Nada para los jóvenes jubilosos que se acercan a la mayoría de edad. Mucho cuando se trata de recordar aquel familiar, aquel amigo, que cumple 17 años de haber fallecido. 

El miércoles 17, es decir dentro de dos días, cumplirá esos mismos de haber muerto asesinado, un gran amigo, un admirado y afamado periodista de Colombia, el director del diario "El Espectador", lo cual influyó tanto como para decir que ese hecho horrendo acabó con el periódico, que decayó tanto que hubo que venderlo a terceras personas. 

No fueron capaces de imprimirle el impulso necesario y como para no dejarlo morir del todo lo convirtieron en hebdomadario. 
Quién escribe un bello artículo sobre él, el domingo pasado, en su diario, dice: "Son 17 años que pesan en las cuentas pendientes de un país acostumbrado a los silencios. Pero que nunca podrán borrar el legado de un hombre que hizo de su palabra una antorcha de libertad y que encontró la muerte denunciando con nombre propio a cómplices y sicarios del narcotráfico. 
 

"Nunca se hizo justicia a esos bandidos. Sin embargo toda Colombia sabe que Pablo Escobar Gaviria y sus secuaces perpetraron el hecho." 
Casi treinta años tuve una columna en la página editorial de "El Espectador". Fui amiga personal de Guillermo y su familia. Hoy les digo que su muerte es de héroes como fue la del General Rafael Uribe Uribe.