Vanagloria, Vanaglorioso
A. Nombres
1.
alazoneia, o –ia (ajlazoneiva),
denota jactancia, alarde, y se traduce «la vanagloria de la vida» en 1 Jn
2.16 (rv: «soberbia»); en Stg 4.16: «soberbias» (rv, rvr). Cf.
alazon, nombre traducido «altivo» y
«vanaglorioso» (Ro 1.30, 2 Ti 3.2).
2.
kenodoxia (kenodoxiva), de
kenos, vano, vacío, y
doxa, gloria; se emplea en Flp 2.3.
B. Adjetivo
kenodoxos
(kenovdoxo"), relacionado con A, Nº 2, se
traduce «vanagloriosos» en Gl 5.26 (rv: «codiciosos de vana gloria»).
Vanidad, Vano, Vanamente
A. Nombre
mataiotes
(mataiovth", 3153), vaciedad en cuanto a
resultados, relacionado con mataios
(véase B, Nº 2). Se emplea: (a) de la creación (Ro 8.20), como no alcanzando
los resultados para la que había sido dispuesta, debid o al pecado; (b) de
la mente que gobierna la manera de vivir de los gentiles (Ef 4.17); (c) de
las «palabras infladas y vanas» (lit., «de vanidad») de falsos maestros (2 P
2.18; Francisco Lacueva traduce «de necedad», véase
Nuevo Testamento Interlineal).
Nota
:
Para mataios en plural neutro en Hch
14.15: «vanidades».
B. Adjetivos
1.
kenos (kenov"), vacío, con especial
referencia a la calidad. Se traduce «cosas vanas» (Hch 4.25); «en vano» (1
Co 15.10, lit., «vana» como adjetivo, esto es, «su gracia no ha sido vana»);
«vana» en v. 14, dos veces; Ef 5.6: «vanas»; Col 2.8:
«vana argucia» (vm); Stg 2.20:
«hombre vano»; en los siguientes pasajes la forma neutra,
kenon, sigue a la preposición
eis, en, y denota «en vano» (2 Co
6.1; Gl 2.2; Flp 2.16,dos veces; 1 Ts 3.5).
2.
mataios (mavtaio"), carente de
resultados. Se emplea de: (a) prácticas idolátricas (Hch 14.15: «de estas
vanidades»); (b) los pensamientos de los sabios (1 Co 3.20: «que son
vanos»); (c) la fe, si Cristo no ha resucitado (1 Co 15.17: «vana»); (d)
cuestiones, contenciones, etc. (Tit 3.9: «vanas»); (e) religión, con una
lengua desenfrenada (Stg 1.26); (f) la forma de vivir (1 P 1.18).
(2)
periergos, ocupado en naderías, se emplea de artes mágicas en Hch
19.19 (lit., «cosas que están alrededor trabajan», y por ello superfluas),
esto es, las artes de aquellos que se entremeten en cosas prohibidas, con la
ayuda de espíritus malos, «vanas artes» (rv; rvr: «magia»). Véanse también 1
Ti 5.13, donde el significado es «inquisitivo», metiéndose en los asuntos de
otros, «entremetidas» (rv: «curiosas»).
(3) Para
kenofonia, traducido «pláticas sobre cosas vanas» (1 Ti 6.20);
«vanas palabrerías» (2 Ti 2.16).
(4)
mataiologia, «vana palabrería» (1 Ti 1.6).
C. Verbo
kenoo
(kenovw), vaciar, correspondiéndose con B, Nº
1. Se traduce «vana resulta» en Ro 4.14; «no se haga vana» (1 Co 1.17);
«desvanezca» (9.15; rv: «desvanezca»); 2 Co 9.3: «no sea vano». Para «se
despojó» (Flp 2.7; rv: «anonado»).
Notas:
(1) Para battalogeo, traducido «no
uséis de vanas repeticiones» (rvr; rv: «no seáis prolijos»).
(2)
katargeo, este término se traduce: «habrá hecho vana la verdad de
Dios» (Ro 3.3, rv; rvr: «habrá hecho nula»).
D. Adverbios
1.
eike (eijkh`), denota: (a) sin
causa, «vanamente» (Col 2.18); (b) sin objeto, «en vano» (Ro 13.4; Gl 3.4,
dos veces; 4.11); en Mt 5.22
Varón
1.
aner (ajnhvr), significa
específicamente varón, no empleándose nunca del sexo femenino. Se traduce
«varón» en pasajes como Mc 6.20; Lc 1.27, 34; 8.41; 9.30, 32; 19.2; 23.50,
etc.
2.
arsen o arren (a[rshn), se traduce
«hombres» en Ro 1.27, tres veces; con el término «varón» en Mt 19.4; Mc
10.6; Lc 2.23; Gl 3.28, donde el significado es que en Cristo no hay
distinción de sexos; el sexo no constituye una barrera ni para la salvación
ni para el desarrollo de las gracias cristianas; Ap 12.5, 13
Velar
En El Sentido de Estar Vigilante
1.
gregoreo (grhgorevw), velar. Se
emplea: (a) de mantenerse despierto (p.ej., Mt 24.43; 26.38,40,41); (b) de
vigilancia espiritual (p.ej., Hch 20.31; 1 Co 16.13; Col 4.2; 1 Ts 5.6, 10,
para lo cual véase Nota más abajo; 1
P 5.8; Ap 3.2: «Sé vigilante», 3;
16.15).
Nota
:
En 1 Ts 5.10 se traduce «para que ya sea que velemos, o que durmamos,
vivamos juntamente con Él». No se emplea en este pasaje en el sentido
metafórico de «estar vivo»; aquí se pone en contraste con
katheudo, «dormir», que nunca es
empleado por el apóstol con el significado «estar muerto» (tiene este
significado solo en el caso de la hija de Jairo, Mt 9.24, donde en realidad
se emplea en contraste con apothnesko,
morir). Por ello, el significado de gregoreo
es aquí el de vigilancia y expectación en contraste con la laxitud e
indiferenc ia. Todos los creyentes vivirán con Cristo desde el momento del
arrebatamiento descrito en 1 Ts cap. 4; porque todos ellos tienen ahora vida
espiritual, aunque la condición espiritual y los logros de cada uno de ellos
varían considerablemente. Aquellos que son laxos y dejen de velar sufrirán
pérdida (1 Co 3.15; 9.27; 2 Co 5.10, p.ej.), pero el apóstol no está tocando
aquí este aspecto del tema. Lo que sí pone en claro aquí es que el
arrebatamiento de los creyentes en la segunda venida de Cristo dependerá
solo de la muerte de Cristo por ellos, y no de la condición espiritual en
que se encuentren. El arrebatamiento no es asunto de recompensa, sino de
salvación.
2.
agrauleo (ajgraulevw), alojarse en
un redil en un campo (agros, campo;
aule, redil). Se emplea en Lc 2.8.
3.
agrupneo (ajgrupnevw), estar sin
dormir (de agreuo, cazar, y
jupnos, sueño). Se emplea
metafóricamente, de estar vigilante, velar (Mc 13.33; Lc 21.36; Ef 6.18; Heb
13.17). Este término no expresa solo el hecho de estar en vela, sino la
actitud vigilante de aquellos que están dedicados a algo.
4.
nefo (nhvfw), abstenerse de vino. Se
emplea metafóricamente de vigilancia moral, y se traduce «velad en oración»
en 1 P 4.7.
5.
eknefo (ejknhvfw), primariamente,
volver a los propios sentidos saliendo de una borrachera, volverse sobrio.
