| Febrero 22 del 2.000
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Lo hemos visto, lo hemos palpado cuando la famosa "Comisión de Paz" que desplazó Colombia a varios países europeos, compuesta por 4 comandantes guerrilleros de las FARC, Víctor G. Ricardo, alto comisionado para la paz y otros civiles que han trabajado en el más difícil e inalcanzable proyecto de este gobierno, nos hace santiguarnos. ¿Si servirá que hasta delegados del Santo Padre los hayan recibido? ¿Cómo hablar de paz cuando se sigue haciendo la guerra, continúan los secuestros, y se tiran bombas sobre caseríos poblados por campesinos? ¿No es más justo hablar de paz mientras se hace cesación del fuego? Nos arruinaron la vida a los colombianos todos y ya no creemos ni a unos, ni a otros. No queremos venganzas, queremos justicia. La nuestra es lenta y no del todo confiable. Los empresarios quieren ayudar pero no se ve ninguna empresa creada para que los desocupados al fin puedan trabajar. No se reconstruyen siquiera las viviendas destruidas por el terremoto hace un año, menos los caseríos incendiados y saqueados. Todo es bla, bla, bla... Raúl Reyes, el vocero de las Farc, tranquilamente ha afirmado ante los auditorios internacionales que ellos siguen la guerra mientras se habla. ¿Habrá descaro igual? Siquiera el Santo Padre no los recibió, sino una comisión muy de segunda. "Por sus hechos los conoceréis", pero el presidente Pastrana esta obnubilado. ¡Qué le vamos a hacer! Leonor Uribe de Villegas
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