Celebración de la Constitución del
Estado Libre Asociado en Barceloneta
25 de julio de 2000

Escudo del Estado Libre Asociado de Puerto Rico


Advierte a Clinton sobre el status

Por Benjamín Torres Gotay
Periódico El Nuevo Día
Miércoles, 26 de julio de 2000

BARCELONETA - En una actividad que se realizó a la sombra de imputaciones de mal uso de fondos públicos, la líder popular Sila María Calderón le hizo ayer la siguiente advertencia al presidente estadounidense Bill Clinton: sin consenso ningún proceso para resolver el problema del status va a dar resultado.

Esta advertencia la vertió Calderón al ofrecer el mensaje principal en la ceremonia de conmemoración de la Constitución del Estado Libre Asociado (ELA), celebrada en este municipio en momentos en que arrecian intentos de la Casa Blanca por atender el problema del status, cuando casi se acaba el Gobierno de Clinton.

Calderón saluda a los asistentes del 48 aniversario del ELA. (Foto por Carla Martínez/El Nuevo Día)
"Hoy queremos decirle al Presidente de Estados Unidos que el ELA representa la voluntad mayoritaria de nuestro pueblo y esa voluntad hay que respetarla. Queremos decirle que en cualquier proceso para atender la situación del status tiene que ser uno justo a todas las partes", sostuvo Calderón, ante una multitud estimada extraoficialmente en unas 20,000 personas.

CUALQUIER PROCESO, precisó Calderón, tiene que ser precedido de consultas con todas las fuerzas políticas y todas las opciones tienen que ser definidas y presentadas de manera justa.

"Un proceso sin esa equidad, sin ese juego limpio, sin esa justicia no va a prosperar", afirmó Calderón en un mensaje también dirigido al Congreso.

Mientras se celebraba esta actividad, a la que acudió todo el liderato popular importante salvo el ex gobernador Rafael Hernández Colón, en San Juan el gobernador Pedro Rosselló informaba de que el presidente Clinton se comprometió a resolver el problema del status en un año, aunque termina su mandato en enero del 2001.

Calderón, en una entrevista posterior con El Nuevo Día, dijo que la Casa Blanca responde a "otras finalidades" y acusó al presidente Clinton de actuar a petición del Partido Nuevo Progresista (PNP). "Al presidente Clinton le quedan como tres meses de incumbencia. Ha tenido ocho años para hacer esto y este es un proceso que tiene otras finalidades", dijo. El discurso de la alcaldesa Calderón ante la multitud de populares no generó grandes reacciones, salvo cuando se refirió a la lucha del pueblo viequense contra la presencia militar. El Nuevo Día supo que incluso líderes populares generalmente incondicionales a Calderón reaccionaron con cierta insatisfacción al discurso.

CALDERON SOSTUVO que, en vista de que la actividad se sufragó con fondos públicos, su intención fue dar un discurso "prudente". "Esto era una actividad oficial y el propósito del discurso no era avivar fuerzas ni tenía propósitos políticos", dijo, al reconocer que su alocución no generó grandes pasiones en la audiencia.

Aseguró, además, que aunque hubo insignias políticas, abundó el color rojo distintivo del PPD y se le hizo protagonista de la actividad siendo líder de la oposición al PNP, la ceremonia se realizó de acuerdo con las directrices emitidas por el contralor Manuel Díaz Saldaña para actividades sufragadas con fondos públicos.

Tres legisladores del PNP, el senador Kenneth McClintock y los representantes Aníbal Vega Borges e Iris Miriam Ruiz no lo vieron así, recopilaron supuesta evidencia y dijeron que acudirán hoy ante el contralor Díaz Saldaña a acusar a Calderón de haber usado fondos públicos para una actividad partidista.