Se emplea en este sentido en la lxx, p.ej., Gn 9.24; metafóricamente, en Jl
1.5; Hab 2.7; lit., en 2.19, de las palabras de un idólatra a una imagen. En
el NT en 1 Co 15.34: «Velad debidamente y no pequéis»; la rvr77 traduce
«Guardad la debida sobriedad»; más ajustadamente, vm traduce «Despertad a
vuestros sentidos», sugiriendo un retorno a la sobriedad de mente desde un
estupor consiguiente a la influencia de una mala doctrina
Velo
1.
katapetasma (katapevtasma), lit.,
aquello que es extendido (petannumi)
antes (kata), de ahí, un velo. Se
emplea: (a) del velo interior del tabernáculo (Heb 6.19; 9.3); (b) del
correspondiente velo en el templo (Mt 27.51; Mc 15.38; Lc 23.45); (c)
metafóricamente de la «carne» de Cristo (Heb 10.20), esto es, su cuerpo que
Él entregó para que fuera crucificado, proveyendo de esta manera, mediante
su muerte expiatoria, un medio para el acceso espiritual de lo creyentes, el
«camino nuevo y vivo», ante la presencia de Dios.
2.
kalumma (kavlumma), cubierta. Se
emplea: (a) del velo que Moisés puso sobre su rostro al descender del monte
Sinaí, impidiendo así que Israel pudiera contemplar la gloria (2 Co 3.13);
(b) metafóricamente, de la visión espiritualmente oscurecida sufrida
retributivamente por Israel, hasta que tenga lugar la conversión de la
nación al Mesías de ellos (vv. 14,15,16).
3.
peribolaion (peribovlaion), denota
lit., algo echado alrededor (peri,
alrededor; balo, arrojar); de ahí,
una cubierta, velo (1 Co 11.15), o un manto alrededor del cuerpo, vestido
(Heb 1.12).
Vencedor (Ser), Vencer
1.
nikao (nikavw), vencer. Se emplea:
(a) de Dios (Ro 3.4, término legal, para el cual véase nota más abajo:
«venzas»); (b) de Cristo (Jn 16.33; Ap 3.21; 5.5; 17.14); (c) de sus
seguidores (Ro 12.21b; 1 Jn 2.13,14; 4.4; 5.4, 5; Ap 2.7,11,17, 26;
3.5,12,21; 12.11; 15.2; 21.7); (d) de la fe (1 Jn 5.4); (e) del mal, voz
pasiva (Ro 12.21); (f) de unos futuros potentados humanos (Ap 6.2; 11.7;
13.7).
Nota
:
En Ro 3.4: «Para que … venzas cuando fueres juzgado», es un término legal,
significando que la justicia del veredicto del juez, inevitable cuando Dios
es el juez, lleva al asentimiento por parte del acusado. Las promesas dadas
a Israel no constituían garantía alguna de que un judío no arrepentido
podría escapar a la condenación.
2.
jupernikao (uJpernikavw), ser más
que vencedor (juper, sobre, y Nº 1),
conseguir una magna victoria. Se encuentra en Ro 8.37, lit., «somos
hipervencedores», esto es, somos preeminentemente victoriosos.
Vengador, Venganza, Vengar(Se)
A. Nombres
1.
ekdikos (e[kdiko"), primariamente,
sin ley, luego, uno que impone una pena a una persona, un vengador,
castigador. Se emplea en Ro 13.4 de una autoridad civil en el ejercicio de
su función de ejecutar ira sobre un malhechor: «vengador». En 1 Ts 4.6 se
emplea de Dios como el vengador contra aquél que agravie a su hermano, aquí
de manera particular en el tema del adulterio.
2.
ekdikesis (ejkdivkhsi"), venganza, y
para lo cual véase , significa lit. «lo que viene procedente de justicia»,
no, como sucede tan frecuentemente con la venganza humana, de un sentimiento
de agravio o meramente de un sentimiento de indignación. Este empleo se
utiliza con la mayor frecuencia de la venganza divina (p.ej., Ro 12.19; Heb
10.30). Para una lista completa, véase RETRIBUCIÓN, A,
Nº 3. Los juicios de Dios son santos y rectos (Ap 16.7), y libres de
cualquier elemento de autogratificación o de resentimiento.
B. Verbo
ekdikeo
(ejkdikevw), se traduce «No os venguéis» (Ro
12.19); «vengas» (Ap 6.10); «ha vengado» (19.2);
Verbo
logos
(lovgo"), palabra. Se emplea como título del
Hijo de Dios, traduciéndose «Verbo» (Jn 1.1, tres veces, 14; 1 Jn 1.1; Ap
19.13); en tr también en 1 Jn 5.7, en el controvertido pasaje de «los
testigos celestiales».
Tanto
jrema como logos se
traducen «palabra» y «palabras». Jrema
es el dicho, lo que se expresa (ero,
eireka, «hablar»); es más individual
que logos, siendo su relación con Él
como una parte a un todo. Logos
incluye los pensamientos así como lo que se expresa. Comparar el uso de los
términos franceses mot y
parole.
Estos dos términos han sido
distinguidos de la siguiente manera: logos
es la palabra más profunda, más plena e inclusiva; es la revelación de lo
que está en Dios, en su naturaleza y carácter su amor, sus caminos–en
resumen, todo lo que Él comunica jrema
es la comunicación misma. Logos (de
lego, «hablar») es aquello que es
conocido en la mente y conocido por expresarlo. No se puede pensar sin tener
un pensamiento, y logos se emplea
para denotar aquello, y su expresión; es el tema y la forma del pensamiento
y de la expresión, así como la expresión de ello. Es una palabra tan
inclusiva que es muy difícil de abarcar. Jrema
es la expresión proposicional mediante la que se comunica el pensamiento.
Si esta distinción se tiene en
cuenta, se comprenderán mejor los siguientes pasajes. Para
logos, Mt 13.19; Mc 14.39 (donde el
original dice «palabra», en singular, no «palabras»; cf. Mt 26.44); Mc 7.13;
16.20; Lc 1.2; Hch 4.31; 6.4; Ro 9.6; Heb 4.12; 6.1; Stg 1.18; 1 P 1.23. Y
se comprenderá lo característico que es el término
logos de los escritos de Juan: 1.1,14; 5.24, 38; 8.31, 37, 43;
y en los vv. 51,52 y 55 (donde es lo mismo, «palabra»); 10.35; 14.23, 24;
15.3, 20; 17.6, 14,17; 1 Jn 1.1.
Sin embargo, el apóstol también
emplea jrema: Jn 3.34; 6.63,68;
8.47; 12.47-48; 14.10; 17.8. Cf. también Mt 4.4; Ef 6.17 (no el libro,
meramente, sino el texto); Mt 26.75; Lc 5.5; Ro 10.8,17; Heb 1.3; 6.5; 11.3;
1 P 1.25. Ello será suficiente para ilustrar el empleo de la palabra, que
tiene más el sentido de expresiones individuales, de comunicaciones divinas.
Lalia
(de lalero, «hablar, emitir un
sonido») es, como sustantivo, de empleo mucho más limitado, como también de
significado, y de hecho solo se halla en Mt 26.73; Mc 14.70; Jn 4.42 (cf.
logos, v. 41); y 8.43. Pero el
constante empleo del verbo para el hecho de la pronunciación del lenguaje
humano (Mt 9.33; Mc 14.17; Hch 2.4; 18.9), y en expresiones como «habló,
diciendo» (cf. Mc 6.50; Heb 2.2) da una suficiente definición de su sentido.
Jn 8.43 yuxtapone logos y
lalia de tal manera que se ilustran
sus respectivos significados: logos
es el tema de aquellos discursos, la palabra misma;
lalia la forma y expresión externas
que asume su palabra. Ellos no comprendían lo que Él decía (lalia)
porque no asimilaban su pensamiento (logos);
como bien se ha dicho: «En las cosas divinas uno no aprende las definiciones
de las palabras y después las cosas; se aprenden las cosas, y luego el
significado de las palabras es evidente»» (de
New Concise Bible Dictionary: «Word, Words», pp. 857-858).
