INT. DEPARTAMENTO. DIA LEO (22) y MARTIN (22) están sentados en la mesa frente a la tele, a la cual Martín mira atentamente acompañado de revistas relacionadas con la Segunda Guerra Mundial, algunas con esvásticas notorias. Leo come cereales. LOCUTOR DEL DOCUMENTAL (off) Las razones fundamentales por las cuales los nazis invadieron Rusia fueron muchas y diversas... Leo, saca una insignia de policía de la caja de cereales y mira el televisor, extrañado. LOCUTOR DEL DOCUMENTAL (off) ...En primer lugar, se dedicaban a invadir. En segundo lugar, eran buenos en ello. Y la tercera, y no por ello menos importante, es que era un punto clave en la conquista de Europa. LEO (colocándose la insignia en el pecho) Martín. MARTIN (poniendo mute) ¿Sí? LEO Perdoná que te interrumpa pero... ¿qué es lo que está mal? Mirá, la caja de este cereal dice extra crujiente. Leo le convida una cucharada de cereales a Martín. LEO ¿Están extra crujientes para vos? MARTIN Mmmmmh, sí. LEO ¿Y entonces?... No se quizás sea yo, quizás solo estoy viendo el detalle y no el principio detrás de este que es lo que realmente importa. MARTIN Leo, ¿de qué estás hablando? LEO No te hagas el desentendido, aquí no sirve tratar de identificar los diez cuernos en la bestia porque muchos han tratado... y han fallado. MARTIN Y se burlaban de mi cuando puse en el discado rápido el número del manicomio, ¿pasame el teléfono? LEO No el teléfono está bien, los cereales están bien y estamos viendo un documental sobre la Segunda Guerra Mundial... ¡¿Estamos viendo un documental sobre la Segunda Guerra Mundial?! MARTIN (señalando a la tele) Ah, ¿esto? ¿Te acordás de la chica que me crucé la semana pasada? Leo niega con la cabeza. MARTIN La hija de la amiga de mi mama... esa que es maestra. LEO No. MARTIN La que mi mamá cuenta que asiente como vaca... LEO (asiente mugiendo como vaca) Mmmmmmmmmmmmmmm... MARTIN Bueno, resulta que fue uno de esos encuentros con personajes que conocés de vista, y no de oído. Y cometí el error de detenerme a saludar, en vez de un práctico "hola" al paso, quedando expuesto a "conversación". Y si observamos este tipo de primeras charlas encontraremos un claro patrón de incomodidad que se repite constantemente... LEO ¿Charla formulario? MARTIN Sí. LEO ¿El "momento ocupación"? MARTIN Claro. LEO (entrecerrando los ojos) ¿Licenciado en Historia? MARTIN Y... sí. Leo cierra los ojos y niega con la cabeza. MARTIN Bueno ahí me contó que quería dar una charla sobre la Segunda Guerra Mundial a sus alumnos, y me preguntó si yo sabía algo. LEO ¡¿Que si sé sobre la Segunda Guerra Mundial?! MARTIN Exacto. Y me comprometí a dar una clase esta tarde. Martín aprieta mute otra vez. LOCUTOR DEL DOCUMENTAL (off) ...Fue en Stalingrado donde los nazis sufrieron su peor derrota. LEO ¿Sabés cuál fue la verdadera razón del fracaso? MARTIN Sí, el frío. LEO Sí, pero todos sabemos que hace frío en Rusia. MARTIN Bueno, ahora. También sabemos que la Tierra gira al rededor del sol, y a Colón por decir eso lo prendieron fuego. LEO No, nadie prendió fuego a Colón. A lo que me refiero es que los nazis sabían que hacía frío en Rusia, pero contaban con unos calzoncillos muy abrigados, diseñados especialmente para esas bajísimas temperaturas. El problema es que el cargamento no llegó a tiempo. MARTIN Leo, ¿de dónde sacaste todo eso? LEO Me lo contó Dody. Y me dijo que las venden en la tienda que está frente al cine. De todas formas, ni se me pasó por la cabeza comprarlas. MARTIN Sí, no da comprar algo