SERRAT Y MIGUEL RIOS,
MANO A MANO
Entre
los diferentes espectáculos que pasean por los escenarios españoles en el
verano de 1972 hay uno que llama la atención: “duelo” musical entre Serrat y
Miguel Rios, la poesía de Machado contra “el rock de la cárcel”. El espectáculo
que se anuncia como un “mano a mano” no es otra cosa que un invento de Lasso de
la Vega para vender los conciertos. Porque después en escena cada uno realiza
su actuación por separado, como corresponde a dos músicos d estilos tan diferentes.
La amistad
entre los dos cantantes viene ya de lejos. Miguel Rios es padrino del primer de
Serrat que por entonces todavía permanece en secreto, por otro lado acaba de
realizar una versión “rockera” de “Cantares”. Miguel Rios junto con Marisol son
de los pocos cantantes españoles que por aquellas fechas se han atrevido a
hacer versiones de los temas de Serrat. Para Serrat es una forma también de
ayudar a un amigo que acaba de pasar por la cárcel por un problema de drogas.
Miguel Rios es detenido por posesión de cannabis; su figura es blanco de la
prensa más conservadora que lo ataca sin piedad. Serrat, como en otras
ocasiones, sabe acudir cuando le llama un amigo...
Este
“mano a mano” veraniego que Lasso de la Vega ha montado como había hecho en
otros tiempos con otros artistas, conocerá “división de opiniones” y en algunos
sitios, como yo fui testigo en Valencia, una buena bronca para ambos artistas.
El álbum “Mediterráneo” supone para Serrat un “renacimiento” musical. Después
de su retirada, cambio de director musical, y una última época marcada por una
cierta saturación de recitales, Serrat volvía a demostrar su liderazgo en la
música española. Artístico y comercial.