COCHES ARGENTINOS
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La Industria Automotriz Argentina en los Años Sesenta

Humor Automovilístico

Prueba de aceleración del Bambi

 

Dime Cómo Eres y te Diré Cómo Andas
Ronald Hansen (Ilustracciones de Oski) ©PARABRISAS, Agosto 1961

Cada uno maneja como es. No descubrimos la pólvora, porque psicológicamente la personalidad se nos refleja en cada uno de nuestros actos...

 

... el amigo A. El amigo A se la pasó juntando plata. Tuvo el mérito indiscutible e indiscutido de trabajar de 6 a 24 horas todos los días incluso domingos, feriados y el día de navidad. Un buen día pudo decir ufano que no se dejaba cortar la cabeza por menos de diez millones de pesos. Siguió en la senda cautelosa; compró un “forcito” ’37, pero el auto había sido descuidado por dueños anteriores, y A no sabía mucho de mecánica. Resultado que “se vendió.” Se fijó en los clasificados y encontró un Impala ’61. En realidad podría ser cualquier otro tipo de Chevrolet, pero desde el “affaire” Todres, aquí no hay ningún Chevrolet que no sea Impala...
Compró el Impala y... ¡hay que verlo pasar, compañero! Una mano cuelga de la puerta exhibiendo el anillo de diamantes y la otra toma el aro del volante con cuidada indiferencia. Si alguna vez tiene que hacer un cambio de velocidad (para no hacerlos se compró un auto grande), la mano colgante se levantará perezosamente, la otra pasará del volante al cambio, y unos segundos después, todo volverá al status quo. No es una mala persona, pero cuídese de él cuando maneja, especialmente los domingos cuando va a Ezeiza con la patrona (ahora se tiñó de rubia) y los chicos (que el año que viene irán a un colegio inglés, con blazer azul y pantaloncitos de franela gris)...

 

B es muy distinto. B aprendió a manejar cuando tenía doce años y se olvidó de cómo hacerlo a los catorce. Desde esa temprana edad su técnica de manejo se reduce a mantener el pie firmemente sobre el acelerador de su NSU Prinz y controlar la velocidad usando la caja. (Después se queja de que se le sueltan las patas del motor...) Sale de La Fusta o Reviens con algo de copas de más, “rosca” por la Avenida del Libertador a 130 (para eso se hizo “tocar” el motor por Delfosse o Galluzzi) y es temible bajo cualquier circunstancia. Con el tiempo llegará a andar ligero y bien; la cultura innata aflorará una vez que los arrebatos de una juventud demasiado fácil se hallan acallado. Pero hasta los veinte largos, será un peligro para todos. Cuídese, también, especialmente de noche y cerca de la zona de las “boites”.

 

C es un respetable señor. Siempre tuvo un pasar discreto. Tuvo Rugby, Ford A, después un Chevrolet ’36, pasó al Plymouth ’41 y actualmente tiene un Chevrolet ’51 que cuida como si fuera una novia. (Tampoco admite que los autos chicos sirven para la Argentina). Es una excelente persona, pero sabe todo lo que se puede saber sobre conducción de automóviles. No le gustan los indicadores de viraje. “Toda la vida hicimos señales sacando la mano por la ventanilla. Ahora vienen con esas lucecitas que se descomponen a cada rato...” No es cierto, pero... Después, si le dicen que en la Provincia de Buenos Aires son obligatorios los indicadores de viraje para los coches que se vayan patentando nuevos, dirá muy suelto de cuerpo: “Y... ahí hubo una ‘tragada’ de algún funcionario...”
Y en cuanto a los giros prohibidos... “Vea, mi amigo, hace 30 años que estoy doblando a la izquierda en esta esquina...¿pero es ahora que se han vuelto todos locos? ¡No hacen más que entorpecer el tránsito! Antes venía de mi casa en 17 minutos sin correr. Ahora, con todos estos semáforos, con todos estos ridículos cartelitos... ¡tardo media hora y más! ¿Y a eso le dicen progreso?
C es una bellísima persona; un hombre atento, formal, cumplidor, un verdadero “pilar de la comunidad” como dicen los norteamericanos. Pero en cuanto se sube a un auto ¡es un viejo testarudo!...