Verdad,
Verdadero, Verdaderamente
A. Nombres
aletheia
(ajlhvqeia), verdad. Se emplea: (a)
objetivamente, significando «la realidad que se encuentra en la base de la
apariencia; la esencia manifiesta y veraz de algo» (Cremer), p.ej., Ro 9.1;
2 Co 11.10; especialmente de la doctrina cristiana, p.ej., Gl 2.5, donde «la
verdad del evangelio» denota la verdadera enseñanza del evangelio, en
contraste con sus perversiones; Ro 1.25, donde «la verdad de Dios» puede ser
«la verdad acerca de Dios» o «Dios, cuya existencia es una realidad»; pero
en Ro 15.8 «la verdad de Dios» indica su fidelidad en el cumplimiento de sus
promesas, fidelidad que se exhibe en Cristo. El término tiene un sentido
absoluto en Jn 14.6; 17.17; 18.37, 38. En Ef 4.21, donde la vm da la
traducción correcta: «según es la verdad en Jesús», el significado no es
meramente la verdad ética, sino la verdad encarnada en Él en toda su
plenitud y extensión; Él era la perfecta expresión de la verdad. Es una
declaración virtualmente equivalente a su afirmación en Jn 14.6; (b)
subjetivamente, veracidad, verdad, no meramente verbal, sino sinceridad e
integridad de carácter (Jn 8.44; 3 Jn 3); (c) en frases, p.ej., «con verdad»
(epi, sobre la base de; Mc 12.14; Lc
20.21); con en, en (2 Co 6.7; Col
1.6; 1 Ti 2.7; 1 Jn 3.18; 2 Jn 1.34).
Notas:
(1) Para alethes, traducido «amante
de la verdad» (Mt 22.16); «con verdad» (Jn 4.18); «verdad» (10.41; 19.35),
véase bajo B, Nº 1, más abajo; (2) alethos,
verdaderamente, traducido «en verdad» en Lc 9.27; 12.44; 21.3; Jn 7.26; 1 Ts
2.13, se trata bajo D, Nº 1; (3) la partícula
ara, traducida «en verdad» en 1 Co 15.15; (4) para
asfaleia, traducido «verdad» en Lc
1.4, véase SEGURIDAD, A, Nº 1; (5)
eige, realmente, en verdad (Gl 3.4;
Ef 4.21; Col 1.23, etc.), es un compuesto de ei,
partícula condicional, y ge,
partícula de reafirmación; (6) eanper,
yuxtaposición de la conjunción condicional ean,
y de la partícula intensificadora per,
«si», «precisamente si», se traduce «sí en verdad» en Heb 6.3; (7)
mentoi, sin embargo, significa «en
verdad» o «ciertamente» en Stg 2.8 (contrastar vm, que traduce «al
contrario»); (8) el adverbio ontos,
verdaderamente, se traduce «en verdad» en 1 Ti 5.3, 5, 16.
B. Adjetivos
1.
alethes (ajlhqhv"), primariamente, a
descubierto, manifiesto (a,
privativo, letho, olvidar, =
lanthano, escapar a la detección),
de ahí real, genuino. Se emplea: (a) de personas, veraz (Mt 22.16: «amante
de la verdad»; vm: «veraz»; Mc 12.14; Jn 3.33; 8.26; Ro 3.4; 2 Co 6.8); (b)
de cosas, verdadero, conforme a la realidad (Jn 4.18: «con verdad», lit.,
«verdadero»; 5.31, 32; en los textos más comúnmente aceptados, 6.55, dos
veces; 8.13,14, v. 16 en tr en lugar de Nº 2 en los mss. más comúnmente
aceptados, 17; 10.41: «verdad»; 19.35: «verdad», lit., en ambos pasajes,
«verdadero»; 21.24; Hch 12.9: «verdad», lit., «verdadero»; Flp 4.8; Tit
1.13; 1 P 5.12; 2 P 2.22; 1 Jn 2.8, 27; 3 Jn 12).
2.
alethinos (ajlhqinov"), relacionado
con Nº 1, denota verdadero en el sentido de real, ideal, genuino. Se emplea:
(a) de Dios (Jn 7.28; cf. Nº 1 en 7.18, más arriba; 17.3; 1 Ts 1.9; Ap
6.10); estos declaran que Dios cumple el significado de su nombre, Él es «el
verdadero Dios», en distinción a todos los otros dioses, que son falsos (alethes,
véase Jn 3.33 en Nº 1, significa que Él es veraz, fiel en todos sus
pronunciamientos, que no puede mentir); (b) de Cristo (Jn 1.9; 6.32; 15.1; 1
Jn 2.8; 5.20, tres veces; Ap 3.7,14; 19.11); su juicio (Jn 8.16, en los
textos más comúnmente aceptados, en lugar de Nº 1); (c) de las palabras de
Dios (Jn 4.37; Ap 19.9; 21.5; 22.6); en los últimos tres pasajes el
significado es equivalente al del Nº 1; (d) de sus caminos (Ap 15.3); (e) de
sus juicios (Ap 16.7; 19.2); (f) de sus riquezas (Lc 16.11); (g) de sus
adoradores (Jn 4.23); (h) de los corazones de ellos (Heb 10.22); (i) del
testimonio del apóstol Juan (Jn 19.35); (j) del tabernáculo celestial,
antitípico (Heb 8.2; 9.24), no en el sentido de que el tabernáculo en el
desierto fuera falso, sino que era una débil copia terrena del celestial.
Nota
:
«alethinos se relaciona con
alethes como la forma con el
contenido o sustancia; alethes
denota la realidad de la cosa, y alethinos
define la relación de la concepción con la cosa a la que se corresponde, =
genuino» (Cremer). El arzobispo Trench lo recapitula del siguiente modo:
«Podemos afirmar del alethes que
cumple la promesa de sus labios; pero del
alethinos la más amplia promesa de su nombre. Todo lo que este
nombre significa, tomado en su sentido más elevado, profundo y amplio, en
todo aquello que Él debiera ser, esto es Él de una manera plena».
3.
gnesios (gnhvsio"), significa
primariamente «legítimamente engendrado» (relacionado con
ginomai, devenir, venir a ser), de
ahí verdadero, genuino, sincero. Se emplea en 1 Ti 1.2: «verdadero hijo en
la fe» (Besson: «legítimo»); Tit 1.4: «verdadero hijo en la común fe»
(Besson: «legítimo»). Se traduce «sinceridad» en 2 Co 8.8; «compañero fiel»
en Flp 4.3 (rv: «hermano compañero»; Besson: «querido»; vm: «fiel compañero
de yugo»). Para el nombre calificado por el adjetivo
gnesios en este pasaje,
su(n)zugos.
C. Verbo
aletheuo
(ajlhqeuvw), significa tratar con fidelidad o
con verdad con cualquiera (cf. Gn 42.16, lxx: «si actuáis con verdad o no»,
relacionado con A, y se traduce «por deciros la verdad» (Gl 4.16);
«siguiendo la verdad» (Ef 4.15; vha, «manteniendo la verdad»; lba, Besson:
«hablando la verdad»; vm: «diciendo la verdad»). En la cita de Gálatas el
apóstol está probablemente refiriéndose al contenido de su epístola.
