Síndromes por los ocho principios.
Los ocho principios diagnósticos constituyen el punto
de partida para la diferenciación de síndromes, su conocimiento nos permite
determinar elementos fundamentales en el desarrollo de la enfermedad como son su localización,
naturaleza, relación entre el Xie Qi
y Zheng Qi y la categoría Yin o Yang de la enfermedad.
Los ocho principios básicos para el diagnóstico
constituyen en un criterio más estrecho las cuatro categorías que a continuación
expresamos:
Externo |
Interno. |
Calor |
Frío. |
Shi |
Xu |
Yang |
Yin. |
Los clásicos
de la medicina tradicional plantean que las enfermedades externas, por calor y
por plenitud (Shi) pertenecen al Yang,
mientras que las enfermedades internas por frío y por vacío (Xu) pertenecen al Yin, es
necesario señalar que en la práctica clínica siempre no sucede así y es
frecuente encontrar patologías tipo Shi por frío y
enfermedades tipo Xu por deficiencia de Yin
traducida clínicamente por signos y síntomas de calor.
A continuación se describen cada uno de estos
principios.
Externo e Interno.
Estos principios traducen la localización de la
enfermedad. Las enfermedades externas se localizan en la superficie del cuerpo
humano, entiéndase por superficie vello, piel, músculos y articulaciones y las
internas aquellas que afectan la energía, sangre, líquidos corporales y los
órganos Zang-Foo. Los
mismos se diferencian en cuanto a su etiología, ubicación, clínica y principio
de tratamiento.
|
Externo |
Interno |
Etiología. |
Invasión de F. P. Exógenos. |
F.
P. Endógenos Disfunción
de los Zang-Foo. Acción
de factores coadyuvantes. |
Ubicación |
Vello, piel, músculos y articulaciones. |
Qi, Xue, Jinye, órganos. |
Clínica. |
Aversión
al viento, fiebre,
cefalea, dolores articulares, obstrucción nasal, saburra blanca y delgada, pulso
superficial. Aparición brusca y duran poco. |
Fiebre
sin escalofríos o escalofríos sin fiebre,
saburra anormal, pulso profundo,
clínica relacionada con el órgano afectado. Prolongadas. |
Terapéutica |
Dispersar el F. P. Exógeno. |
Corregir
el desequilibrio de Qi |
El frío y el calor son los principios que traducen la
naturaleza de la enfermedad, o lo que es igual por qué están causadas las
enfermedades. Ellos se diferencian en
cuanto a causalidad y síntomas fundamentalmente y en ambos casos pueden ser
traducción de enfermedades externas o internas.
|
Calor. |
Frío. |
Causa. |
Calor de verano. Sequedad patógena. Xu de Yin o Shi de Yang. |
Frialdad patógena. Xu de Yang o Shi de Yin. Debilidad de
las actividades vitales del cuerpo humano. |
Síntomas. |
Fiebre sin aversión
al frío, rubor facial,
ojos rojos, inquietud, lengua roja. |
Aversión al
frío, palidez, extremidades frías, lengua pálida. |
Síntomas ocasionados por el consumo de Jinye. |
Sequedad de la boca, heces secas, orinas escasas
y amarillas, saburra amarilla y seca, pulso rápido. |
Ausencia de sed, heces blandas, orinas claras,
saburra blanca y húmeda, pulso tenso. |
Existen particularidades clínicas que a modo de
resumen facilitan la diferenciación práctica al enfrentar el paciente.
Síntomas. |
Calor. |
Frío. |
Sed |
Si.
Avidez por bebidas frías. |
No.
Bebidas calientes. |
Apariencia
facial. |
Rubicundo. |
Pálido. |
Orina. |
Concentrada
y escasa. |
Abundante
y clara. |
Heces
fecales |
Secas. |
Blandas. |
Pulso. |
Rápido. |
Tenso. |
Saburra. |
Amarilla
y seca. |
Blanca
y húmeda. |
La deficiencia (Xu) y exceso
(Shi) es otro de los pares de principios que
abordamos en este acápite. Los mismos nos expresan la relación entre los
factores patógenos y antipatógenos en el cuerpo
humano.