 

D es un “rana”, el prototipo del porteño ventajero. Es el que no hace cola porque algún amigo le dio la tarjetita para el ministro. Es el que “se hizo traer” la radio a transistores porque le salía más barato que comprarla en un comercio (cuyo dueño la había contrabandeado de cualquier modo). Por supuesto, maneja del mismo modo. Se “cuela” en los semáforos cuando está seguro de que el ojo avizor de la autoridad no está cayendo sobre él. Estaciona por doquier. Y siempre tiene un ojo abierto para la grúa. Si “viene” una boleta, hace lo imposible por “arreglarla”. Pierde en tiempo más de lo que le hubiera costado pagar la multa, pero la cuestión es no perder la patente de “piola”. Se filtra por la derecha si puede, calculando que el conductor del auto que viene por el otro lado es un novicio, una mujer, o un anciano, y va a ceder terreno. No va a arriesgar un choque frontal, pero escápele igual; es probable que lo saque a usted de las casillas y lo lleve a hacer alguna “cosa de negros”...l

 

E. La señorita E quiere desvirtuar la creencia generalizada de que las mujeres no saben manejar. Tiene un Peugeot 403 azul oscuro y anda corriendo siempre a fondo. Lástima que quiera correr antes de haber aprendido a caminar. Cree que doblar fuerte es llegar a la esquina y torcer el volante. Diga usted que el 403 es un auto que perdona mucho. Incluso que la señorita E se arrepienta cuando entra muy fuerte en la curva de River y frene con la dirección torcida. Cosa que, por otra parte, no haría Ewy Rosqvist; esa Ewy Rosqvist que la señorita E cita más o menos cincuenta veces por día.
Y nuestro mensaje a la señorita E es: “Niña, no hay ningún motivo que impida que usted maneje extraordinariamente bien. Pero tiene que ir aprendiendo de a poco. (Lo mismo decimos para su amiguito B).

 

F tiene un Cadillac. No es un ’63, pero un ’60 muy bien tenido. Mucha plata. En el Automóvil Club todos le dicen “Buen día, doctor” cuando va a cargar nafta. No es un doctor, pero es un hombre capaz; dirige una empresa y lo hace bien. Heredó la empresa del padre y desde joven conoció la autoridad. No abusa de ella pero cuando dice la frase aún más intrascendente, resuena en ella el metálico timbre del hombre acostumbrado a que le hagan caso.
Por supuesto, no concibe que la gente que anda en Dauphine, De Carlo o Fiat 600 tenga los mismos derechos que él. Por eso pasa “de prepo”, no porque sea por naturaleza un mal educado, sino porque en la oficina la gente se hace a un lado cuando viene. Maneja con eficiencia, como todo lo que hace, pero de cuando en cuando su mismo espíritu arrollador lo llevan a deformar la carrocería por impacto (“bollo”, que le dicen). Si se encuentra con él, cédale el paso. De todos modos no se va a convencer...

 

G es un señor distraído. Excelente persona, y todo el mundo lo aprecia. ¡Pero es una calamidad! No hay confitería en Buenos Aires en la que no se haya dejado olvidado un paraguas. No hay mesa de café en que no haya quedado un atado de Particulares como recuerdo de que G pasó por ahí. Su récord es haber llevado en el bolsillo una carta para echar en el buzón, durante cuarenta y cuatro días consecutivos.
Su auto y su conducción son dos calamidades paralelas. Hace tres meses que tiene que arreglar un foquito de posición del lado izquierdo. El vidrio trasero derecho no baja porque se le salió el picaporte y lo perdió. Y para ese modelo no hay repuesto. Cuando anda por la calle es igual. Si alcanza a ver un agente de tránsito, es por casualidad. Dobla a la izquierda porque se le ocurre, y no por deliberadamente trasgresor. Gran persona, y cordial amigo, pero en la calle ¡una amenaza!

 

La señora H es la antítesis de la señorita E. Padre “muy a la antigua”, le inculcaron, tal vez involuntariamente, la creencia de que la mujer es un ser inferior cuyo único fin en el mundo es lavar los platos y poblar la tierra. Se sobrecarga de espanto cuando le sugieren algo más complicado que poner la heladera en “descongelar”. Pero hace unos meses el esposo, cuyos negocios van muy bien, le regaló un Dauphine para tener él más libertad de acción con su Cross Country. La buena señora H al principio se negó terminantemente a sentarse tras el volante de su autito color borravino. Pero cuando se dio cuenta atemorizada de que el marido comenzaba a perder la paciencia, se tiró, no muy resueltamente, a la aventura.
¡Pobre señora H! Nunca aprenderá a manejar. Siempre se le calará el motor en las intersecciones. Siempre chocará con algo cuando da marcha atrás. Nunca se acordará de prender las luces cuando anda de noche. ¡Huya, señor lector! ¡Huya despavorido!