D. Adverbios
1.
alethos (ajlhqw`"), con seguridad,
verdaderamente. Se traduce «verdaderamente» en Mt 14.33; 26.73; 27.54; Mr
17.40; 15.39; Jn 4.42; 6.14; 7.40; 8.31; 17.8; Hch 12.11; 1 Jn 2.5. Con la
frase «en verdad» (Lc 9.27; 12.44; 21.3; Jn 7.26; 1 Ts 2.13); «verdadero»
(Jn 1.47); «verdadera» (Jn 6.55).
2.
ontos (o[ntw"), adverbio derivado de
on, participio presente de
eimi, ser, denota realmente,
verdaderamente, en verdad. Se emplea en Mc 11.32: «verdadero profeta» (rv:
«verdaderamente era profeta»); Lc 23.47; 24.34; Jn 8.36; 1 Co 14.25; Gl
3.21; 1 Ti 5.3: «en verdad»; v. 5: «en verdad»; v. 16: «en verdad»; 2 P
2.18; en 1 Ti 6.19, rvr sigue los textos que tienen
aionios, «eterna» (vm: «la vida que
lo es en verdad», siguiendo los mss. más comúnmente aceptados).
3.
gnesios (gnesivw"), relacionado con
B, Nº 3, sinceramente, honorablemente. Se traduce «tan sinceramente» (Flp
2.20, rvr, rvr77; rv: «con sincera afición»; vm: «ingenuamente»; Besson:
«íntimamente»), esto es, «tan verdaderamente».
Notas:
(1) Para la partícula de, traducida «verdaderamente lleva fruto» (Mt 13.23,
vha; lba, «sí da fruto»).
(2) Para
aletheia, verdad, traducido «verdaderamente» en Lc 22.59; Hch
4.27 (vm: «de verdad» y «a la verdad», respectivamente), véase A más arriba.
E. Partículas Y Frases
1. men
(mevn), partícula conjuntiva (originalmente una
forma de men, ciertamente,
verdaderamente, que aparece en Heb 6.14), por lo general relacionada con una
conjunción o partícula adversativa, como de, en la siguiente cláusula, que
se pone en oposición a ella. Es frecuentemente intraducible; en ocasiones se
traduce «verdaderamente», como en Mt 9.37 (vm; rvr: «a la verdad»); más
veces con la frase «a la verdad» (p.ej., Mt 3.11; Mt 17.11; vm: «en verdad»;
23.27, etc.); en otros casos se traduce «ciertamente» (p.ej., Heb 6.16;
11.15; vm: «en verdad»).
Vestido
1.
jimation (iJmavtion), prenda de
vestir exterior, manto. Se echaba sobre el
quiton (para lo cual véase ), p.ej., Mt 17.2; 27.31, 35.
2.
jimatismos (iJmatismov"), en forma
de palabra colectiva, denotando vestimenta, ropas. Se emplea generalmente de
vestidos costosos o lujosos, la vestimenta de reyes o potentados, etc. Véase
Lc 7.25: «vestidura preciosa». Véase también Hch 20.33 y 1 Ti 2.9: «vestidos
costosos». Esta es la palabra empleada de la blanca y deslumbrante vestidura
del Señor en el monte de la transfiguración (Lc 9.29: «vestido blanco y
resplandeciente»). Se emplea también para designar su
quiton, su vestidura interior (véase
), por la que los soldados echaron suertes (Jn 19.23, 24: «ropa»). También
se traduce «ropa» en Mt 27.35.
3.
enduma (e[nduma), relacionado con
enduo (véase VESTIR,
Nº 2), denota cualquier cosa puesta encima, un vestido de cualquier tipo. Se
emplea de la vestimenta de los antiguos profetas, en prenda de su
menosprecio por el esplendor terreno (1 R 19.13; 2 R 1.8; Zac 13.4). En el
NT se emplea también de la vestimenta de Juan el Bautista (Mt 3.4); de
vestidos en general (Mt 6.25, 28; Lc 12.23); metafóricamente, de vestidos de
ovejas (Mt 7.15); de un vestido de boda (Mt 22.11,12), traducido en forma
verbal en la rvr (vm, respectivamente: «que no traía vestido de boda» y «sin
tener vestido de boda»); del vestido del ángel en el sepulcro del Señor
después de su resurrección (28.3).
Nota
:
El incidente del vestido de bodas, enduma,
en Mt 22.11,12, indica que las personas de alta alcurnia mostraban su
munimiciencia proveyendo a los invitados de vestiduras festivas.
4.
esthes (ejsqhv"), y
esthesis (e[sqhsi"),
relacionados con jennumi, vestir,
significan vestidura, ropa, sugiriendo generalmente las ropas ornamentadas y
de buena calidad. El primer vocablo se encuentra en Lc 23.11: «ropa»; 24.4:
«vestiduras»; Hch 10.30: «vestido»; 12.21: «ropas» (RV: «ropa»); Stg 2.2,
dos veces: «ropa» y «vestido» (rv: «vestidura»); v. 3: «ropa» (rv:
«vestidura»). Esthesis se emplea en
Hch 1.10: «vestiduras» (rv: «vestidos»).
5.
stole (stolhv), (castellano,
estola), denota cualquier ropaje lujoso, una vestidura larga llegando a los
pies o con cola detrás. Se emplea de las largas vestiduras que vestían los
escribas, a fin de hacerse notar (Mc 12.38; Lc 20.46); de la ropa que
llevaba el joven en el sepulcro del Señor (Mc 16.5); del «mejor vestido» o,
más bien, del vestido principal, que fue sacado para el retornado hijo
pródigo (Lc 15.22). Se emplea cinco veces en Apocalipsis, de los santos
glorificados (6.11; 7.9,13,14; 22.14). En la lxx se emplea de las santas
vestiduras de los sacerdotes, p.ej., Éx 28.2; 29.21; 31.10.
6.
peribolaion (peribovlaion), de
peribalo, echar en torno, lit.,
aquello que es echado alrededor; era un velo o manto. Se emplea en 1 Cor
11.15, del cabello de una mujer, que le es dado como velo; en Heb 1.12, de
la tierra y de los cielos, que el Señor envolverá «como un vestido» (vm,
rvr77: «manto»). La otra palabra que aparece en este v. en los mss. más
comúnmente aceptados (cf. lba), es jimation:
«Como un manto (peribolaion) los
enrollarás; como una vestidura (jimation)
serán mudados».
Nota
:
Para quiton, traducido «vestido» en
Mc 14.63 (rv; rvr: «vestidura»); «vestidos» (Lc 9.3, rv; rvr: «túnicas»)
Viento
1.
anemos (a[nemo"), además de su
significado literal, se emplea metafóricamente en Ef 4.14, de enseñanzas
variables. En Mt 24.31 y Mc 13.27 los cuatro vientos significan los cuatro
puntos cardinales; lo mismo en Ap 7.1 (cf. Jer 49.36; Dn 7.2); los
contextos, indican que estos cuatro vientos están relacionados con la
ejecución de juicios divinos. Deissmann (Bible Studies) y Moulton y
Milligan (Vocabulary) ilustran esta frase mediante los papiros.
2.
pnoe (pnohv), soplido, ráfaga
(relacionado con pneo, soplar). Se
emplea del viento recio en Pentecostés (Hch 2.2).
3.
pneuma (pneu`ma), se traduce
«viento» en Jn 3.8: «el viento sopla» (la Versión Revisada Inglesa da, en el
margen: «el Espíritu alienta», su significado probable).
Notas:
(1) Para notos, «viento del sur» (Lc
12.55; Hch 28.13); (2) el verbo anemizo,
traducido «la onda del mar, que es arrastrada por el viento» (Stg 1.6; cf.
Nº 1 más arriba); (3) para pneo,
soplar, traducido «viento» en Hch 27.40.