nazi. LEO Ni loco. Ah, no te creas que me olvidé de tu documental. MARTIN No te creas que me olvidé de los diez cuernos de la bestia. ELIPSIS Martín y Leo están sentados alrededor de la mesa. Leo está leyendo el diario. Martín apaga la tele. MARTIN (interrumpiendo a Leo) ¿Sabías qué es lo que realmente necesita esta ciudad? LEO Vacas sagradas. SONIDO DE TIMBRE. Martín va hacia el portero eléctrico. MARTIN Superhéroes. Me refiero a que no es tan difícil... Yo podría ser un superhéroe. LEO Vos no podrías ser un superhéroe. MARTIN (presionando el botón de abrir) Lo mismo dirías si vieras a Diego de la Vega. LEO El Zorro no es un superhéroe. Por definición, un superhéroe debe tener superpoderes. MARTIN ¿Batman es un superhéroe? LEO Obviamente Batman es un superhéroe. MARTIN ¿Ah sí? ¿Y cuál es su superpoder? LEO ¿Que te parece... ¡el dinero!? Entra PAULA (22) bruscamente y cierra la puerta de igual forma. PAULA ¡No van a creer el día que tengo! Primero llegaron los fumigadores a la mañana, ¡que tienen que hacer una fumigación de emergencia en todo el edificio! ¿Es que siquiera existe tal cosa? ¿Acaso de repente nos van a comer las arañas? Bueno, de todos modos, salgo de mi casa y una vieja me roba el taxi. Encima me hace esta estúpida pregunta: (imitando la voz de una vieja) Eh, querida, ¿tus papás son primos? (volviendo a su voz) ¿Qué significa eso? Leo y Martín bajan la vista. PAULA ¡¿Qué?! ¡¿Por qué esas caras?! LEO Eh... hay una vieja creencia que dice que... los hijos de familiares cercanos pueden nacer... cerebralmente... ¿cómo decirlo...? Afectados... PAULA ¡¿Qué?! MARTIN Eso es algo que nunca entendí. ¿Entonces Adán y Eva junior tuvieron hijos bobos? ¿Es que la humanidad toda es una raza de individuos cerebralmente... afectados? PAULA Bueno, encima después de que logro tomarme un taxi, el taxista me devuelve... (sacando de su bolsillo un puñado de monedas) ¡Esto! Paula pone el puño con sus monedas en sus caras. PAULA ¡Yo no quiero sus estúpidas monedas! (con voz calmada y pausada) Por favor, señor, ¿no me podría cambiar esto por billetes? Hay monedas de un centavo acá. (imitando la voz de un hombre) Eh... yo no quiero esas monedas. (volviendo a su voz normal) Pero las monedas también tienen valor. (voz de hombre) Entonces quédeselas. Paula arroja fuertemente las monedas contra el piso. PAULA ¡Ah, les digo, un día van a volverme loca! MARTIN Dios, Paula. Espero que eso nunca pase. PAULA Ah, hablé con Domitila. Parece que ayer, jugando con el SAP de su televisor: castellano, inglés, castellano, inglés; logró dejarlo en algún lugar en el medio, dice que Bugs Bunny parece chicano. LEO ¿No trató de arreglarlo? PAULA No, creo que le gusta. En fin, quedamos en encontrarnos acá para ver el maratón de los Superamigos. Debe estar por llegar en cualquier momento. LEO Me parece que alguien aquí no ha madurado. PAULA (haciéndole la venia a Leo) Discúlpeme, comisario. Leo baja la vista y se retira la insignia de su pecho. PAULA Por cierto, recibí noticias de mis primos de Polonia. LEO ¿Los que hablan alto y tenés que gritar para que te escuchen? PAULA Sí. ¿Adivinen qué? Deben estar llegando al aeropuerto. ¿Les molesta si vienen para acá? MARTIN No, para nada. De hecho, ¿por qué no los traés al cine con nosotros? PAULA Bárbaro. LEO ¡Nie chce mi dac mojej insuliny! PAULA ¿Qué? LEO Es lo único que sé decir en Polaco. Creo que significa "no me quiere dar mi insulina". PAULA Ah. LEO No conozco a todos, pero me contaste que uno es un neumonólogo muy