Y más si falta valor para defenderlas. Tengo un amigo que suele
contarme sus opiniones y coincido con él muchas veces pero a veces
tenemos discrepancias.
Tal vez él es muy radical, sobre todo en cuanto a la religión
y política. Detesta el clericalismo y la extrema, aún la
simple derecha.
El liberalismo mio le parece muy débil y el catolicismo demasiado
fuerte.
Cuando se tienen 75 años ya uno ha a prendido qué vale
la pena defender con ardor y qué no lo justifica. "¡C'est
la vie!"
Esta mañana cundo vi en la TV las caras felices del presidente
Bush, y la de su hermano Jeb, el gobernador de la Florida, en Usa, sentí
un fuerte desengaño. Allá vive mi hija mayor, ¡qué
pereza para ella!
Después escuché la misa por el canal EWTN, de la Madre
Angélica, en Atlanta. Es la única misa que tenemos entre
semana los viejos y los enfermos.
¿Godo Bush? La madre y su comunidad franciscana (monjes y sacerdotes)
le ganan.
Pero por encima de todos está Dios y es a Él al único
que invoco porque no creo en los humanos.
Si, hay uno en el que creo ahora, ojalá no nos desilusione. El
presidente Álvaro Uribe, de acá, de Colombia.
La corrupción tan extendida, el narcotráfico, los grupos
guerrilleros hacen inmanejable esta República.
Así, pues, mi querido Roberto: no soy goda, no lo he sido nunca.
Encuentro algunas personas que me merecen respeto, por ejemplo el santo
Escrivá de Balaguer, que si tuvo algunos errores, pero de política
terrena que Dios le perdonó. Como a todos nos tiene que perdonar.
Leonor Uribe de Villegas
|