Vigilia
fulake
(fulakhv), se emplea: (a) con el significado de
«una vigilia» o «vela», Lc 2.8, lit.: «(guardando,
fulasso) vigilias», traducido «guardaban las vigilias»; (b)
del tiempo durante el que se montaba guardia durante la noche, una vigilia
de la noche (Mt 14.25; 24.43; rvr: «hora»; rv: «vela»; Mc 6.48; Lc 12.38).
Entre los judíos la noche era
dividida en tres vigilias (véanse, p.ej., Éx 14.24; Jue 7.19), costumbre que
siguió a través del dominio de Roma. Los romanos dividían la noche en cuatro
vigilas; esto era reconocido entre los judíos (véase Mc 13.35).
Vino
1.
inos (oi\no"), es el término general
para el vino. La mención de la rotura de los odres de cuero (Mt 9.17; Mc
2.22; Lc 5.37), implica fermentación. Véase también Ef 5.18 (cf. Jn 2.10; 1
Ti 3.8; Tit 2.3). En Mt 27.34, vha, lba y nvi tienen «vino», siguiendo la
lectura de los mss. más comúnmente aceptados, en lugar de la variante
«vinagre» (tr), seguida por rv, rvr, rvr77, vm, Besson.
Se emplea este vocablo
metafóricamente: (a) de los males ministrados a las naciones por la
Babilonia religiosa (14.8; 17.2; 18.3); (b) del contenido de la copa de la
ira divina sobre las naciones y Babilonia (Ap 14.10; 16.19; 19.15).
La intemperancia es el abuso del
vino, y en contra de tal abuso hay abundantes protestas y advertencias en
las Escrituras. El vino es mencionado junto con el aceite y el grano entre
los buenos dones con los que Dios bendeciría a su pueblo terrenal (Dt 7.13;
Sal 104.15). Era ofrecido a diario en el templo como libación (Nm 28.7).
El Señor aludió a la diferencia
entre Él mismo y Juan el Bautista con estas palabras: «Vino Juan el
Bautista, que ni comía pan ni bebía vino … Vino el Hijo del Hombre que come
y bebe» (Lc 7.33-34). El vino fue creado por el Señor en su primer milagro
(Jn 2.3-10); y Él dijo en la última Pascua: «De cierto os digo que no beberé
más del fruto de la vid, hasta aquel día en que lo beba nuevo en el Reino de
Dios» (Mc 14.25). La designación «fruto de la vid» para significar vino era
una expresión normal: cf. tratado Berakoth
6.1, en la Misná, donde también se afirma que el vino era empleado en
la Pascua (tratado Pesatrim X); cf.
Herodoto, 1.212. El Señor instituyó la cena memorial con la copa de vino
llamada «de bendición», la tercera en el ritual de la cena pascual.
Pablo recomienda a Timoteo que tome
un poco de vino debido a sus frecuentes enfermedades (1 Ti 5.23); el diácono
no debe ser dado a mucho vino (1 Ti 3.8); las ancianas no deben quedar
esclavizadas por un exceso de vino (Tit 2.3; F. Lacueva, «ni por vino mucho
esclavizadas», Nuevo Testamento Interlineal).
Hay, por todo ello, adecuada evidencia de que el vino es considerado como un
don benéfico de Dios, del que el hombre puede hacer un moderado empleo. Sin
embargo, si alguien no tiene poder sobre sus apetitos, es indudable que hará
mejor en abstenerse. Los borrachos no heredarán el Reino de Dios (1 Cor
6.10).
El beber vino, lo mismo que el
comer carne, puede ser ocasión de caída para un hermano débil (Ro 14.21),
especialmente en conexión con lo sacrificado a los ídolos (cf. 1 Cor
8.10-13). En todo caso, la abstinencia no puede ser impuesta como norma
general, ni permanentemente, sobre los que han reconocido su libertad en el
Señor (Col 2.16). El criterio para la recta actuación debe ser la libertad
en el Señor, informada por el amor a los hermanos y por la sobriedad, en
gratitud hacia Dios, el Creador y Sustentador de la vida.
2.
gleukos (gleu`ko"), denota «vino
nuevo» dulce, o mosto (Hch 2.13), donde la acusación misma muestra que era
embriagante y que debe haber sufrido una cierta fermentación. En la lxx, Job
32.19.
Viña
ampelon
(ajmpelwvn), viña. Se emplea 22 veces en los
Evangelios Sinópticos; fuera de ellos, solo en 1 Cor 9.7.
Nota
:
Para ampelos, término que se traduce
«viña» (Ap 4.19, y en la vm en Ap 14.18).
Viñador,
Viñero
ampelourgos
(ajmpelourgov"), trabajador en una viña (de
ampelos, vid, y
ergon. trabajo). Se traduce
«viñador» (Lc 13.7; rv, viñero»).
Virgen
parthenos
(parqevno") virgen, célibe. Se emplea en Mt
1.23: «virgen»; 25.1: «vírgenes»; v. 7: «vírgenes»; v. 11: «vírgenes»; Lc
1.27, dos veces: «virgen»; Hch 21.9: «doncellas»; 1 Cor 7.25, vírgenes»; v.
28: «doncella»; v. 34, dos veces: «doncella»; v. 36: «hija virgen»; v. 37:
«hija virgen»; v. 38, en los mss. más comúnmente aceptados: «hija virgen»
(vm; término omitido en tr); 2 Cor 11.2: «virgen»; Ap 14.4: «vírgenes» (en
género masculino).
Con respecto a Mt 1.23, se trata de
una cita de la lxx de Is 7.14, que traduce la palabra hebrea
almah como
parthenos (virgen). Acerca del significado de
almah y su traducción se pueden
transcribir las siguientes observaciones:
««He aquí que la virgen concebirá».
¿Podemos decir quién es esta virgen? Isaías emplea el artículo determinado
al hablar de ella. Podría parecer así que se tratara de una virgen bien
conocida, cuya identidad reconocerían todos. Y, en realidad, algunos han
supuesto que esto era así. Gressmann, por ejemplo, mantenía que en el
antiguo Israel existía una extendida creencia de que una virgen concreta
daría a luz un hijo. Pero en el Antiguo Testamento hay solo otra referencia
explícita a la madre del Mesías, y se encuentra en Miq 5.3: «Pero los dejará
hasta el tiempo que dé a luz la que ha de dar luz». Aquí no aparece el
artículo determinado.
»Es más natural mantener que el
artículo determinado se emplea con la palabra
almah en un sentido genérico, y que sirve para designar a alguna
persona concreta desconocida. El propósito de Isaías es distinguir la
almah de cualquier otra clase de
mujer. Es como si viniera a decir: «No es una mujer vieja ni casada la que
ve en visión, ni una esposa ni una muchacha, necesariamente, sino una
almah».
»De entrada, se puede afirmar con
seguridad que la palabra almah nunca
se emplea de una mujer casada. Por lo menos uno de los pasajes en que se
emplea pone en claro que puede utilizarse para designar a una que es
verdaderamente virgen (Gn 24.43). Rebeca es llamada
almah, pero además se la designa
como bethulah, y de ella se dice que
ningún hombre la había conocido. En un pasaje (Pr 30.19) la palabra
almah puede tener referencia a una
muchacha inmoral pero no indica una muchacha casada. Quizá el equivalente
más cercano en castellano sea la palabra doncella, que en su sentido propio
no se emplea para designar a una mujer casada. Pero incluso este término
puede no ser el exacto equivalente de almah,
porque en tanto que doncella también puede hacer referencia a una sirvienta
doméstica, casada o no, almah nunca
tiene tal sentido. Por esta razón lo más prudente, después de todo, es
traducir almah como virgen.
