2.- Sobre la cantidad de agua.
El cáñamo necesita bastante agua, pero sin llegar a tener
la tierra permanentemente empapada; como referencia observareis que con
la falta de agua las hojas se caen. A partir de aquí tampoco os
paseis con el agua.
3.- Sobre la temperatura.
Se suele creer que cuanta más calor mejor, pero tampoco és
cierto, ya que un exceso de calor (a partir de 30 grados más o menos)
agobia a la planta y la deja aplatanada. De hecho no requiere temperaturas
superiores a 18 grados.
4.- Como distinguir el macho de la hembra.
En primer lugar hay que tener en cuenta que es la hembra y no el macho
la apta para el consumo. Tras unas tres semanas de crecimiento normal,
las plantas masculinas tienen menos color, más altura y son
más delgadas, tienen menos hojas y las ramas nacen del tallo a una
mayor distancia entre si, al tiempo que producen una especie de bolitas
de las cuales saldrà el polen que fecundará las hojas de
las hembras. Hacia la sexta semana les crece una suerte de penacho de hojas
en la punta. Las plantas femeninas por el contrario son más achaparrada
y redondeadas, de un verde más oscuro, tienen muchas hojas y las
ramas salen del tallo mucho más próximas entre si.
La densidad de la plantación favorece el desarrollo de las masculinas,
mientras que el espacio libre facilita el desarrollo de las femeninas.
Todas las plantas producen tanto el encima masculino como el femenino,
y son las condiciones ambientales el determinante de uno u otro sexo. Si
has plantado en abril hacia primeros de junio ya las puedes distinguir.
Si las hembras son fecundadas produciran semillas pero perderan potencia
psicoactiva, así que si no tienes problemas para obtener semillas
para el próximo año, procura cortar los machos antes
de que florezcan las hembras.
También puede ocurrir que la planta sea hermafrodita.
5.- Sobre el abono.
Si cultivas en maceta y has comprado tierra rica en nutrientes no hace
falta abonar, o hacerlo muy moderadamente ya que el cultivador novato suele
quemar la planta por exceso de abono, pero deberas cambiar
la tierra cada año.
Si cultivas en el campo, lo mejor, si se puede, es encontrar un terreno
que se emplee también para otro tipo de cultivos ya que el cáñamo
crece mejor en rotación con otros cultivos como el grano,
las judias o los guisantes, que suponen una importante reenergetización
del terreno. Si el terreno no está seriamente agotado, el
siguiente método funciona bastante bien: Al principio del otoño
se labra el pedazo de tierra elegido y se le cubre con una leve capa de
estiercol, y se plantan a continuación las judias u otras leguminosas;
al cabo de dos o tres semanas se da la vuelta a la tierra dejndo enterrados
los tallos y se vuelve a aplanar la tierra pisando la superficie
con botas pesadas o pasando un rulo; luego se deja reposar la tierra durante
todo el invierno. Al principio de la primavera se escarda el terreno,
se cubre con un fertilizante orgánico como el estiércol y
ya está listo para plantar.
6.- Semillas y sementera.
El principal enemigo de las semillas es la humedad. En un ambiente perfectamente
seco mantienen su vitalidad incluso durante tres años y no se ven
afectadas por el calor si no supera los 37 grados. Si la atmósfera
en que se encuentren es húmeda esta temperatura desciende a los
30 grados. La mayoria de los cultivadores usan un recipiente herméticamente
cerrado, como el que utilizan los fotógrafos para guardar sus películas,
y lo mantienen a una temperatura constante de 25 grados aproximadamente.
Tampoco es aconsejable guardar grandes cantidades de semillas juntas pues
podrian calentarse.
El aspecto exterior proporciona un buen número de indicaciones sobre
el estado de salud de la semilla. La semilla vital es bien lisa por fuera
y nada rugosa; tiene un color gris claro, gris verdoso o gris pardo,
y se pone lustrosa si se la frota con las manos. Si una vez abiertas expelen
un olor como de aceite rancio, seguramente son demasiado viejas; si por
dentro presentan un color negro es seguro que han fermentado y no germinarán
jamás; por el contrario si el interior es blancuzco y polvoriento
no son muy viejas y aún pueden germinar, pero las plantas que broten
serán débiles.
7.- El trasplante; una operación delicada.
