INFORMACIÓN EN BREVE

Introducción.

Los alacranes o escorpiones forman parte de los artrópodos ponzoñosos que por la toxicidad de sus venenos ponen en peligro la vida de quién atacan. Son los arácnidos más antiguos que se conocen. Invadieron la tierra a mediados del Silárico, hace casi 400 millones de años, y han sobrevivido hasta nuestros días, conformando un grupo muy diversificado y exitoso, por lo que se les reconoce como verdaderos "fósiles vivientes".

Conocidos y temidos por las antiguas civilizaciones, en ambos mundos han sido representados de muy diversas maneras, y dado lugar a muchas leyendas, mitos y supersticiones, algunas demasiado fantasiosas.

Se han descrito hasta el momento 1,500 especies de escorpiones, distribuidas en todo el mundo. Los escorpiones conforman el Orden Scorpionida, uno de los 12 Órdenes de arácnidos vivientes, compuesto por 11 familias con más de 1 300 especies descritas en 112 géneros, distribuidas mundialmente.

Morfología.

Como los demás arácnidos, tienen el cuerpo dividido en dos regiones, cuatro pares de patas, abertura genital ventral y sexos separados. Se distinguen por su cauda terminada en el telson adaptado para inocular veneno.

El cuerpo del alacrán presenta una porción anterior, el "prosoma", cubierto por el caparazón insegmentado, que se continua en el cuerpo de doce segmentos, siete forman el "mesosoma" y cinco la "cauda" o "cola". El último segmento es el "telson", modificado como aparato inoculador de veneno, en cuyo interior están las glándulas de la ponzoña y termina en el aguijón o acáleus. Ventralmente, observamos la placa esternal, las válvulas genitales y los peines, estructuras sensoriales exclusivas de los alacranes.

Hábitos.

Son animales de hábitos nocturnos; se alimentan principalmente de insectos que detectan mediante redes sensoriales muy especializadas llamadas "tricobotrias"; la mayoría viven enterrados, debajo de las piedras o de la corteza de los árboles.

Viven en ambientes tropicales y subtropicales; sitios húmedos, secos y áreas desérticas, pero varias especies del género Centruroides se adaptan a las habitaciones humanas encontrándoseles en buen número dentro de las casas. En México los escorpiones que con mayor frecuencia encontramos en las habitaciones o en sus alrededores son: Centruroides, Vaejovis, Hadrurus y Diplocentrus.

Biología.

Son animales vivíparos; sin metamorfosis aparente después del "pulli" o período de recién nacido. Su desarrollo es lento y puede alcanzarlos 15 años de edad. Después de la primera muda, la cutícula de los escorpiones fluorece al iluminársele con luz ultravioleta, lo cual facilita detectarlos y capturarlos con relativa facílidad.

Ciclo de vida.

Los alacranes se reproducen sexualmente y, el apareamiento es precedido por un cortejo o "danza nupcial". Aunque la fertilización es interna, el macho carece de pene y depende del "espermatóforo" para la transferencia del esperma. Después de la fecundación, se desarrollan los embriones en los tubos ováricos de la hembra. El número de crías varía, va desde seis a ciento cinco "pullis" por camada, en algunos Cenfruroides de Norteamérica. Los recién nacidos, conocidos como "pullí" o "larva", carecen de uñas; el telson no está totalmente formado y no pueden picar. Suben al dorso de la madre permaneciendo ahí hasta que mudan al segundo estado juvenil, momento en que se alejan de la madre, dispersándose. Mudan cinco a ocho veces hasta que llegan a la madurez sexual.

El alacranismo es causado por la picadura de los alacranes cuando accidentalmente nos ponemos en contacto con ellos. El veneno producido por las glándulas dentro del telson es una secreción líquida que es expulsada violentamente por el orificio del acúleus o aguijón, en el momento del ataque. Este, se compone básicamente de proteínas y péptidos de bajo peso molecular, aminoácidos libres y sales orgánicas.

> Página Principal <