En ugarítico la palabra
glmt nunca se emplea de una mujer
casada. [Nota: No es exacto decir,
como lo hace Coppens (La Profétie de la Almah,
Bruges: París, 1952, p. 24), que lm
se aplica a Ashirat, la hija y esposa de Él. La palabra que se emplea para
Ashirat es lm, p.ej.,
att.il. att.il. wllmh (52.42) y
también bt.il bt.il. wlmh
(52.45,46). Cf. Ugaritic Manual, de
Gordon, 1955, p. 144. La expresión bglmt
es difícil. Puede significar «hijo de Galmat, la diosa», y servir así como
nombre propio. Se emplea también como paralelo de
zlmt, que puede significar «oscuridad». Cf.
Canaanite Myths and Legends, de
Driver, 1956, p. 101. En todo caso la palabra no constituye ninguna objeción
al argumento anteriormente expuesto.]
A la luz de la repetida afirmación
de que almah puede denotar una mujer
joven, una muchacha joven, buena o mala, casada o soltera [véase, p.ej., la
nota al pie en el pasaje correspondiente de la Biblia de Jerusalén; cf.
asimismo la versión Dios Habla Hoy, que traduce «joven», con nota que afirma
«según el texto hebreo», y la versión de Schökel y Mateos, «joven»], es
interesante preguntar por qué se eligió este término en particular para
designar a la madre del Mesías. Es evidente que la palabra
yaldah no sería apropiada, porque se
emplea solo de niñas. Tampoco es apropiada la palabra
naarah, porque se puede aplicar
indiscriminadamente a cualquier mujer. Esta palabra es de sentido tan
general que Isaías no la hubiera encontrado apropiada, a no ser que hubiera
querido expresar el pensamiento de que «una joven» iba a tener un hijo.
Se ha dicho con frecuencia que si
el profeta hubiera querido designar a la madre como virgen, tenía a su
disposición la palabra bethulah. A
primera vista esta parecería una palabra perfecta para el caso; pero con un
examen más atento resulta muy insatisfactoria. Es cierto que
bethulah puede referirse a una
virgen, pero también puede referirse a una virgen desposada (bethulah
melorasah). En Deuteronomio las leyes ponen en claro que la
traición al estado de desposorio era tan aborrecible como el adulterio, y
conllevaba la pena de muerte. En Jl 1.8, la
bethulah es evidentemente una mujer casada, y en tardíos textos
arameos de encantamientos, el equivalente arameo de
bethulah se refiere a una mujer
casada. Si Isaías hubiera empleado esta palabra
bethulah, nos hubiera dejado en confusión. No hubiéramos
sabido qué era exactamente lo que tenía en mente. ¿Habría estado
refiriéndose a una que era verdaderamente una virgen, o a una que estaba
desposada, o a una que ya había conocido marido? A la luz de estas
consideraciones, parece que la elección de la palabra
almah fue deliberada. Parece que es
la única palabra que significa una mujer soltera. Ninguna otra palabra
hebrea disponible indicaría con claridad que aquella a la que Él designa no
estaba casada. Ninguna de estas otras palabras hubiera indicado un
nacimiento insólito. Solo almah pone
en claro que la madre no estaba casada.
Si, ello no obstante, la madre es
una mujer no casada, surge una cuestión. ¿Era el hijo ilegítimo, o no? Si el
hijo fuera ilegítimo, ¿sería un nacimiento así una señal? Todo el contexto,
en verdad todo el contexto bíblico, elimina esta posibilidad. Por otra
parte, si la madre fuera una mujer honesta, entonces el nacimiento estaría
fuera de lo ordinario, un nacimiento inusual. La madre es a la vez no casada
y honesta. Cuando se comprende este hecho, se hace evidente que hay solo una
mujer de la que se pueda afirmar esto: María, la madre del Señor» (E. J.
Young, The Book of Isaiah, Wm. B.
Eerdmans Pub. Co., Grand Rapids, 1965, 1978, vol. I, p. 286-289).
El mismo hecho de que la traducción
de almah en la lxx sea
parhenos, constituye una evidencia
adicional de cuál era el significado de la palabra hebrea
almah y de cuál era, en este
contexto, su sentido preciso. Con respecto a las traducciones posteriores
del AT hebreo al griego, vale la siguiente observación: «Las otras versiones
griegas de Isaías la traducen por «una joven»; pero debe recordarse que los
cristianos comenzaron temprano a emplear este pasaje contra los judíos, y
que de los tres traductores Aquila era judío, Teodocio era judío o hereje, y
Símaco era ebionita (judaizante), lo cual hace que su traducción sea
sospechosa»
Vivir, Vivificar, Vida, Viviente,
Vivificante, Vivo
(I) Vivir
A. Verbos
1. zao
(zavw), vivir, estar vivo. Se emplea en el NT:
«(a) de Dios (Mt 16.16; Jn 6.57; Ro 14.11); (b) del Hijo en encarnación (Jn
6.57); (c) del Hijo en resurrección (Jn 14.19; Hch 1.3; Ro 6.10; 2 Cor 13.4;
Heb 7.8); (d) de vida espiritual (Jn 6.58; Ro 1.17; 8.13b; Gl 2.19-20; Heb
12.9); (e) del presente estado de los santos fallecidos (Lc 20.38; 1 P 4.6);
(f) de la esperanza de la resurrección (1 P 1.3); (g) de la resurrección de
los creyentes (1 Ts 5.10; Jn 5.25; Ap 20.4), y de los incrédulos (v. 5, cf.
v. 13); (h) del camino de acceso a Dios a través del Señor Jesucristo (Heb
10.20); (i) de la manifestación de poder divino en apoyo de la autoridad
divina (2 Cor 13.4b; cf. 12.10 y 1 Cor 5.5); (j) de pan, figurativo del
Señor Jesús (Jn 6.51); (k) una piedra, figurativa del Señor Jesús (1 P 2.4);
(1) de agua, figurativa del Espíritu Santo (Jn 4.10; 7.38); (m) un
sacrificio, figurativo del creyente (Ro 12.1); (n) de piedras, figurativas
del creyente (1 P 2.5); (ñ) de oráculos, logion
(Hch 7.38), y de la palabra (logos)
de Dios (Heb 4.12; 1 P 1.23); (o) de la vida física de los hombres (1 Ts
4.15; Mt 27.63; Hch 25.24; Ro 14.9; Flp 1.21, empleado como nombre en el
modo infinitivo, con el artículo, «el vivir», 22; 1 P 4.5); (p) del
mantenimiento de la vida física (Mt 4.4; 1 Cor 9.14); (q) de la duración de
la vida física (1 Ts 3.8); (r) del goce de la vida física (1 Ts 3.8); (s) de
la recuperación de la vida física del poder de la enfermedad (Mc 5.23; Jn
4.50); (t) de la recuperación de la vida física del poder de la muerte (Mt
9.18; Hch 9.41; Ap 20.5); (u) del curso, conducta y carácter de los hombres:
(1) en buen sentido (Hch 26.5; 2 Ti 3.12; Tit 2.12); (2) en mal sentido (Lc
15.13; Ro 6.2; 8.13a; 2 Cor 5.15b; Col 3.7); (3) sin sentido definido (Ro
7.9; 14.7; Gl 2.14); (v) de restauración después de una alienación, «ha
revivido» (Lc 15.32).
Nota:
En 1 Ts 5.10, vivir significa experimentar aquel cambio (1 Cor 15.51), que
ha de ser la parte de todos en Cristo que estén vivos sobre la tierra a la
Parusía del Señor Jesús (cf. Jn 11.25), y que se corresponde con la
resurrección de aquellos que hayan muerto anteriormente en Cristo (1 Cor
15.52-54).