prestigioso. PAULA Sí, me parece que actualmente está investigando unos métodos revolucionarios para combatir el asma con humo. MARTIN Aunque eso es interesante no tengo tiempo para escuchar más. Llego tarde a la escuela. Martín agarra una campera de un perchero junto a la puerta, y al abrirla aparece DOMITILA (22). DOMITILA Hola MARTIN Chau. DOMITILA ¿No vas a ver a los Superamigos? MARTIN Dejáme decirte algo acerca de los Superamigos. Primero, hay algo que me saca de quicio. ¿Notaron cómo esos dos... Mellizos Increíbles...? LEO Gemelos Fantásticos. MARTIN Ah, como sea. ¿Vieron cómo uno siempre se convierte en agua y el otro en animal? Todos sabíamos eso. ¡Ellos sabían eso! Pero en ningún capítulo parecían reconocerlo. Ah... detesto a los que no aceptan sus propias limitaciones... Bueno, de todos modos, tengo que ir a dar una clase sobre la Segunda Guerra Mundial. Hasta luego. Sale por la puerta, da unos pasos y vuelve. MARTIN (poniendo voz tenebrosa) Además está ese Batman, con su superdinero... Uuuuuuuuuh... Martín se va, Domitila cierra la puerta. DOMITILA Vos, Leo, ¿te quedás? LEO No sé, tendría que ir a comprarle algo a mi sobrino, que cumple años, y esta vez tiene que gustarle. Leo y Paula sonríen. DOMITILA ¿Por qué? ¿Qué pasa? PAULA El año pasado le regaló entradas para Hollyday On Ice. Paula y Domitila ríen. LEO ¡Hey! Cuando yo era chico, el espectáculo era mucho más infantil... y heterosexual. DOMITILA Ya sé. ¿Por qué no le regalás lo que mi primo Dody le regaló al hermanito de la novia? ¿A tu sobrino le gusta el fútbol? LEO Sí. Es de San Lorenzo. DOMITILA Bueno, hacé esto. Primero, averiguá el nombre de su jugador favorito. LEO Eso es fácil: Leandro Romagnolli. DOMITILA Bárbaro, esos jugadores jóvenes todavía no cayeron en el delirio de grandeza de los famosos de sacar sus nombres de la guía telefónica. LEO No creo que se pueda llegar a divertir mucho con una guía, ni siquiera con una que tenga el número de Romagnolli. DOMITILA No, idiota. El teléfono es para la segunda parte del plan. Vos lo llamás y le pedís algo que él use, como una prenda de vestir o un objeto. LEO ¿Un vaso, por ejemplo? DOMITILA Por ejemplo. LEO ¡Hey! Eso le puede llegar a gustar. ¿Y te parece que me lo vaya a dar? DOMITILA Sí, sin duda. Además, no gastás nada de plata y tu sobrino va a apreciar mucho más eso, que te tomaste el trabajo de conseguirlo, que algún estúpido juguete caro con lucecitas que se prenden y se apagan. PAULA Sí, claro, los chicos odian los estúpidos juguetes caros con lucecitas que se prenden y se apagan. INT. AULA DE ESCUELA. DIA Martín está parado frente a la clase y tiene la campera puesta. A su derecha está sentada la MAESTRA (25), y detrás un pizarrón que dice "Hoy: Segunda Guerra Mundial, por el Licenciado en Historia Martín Vázquez". MARTIN Entonces, los nazis desarrollaron unos calzoncillos terriblemente calurosos, y decidieron invadir Rusia para probar el poder de éstos. El problema fue que las tropas llegaron mucho antes que los calzoncillos, y el frío, que es bueno, mató a los nazis. ALUMNO CURIOSO (off) ¿El calor es malo? MARTIN Eh... Sí. Por eso el frío conserva los alimentos y el calor los pudre. MAESTRA (asiente mugiendo como vaca) Mmmmmmmmmmmmm... ALUMNO CURIOSO (off) ¿Por eso los esquimales son buenos y los beduinos malos? MARTIN Claro. ALUMNO CURIOSO (off) ¿Cómo sabes tanto de esa guerra? No pudiste estar allí. Ni siquiera habías nacido. MARTIN ¿Quién ganó el Mundial de Fútbol en el '86? ALUMNO CURIOSO (off) Argentina. MARTIN