En general, ya hemos dicho en el primer punto que se suele plantar en un
lugar provisional para la germinación, como por ejemplo y para ello
nada mejor que un vaso de papel que permita a la raiz crecer al menos
unos 2,5 cm. en profundidad, ya que será muy fácil cortar
el vaso y extraer la tierra como un bloque compacto.
Durante el trasplante las plantas quedan notablemente expuestas a una serie
de riesgos, así que habrá que tomar algunas precauciones:
la primera hacerlo en un dia nublado o al caer la tarde de forma que las
raices no se vean muy expuestas a la luz. se procurará que el nuevo
terreno sea lo más parecido al anterior; se saca la planta
delicadamente con la tierra como un bloque compacto y se coloca en un agujero
previamente practicado en el nuevo terreno recipiente, sea el suelo
o la maceta. se procurará también no tocar el tallo, sosteniéndolo
lo más cerca posible del nivel de tierra, y sin tocar nunca las
raicillas ni las hojas. al depositar el bloque de tierra
en el agujero se procurará enfocar la planta hacia la luz para no
obligarla a un brusco movimiento fototrópico (de búsqueda
de luz) que podria perjudicar el arraigamiento. el agujero debe ser lo
bastante profundo como para permitir a la joven raíz extenderse
en toda su longitud, pues seguramente habrá quedado algo comprimida
en su lugar provisional. el terreno se reordenará de forma que el
tallo quede a la misma altura del suelo que tenia anteriormente; acumular demasiada tierra
alrededor del tallo puede ser peligroso. regar al finalizar la operación,
a fin de facilitar la adaptación al nuevo terreno.
8.- Cuando cosechar.
Existe la creencia de que cuando más tiempo esten las plantas en
el suelo mejor, hasta antes de que lleguen las primeras heladas, las cuales
se cargarian la planta. Nada más lejos de la realidad; la
planta de marihuana tiene su ciclo igual que todas las plantas, sean cerezos,
perales, o cualquier otra. Llega un momento en que los cogollos estan maduros
y si no se cortan y se dejan más semanas a la intemperie se volveran
rancios y perderan el buen gusto al ser fumados.
En general, cuando los filamentos de los plumeros de las hembras pasan
de blancos a marrones, más o menos al cabo de unos 6 o 7 meses desde
que se plantaron, es el momento adecuado de cortar. Si habeis plantado
en maceta el ciclo de la planta será menor, al igual que su producción,
y bastará con unos 5 meses.
9.- Que no se os vea el plumero.
Un buen consejo para los que planteis en terrazas, corrales y otros lugares
con vecinos. Como las plantas suelen tener bastante altura puede llegar
un momento en que los plumeros de la planta asomen en casa del vecino.
Pues bien, para evitar que la planta crezca a lo alto y hacer que crezca
a lo ancho, a medida que querais limitarle la altura, cortais con las manos
las puntas de las ramificaciones más altas y por esa parte la planta
dejará de crecer, ganando fuerza en las ramificaciones; más
bajas, sin que ello suponga gran trauma.
10.- Cultivo en maceta. (Vademecum del cultivador urbano).
las macetas deberan tener, como mínimo, en el fondo, un agujero
para evitar el estancamiento del agua. la maceta debe ser de material poroso,
sin pinturas externas ni horneadas. antes de utilizar la maceta se
mojará completamente durante media hora por lo menos. evitar el
charco de agua en el posamacetas. Se consigue depositando la maceta sobre
una capa de 1 cm. de gravilla en el posamacetas. la planta deberá
tener siempre luz natural o artificial. no cambiarla constantemente de
sitio mientras esté creciendo. alloro con los parásitos. cuando se abone, respetar
las proporcionesde fertilizante; en todo caso, tener en cuenta el consejo anterior
sobre abonos en maceta. si durante el crecimiento la planta se estira demasiado
en busca de luz, ayudala con un palillo a modo de muleta. cuando la planta
tenga 2 o 3 meses, si le falta espacio (siemprre le faltará en maceta
y por lo tanto su crecimiento no será tanto como en el campo) trasplantala
a una maceta mayor; cuanto más pueda bajar la raiz más
crecerá la planta. cada planta debe ponerse lo más lejos
posible de los bordes y a una distancia de unos 40 cm. respecto de las
demás. las lombrices constituyen una inestimable ayuda; la tierra
encajonada y sometida a contínuos riegos se apelmaza enseguida;
las lombrices la remueven, favorecen la; circulación del aire
y el desarrollo de las raices. el cariño que profeseis a vuestras
plantas será proporcionalmente correspondido.