2.
sunzao (sunzavw), vivir juntamente
con (sun, con, y
zao, vivir), puede quedar incluido
con zao en el análisis anterior de
la siguiente manera: (g) (Ro 6.8; 2 Ti 2: 11); (r) (2 Cor 7.3).
»3.
anazao (ajnazavw), de
ana, otra vez, y
zao, denota «volver a vivir»,
«revivir» (Lc 15.24: «ha revivido»); cf. (v) en la lista anterior, y Ro 7.9,
volver a manifestar actividad: «revivió»» (de Notes on Thessalonians,
por Hogg y Vine, pp. 173-174).
Nota
:
Zao se traduce «vivos» en Hch 10.42;
2 Ti 4.1; 1 P 4.5: «vivas»; Heb 4.12: «viva».
4.
bioo (biovw), pasar la vida. Se
emplea en 1 P 4.2: «vivir».
5.
anastrefo (ajnastrevfw), empleado
metafóricamente, en la voz media, conducirse, comportarse, vivir. Se traduce
«vivimos» en Ef 2.3; «que viven» (2 P 2.18; rv: «que conversan»).
6.
diago (diavgw), se emplea de tiempo
en el sentido de pasar una vida (1 Ti 2.2: «para que vivamos quieta y
reposadamente»; 1 Ti 2.2: «viviendo en malicia y envidia»).
7.
politeuo (politeuvw), ser ciudadano
(polites), vivir como ciudadano. Se
emplea metafóricamente de la conducta como en armonía con las
características de la comunidad celestial; en Hch 23.1: «he vivido»; en Flp
1.27: «Solamente que os comportéis».
8.
sunoikeo (sunoikevw),
sun, con, y
oikeo, para lo cual véase
MORAR, C, Nº 1, morar con. Se emplea en 1 P 3.7,
traducido «vivid con ellas sabiamente» (vm: «habitad con»; Besson:
«cohabitando … con»; lba: «convivid … con»).
9.
trufao (trufavw), de
thrupto, enervar, significa llevar
una vida voluptuosa, entregarse a los placeres (Stg 5.5: «habéis vivido en
deleites»).
Notas:
(1) Cf. spatalao, de
spatale, desenfreno, vivir
desenfrenadamente, empleado con trufao
en Stg 5.5: «habéis … sido disolutos»; cf. 1 Ti 5.6, de mujeres carnales en
la iglesia: «que se entrega a los placeres».
(2)
streniao, desenfrenarse, se traduce «ha vivido en deleites» en Ap
18.7; «han vivido en deleites» (v. 9).
(3)
asebeo, para lo cual véase , A, se traduce «vivir impíamente» en
2 P 2.6.
(4)
eireneuo, traer paz, reconciliar, o estar en paz, se traduce
«vivid en paz», en un gentil reproche del Señor a sus discípulos.
(5) Para
meno, morar, traducido con el verbo vivir en Hch 28.16: «vivir
aparte»; 1 Cor 15.6: «muchos viven aún».
(6)
oikeo, se traduce «vivir» en 1 Cor 7.12,13, de cónyuges viviendo
juntos.
(7)
tapeinooo significa hacer bajo, llevar abajo: (a) de llevar al
suelo, nivelar, reducir a una llanura, como en Lc 3.5; (b) metafóricamente
en la voz activa, de llevar a una condición humilde, humillar (2 Cor 11.7),
y en la pasiva, estar humillado, traducido «Sé vivir humildemente» (rv:
«estar humillado»); en Mt 23.12; Lc 14.11; 18.14: «será humillado». Se
traduce «humillaos», en el sentido de la voz media, en Stg 4.10; 1 P 5.6:
«humille» en Mt 18.4; «que … me humille» (2 Cor 12.21); «humilló» (Flp 2.8).
En Lc 18.14b: «el que se humilla».
(8) Para
anastrofe, conducta, traducido «manera de vivir» en Ef 4.22; 1
P 1.15,18; 2.12; 2 P 3.11,
(II) Vivificar
A. Verbos
10.
zoopoieo (zwopoievw), se traduce
«vivificará» en Ro 8: 1 l; «serán vivificados» (1 Cor 15.22); «no se
vivifica» (v. 36); «vivificar» (Gl 3.21); «vivificado» (1 P 3.18).
(III) Vida
B. Nombres
1. zoe
(zwhv), (castellano, zoo, zoología) se emplea
en el NT «de la vida como un principio, vida en el sentido absoluto, vida
como la tiene Dios, aquello que el Padre tiene en sí mismo, y que Él dio al
Hijo encarnado que tuviera, vida en sí mismo (Jn 5.26), y que el Hijo
manifestó en el mundo (1 Jn 1.2). El hombre ha quedado alienado de esta vida
a causa de la caída (Ef 4.18), y de esta vida los hombres llegan a ser
participantes mediante la fe en el Señor Jesucristo (Jn 3.15), que viene a
ser su autor para todos los que confían en Él (Hch 3.15), y que por ello es
designado como «la vida» del creyente (Col 3.4), porque Él mantiene la vida
que Él da (Jn 6.35,63). La vida eterna es la posesión presente y real del
creyente debido a su relación con Cristo (Jn 5.24; 1 Jn 3.14). Que un día
extenderá su dominio a la esfera del cuerpo queda garantizado por la
resurrección de Cristo (2 Cor 5.4; 2 Ti 1.10). Esta vida, sin embargo, no es
simplemente un principio de poder y animación, porque tiene asociaciones
morales inseparables de ella, como la santidad y la rectitud. Muerte y
pecado, vida y santidad, se encuentran frecuentemente contrastadas en las
Escrituras.
Zoe
se emplea también de aquello que es la posesión común de todos los animales
y hombres por naturaleza (Hch 17.25; 1 Jn 5.16), y de la presente
peregrinación del hombre sobre la tierra con referencia a su duración (Lc
16.25; 1 Cor 15.19; 1 Ti 4.8; 1 P 3.10). «Esta vida» es un término
equivalente a «el evangelio», «la fe», «cristianismo» (Hch 5.20)» (de
Notes on Galatians, por Hogg y Vine, pp. 324-325).
La muerte entró por el pecado (Ro
5.12), que es rebelión contra Dios. Así, el pecado involucraba la pérdida de
la vida. «La vida de la carne en la sangre está» (Lv 17.11). Por ello la
impartición de vida al pecador tiene que ser hecha mediante una muerte
causada por el derramamiento de aquel elemento que es la vida de la carne.
«La sangre, en virtud de ser la vida, es la que hace expiación» (id., vm).
La separación de Dios causada por la pérdida de la vida podía ser resuelta
solo mediante un sacrificio en el que la víctima y el ofrendante quedaran
identificados. Aquello que estaba dispuesto en las ofrendas típicas de
Israel tuvo su pleno cumplimiento en el voluntario sacrificio de Cristo. El
derramamiento de la sangre, en el lenguaje de las Escrituras, involucra el
quitar o entregar la vida. Por cuanto Cristo no tenía pecados propios por
los cuales morir, su muerte fue voluntaria y vicaria (Jn 10.15 con Is 53.5,
10,12; 2 Cor 5.21). En su sacrificio Él soportó el juicio divino debido al
pecado del hombre. Por medio de ello el creyente queda identificado con Él
en su vida inmortal, por medio de su resurrección, y goza de una comunión
consciente y eterna con Dios.
2.
bios (bivo"), (cf. los términos
castellanos comenzando por bio), se emplea en tres sentidos: (a) del período
o duración de la vida (p.ej., en 1 P 4.3, rv, que sigue al tr: «el tiempo
pasado de nuestra vida»; rvr sigue a los mss. que omiten «nuestra vida»; Lc
8.14; 2 Ti 2.4); (b) de la manera de vivir, vida con respecto a su conducta
moral (1 Ti 2.2; 1 Jn 2.16); (c) de los medios para la vida sustento,
mantenimiento (Mc 12.44: «sustento», rv: «alimento»; Lc 8.43: «cuanto
tenía», rv: «hacienda»; 15.12: «bienes», rv: «hacienda»; v. 30: «bienes»,
rv: «hacienda»; 21.4: «sustento»; 1 Jn 3.17: «bienes»).
