación ayudarán al equipo a tomar la decisión final sobre su capacidad de ser donante de un riñón. La evaluación generalmente sigue los siguientes pasos: 1. Examen Físico e
Historia Clínica
2. Pruebas de Diagnóstico
Pruebas de rayos X, radiografía de los riñones, miden el nivel de funcionamiento de los riñones. Se le inyecta un tinte en la vena para hacer resaltar los riñones, ureteros y vejiga para que los médicos puedan buscar anormalidades. Si usted es alérgico al yodo informe al médico sobre este problema. Radiografía de tórax, detecta anormalidades en los pulmones. Electrocardiograma (EKG o ECG). Mide el ritmo y regularidad de los latidos del corazón. Banco de Sangre
Arteriografía Renal
Evaluación Psicosocial
Evaluación médica
El equipo se reúne
cada 15 días, está integrado por cirujanos, nefrólogos,
urólogos, coordinador de trasplante, dietista, trabajo social, y
con base en la información presentada, el equipo decidirá
si usted es un candidato apropiado para la donación. Se le notificará
de la decisión tan pronto como sea posible. Una vez que se
confirme que usted es el mejor donante posible, se programará la
cirugía de trasplante.
ADMISIONUna vez que se ha fijado la fecha de la cirugía, se le dará un pase especial en el que se anotará la fecha y hora de su cirugía.Con este pase usted acudirá
a admisión hospitalaria en donde se le pedirán datos personales
como: domicilio, teléfono, nombre de la empresa y algunos otros
datos que ayuden a localizar algún familiar en caso necesario.
REGLAMENTO HOSPITALARIO:1. No traer cosas de valor: dinero, alhajas, etc.2. Traer todos los estudios de rayos X y laboratorio que usted tenga en casa y que estén relacionados con su cirugía. 3. Objetos personales que usted puede traer: cepillo dental, pasta dental, jabón, peine, sandalias o pantuflas. 4. Tramitar los pases para
la visita hospitalaria.
Equipo de Cuidado de la SaludDurante su estancia, usted recibirá cuidados por parte de muchas y diferentes personas, miembros del equipo de transplante y muchos otros.CIRUGÍAUsted ingresará al hospital dos días antes de la cirugía para que se le hagan más pruebas, esta evaluación continuada le dará al equipo de trasplante información importante sobre su estado general de salud y los alertará sobre cualquier otro problema médico que pueda usted tener. Durante este período el médico lo visitará y le explicará lo que sucederá los siguientes días.La mayoría de los pacientes siguen estos pasos en su preparación para la cirugía: 1. Su cirujano hablará nuevamente con usted y sus familiares sobre el procedimiento de trasplante y contestará preguntas de último minuto. 2. Se tomará una muestra fresca de sangre para una última prueba, si esta prueba es anormal se cancelará la cirugía (a esta prueba se le llama prueba cruzada). En algunos casos se identifica una infección u otro problema que pueden causar la cancelación de la cirugía. 3. El anestesiólogo
le preguntará sobre cualquier alergia, reacciones alérgicas
previas y le explicará el procedimiento para la anestesia.
5. Se mantendrá en ayuno a partir de las 10:00 de la noche del día previo a su cirugía. 6. Bajará temprano a la sala de recuperación en quirófanos, en espera de su cirugía. 7. Un día antes de la cirugía le colocarán suero, esto sirve para mantener al riñón en trabajo constante. 8. En la mañana de su cirugía se le envolverán las piernas con vendas elásticas para ayudar a la circulación. 9. Antes de ser llevado a
la sala de operación puede que se le dé un sedante para ayudará
o a relajarse.
LA OPERACIONEl día de la cirugía habrá dos salas de operaciones juntas programadas para usted y el receptor, mientras usted esté en la sala de operaciones su familia podrá esperar fuera. Podrán pedir información en admisión hospitalaria. Dos equipos de médicos harán las operaciones, uno para usted y otro para quien recibirá el riñón.Al llegar a la sala de operaciones usted estará somnoliento, su cirujano ya estará junto con el resto del personal de quirófano. Cada operación toma entre cuatro y seis horas. La cirugía de usted se llama Nefrectomía y se extirpa el riñón por un costado. Una vez extirpado el riñón, se lava y luego se le coloca en el receptor que está en la sala adyacente. Inmediatamente después
de la cirugía será llevado a la sala de recuperación
donde permanecerá por unas horas, hasta que esté completamente
recuperado y sus signos vitales estén estables. Sus médicos
estarán al pendiente de su recuperación hasta que sea dado
de alta del hospital.
DESPUES DE LA CIRUGIAINMEDIATAMENTE DESPUESInmediatamente después de la cirugía será llevado a la Sala de Trasplante Renal. Sus médicos permanecerán cerca las 24 horas del día y miembros del personal médico estarán monitoreando sus signos vitales y atendiéndolo. Cuando se le despierte, una enfermera le informará sobre las dos cirugías, el propósito de los tubos que tenga conectados y dónde está su familia. Si se siente incómodo o tiene alguna pregunta hable con la enfermera. Si tiene problemas para hablar su enfermera se comunicará con usted mediante notas escritas. LA MAÑANA SIGUIENTE La mañana después de la Cirugía, la enfermera lo ayudará a levantarse de la cama. De allí en adelante se le alentará a caminar y permanecer levantado una buena parte de cada día. Esto ayudará a evitar las complicaciones quirúrgicas más comunes al aumentar la circulación y promover la función intestinal. Sus enfermeras lo alentarán a toser y a respirar profundamente con frecuencia para ayudarlo a evitar la pulmonía, un posible riesgo después de muchos tipos de cirugía. Si el toser le causa dolor, pida que alguien le sostenga el abdomen y espalda con las manos o una almohada mientras tose. Pida medicamentos para el dolor según los necesite. Si toma un calmante antes de levantarse de la cama la primera vez, el moverse y respirar profundamente le serán mucho más fáciles. Un trabajador social de Trasplante
Renal podrá hablar con usted sobre cualquier preocupación
relacionada a la donación que pueda seguir durante su hospitalización.