Los síndromes por exceso nos señalan que existe lucha
entre los factores antes expuestos lo cual puede traducirse en la clínica como
una respuesta del cuerpo ante la invasión de agentes que tratan de distorsionar
su equilibrio bioenergético, en estos casos el pronóstico de la enfermedad será
bueno y es equivalente a las patologías agudas de la
medicina occidental.
Por el contrario los síndromes de tipo deficiencia
señalan una marcada debilidad del factor antipatógeno
lo cual traduce progreso de la enfermedad y pronóstico malo o reservado como
ocurre en las patologías crónicas.
Es valedero señalar que en ocasiones los síndromes por
exceso pueden transformarse en síndromes de deficiencia o viceversa lo cual
cambiaría el pronóstico y en ocasiones el tratamiento de la entidad patológica.
Deficiencia.
1. Traduce insuficiencia los factores antipatógenos
del cuerpo humano.
2. Disfunción de tipo Xu de los
órganos Zang-Foo o
debilidad de Qi y Xue.
3. Se observa en enfermedades crónicas que consumen Yang.
Clínica.
Interrogatorio: Depresión,
apatía, acostarse encogido, palpitaciones, tinnitus,
vértigos, insomnio, amnesia, sudoración profusa o nocturna, mareos, orinas
profusas, espermatorrea, heces blandas, calor en los cinco centros.
Inspección:
Cara pálida, movimientos lentos, lengua pálida con saburra blanca.
Palpación:
Dolor que se alivia con la presión, extremidades frías, pulso filiforme.
Auscultación:
Vos baja, respiración débil y corta.
El cuadro
clínico de la deficiencia energética es muy florido, pero se sustenta
básicamente en cuatro aspectos.
1.
Xu de Qi. 3. Xu de Yin.
2. Xu de Xue. 4. Xu de Yang.
En este caso
solo nos limitamos a expresar el cuadro clínico de forma general, sus
particularidades se trataran en los acápites siguientes cuando se especifiquen
los síndromes de Qi, Xue y
de los Zang-Foo.
El principio de tratamiento en estos casos va
encaminado a tonificar la producción de Qi, Xue, Yin y Yang.
Exceso.
1. Traduce lucha entre el factor antipatógeno
y patógeno en el cuerpo humano.
2. Disfunción de los órganos internos con retención de
humedad y flema.
3. Estancamiento de Qi y Xue por ataque de factores patógenos exógenos o algunos
factores coadyuvantes.
4. Se observa en enfermedades agudas.
Clínica.
Interrogatorio: Constipación, hiperactividad, tenesmo
rectal y vesical, fiebre, distensión torácica y abdominal.
Inspección: Cara roja, irritabilidad, lengua roja y saburra
gruesa.
Palpación: Dolor que no tolera la presión, pulso
fuerte.
Auscultación: Vos fuerte, respiración ruidosa.
En este caso al igual que en los síndromes tipo Xu también se exponen las características generales,
dejando a posteriori una explicación más específica al abordar los síndromes de
Qi, Xue y los Zang-Foo.
Principio de tratamiento:
1. Dispersar los factores patógenos exógenos.
2. Promover la circulación de Qi
y Xue.
Los últimos principios a tratar serian las categorías Yin Yang de la enfermedad, los
mismos constituyen la aspecto fundamental para ubicar
la entidad patológica a expensas de los síntomas y signos.
Yin y Yang constituyen la
síntesis más general de los procesos patológicos a los que se encuentra
sometido el cuerpo humano y por lo tanto toda enfermedad debe ser clasificada
como tal.
Los ocho principios constituyen la regla más general
para el diagnóstico siendo el punto de partida para la diferenciación de
cualquier proceso morboso en un paciente.