Pero qué extraño. ¿Cómo lo sabés si no habías nacido? ALUMNO CURIOSO (off) Me lo contó mi padre que estuvo en el Estadio Azteca ese día. MAESTRA Mmmmmmmmmmmmm... MARTIN Bueno, a mí me lo contó mi abuelo. ALUMNO CURIOSO (off) A juzgar por tu apellido eres de ascendencia española. ¿Cómo pudo tu abuelo haber estado allí? MARTIN Ah, sí. Me lo contó mi abuelo materno. ALUMNO CURIOSO (off) ¿Cómo se apellida tu madre? MARTÍN Pérez... troika. Y se acabó la clase. Pueden salir. Mientras todos van saliendo, ALDANA (10) se le acerca. ALDANA Excelente clase. No sabía lo de los calzoncillos. MARTIN Pocos lo saben. ALDANA ¿Qué te parece si vamos a comer y seguimos esta charla? Yo podría contarte algunas cosas también. MARTIN A ver, ¿cómo cual? ALDANA Por ejemplo, hay una ley que obliga a usar cuatro bolitas de naftalina por mingitorio. MARTIN Interesante, ¿cómo lo sabes? ALDANA Mi madre es inspectora de baños públicos. MARTIN Mirá, aceptaría si no tuvieras diez años. ALDANA ¿Diez años? No, yo tengo 27. MARTIN Ah, sí, ¿y estás haciendo la primaria de vuelta porque cambiaron el sistema educativo y querías ver qué te perdías? ALDANA Claro. Además, una chica de 10 años sabría que... Aldana le dice algo a Martín al oído, este abre bien los ojos y asiente con la cabeza. INT. DEPARTAMENTO. DIA Paula y Domitila están sentadas viendo la tele. Leo esta parado con un teléfono en una mano y con la otra busca en una guía telefónica. Marca unos números en el teléfono y espera unos pocos segundos. LEO Hola me gustaría hablar con Romagnolli, Leandro Romagnolli... sí espero. PAULA Hay algo que no entiendo acerca del avión de la Mujer Maravilla. ¿Notaste como al ser invisible se puede ver a la Mujer Maravilla conduciéndolo? DOMITILA Sí. PAULA Bueno entonces no te parece razonable que los maleantes lo noten por ejemplo: (Gesticulando con las manos) ¡Hey! ¡Mira, allá arriba viene la Mujer Maravilla! No puedo probarlo, pero creo que... alrededor está su avión. LEO ¿Hola? ¿Leandro? Sí, qué tal. Mirá, yo no soy un loco ni nada, pero resulta que tengo un sobrino que cumple años... sí, años... gracias. Y me preguntaba que ya que es fanático de San Lorenzo, y especialmente tuyo... claro el hijo de mi hermana... no es morocho. Bueno, me encantaría regalarle algo que vos uses, como por ejemplo un vaso tuyo... no, no tiene nada que ver con donaciones de órganos... sí, también podría ser una cuchara... bueno, está bien, un vaso... no, no el órgano. Un vaso, quiero un vaso. Domitila le alcanza un vaso, estirando su brazo, manteniendo su vista en la tele. LEO (a Domitila) No, no quiero un vaso. Domitila saca el vaso. LEO (a Romagnolli) No, a vos no. Domitila le alcanza el vaso. LEO (a Domitila) ¡Sólo quiero un vaso de Romagnolli para mi sobrino! Leo se queda mirando el teléfono y corta. LEO (tomándose el mentón) Tendré que recurrir al plan B. Paula y Domitila se miran, Leo mira hacia la tele. LEO Ok, puedo entender cómo Superman y Batman, al tener capa, puedan volar, pero cómo vuela la Mujer Maravilla... eso nunca lo entendí. PAULA Vení, sentáte y dale un descanso a tu cerebrito que parece necesitarlo. LEO (agarrando una campera del perchero) No, primero voy a ir a comprar las entradas al cine. Atiendan el teléfono. Si es mi hermana, díganle que vuelvo en una hora y que no se preocupe, nada de patinadores en calzas para este año. EXT. CINE. DIA Leo sale del cine contando unas entradas. Tiene puesta su campera. Mira la tienda de calzoncillos de enfrente. Niega con la cabeza, guarda