MONITORES Y EQUIPOSCuando se despierte en la sala de recuperación, estará conectado a tubos y equipo que ayudarán a mantener las funciones de su cuerpo durante y después de la cirugía. La información que sigue explica la función del equipo y lo que sentirá usted.CATETERES INTRAVENOSOS (IV)
TUBO NASOGASTRICO
SONDA FOLEY
ALAMBRES ECG. (MONITOR DEL
CORAZON)
LIMITADORES
CANULA 0 MASCARILLA DE OXIGENO
PULSOXIMETRO
PERIODO DE RECUPERACION DEL DONADOR Su operación (NEFRECTOMIA) se considera cirugía mayor. Su completa recuperación llevará varias semanas. PRIMERA SEMANA: Su estancia en el hospital será de tres a cuatro días por regla general. SEGLINDA SEMANA: Aproximadamente de 10 a 12 días deberá de regresar al hospital para que sea revisado y se le retiren los puntos; después de esto puede comenzar a aumentar su actividad física. TERCERA SEMANA: Usted podrá volver a su trabajo a la cuarta Semana después de la cirugía y a la séptima semana podrá reanudar sus servicios y deportes, esto lo irá incrementando poco a poco según se lo vaya pidiendo su cuerpo. Por tener un sólo riñón no debe participar en deportes de contacto, como son: FUTBOL, BASQUETBOL, KARATE, etc. Cada seis meses y cada año
debe hacerse pruebas de orina y sangre y las puede realizar en su clínica
de adscripción.
APENDICEPREGUNTAS Y RESPUESTAS COMUNES¿Cómo afectará mi vida el tener un sólo riñón?El riñón que le quede compensará y funcionará tan bien como los dos riñones originales. Podrá hacer casi todo lo que hacía antes de la cirugía. Una excepción sin embargo, es la necesidad de evitar aquellas actividades que corra el riesgo de dañar el único riñón que tiene.¿Cuáles son los riesgos de la donación?Uno de cada diez donantes vivos tendrá algún problema menor como una infección de las vías urinarias. Por lo general no hay complicaciones a largo plazo. Sin embargo, cualquier tipo de cirugía, y aún algunas de las pruebas de evaluación de donantes, tienen algún grado de riesgo; sus cirujanos discutirán estos riesgos con usted antes de empezar la evaluación y una vez más inmediatamente antes de la cirugía.¿Dónde se hace la incisión para el trasplante de riñón?Esto dependerá del cirujano. La mayoría de los cirujanos hacen la incisión en el costado o la parte baja de la espalda.¿Qué puedo esperar inmediatamente después de la cirugía?Usted estará en la sala de recuperación, estará conectado a varios tubos, entre ellos un tubo nasogástrico (NG), introducido por la nariz y una sonda foley en la vejiga. El tubo nasogástrico será quitado a las pocas horas de la cirugía, y la sonda a la mañana siguiente. Puede pedir un medicamento para el dolor si lo necesita. A la mañana siguiente a su cirugía, alguien lo ayudará a levantarse de la cama, y se le alentará a caminar y a permanecer levantado una buena parte del día.¿Cuándo podré comer o beber después de la cirugía?Estará recibiendo líquidos intravenosos por unos días. Podrá empezar a comer alimentos sólidos en cuanto pase gas o tenga una evacuación intestinal.¿Cuándo podré tener relaciones sexuales?Podrá tener relaciones sexuales nuevamente dos semanas después de ser dado de alta del hospital, según como se sienta. La donación de un riñón no tendrá ningún efecto sobre su deseo sexual ni su fertilidad.¿Quién pagará los costos de la Cirugía?l.M.S.S., y lo que derive, medicamentos, curación y la atención médica por un año si no es asegurado.MIEMBROS DEL EQUIPO DE TRANSPLANTE
Cirujanos:
Urólogos:
Nefrólogos:
Nutrióloga:
Psicólogo:
Anestesiólogos:
Trabjadoras Sociales:
SIN FECHA, APROXIMADAMENTE 1997. |
XIV.
Multa por el importe de 1,000 a 4,000 días de salario mínimo
vigente a los establecimientos que practiquen trasplantes sin autorización.
XV. Multa por el importe de 4,000 a 10,000 días de salario mínimo vigente al que saque un órgano o célula del país, al que realice trasplantes sin haber realizado la investigación necesaria, tome órganos de menores de edad, al que base su actuación en contra de los principios señalados en la ley y que deben regir todos los procedimientos de trasplantes. XVI. De 4 a 10 años de prisión y multa por el importe de 4,000 a 10,000 días de salario mínimo vigente al que comercie con órganos, simule actos jurídicos y no respete las listas de preferencias. -Ir a Marco Legal- |
Pide tu tarjeta de Donador Voluntario a ATEPAC ® |
DONATIVOS: Asociación de Trasplantados del Estado de Puebla, A.C. |
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