1. La importancia del reproductor
2. Los más conocidos
3. WinAmp

1. Importancia: Su importancia deriva de varios factores. Yo me voy a limitar a exponer estos factores para que cada uno elija el reproductor que mejor se adapte a sus necesidades.

Recursos: La cantidad de recursos que consume un reproductor es un factor a tener muy en cuenta para los poseedores de ordenadores poco potentes. Evidentemente el poseedor de un Pentium III no debe prestar demasiada importancia a este factor, y más teniendo en cuenta que estos programas están preparados para consumir el menor número de recursos posible. Hay que tener en cuenta que el reproductor se va a usar normalmente simultáneamente con otros programas, es usual escuchar música mientras se están realizando otras tareas en el ordenador, por lo que es conveniente que el reproductor no ralentice el resto de las aplicaciones.

Comodidad: Con el tiempo este puede ser el factor más importante, ya que cuando alguien se acostumbra a utilizar un programa, puede no interesarle cambiar a otro aún sabiendo que es mejor.

Prestaciones: Casi todos los reproductores más conocidos vienen con las mismas funciones, así que no será un factor determinante.

Diseño: Depende del gusto de cada persona, pero es indudable que algunos reproductores son superiores en el aspecto estético.

2. Reproductores: Voy a hacer una breve comparación de los que, a mi juicio, son los mejores.

Si quieres más información o descargar estos reproductores pulsa sobre su imagen para ir a la página oficial.

WinAmp: Sin duda el más extendido. Combina rapidez, funcionalidad y un diseño muy flexible. Más adelante nos adentraremos más en el uso de este gran reproductor para explicar todas sus ventajas.

Nad: Sorprende que al descargar este reproductor sólo ocupe 116 Kb, especialmente indicado para equipos más antiguos ya que consume muy pocos recursos. La calidad de sonido es muy buena, pero quizás demasiado simple para los que busquen funciones un poco más avanzadas.

Sonique: Destaca sobre todo en el diseño. Tiene muchas funciones pero a mi juicio es un poco complejo y lento. Eso sí, merece la pena verlo en acción por su espectacularidad.

3. WinAmp: Voy a detenerme en este reproductor, el cual recomiendo:

Interface: La cualidad más destacada es el uso de skins (piel), es decir, el diseño del reproductor puede cambiarse entre más de 3000 disponibles. Aparte de los habituales botones de controles, nos encontramos un analizador gráfico de la señal y un display con toda la información (título de la canción, tiempo restante, etc...). También existen otros controles adicionales como balance, shuffle (reproducción aleatoria), lista de canciones y una barra de desplazamiento.

Lista de Canciones: Una utilidad muy cómoda es la posibilidad de arrastrar los archivos de sonido a esta zona y se añadirán directamente a la lista. Informa rápidamente de la duración de las canciones individualmente o en su totalidad.

Ecualizador: de diez bandas con posibilidad de amplificar la señal, por si nuestra tarjeta de sonido no amplifica lo suficiente la señal. Permite guardar las distintas configuraciones.

En las últimas versiones dispone de un navegador propio para Internet, pero la verdad es que es más cómodo usar el Explorer o el Navigator. Se puede observar en esta imagen el resultado completo de todos los elementos abiertos.

Pero si hay algo interesante es la posibilidad de minimizar los elementos del WinAmp a simples barras horizontales que ocupan muy poco espacio, y aún así, muestran gran información.

En el siguiente capitulo enseñaremos cómo tratar archivos de sonido en varias direcciones, de CDaudio a WAV, de WAV a MP3, o todo en un solo paso.