Voluntad, Voluntario,
Voluntariamente
A. Nombres
1.
thelema (qevlhma), significa: (a)
objetivamente, aquello de que se tiene voluntad, de la voluntad de Dios
(p.ej., Mt 18.14; Mt 3.35), siendo su cumplimiento una señal de la relación
espiritual con el Señor; Jn 4.34; 5.30; 6.39,40; Hch 13.22, plural, lit.,
«mis voluntades»; Ro 2.18; 12.2, lit., «la voluntad de Dios, la buena y
perfecta aceptable». Aquí el artículo repetido tiene probablemente la
función de resumir, siendo los adjetivos una descripción de la voluntad de
Dios, como aparece en las versiones castellanas; Gl 1.4; Ef 1.9; 5.1 «del
Señor»; Col 1.9; 4.12; 1 Ts 4.3; 5.18, donde significa «el consejo lleno de
gracia» más que «la resolución determinada»; 2 Ti 2.26, que debería leerse
«que han sido tomados cautivos por Él [(autou),
esto es, por el diablo; la versión dada por la Versión Revisada Inglesa:
«por el siervo del Señor» es una interpretación que, además, no se
corresponde con el texto griego] para su (ekenou)
voluntad» (esto es, la voluntad de Dios; el pronombre diferente vuelve a
hacer referencia al sujeto de la oración, esto es, Dios); así, la traducción
correcta sería comenzando por el v. 25: «por si quizás Dios les conceda
arrepentimiento que conduce al pleno conocimiento de la verdad, vuelvan al
buen sentido, escapando del lazo del diablo, que los tiene cautivos, para
hacer la voluntad de aquél» (esto es, de Dios); Heb 10.10; Ap 4.11; de la
voluntad humana (p.ej., 1 Cor 7.37); (b) subjetivamente, la voluntad
descrita como la emoción de estar deseoso, en lugar de la cosa deseada; de
la voluntad de Dios (p.ej., Ro 1.10; 1 Cor 1.1; 2 Cor 1.1; 8.5; Ef 1.1,5,11;
Col 1.1; 2 Ti 1.1; Heb 10.7,9,36; Jn 2.17; 5.14); de la voluntad humana
(p.ej., Jn 1.13; Ef 2.3: «la voluntad de la carne»; 1 P 4.3, tr; 2 P 1.21).
2.
thelesis (qevlhsi"), denota la
acción de querer, un deseo [similar a Nº 1(b)] (Heb 2.4).
3.
boulema (bouvlhma), designio
deliberado, aquello que se dispone premeditadamente (Ro 9.19: «voluntad»; 1
P 4.3, en los mss. más comúnmente aceptados).
4.
eudokia (eujdokiva), (eu,
bien; dokeo, pensar) se traduce
«buena voluntad» en Lc 2.14.
5.
eunoia (eu[noia), buena voluntad (eu,
bien; nous, mente). Se emplea en Ef
6.7: «sirviendo de buena voluntad»; para 1 Cor 7.3.
B. Adjetivos
1.
jekousios (eJkouvsio"), voluntario.
Se emplea con kata en Flm 14, lit.
«según el querer»: «voluntario» (nvi: «espontáneo»; vm: «de voluntad
espontánea»).
2.
jekon (eJkwvn), de libre voluntad,
voluntario. Se emplea en Ro 8.20: «por su propia voluntad»; en 1 Co 9.17:
«lo hago de buena voluntad». En la lxx, Éx 21.13; Job 36.19.
3.
akon (ajkwvn),
a, privativo, y Nº 1, indispuesto,
no voluntario. Se emplea en 1 Co 9.17: «de mala voluntad» (vm,
«forzosamente»; lba: «en contra de mi voluntad»; rvr77: «de mala gana»). En
la lxx, Job 14.17.
C. Verbo
boulomai
(bouvlomai), expresa generalmente el deliberado
ejercicio de la volición con mayor intensidad que
thelo (véase Nota más
abajo), y se traduce «de su voluntad» en Stg 1.18, donde se emplea el
participio presente, lit., «habiendo querido».
Nota
:
Thelo, se emplea en el participio
presente en 2 P 3.5, y se traduce «estos ignoran voluntariamente», lit.,
«esto les escapa (esto es, a su conocimiento) voluntariamente (esto es, por
su propia voluntad)».
D. Adverbio
jekousios
(eJkousivw"), denota voluntariamente (Heb
10.26), de pecar; 1 P 5.2, de ejercer supervisión sobre la grey de Dios
Voz
1.
fone (fwnhv), sonido. Se emplea de
la voz: (a) de Dios (Mt 3.17; Jn 5.37; 12.28,30; Hch 7.31; 10.13,15; 11.7,
9; Heb 3.7,15; 4.7; 12.19,26; 2 P 1.17-18; Ap 18.4; 21.3); (b) de Cristo:
(1) en los días de su carne (Mt 12.19, negativamente; Jn 3.29; 5.25;
10.3,4,16,27; 11.43; 18.37); (2) en la cruz (Mt 27.46 y pasajes paralelos);
(3) del cielo (Hch 9.4,7; 22.7,9,14; 26.14; Ap 1:10,12, aquí, por metonimia,
del orador, 15; 3.20); (4) en la resurrección «para vida» (Jn 5.28; 1 Ts
4.16, donde «voz de arcángel» carece de artículo, y probablemente se refiere
a la voz del Señor como poseyendo un carácter arcangélico); (5) en la
resurrección para juicio, Jn 5.28 [no el mismo acontecimiento que (4)]; (c)
de seres humanos en la tierra (p.ej., Mt 2.18; 3.3; Lc 1.42, y
frecuentemente en los Sinópticos); (d) de ángeles (Ap 5.11, y frecuentemente
en el Apocalipsis); (e) de los redimidos en el cielo (p.ej., Ap 6.10; 18.22;
19.1,5); (f) de un dios pagano (Hch 12.22); (g) de cosas, p.ej., el viento
(Jn 3.8: «sonido»).
2.
keleusma (kevleusma), llamada,
convocatoria, grito de mando (relacionado con
keieuo, véanse MANDAR,
ORDENAR). Se emplea en 1 Ts 4.16 del grito con el que (en,
en, denotando las circunstancias acompañantes) el Señor descenderá del cielo
en el momento del arrebatamiento de los santos (aquellos que duermen, y los
vivos) para encontrarse con Él en el aire («voz de mando»). Aquí no se dice
que el grito será su verdadera voz, aunque ciertamente así será (Jn 5.28).
En la lxx, Pr 30.27: «las langostas … a la palabra de mando marchan en
formación».
3.
fthongos (fqovggo"), voz, término
relacionado con fthengomai, emitir
una voz. Aparece en Ro 1.18; 1 Co 14.7: «voz» y «voces», respectivamente. En
la lxx, Sal 19.4.
Notas:
(1) para krauge, «voz» en Lc 1.42 en
los mss. más generalmente aceptados (en lugar de Nº 1 en tr); Ap 14.18, tr
(en lugar de Nº 1 en los mss. más generalmente aceptados).
(2)
stoma, boca, se traduce «voz» en Ro 15.6: «unánimes, a una voz»,
lit., «con una misma boca».
(3) El verbo
foneo se traduce «decía a gran voz»
(Lc 8.8); «dando voces» (Lc 16.24).