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...para una Colombia acosada por muchos males.
Las guerrillas, los secuestros, la situación económica
que, ojalá, no nos lleve a un "argentinazo", la desocupación,
el desplazamiento de pueblos perseguidos, la criminalidad generalizada.
En marzo próximo serán las elecciones para presidente
de la República y hay seis aspirantes serios a la candidatura. Entre
ellos el abogado Álvaro Uribe Vélez, por quien votaremos
todos en mi familia, por primera vez sin distingos políticos. Álvaro,
siendo Uribe, es liberal como quien esto escribe, antioqueño como
fueron nuestros ancestros.
Creyente (no se por qué se duda de la fe de los "rojos" como
nos han llamado, contra los "azules" conservadores) ha escrito un artículo
titulado "Un sueño de Navidad". De algunos de sus párrafos
los hago partícipes.
"Quiero en este tiempo de Navidad, dar un mensaje de esperanza a todos
los colombianos, para que, a partir del legado de Jesucristo, hagamos de
nuestra patria un lugar en el que la tolerancia, el respeto por la pluralidad,
los derechos de nuestros conciudadanos y de las leyes, nos permita construir
una sociedad libre, más igualitaria y más feliz"
Quiere Uribe que pensemos y obremos de tal forma que mejoren las cosas,
que soñemos con una sociedad más justa, con una Colombia
sin guerrillas y sin paramilitares. Que haya una autoridad firme -y yo
diría que menos dialogante con los malhechores- y así surgirá
un estado fuerte.
Quiere que trabajemos porque haya un país sin tanta politiquería
ni corrupción, con una clase media fuerte, con un pueblo al que
le llegan todos los servicios, en donde haya trabajo para todos, buena
educación, no conformarnos con lo que algunos llaman "educación
suficiente".
Qué bello es ese sueño suyo que ve a los campesinos regresando
a sus parcelas abandonadas, a los industriales invirtiendo de nuevo en
sus industrias, a los profesionales regresando de su exilio. Que éstas
fe y fortaleza hagan que podamos transformar las dificultades y la incertidumbre
en confianza.
Nos invita a celebrar la Navidad en familia (como él lo hizo)
y nos desea felicidad, alegría y paz. ¿No es óptimo
nuestro candidato? Que Dios lo bendiga y aleje de él todo mal y
peligro. Porque, hoy por hoy, es el punto de mira de más de un asesino,
con las criminales FARC al frente del funesto plan.
Leonor Uribe de Villegas
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