"LA REALIDAD es que la actividad se llevó a cabo con el mayor decoro y que se prohibieron las insignias políticas y si las hubo fueron mínimas. Todos los países del mundo celebran con orgullo sus constituciones y no veo por qué en Puerto Rico no podamos hacerlo", dijo Calderón, quien tildó de "políticas" las imputaciones del PNP de que hubo uso irregular de fondos públicos en la actividad.


Arremete Menéndez contra el PNP

Por Benjamín Torres Gotay
Periódico El Nuevo Día
Miércoles, 26 de julio de 2000

BARCELONETA - El congresista Robert Menéndez se metió de lleno ayer en la arena política de Puerto Rico al calificar como "una mentira descarada" el planteamiento del Partido Nuevo Progresista (PNP) de que la ciudadanía estadounidense de los puertorriqueños puede ser revocada.

Al dar un enérgico discurso en la conmemoración de la Constitución del Estado Libre Asociado (ELA) celebrada aquí, Menéndez, demócrata de Nueva Jersey, también criticó la actitud del PNP en el proceso plebiscitario del 1998 al definir la fórmula estadolibrista que fue presentada al electorado.

"Bajo ningún concepto podría el Congreso legislar para quitarles a los puertorriqueños su ciudadanía. Se imaginan al Congreso legislando para quitarle la ciudadanía a un grupo de personas? Eso es absolutamente falso", dijo Menéndez, quien, además, calificó tales planteamientos como "terrorismo político".

SIN REFERIRSE directamente al PNP, Menéndez, quien es de origen cubano y amigo cercano del candidato popular a comisionado residente Aníbal Acevedo Vilá, dijo que esos planteamientos tienen el fin de provocar miedo en la población.

Con relación a lo que ocurrió en el plebiscito de 1998, cuando la Legislatura dominada por el PNP definió la fórmula de ELA que figuró en la papeleta y que no fue apoyada por los populares, Menéndez dijo: "No es correcto que sean los opositores políticos los que definan las aspiraciones de sus adversarios".

Menéndez vino a la conmemoración del ELA invitado por la Asociación de Alcaldes del PPD y el Municipio de San Juan, que es dirigido por la candidata popular a la gobernación, Sila María Calderón.


Asegura que RHC respalda a Sila

Por Ismael Torres
Periódico El Nuevo Día
The Associated Press
Miércoles, 26 de julio de 2000

BARCELONETA - José Alfredo Hernández Mayoral excusó ayer la ausencia de su padre, el ex gobernador Rafael Hernández Colón, de los actos conmemorativos del 48 aniversario del Estado Libre Asociado, celebrados aquí.

Dijo que la ausencia del ex mandatario y ex presidente del Partido Popular Democrático (PPD) no se debe interpretar como algo negativo, porque Hernández Colón apoya a la candidata popular a la gobernación, Sila María Calderón, y en su momento se lo hará saber al pueblo.

José Alfredo Hernández Mayoral (Foto Primera Hora)
"El apoya a Sila y lo hará saber en su momento, como lo ha hecho en pasadas campañas. El escogerá el momento y lo hará. Lo conocemos", dijo Hernández Mayoral mientras subía al templete principal que este año no tuvo inconveniente en accesar, contrario al año pasado en Hatillo.

En cuando a la situación político electoral del Partido Popular en esta contienda, dijo que el PPD se tiene que preparar para mantener la ventaja que tiene en estos momentos. "Ahora viene la parte dura de la campaña y nos tenemos que preparar, y actos como éste de hoy ayudan a motivar a los votantes", dijo.

EN ESE sentido, excusó la ausencia de Hernández Colón en los actos conmemorativos del ELA y dijo que no se debía interpretar su ausencia como algo negativo porque en su momento hará público su apoyo a Calderón, algo que muchos hasta ahora dudan.

Hernández Colón se distanció de Calderón luego de que la actual líder del PPD combatió la candidatura de Hernández Mayoral a comisionado residente y apoyó a Aníbal Acevedo Vilá, quien finalmente se impuso en la contienda del pasado mes de noviembre.

