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      (Transcrito del periódico "Medjugorje" n. 40 Julio/Agosto 1991.)

Sin duda es el "Tercer Secreto" de Fátima, el que ha despertado más interés, entre los católicos de todo el mundo; y se preguntan:

    ¿Cómo es posible que si la Señora ha decidido enviar un mensaje; y la Iglesia ha reconocido debidamente las apariciones de Fátima, lo tenga escondido mientras lo debería de haber revelado ya en 1960?

   — «Es un problema que también en mí ha despertado la curiosidad», reveló el Cardenal Oddi, Prefecto de la Congregación para el Clero, de 1979 a 1986.

   El Cardenal ha hecho declaraciones inéditas para el periódico "30 días":

   — «Me he interesado, como muchos fieles y sacerdotes, por el Tercer Secreto de Fátima. Como se sabía que debía ser revelado en 1960, a menos que sor Lucia no hubiere muerto antes; todos esperamos que llegase aquel año.

   Pero 1960 llegó, y no fué anunciado nada. Yo fuí secretario de Juan XXIII cuando estaba en Paris, y he aprovechado la confianza que tenía con él, para decirle con franqueza:

   — "Beatisimo Padre, hay algo que no le puedo perdonar".

— «¿Qué es?», me preguntó.

— «El haber tenido al mundo en suspenso durante tantos años y luego ver llegar el inicio de 1960, pasaron varios meses y de este secreto no se sabe nada.» El Papa Roncalli me respondió:

   — «No hablemos de esto», dijo él; y le repliqué:

   — «Yo, si Ud. no quiere no le hablo más, pero no puedo impedir a la gente de hacerlo. El interés es espasmódico: yo habré hecho ya un centenar de predicas y discursos anunciando esta revelación.»

   — «Te he dicho de no hablarme de eso», dijo el Papa.

   Y no le insistí más, pero quería ir al fondo de la historia. Después fuí a ver a Monseñor Capovilla, su secretario privado, y le pregunté:

   — «Han abierto el texto del secreto?»

   — «Sí, lo hemos abierto», respondió.

— «¿Quienes estaban presentes?»; y me dijo:

   — «Estaba el Papa, el Cardenal Ottaviani y yo; pero dado que no podíamos comprenderlo porque estaba escrito a mano y en portugués, fué llamado un monseñor portugués que trabajaba en la Secretaría de Estado. Luego de haberlo leido, el papa Roncalli lo devolvió a la caja fuerte.»


   Pero, ¿por qué el Papa Juan no lo publicó?

   El Cardenal Oddi, quien conocia muy bien a Juan XXIII, dijo:

   — «Yo estoy seguro que el secreto no contenía algo bueno; el Papa Roncalli no quería oir hablar de desgracias, de castigos. De aquí que pienso que contendría alguna cosa de prohibición, castigo o desastre.»

   «Otra ocasión en que me he interesado por el secreto de Fatima fué en 1985, -aclara el Cardenal Silvio Oddi-; estaba en Fátima, en la misa del 13 de Mayo (1985), asistían un millón de personas.

   Y, ya que estaba en Fátima, fuí a visitar a Sor Lucía. Me entretuve como una hora hablando con ella. Le dije:

— «Mire, yo no quiero conocer el secreto. Lo que me intriga es por qué no ha sido publicado, ¿puede Ud. decirmelo?» «Y luego me gustaria saber si cuando el Papa estuvo aquí habéis hablado de ello.»

      - El Cardenal Silvio Oddi concluye:
     «A este punto me permito avanzar una hipótesis: que el tercer secreto de Fatima preanunciase algo grave que la Iglesia haya hecho, naturalmente sin intención, que a causa de malas interpretaciones, de desobediencia o algo parecido la Iglesia habría atravesado un momento por demás difícil.

    Sin embargo el SECRETO dice que en el año sesenta, a pesar de las mejores intenciones, la Iglesia habría hecho algo cuyas consecuencias fueron muy dolorosas, con una disminución inmensa de la práctica religiosa, y que luego, seguido de un gran sufrimiento, la fé habría vuelto.

   Sí, esto podría ser el contenido del Tercer Secreto. Pero si esto fuese cierto, este secreto ya lo hemos visto porque la crisis de Iglesia está a la vista de todos, y los espíritus más despiertos se han dado cuenta hace años.»