Células de generación espontánea muestran que la vida pudo haberse originado en el espacio
Fuente: CNN en español (01 de Febrero de 2001)
Unas pequeñas burbujas capaces de originarse en el helado vacío del espacio sugieren que la vida, o al menos su germen, pudo haber surgido en el cosmos.
En un experimento en que se reprodujeron las duras condiciones del espacio --temperaturas heladas, ausencia de aire, abundante radiación-- un grupo de científicos logró que se formaran membranas de células artificiales.
Las membranas, semejantes a pompas de jabón, podrían funcionar como primitivas paredes celulares, dice David Deamer, biólogo de la Universidad de Santa Cruz que se especializa en el tema.
"Estas paredes son semipermeables. Todas las membranas son semi-permeables, para que los elementos como el agua y el oxígeno puedan entrar y salir con facilidad", dice Deamer, quien participó del estudio. "Eso es lo necesario para la vida: necesita contar con un interior que no esté totalmente aislado del exterior".
Deamer dice que los compuestos orgánicos que las forman se han encontrado en meteoritos que alcanzaron la Tierra, y algunos años atrás se descubrió que "se combinan solos" formando burbujas de aspecto jabonoso que repelen el agua.
Cuando la agencia espacial estadounidense comenzó su programa de astrobiología --en busca de vida en el espacio-- los investigadores se juntaron para determinar qué sería necesario para crear una célula en el espacio.
"Los científicos creen que las moléculas necesarias para crear las membranas celulares, y por lo tanto el origen de la vida, se encuentran por todas partes en el espacio", expresó en un comunicado Louis Allamandola del Centro Ames de Investigación. "Este descubrimiento sugiere que podría encontrarse vida por todos los rincones del universo".
Compuestos comunes y corrientes
Los investigadores utilizaron compuestos simples comunes, que se combinaron para formar algo que se parece a una vesícula o membrana celular.
"Este proceso ocurre continuamente en las densas nubes moleculares del espacio", dice Allamandola.
Tales compuestos podrían tranquilamente haber llegado a la Tierra en un meteorito o un asteroide. "El transporte de estos compuestos puede haber sido crítico para el origen de la vida en la Tierra".
"Tal vez estas moléculas fueron como troncos esparcidos que permitieron asentarse a los químicos que originan la vida y construir sus hogares", agrega Jason Dworkin, investigador graduado de la NASA que realizó gran parte del trabajo de este estudio.
El próximo paso será ver si estas pequeñas burbujas pueden admitir actividad celular en su interior, y Deamer piensa que podrían.
"Estamos intentando inyectar cosas como ADN y ARN dentro de estas vesículas", dice.
El ADN y el ARN conforman la base genética de la vida, donde el primero transporta las instrucciones básicas para la actividad celular y el segundo las lleva a cabo.
"De alguna manera lo que estamos tratando de hacer es, no una forma de vida artificial porque no estamos ni remotamente cerca, pero un modelo de lo que podría haber conducido al origen de la vida primitiva", dice Deamer.
"Hemos capturado un gen en AND, en una pequeña vesícula lípida. También capturamos una encima que puede utilizar ese gen para fabricar ARN. Todo eso dentro de una pequeña vesícula celular". A eso le aplican químicos que se sabe promueven la actividad celular, y hasta ahora --dicen-- está funcionando.
(Con información de Reuters)