La ruptura se evidenció públicamente cuando los organizadores de los actos conmemorativos del ELA el año pasado, en Hatillo, impidieron que Hernández Mayoral subiera a la tarima principal de la actividad porque no era funcionario del PPD.

Hernández Colón denunció entonces que mientras se impedía el acceso de su hijo, en la tarima se permitía la presencia de donantes del PPD, como Rubén Vélez, que no eran funcionarios del Partido Popular.

HERNANDEZ MAYORAL dijo, por su parte, que las cosas hoy son distintas. "Es un año cordial y de armonía, cara a unas elecciones", dijo.


Otro discurso sobre status

Por Maritza Díaz Alcaide
Periódico Primera Hora
Miércoles, 26 de julio de 2000

BARCELONETA- La presidenta del Partido Popular Democrático, Sila Calderón, volvió por sus fueros y le exigió ayer al presidente Bill Clinton respeto por la voluntad mayoritaria del puertorriqueño, "que es estadolibrista".

En su mensaje como oradora principal de los actos conmemorativos del 48 aniversario del Estado Libre Asociado, Calderón le advirtió a Clinton y al liderato del país que sin consenso no hay grupo de trabajo, no hay plebiscito, ni consultas, ni Asamblea Constituyente, ni nada.

Cero imposiciones, reclamó ayer Calderón en un discurso en el que arremetió contra la imposición de esquemas que pretenden buscar ventaja a expensas de procesos injustos.

La Casa Blanca llamó recientemente al liderato político de Puerto Rico a buscar avenidas para solucionar el problema de status de la isla, labor que podría llevarla a cabo un grupo de trabajo a designarse. Se ha mencionado que como parte del taller, se trabajaría con las definiciones de status viables para el gobierno de Estados Unidos, pero el Partido Popular entiende que ese sería un ejercicio en futilidad por lo adelantado del cuatrenio.

(Foto por Luis Alcalá del Olmo/Primera Hora)

"Queremos decirle a los líderes del país, a los que se empeñan en olvidar el mandato de nuestro pueblo, que insisten en ignorar su voluntad, expresada reiteradamente, que sin consenso no hay grupo de trabajo, no hay plebiscitos, ni consultas, ni Asamblea Constituyente. Sin procesos acordados entre todos, no hay solución viable. La fuerza de nuestro pueblo no se puede ahogar", dijo la Alcaldesa de San Juan.

Le planteó a un público bastante parco a la hora de dispensar vítores y aplausos que el desarrollo del Estado Libre Asociado no puede ponerse en manos de los enemigos de esa fórmula política.

A los candidatos a la presidencia, Calderón los instó a escuchar la voz del pueblo de Puerto Rico, y al Congreso le advirtió que el proceso hacia una definición del status no puede prestarse a soluciones de encargo. "Eso sería negar la esencia misma de la autodeterminación", dijo.

"Somos un pueblo de alma recia, que se aferra a su idioma, que afirma su identidad, que se respeta a sí mismo. Un pueblo que se resiste a morir", agregó, mientras un grupo de niños en la tarima ondeaba banderitas de dos caras, una con la bandera americana y la otra con la puertorriqueña.

En la actividad, en que se invirtió unos $310 mil, incluyendo una buena tajada de asignaciones municipales, se observaron muchas de esas banderas, poquísimas de la pava y algunas con el nombre de "Sila".

Vestida de chaqueta corta y blusa color guayaba, con pantalones crema, Calderón se dirigió al podio bajo los acordes de La Borinqueña y al final bajó de la tarima para confundirse con el público, mientras Roberto Luis Soler, de 13 años, entonaba "Preciosa" al estilo casi idéntico de Marc Anthony.

El discurso de Calderón, básicamente uno en referencia al status y con profusión de oraciones largas, no pareció enardecer a muchos, como sucede en actividades multitudinarias de esta índole.

