El ferrocarril a Neuquén

CONFLUENCIA

 de los ríos Limay y Neuquén

El 23 de enero de 1783, el Alférez de la Real Armada Basilio Villarino, tras una penosa navegación por el Río Negro, iniciada cinco meses antes en Patagones, llegaba a la confluencia del río Limay-Negro, importante curso de agua emisario del lago Nahuel Huapi  y el río Neuquén, palabra indígena que significa correntoso y Villarino confunde con el Río Diamante que cruza por el sur de la provincia de Mendoza.

La región de la Confluencia era un lugar de paso para los pueblos aborígenes que habitaban la Patagonia. En el sitio donde hoy se encuentran los puentes carreteros y ferroviario estaba ubicado el vado natural por el que el que cruzaban el río Neuquén en sus constantes movimientos migratorios.
En vista de su importancia estratégica, en junio de
1879 el general Julio A. Roca dispuso la construcción de un fuerte que vigile el paso. Entre 1879 y 1881 se levantaron en esa región cuatro fortines llamados Chichinal, General Roca, Primera División y Vidal, ubicados mas o menos donde hoy se encuentran las localidades Chichinales, General Roca, Cipolletti y Barda del Medio, respectivamente.

General Roca es la única localidad que surgió directamente a partir del acantonamiento militar, sin embargo  alrededor del fortín Primera División, surge una pequeña población que intenta, en esos primeros años, comenzar la explotación agrícola de la tierra. Para ello se encara la construcción de un canal, el llamado “Canal de los Milicos”, que derive aguas del Río Neuquén e irrigue las zonas alejadas de las costas, hasta entonces tierra yerma por la falta de agua.

Hacia 1885 ese primer intento no ha dado demasiados frutos, principalmente debido a la precariedad del canal, cuya toma se tapa constantemente. Es entonces que llega a la Confluencia el Coronel Manuel Fernández Oro, quien, en 1886, compra al Estado Nacional tierras situadas en la margen izquierda del río Neuquén.

 EL FERROCARRIL

Uno de los tres trenes que partieron el 31 de mayo de 1899 desde Plaza Constitución con la comitiva que encabezada por

el presidente Julio Argentino Roca inaugurarían la línea a Neuquén.

 

A mediados de 1895 la alarmante posibilidad de una guerra con Chile, decidió al gobierno argentino a negociar con el Ferrocarril del Sud la construcción de una línea desde Bahía Blanca hasta la confluencia del Limay y el Neuquén ( 552 kilómetros) para permitir el rápido traslado de tropas si ello se hacía necesario.   

Puentes entre Cipolletti y Neuquén y ciudad de Neuquén. fotos: Jorge Gonzalez

En 1899 se dan dos eventos que marcarán la historia del pequeño caserío. Por un lado, la llegada del Ferrocarril del Sud a la Confluencia; por el otro, la gran crecida de los ríos Neuquén y Limay-Negro, que termina de inutilizar el Canal de los Milicos, y decide a las autoridades nacionales (presentes en la zona para inaugurar el tramo del ferrocarril) a encargar al ingeniero César Cipolletti un estudio de las cuencas de los ríos con vistas al control de sus caudales y a la utilización de sus aguas para riego extensivo.

La llegada del ferrocarril permite una comunicación fluida con la metrópoli, y el arribo de nuevos pobladores, en su mayoría inmigrantes italianos y españoles.

Línea Bahía Blanca-Confluencia y estaciones construidas en 1899.

En enero de 1896 comenzaron en Bahía Blanca, las obras de construcción de la línea a Neuquén, habilitándose la primera sección, hasta Río Colorado, el 1º de octubre del año siguiente. De Río Colorado a Choele Choel, actual estación Darwin, se habilitó el 1º de julio de 1898. La tercera sección hasta Chelforó el 1º de enero de 1899, finalmente, la cuarta sección, hasta la confluencia y con ella toda la línea se pensó inaugurar el 1º de junio de aquel año en la provisoria estación Neuquén ubicada en la costa este del río homónimo, cerca de la actual estación Cipolletti. Sin embargo la inusual crecida de los ríos Neuquén, Limay-Negro, frustró la ceremonia de inauguración en aquella lejana punta de riel y aunque el acto se realizó el día 1º, debió hacerse a bordo de los trenes de la comitiva, en la estación Chimpay.

