Noviembre 1 de 2.001 |
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Qué difícil es gustar a todo el mundo . "La rabia y el orgullo" ha sido calificado por algunos como el buen producto de una racista, imperialista, militarista, etc. ¡Lo que puede el sectarismo! Para una testigo presencial de lo ocurrido el 11 de septiembre pasado en nueva York, lo que vio desde una ventana de su apartamento situado al frente de los edificios del World Trade Center, será algo que le marcará aun más su vida, deteriorada por el cáncer. Yo vi todo el espectáculo por la TV pues soy asidua televidente de CNN. No podía creer que era verdad que la gente horrorizada se aventara por las ventanas de las torres. Escribe Oriana: "Mira, pensaba estar vacunada contra todo y, esencialmente lo estoy, ya nada me sorprende. Pero en la guerra siempre vi a gente que muere asesinada. Nunca había visto a gente que muere matándose, es decir lanzándose sin paracaídas del piso 80, 90 o 100... En la guerra siempre oía ruidos. En cambio las dos torres no explotaron. La primera implosionó y se tragó a sí misma. La segunda se fundió, se disolvió por el gran fuego, como un trozo de mantequilla al calor". Siempre rezamos por todos los muertos de ese día nefasto para la humanidad, en especial por aquellos enloquecidos que se aventaron cual mariposas desde esas ventanas. La muerte quemados los horrorizó más que aquella de lanzarse para estrellarse contra el piso. ¡Que Dios los tenga en su gloria! Muy cierto lo que afirma Oriana: "Cuanto más democrática y abierta es una sociedad, más expuesta está al terrorismo. Cuanto más libre es un país y menos gobernado está por un régimen policial, más sufre o se arriesga a sufrir las matanzas que durante tantos años se produjeron en Italia, Alemania y en otras zonas de Europa. Y ahora tienen lugar, agigantadas, en Norteamérica" ¿Será que en esta pobre Colombia, azotada por el terrorismo, se nos va la mano en democracia? Leonor Uribe de Villegas |
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