 

¿Adonde Vamos a Parar?
SOBREMESA, ©Parabrisas, Noviembre 1966
Hace poco vi una cupé De Carlo con cuatro, repito cuatro, salidas de escape. Me quedé pensando cómo dos válvulas de escape pueden desahogar en cuatro caños. Indudablemente, como decía Ricardo de la Vega, hoy las ciencias adelantan que es una barbaridad.
Quien hubiera dicho, no, que se verían tantos miles y miles de accesorios. Desde los útiles y aún importantes, como cuentavueltas, instrumental adicional y cinturones de seguridad, hasta cosas como esas fundas peludas que ponen en los volantes, y esas espeluznantes virolas cromadas con las cuales autos que por diseño eran sobrios, se convierten de la noche a la mañana en réplicas ambulantes de los tocadiscos tragamonedas de los cafés del Bajo.
Antes usted quería ponerle un amperímetro a su coche para completar o reemplazar la luz de idiota que sirve únicamente para informar que Se Rompió y lo miran como si recién hubiera bajado a tierra en el OVNI de las 13:22. Ahora se ven los vehículos más inverosímiles con manómetros, medidores de temperatura, etc.; incluso hay gente que protesta porque no puede colocarle medidores de temperatura a su Isard o NSU-Prinz. Eso está todo muy bien, aunque a veces me pregunto cuánta gente hay que realmente sabe interpretar los instrumentos que colocó, y más aún, cuántos los miran.
Después tenemos los volantes especiales. Nadie discute que son lindos y están bien hechos. Claro que uno a veces ve un Fiat o un Peugeot con gomas gastadas y un volante nuevito, nuevito, y entonces uno se pregunta si no hubiera sido mejor gastar la plata en gomas, total el volante Nardi no se lo van a dejar lleva al cielo. Y después uno ve un Citroën 2 CV con un volante Nardi. Ojo que a mi me parece que el 2 CV es un autito flor y truco, pero ponerle un volante deportivo a un 2 CV es como ponerle gomas Pirelli Cinturato a una carretilla elevadora.
¿Y los faros banquineros? Uno suele verlos en autitos que con toda la buena suerte roscan los 110 a fondo; entonces surge la pregunta de que si los tipos para andar a ciento diez necesitan tanto faro, ¿no sería mejor que cambiaran la palanca de cambios por un bastón blanco? Claro que a lo mejor el que maneja es el perro guía. Por las cosas que se ven en la calle, la hipótesis es probable...

 