 

Gral. Cerri, ex Cuatreros

Médanos

Algarrobo

aquí estuvo la estación Gaviotas Río Colorado Juan de Garay
Pichi Mahuida Fortín Uno Lo que queda de Benjamín Zorrilla
Darwin ex Choele Choel Chimpay Chelforó
Las estaciones originales de la línea: faltan Río Negro que se destruyó por la inundación antes de ser habilitada y la primitiva Neuquén que por ser provisoria, seguramente una construcción de madera, no se encontraron fotos de ella. fotos de Héctor Guerreiro, Jorge Waddell, Jorge Faye, Daniel Cazenave, Sergio García y Marcelo Arcas.

 

Chichinales

El puente ferroviario sobre el río, para llegar a la actual ciudad de Neuquén, fue una obra de ingeniería de bastas proporciones, en parte por la falta de conocimiento sobre el régimen hídrico y en parte por la extensión que debió tener el cruce construido en siete tramos y que finalmente se abrió al servicio público, el 12 de junio de 1902.

La construcción del dique que dio lugar a la formación del Lago Pellegrini y al sistema de riego de todo el valle, motivó que el Ferrocarril del Sud tendiera en 1909, un ramal de 30 kilómetros para el movimiento de materiales, por la margen izquierda del río Neuquén, construyéndose en el empalme con la vía principal, una estación que originalmente se llamó Limay y que no es otra que la actual Cipolletti.

El 20 de marzo de 1910 se libró al servicio público la estación Allen y poco después se fundó el pueblo entre General Roca y Cipolletti mientras se construía la prolongación de Neuquén a Chile, llegando el ferrocarril a Zapala en diciembre de 1913, prolongación que se habilitó al servicio el 3 de enero de 1914.

También en 1914 sobre el ramal tendido hacia el dique en el río Neuquén el Ferrocarril del Sud habilitó la estación Cinco Saltos para servir a los pobladores de las Colonias La Picasa (Río Negro) y Centenario (Neuquén). En torno a ella se fue formando el pueblo del mismo nombre que hoy es ciudad. Junto a esas vías fueron surgiendo también las paradas Ferri, entre Cipolletti y Cinco Saltos. Kilómetro 1212, actual Contralmirante Cordero y kilómetro 1218, punta de rieles del ramal.

Estación cubierta de nieve. Se llamó sucesivamente Limay,

General Fernandez Oro y Cipolletti. foto: Cipolletti.gov.ar

 

Neuquén, Av. Argentina y chalet de la gobernación en 1940.
Puente ferroviario sobre el río Neuquén. Neuquén estación habilitada en 1902.

Con el paso de los años el valle del Río Negro se fue poblando y su actividad industrial y comercial se incrementó en forma sostenida, por ello el Ferrocarril del Sud estableció un servicio de trenes locales entre las estaciones Río Negro (actual Padre A. Stefenelli) y Neuquén, con paradas en las estaciones Allen y Cipolletti y la parada kilómetro 1156 que con el tiempo se convertirá en la estación Coronel J.J. Gómez y en los kilómetros 1151, 1162 y 1183, simples pasos a nivel.

Para ello usó un coche motor a vapor de los que tenía en servicio tres unidades desde 1905. Poco después, al resultar su capacidad insuficiente para satisfacer el creciente tráfico, fue suplantado por un tren convencional y el coche corrió un tiempo por el ramal al kilómetro 1218 hasta que desapareció del servicio en el valle.

 

izquierda arriba: Coche motor a vapor del FC Sud que estuvo en servicio local. foto: Colección Fundación Museo Ferroviario.

izquierda abajo: Aviso al público con el horario del tren local. (Revista Comercial de Bahía Blanca - febrero 12 de 1916) colección Héctor Guerreiro.

Lo que queda de la parada Ferri Estación Cinco Saltos bien conservada
parada Contralmirante Cordero y Kilómetro 1218 (Barda del Medio). Las 4 fotos: Jorge Faye

 

En  el tramo de vía que la línea recorre el valle del Río Negro al este de la confluencia y el valle del Río Limay ya en territorio de Neuquén, se fueron habilitando nuevas estaciones cuya importancia varió en función de las poblaciones que se establecieron en torno a ellas.

 

Cuando el ferrocarril llegó al valle ya existía desde 1879 una población llamada al igual que la isla que forma allí el Río Negro, Choele Choel. Desde entonces usaba como propia la estación del mismo nombre ubicada a 12 kilómetros.

