Asociación Contra el Ruído de Tres Cantos |
VACACIONES DE
RUIDO Y ESTRUENDOS EN LOS CINES
La mayor�a de las situaciones de contaminaci�n ac�stica analizadas o denunciadas por las asociaciones de vecinos o por organizaciones ecologistas se refieren a agresiones ac�sticas originadas por actividades econ�micas molestas, o bien, por infraestructuras de comunicaciones, principalmente carreteras y autov�as. ��������������������� Sin
embargo, a la vuelta del verano, y despu�s de haber probado las delicias del
descanso, de las vacaciones y del viajar, uno ha podido, quiz�s, comprobar que
el ruido molesto en general, est� tambi�n presente en estos �mbitos del
descanso y del ocio, si cabe con mayor profusi�n, en muchas ocasiones. ��������������������� Seguramente
es entonces, cuando nos damos m�s cuenta de lo importante que es vivir en una
atm�sfera tranquila alejada, nunca mejor dicho, del "mundanal ruido",
probablemente porque al sentir las agradables sensaciones de las vacaciones nos
percibimos mejor, nos encontramos bien, porque nos sentimos en armon�a con
nuestro cuerpo, o cuando menos aproxim�ndonos bastante a ella. Es
necesario un examen de conciencia vacacional ��������������������� Es
en esta armon�a m�s o menos conseguida, cuando de repente nos topamos con las
motos acu�ticas, y sus infernales decibelios, con los bares de copas bajo
nuestro apartamento, en una aparentemente id�lica primera l�nea de playa, con
los aeroplanos de propaganda pasando por encima de nuestras cabezas etc.. Desde
luego, quien haya optado, inteligentemente, por pasar las vacaciones en zonas
apartadas del turismo masificado, y frecuentando calas retiradas o salvajes, o
amables pueblecitos en parajes apartados de la geograf�a peninsular, habr�
podido vivir m�s intensamente esa pretendida armon�a con nosotros mismos que es
el objetivo principal de unas buenas vacaciones. ��������������������� De
un modo m�s o menos consciente, todos nos hacemos en estos d�as un breve
"examen de conciencia vacacional ", para ver si hemos cumplido los
sue�os vacacionales que ten�amos durante el invierno, no conviene ser muy
exigentes con el resultado, una cosa son los sue�os o las ilusiones y otra la
realidad de lo vivido, y se lo digo por experiencia propia. ��������������������� �Realizadas estas ligeras reflexiones, que me
era dif�cil obviar por estar en las fechas en las que estamos, en torno a las
vacaciones, y a la contaminaci�n ac�stica presente, tambi�n ellas, paso a
plantear una situaci�n, que seguramente todos los que vamos al cine hemos
vivido y vivimos continuamente, y es el ruido excesivo en los mismos. ��������������������� Principalmente
el asunto est� ligado a los nuevos cines dotados de esos sofisticados sistemas
de sonido y a las pel�culas de acci�n. Nuestros cines de los nuevos centros
comerciales, o de puertos deportivos, y en general todos los cines
modernizados, cuando proyectan pel�culas de acci�n, que ya de por s� registran
sonidos trepidantes generados por gritos, explosiones, m�quinas, efectos
especiales, transformaciones fant�sticas etc., las proyectan a un determinado
volumen recomendado por los productores de las pel�culas o las empresas
suministradoras. Como imaginan, o como han constatado, este volumen es
elevad�simo. La OCU analiza el nivel de ruido en los cines ��������������������� La
revista OCU-SALUD, en su n� 34 de Febrero - Marzo de 2001 expuso unas
investigaciones sobre este tema que constatan con datos lo que todos sab�amos,
que cuando vamos al cine a ver determinadas pel�culas, nos vemos expuestos
durante 90, 120 o 150 minutos a una agresi�n ac�stica en toda regla. ��������������������� Para
esta investigaci�n, se visitaron 12 cines de Madrid donde se proyectaban 5 pel�culas,
tres de ellas infantiles; dicha visita, supon�a entrar como un espectador,
ocupar una butaca y "o�r" la pel�cula con un son�metro en mano donde
se registraba el nivel de ruido durante toda la pel�cula, y con esos valores se
calculaba el volumen medio y m�ximo ( en decibelios) . Aunque dicho estudio se
haya realizado en Madrid, es perfectamente extrapolable a bastantes cines del
gran Bilbao y del Pa�s Vasco en general. ��������������������� Los
resultados de dicha investigaci�n barajaban niveles sonoros medios en decibelios
de 72, 8 dBA, 103,6 dBA, 83,5dBA, 69,2 dBA, 81,5dBA, 84,8dBA, 79,5 dBA ... y
los niveles m�ximos eran de 106,1dBA, 120,6dBA (este �ltimo dato medido en dos
cines), 114,8dBA, 115dBA, 122,1 dBA, 118,2dBA... ��������������������� En
general, del estudio se extrajo la conclusi�n de que el volumen se manten�a
bastante constante durante toda la proyecci�n de la pel�cula; pero, no parece
aceptable a los profesionales de la materia, que en todas la pel�culas los
picos, o valores m�ximos, superaran el nivel m�dico de riesgo de 90dBA. ��������������������� A
juicio de dicho informe que comentamos, convendr�a bajar el volumen de
las pel�culas, -situar el nivel medio en torno a 75 dBA bastar�a-, y los picos
no debieran ir m�s all� de 90dBA. Adem�s, hay que tener en cuenta que
las agresiones sonoras que se soportan a lo largo del d�a se acumulan, y si
durante el d�a hemos estado expuestos a una presi�n sonora elevada durante un
tiempo considerable, esta nueva exposici�n en el cine agravar�a la agresi�n
ac�stica sufrida ese d�a, sea �sta, manifestada en lesiones f�sicas, o bien, en
aumento de niveles de estr�s, ansiedad etc. Las agresiones ac�sticas en las discotecas La situaci�n no
es, para dicho informe, tan preocupante como el que se vive en las discotecas,
donde las agresiones ac�sticas se est�n registrando ya en las consultas de los
otorrinos, apareciendo lesiones irreversibles, pero muchos ciudadanos no vamos
a esas discotecas y si a los cines, y no queremos vernos expuestos en estos
espacios de ocio a fuentes de ruido, cuyos niveles m�ximos s� son agresiones
sonoras de cierta entidad que no tenemos porque recibir, sin nuestro
consentimiento. ��������������������� As�
las cosas, tenemos que exigir a los poderes p�blicos que intervengan en estos
establecimientos velando no s�lo para que caso de desatarse un incendio no
perezcamos dentro de la sala, caso �ste que afortunadamente no ocurre casi
nunca, sino que intervengan en las agresiones que s� estamos sufriendo a diario
en ciertos cines viendo determinadas pel�culas. Y esta intervenci�n debe pasar
inexcusablemente por establecer unos l�mites de emisi�n de decibelios, utilizando
criterios m�dicos, y pensando siempre en todos los espectadores, no s�lo en
aquellos cuyo gozo es mayor, cuanto m�s vibra la sala. ��������������������� Bien
har�an pues, los departamentos competentes en la materia en realizar este oto�o
de vuelta al cine, un estudio previo de la situaci�n, y seguidamente, sin
dilaciones dictar alguna normativa que vele por nuestra salud y nos prevenga de
tanta sonoridad impuesta a todos sin nuestro consentimiento. Fdo: Alfonso C.
Terce�o Ruiz
Presidente de ADECAVI Asociaci�n para la
Defensa de la Calidad de Vida de los Pueblos y
Ciudades de Euskadi (ADECAVI) C/ Pelota,5,Local. BILBAO.Tfno:
944304130 |