IN y OUT
©PARABRISAS, Diciembre 1965 y Junio 1966

IN y OUT vienen a ser los modernos reemplazantes de "estar en la pomada" o "no estar". Así como no se comen arbejas con la hoja del cuchillo, hay vacas sagradas y monstruos negros en automovilismo, especialmente el deportivo. Como despreocupada colaboración con los que se inician en el penoso arte del "savoir faire" al volante, damos esta lista de cosas que se hacen y que no se hacen. Pero recomendamos que es IN leer ésto y OUT tomarlo en serio...
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Las gomas CINTURATO son IN. Pero es OUT ponerle gomas Cinturato a un Morris 10.
Es IN dejar la puerta del auto abierta mientras se toma café en "LA TUERCA".
En Bariloche, tener auto es OUT.
El tocadiscos es OUT, pero los guantes de malla son IN, siempre que no se usen para manejar, debiendo quedar sobre la repisa del tablero.
Terminar el Gran Premio es OUT. Abandonar por una causa increíble es IN.
Es OUT decir "Chevitú", pero es IN decir "el 400".
Es IN estacionar sobre la vereda sur de Avenida del Libertador.
Tener un auto vintage o clásico es IN, pero más IN tenerlo parado porque no llegaron los repuestos de Inglaterra.
Construir un Minijunior es IN, pero correrlo es OUT.
El acelerador de chapa agujereada es IN.
El Alfa 2600 es OUT, pero el Giulia es IN. El Giulietta es OUT.
Es IN hablar mal de los Road Tests de PARABRISAS, pero mucho más IN hablar de los Road Tests de ROAD & TRACK. Es OUT hablar, bien o mal, de los Road Tests de QUATTRORUOTE.
El 2 CV con escape libre es IN. También es IN andar rápido con un R4F (no R4L). Es OUT andar rápido con un Peugeot 404 .
Los tigres son OUT. Pero es IN exhibir al descuido un ejemplar de L'ANNEE AUTOMOBILE en la repisa de la luneta (ROAD & TRACK es OUT).
Hablar bien de TC es OUT, pero es IN correr en TC. También es IN hablar bien del auto de Cupeiro y de los Ford Falcon del equipo.
El Futura es OUT. El Falcon blanco, sucio y sin tazas es IN.
Correr un Falcon en TM es OUT, en TC es IN.
Adelantarse a la luz verde es OUT. Salir picando cuando cambia es IN.
Ir al Autódromo el sábado a la tarde es OUT. El miércoles a la tarde es IN.
Ponerle distintivo Tornado-Jet a un Rambler '63 es OUT. Pero es IN ponerle motor Tornado a un '63 y no decir nada.
Cualquier pick-up, menos el Rastrojero, es IN, siempre que esté embarrada y tenga en la puerta la marca de una estancia.
La regularidad es OUT. Los Rallyes son IN.
Es OUT andar en la calle con números de carrera pintados. En cambio es IN andar con los redondeles blancos sin números. Las calcomanías de amortiguadores son OUT. Las leyendas misteriosas son IN.
Es OUT que su mujer maneje su auto. Es IN comprarle un Dauphine o un Fiat 600 E. Comprarle cualquier otro auto es OUT.
Correr en polóver es IN, especialmente si es con corbata. Correr en campera es OUT.
Las franjitas son decididamente OUT, pero es IN el capot pintado de negro.
Las franjitas de color son OUT, pero los autos blancos o crema son IN.
Es IN tener colocados en el auto cinturones de seguridad, pero es OUT llevarlos prendidos.
Ir a Ezeiza de día es OUT. Ir de noche es IN.
Irse al pasto es OUT. Cortar cordones es IN.
Viajar en colectivo es OUT. Viajar en subte es IN. Cuando se viaja en subte, es IN decir "Ahora que tengo el auto en el taller, me doy cuenta de lo cómodo que es viajar al centro sin tener que estacionar".
CUBA es IN. CASI es OUT. Ser hincha de un equipo de segunda de ascenso es IN, especialmente si ese equipo antes jugó en 1º.
La estanciera es OUT, salvo que sea de doble tracción.
Es IN pintarle a un Rugby '27 leyendas en inglés. Es OUT pintárselas en castellano.