Sila M. Calderón advirtió al liderato del país que sin consenso no hay grupo de trabajo ni plebiscito. (Foto por Luis Alcalá del Olmo/Primera Hora)
El tema de Vieques, mencionado en tres ocasiones, resultó ser el más motivante, provocando gritos de "¡Vieques sí, Marina no!"

"¡Sila, Sila, Sila!", gritaron los populares en varias ocasiones, aunque efectivamente el momento más emotivo de la jornada fué el recorrido de Calderón entre el público al son de la "Preciosa" de Roberto Luis.

¿Una actividad partidista? En el trayecto hacia Barceloneta se pudo observar guaguas escolares desde cuyas ventanillas se asomaba la bandera de la pava. No faltaron las vanes de los líderes políticos, los abanicos de mano con la efigie del candidato favorito, aunque desde la tarima nunca se mencionó al Partido Popular ni ninguna candidatura.

Como coletilla, este año el hijo de Rafael Hernández Colón, José Alfredo, logró lo que no pudo el año pasado en Hatillo, sentarse en el templete con la plana mayor de su partido.


Respeto a lo que el pueblo decida

Por Maritza Díaz Alcaide
Periódico El Primera Hora
Miércoles, 26 de julio de 2000

BARCELONETA- El próximo Congreso y el próximo Presidente.

Ellos son, según el congresista demócrata Robert Menéndez, los que deben atender el tema del status de Puerto Rico, no una comisión no electa que empiece a trabajar en lo que queda de cuatrenio.

Menéndez, orador invitado en los actos de conmemoración del 48 aniversario del Estado Libre Asociado convocados por los municipios populares, dijo ayer que a Bill Clinton y la Legislatura de Estados Unidos les queda poco tiempo en el poder y que sería imposible el aprobar un proyecto que vaya dirigido a resolver el problema de la isla.

"No creo que se debe delegar a una comisión no elegida los poderes que en una democracia recaen sobre el Presidente y el Congreso. Esa comisión no sería elegida por el pueblo", sostuvo el vicepresidente del caucus hispano a tenor con las intenciones de Clinton de crear un grupo de trabajo que busca alternativa para el caso político de Puerto Rico.

Menéndez, en abierta sintonía con el liderato del Partido Popular Democrático, indicó que no se le puede imponer a los puertorriqueños alternativas de status, por el contrario, debe respetarse lo que el pueblo de Puerto Rico decida.

En cuanto al fallo del juez federal de San Juan, Jaime Pieras sobre el voto presidencial, el demócrata de Nueva Jersey mencionó que hay dos decisiones de ese foro que son conflictivas, la de Pieras yla del juez Salvador Casellas sobre la pena de muerte. En última instancia, dijo sobre ese asunto que imperará lo que el pueblo de Puerto Rico quiera cuando elija su destino político.

"El proceso de autodeterminación de un pueblo debe ser respetado por todos los sectores. No es correcto que sean los opositores quienes definan las aspiraciones de sus contrarios", dijo.

Al referirse ante el pueblo popular al tema de Vieques, Menéndez volvió a apoyar la causa de la isla municipio y bajo los vítores de la concurrencia, invitó a no hacer caso a quienes cuestionen "el patriotismo" de los puertorriqueños por pedir el retiro de la Marina de la Isla Nena.

"La realidad es que por más de un siglo de guerras los puertorriqueños han dado su sangre, parte de su cuerpo y su vida. No podemos permitir que cuestionen su patriotismo", afirmó.

El público comenzó a gritar "¡Vieques sí, Marina no!".

Menéndez le pidió también a los puertorriqueños que obvien los reclamos de que se puede perder la ciudadanía americana. "Hay una sola ciudadanía. ¿Se imaginan ustedes a Estados Unidos quitándole la ciudadanía a los veteranos puertorriqueños, a sus hijos, a sus nietos y a sus viudas?", preguntó retóricamente.



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