Sobre la barda, frente a la isla de Choele Choel, el FC del Sud habilitó en 1909 una nueva estación que denominó Darwin, pero en torno a la estación original ya se había formado un pueblo llamado, justamente, Darwin. Sin embargo, esta nueva estación tuvo poco éxito, a pesar de estar mas cerca del pueblo, tal vez por ser de difícil acceso, lo cierto es que los pobladores de la isla siguieron usando la primitiva estación, con el agravante que los nombres cruzados creaban confusión, por lo que el 18 de mayo de 1911, Choele Choel pasó a llamarse Darwin y Darwin, Choele Choel. Esta última, con escaso tráfico y mal ubicada terminó desapareciendo. Dicen que después de un incendio que convirtió su edificio en ruinas.  (1) foto: Rodrigo Stoessel en Panoramio.

Aquí estuvo la estación Choele Choel. (1)

 

Plottier, estación provisoria y Senillosa sobre la vía de Neuquén a Zapala.

La foto de la izquierda sin fecha muestra una formación entrando a la estación Neuquén desde Cipolletti, puede ser el tren local  que circuló por el valle cuando se dejó de usar el coche motor o un tren que lo suplantaba cuando aquel resultaba chico.

 

foto: www.neuquen.gov.ar

Estación Villa Regina en construcción y entre la barda y el trazado de la incipiente colonia. foto: www.villaregina.gov.ar

 

Cnel. Belisle, igual a Plottier provisoria General Enrique Godoy Ingeniero Luis A. Huergo
Mainqué Cervantes Cnel. Juan J. Gómez

Se advierte que estas estaciones, salvo Cnel. Belisle y Contralmirante M. Guerrico fueron construidas con planos similares a Villa Regina, entre 1928 y 1930. General E. Godoy está en ruinas.

fotos: Sergio García y Jorge Waddell . en el caso de Gral. Fernandez Oro, www.fmplusweb.com.ar

Restos de Contralte. Martín Guerrico Gral. Fernández Oro

La estación Río Negro formaba parte de las primeras habilitadas cuando el ferrocarril llegó al valle. La gran inundación de 1899 que impidió la ceremonia de inauguración de la línea, fue particularmente violenta

en el pueblo de General Roca donde estaba esta  estación. El edificio, como casi todos en el pueblo, cedió a la fuerza del aluvión y  cuando las aguas bajaron, la estación ya no estaba. El pueblo se trasladó entonces a un lugar mas seguro, a cuatro kilómetros mas arriba. Inmediatamente después, el Ferrocarril del Sud construyó, del otro lado de la vía, un nuevo edificio, pero esta vez con un plano distinto que nada tiene que ver con las demás estaciones de la empresa. La nueva estación se llamó sucesivamente Río Negro y Fuerte General Roca.

 

 

Junto al nuevo pueblo, en 1916 el ferrocarril habilitó una parada llamada kilómetro 1150 que poco después tomó el nombre de Fuerte General Roca y la anterior estación se llamó Los Perales. Finalmente Los Perales recibió primero el nombre de Alejandro Stefenelli y finalmente Padre Alejandro Steffenelli.

El edificio actual de Fuerte General Roca se construyó a fines de la década del 20.

 

fotos: Sergio García y Jorge Waddell

 

El 25 de mayo de 1910 se firmó el acta de fundación del pueblo de Allen en el kilómetro 1172.9 de la línea, entre General Roca y Cipolletti, ese mismo año el ferrocarril habilitó la estación.

La estación Cervantes se abrió al servicio en 1913 como parada kilómetro 1134, Coronel Belisle e Ingeniero Huergo se habilitaron en 1914, esta última como kilómetro 1120, en el año en que el ferrocarril alcanzaba Zapala y dentro del valle, en territorio de la Gobernación de Neuquén, se habilitaban las estaciones Plottier y Senillosa.

 

 

 

 

 

Estación Allen, entre General Roca y Cipolletti desde 1910.

En el valle del Río Negro, las estaciones Kilómetro 1156, luego denominada Coronel J.J. Gómez, se habilitó en 1915 e Ingeniero Romero y Fuerte General Roca en 1916. Contralmirante Guerrico es de 1921, General E. Godoy de 1924 y una de las mas importantes y pintorescas ciudades del valle, Villa Regina, tiene su estación desde 1928, aunque desde el 6 de diciembre de 1926 existía allí la parada Kilómetro 1106.

Finalmente General Fernández Oro y Mainqué se habilitaron en 1928 y 1929 respectivamente.

La línea actual desde Fortín Uno hasta Senillosa y el ramal a Kilómetro 1218, a partir de Darwin la vía transita por el

valle y actualmente no hay servicio de pasajeros. A algunas estaciones las mantienen los municipios,

otras están en ruinas y algunas prácticamente han desaparecido.

La estación Neuquén en la actualidad, en medio de la ciudad y a la espera

que se concrete el proyecto del nuevo tren local del valle.