En los bares a la calle como El Guindado, Dandy, Charlotte, La Biela, etc., estacionar correctamente es OUT. También es OUT cerrar el auto.
El Ford T es IN, pero el A es OUT.
Es IN (cum laudet) llevar en el coche, en un lugar bien visible, un par de esquíes acuáticos. Es OUT llevar cañas de pescar.
Calcular el consumo por 20 litros es OUT. Es IN hacerlo en kilómetros por litro. Hacerlo en litros cada 100 km es súper IN.
En Punta del Este (perdón, "el Este") las chapas RA son OUT.
Los barcos de madera son IN, los de plástico son OUT.
Es muy IN cortarle la palanca de cambios a los autitos tipo Fiatin, NSU, De Carlo, etc., hasta dejarlas muy cortitas.
Si usted tiene una casa en San Isidro con garage para dos autos, es IN tener la cortina baja para no hacer ostentación.
Los buscahuellas son OUT. Los banquineros son IN.
Es OUT correr en Rallyes con el auto pintarrajeado. Es IN hacerlo con un numerito discreto pintado en la puerta.
Las Scuderias son OUT.
Es OUT andar despacio por Libertador, mirando las casas-quinta.
En el Cerro de las Rosas, la Avenida Rafael Núñez es OUT.
Las calles laterales son IN.
El Packard hasta el modelo 1941 es IN.
Es IN doblar fuerte con un Cadillac del 63 en adelante.
Escribir o hablar de lo que es IN es OUT, en cambio es IN callarse bien la boca al respecto.
Es IN bajarse del auto, pero es OUT hablar bajito y manejar pegado a la vereda.
Los mocasines especiales de competición son IN. Las alpargatas blancas y nuevitas son IN.
Los Minijunior son OUT. Los Fórmula 3 son IN.
Conocerlo a Fangio es OUT. Conocerlo a Froilán es IN.
El Dyna-Panhard es IN.
Es OUT debutar en el Gran Premio, especialmente en las categorías A y B.
El Dauphine y el Gordini son OUT, pero pintados de blanco y con llantas agujereadas son IN.
La Estanciera con faros banquineros Marchal es IN.
El Mercury 54 es OUT, pero si tiene chapa de Tierra del Fuego o Santa Cruz, es IN. Comodoro Rivadavia es OUT.
Correr en Tierra del Fuego es súper IN.
Las motos Triumph bicilíndricas son IN.
Las fundas peludas para volante no son OUT; simplemente no existen.
Es In andar por el centro con un trailer portando una lancha, especialmente si ésta tiene número de competición. También es muy IN no largar una carrera de autos porque ese mismo día tenía que correr en una regata.
El Volvo tipo Ford 46 es IN. El Amazon es OUT.
Las chapas BMW en los De Carlo son OUT.
Las rubias de 20 años son OUT. Las morenas de 40 son IN (hablamos en beneficio de la seguridad en el tránsito).
Los Heinkel abollados, oxidados y despintados son IN. Los puestos a nuevos son OUT.
Las bocinas Sorpasso son súper OUT. Las bocinas de aire comprimido, de un solo tono, son IN.
Es In viajar a Córdoba en Camello.
Vender coches clásicos en los Estados Unidos es OUT. Venderlos en Inglaterra es IN.
Los TC bien tapizados por dentro son IN. Los TM bien tapizados por dentro son OUT.
Es OUT andar en la calle con un TC de los viejos.
Los motores fuera de borda son OUT, los entrofuori son IN. Si no sabe lo que es un entrofuori, Ud. es OUT.
Viajar en el Salón Especial del Nicolas Mihanovich es OUT.
El Chevrolet Super es OUT. El Chevrolet 400 es IN. Condición indispensable, sacarle las tazas y pintarle las ruedas de negro.
Las ruedas pintadas de rojo son OUT.
Los cascos pintados según el color del auto son imperdonablemente OUT.
Es IN ir a pescar en lagunas completamente desconocidas, a las cuales se llega después de 150 kilómetros de tierra. Es OUT ir a pescar a lugares conocidos (salvo competencias de pesca en Mar del Plata).
Mar del Plata es OUT desde el 31 de diciembre al 1 de marzo. En esa época Punta Ballena es IN.
La música clásica es IN, especialmente de compositores desconocidos. Verdi es OUT. Vivaldi es IN, aunque no es desconocido.

 

Automovilismo y Astrología
©PARABRISAS, Junio 1966

ARIES (21/3 a 20/4) • El individuo colocado bajo el signo de Aries es cascarrabias, impulsivo y colérico. Evidentemente, muchos conductores argentinos deben haber nacido en esta época. Su auto ideal es ruidoso, de fuerte aceleración, y tiene la primera sincronizada. Ferrari, Alfa-Romeo o Aston-Martin son los indicados; a falta de muchas divisas, los sustituye por Bergantín Seis, NSU-Prinz, Cisitalia, etc. Nuestro consejo: si lo ve, huya despavorido.
TAURO (21/4 a 20/5) • Los taurinos son calmos, obstinados y poco amigos de desplazarse de su línea de acción. Su auto ideal es un tractor con topadora, pero pueden acercarse por la vía Jeep, Plymouth 37, etc. Le gustaría una locomotora, pero reconoce que éstas no andan en la calle. Nunca chocan, pero pueden hacer chocar a los demás. Nuestro consejo: Apártese.
GÉMINIS (21/5 a 21/6) • Los de Géminis son seres agitados, ágiles, en continuo movimiento. Parecen tener hormigas en todo el cuerpo. Se adelantan por la izquierda o la derecha. Su coche ideal debe ser pequeño, veloz y de mucha agilidad. Nuestro consejo: los chapistas también son criaturas del señor.
CÁNCER (22/6 a 21/7) • La psicología cancerina es sumamente complicada. Oscilan constantemente entre los dos polos. Quisieran un Cadillac Eldorado con cambio de velocidades en el piso, o un Ford T con Hydra-Matic. También les gustaría un Valiant, pero con palanca de cambios afuera de la carrocería, tipo Bugatti 23. Alternativamente, un De Dion Bouton con motor Estanciera. Nuestro consejo: No son peligrosos.
LEO (22/7 a 22/8) • Leo es signo de fuego, y los leoninos se imponen por una personalidad radiante, vibrante y simpática. Su auto ideal es un Rolls-Royce; alternativamente un Imperial. En última instancia se conforman con autos de colección de grandes faroles y guardabarros cromados. Nuestro consejo: Haga un gesto de admiración cuando se acerque al auto de un leonino.
VIRGO (23/8 A 22/9) • El nativo de Virgo es un enamorado nato de la precisión, la exactitud, y el análisis. Llena su tablero de instrumentos que le indican hasta la temperatura de la salida de la caja de dirección. Idealmente, tiene autos que cuestan 400.000 pesos y los recarga con accesorios por 200.000 más. Nuestro consejo: Dígale, “Quema un poco de aceite su auto ¿no?”
LIBRA (23/9 a 22/10) • El nativo de Libra oscila, vacila y tergiversa. Se adelanta frecuentemente, para retroceder de inmediato. Necesita un auto con dos volantes, dos capots y dos motores. Idealmente, debería tener un coche sport instantáneamente convertible en sedán. Nuestro consejo: Mantenga su distancia.
ESCORPIO (23/10 A 21/11) • El subconsciente de un nativo de Escorpio es parecido al fondo de un pantano; bajo una superficie aparentemente plácida, puede esconderse un extraordinario burbujear de vitalidad. Suele manejar plácidamente durante varios kilómetros, y después hacer un rebaje y acelerar velozmente. Su auto ideal sería un anfibio con camuflaje. Podría comprar un Amphicar, o un Volkswagen (según la propaganda del VW, el Escarabajo flota . . .). Nuestro consejo: No se fíe de él . . .
SAGITARIO (22/11 a 21/12) • El nativo de Sagitario es alegre, sociable, optimista, generoso. Es amable con los “auto-stop”, sobre todo si son rubias. Es un notable animador y, a menudo, padre de familia numerosa. Su auto ideal sería un ómnibus, pero se arregla con una rural Cross-Country. Nuestro consejo: Nunca se negará a “arrimarlo” a donde usted vaya.
CAPRICORNIO (22/12 a 19/1) • El nativo de Capricornio es de temperamento cascarrabias. Le gusta vivir relegado sobre sí mismo; hace rancho aparte y no es ruidoso. Idealmente, tendría un auto cerrado, todo negro, de un solo asiento y cuyo interior está débilmente iluminado por un pequeño ojo de buey. Nuestro consejo: Tome por otra calle.
ACUARIO (20/1 a 18/2) • El nativo de Acuario es un ser preferentemente revolucionario, que tiene horror a los lugares comunes. Le gustaría tener un auto con reposición automática de gomas pinchadas. Su auto ideal se encuentra en las páginas de las revistas científicas. Nuestro consejo: Si un acuariano hace una maniobra peligrosa, saque usted de la gaveta una pistola de rayos y apúntele. Verá que se aleja rápidamente, mirando azorado por sobre su hombro.
PISCIS (19/2 a 20/3) • El nativo de Piscis es de temperamento linfático, es blando, plástico e indiferente. Idealmente, le gustaría manejar acostado. Su auto ideal es un Peugeot con asientos reclinables. Por aproximación, puede comprar un Citroën 2 CV. Nuestro consejo: Tóquele bocina (pero no en las ciudades, porque está prohibido).

 

Respuestas para Preguntas Tontas
©Parabrisas, Febrero 1967
—¿Chocó?
—No, le cambié un poco la trompa para ver cómo quedaba.
—¿Va a estacionar?
—No, estoy dando marcha adelante y marcha atrás para acostumbrarme a los cambios.
—¿Así que se compró un auto nuevo?
—No, es el viejo que le cambié la carrocería.

 

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