las entradas en un bolsillo, mira nuevamente hacia la tienda, baja la vista, la sube, saca unos Tic Tac de la campera, se introduce rápidamente algunos en la boca, cruza la calle y entra a la tienda. INT. DEPARTAMENTO. DIA Paula y Domitila están sentadas viendo la tele. PAULA Incluso en un mundo donde es moneda corriente un tipo montado en un hipocampo, es más llamativo ver a una persona sentada en el aire que un avión común y corriente. DOMITILA (Sacando el Ventolín de un bolsillo) No te olvides de mencionarle a tu primo mi problema de asma... PAULA Por lo menos, se lo hubiera diseñado para pilotearlo acostada, así parece que vuela. DOMITILA ...Qué bueno, con su ayuda mi vida no dependería más de esto... Domitila mira el ventolín, Paula se acuesta boca abajo. PAULA (extendiendo un brazo) Podría poner la palanca de acelerar acá... DOMITILA (asustada) ...Supongamos que se empiezan a curar todos. Fabricarlo da pérdidas y no lo hacen más... Domitila se empieza a ahogar y usa el ventolín. PAULA (contrayendo el otro brazo) ...y la de desacelerar acá... DOMITILA (tragando saliva) ...Yo quiero estar en el grupo que causa la no-fabricación. ¿Dijiste "palanca de desacelerar"? PAULA (como si estuviera volando) ¡¿Qué?! DOMITILA No existe tal cosa. PAULA ¡¿Qué?! DOMITILA Palanca de desacelerar. No existe. PAULA (parándose y encogiéndose de hombros) ¿Qué importa? Si pueden poner un lazo que te hace decir la verdad, pueden poner una palanca desaceleradora. SONIDO DE TIMBRE. (Nota: Los signos de admiración implican volumen alto de voz) PAULA (tomando el tubo del portero) Deben ser mis primos... ¡Suban! Paula presiona el botón para abrir. DOMITILA ¿Hablan nuestro idioma, o vas a tener que estar traduciendo? PAULA (abriendo la puerta) No, el nuestro. ¿Y qué te hace pensar que yo sé polaco? DOMITILA Acordáte de mi asma. PAULA Ah, me olvidaba. Hay una cosa, ellos hablan a un volumen muy alto, y si no hacés lo mismo, no te escuchan. Entran tres HOMBRES (35). El segundo tiene bigotes. Paula se abraza con los dos primeros a la vez, ignorando al tercero. PAULA (señalando al primero) ¡Alexei...! ¡Domitila...! ALEXEI ¡Hola! DOMITILA ¡Hola! PAULA (señalando al segundo) ¡Nicolai...! NICOLAI ¡Hola! DOMITILA ¡Hola! PAULA ¡Pasen, pasen! ¡¿Cómo viajaron!? Domitila se queda mirando al tercero, lo saluda levantando las cejas, éste devuelve el saludo y se va acercando con los otros dos a la mesa donde siguen las revistas con esvásticas. PAULA ¡¿Qué tal la comida de avión?! ALEXEI (mirando la mesa) ¡Svástica! NICOLAI ¡Nazi propaganda! El tercero niega con la cabeza. PAULA (cerrando la puerta) ¡No, tranquilos!, ¡Eso es para una clase de historia de Martín, uno de los dueños del departamento! Los polacos se tranquilizan. Leo interrumpe a Paula antes de que cierre la puerta, entra y cuelga su campera, que trae en la mano, en el perchero. LEO ¡Hey! ¡Hola! PAULA ¡Este es leo! ¡El otro dueño de casa! ¡El es Alexei! ALEXEI ¡Hola! LEO ¡¿El neumonólogo?! ALEXEI ¡Sí! LEO ¡¿Y cómo marcha la cura del asma con humo?! Domitila usa su ventolín, tratando de que Alexei lo note. ALEXEI (sin notar a Domitila) ¡Un poco estancada! PAULA ¡Y él es Nicolai! NICOLAI ¡Hola! LEO ¡Hola Nicolai! NICOLAI ¡Yo fabrico bigotes de chocolate! LEO ¡Qué bien... ¿bigotes de chocolate?! ¡¿Cómo es eso?! NICOLAI ¡Siempre tuve dos pasiones! (extendiendo su mano derecha) ¡Los bigotes...! (extendiendo su mano izquierda) ¡Y el chocolate...! ¡Y para unirlas en una única gran pasión...! LEO (uniendo sus manos) ¡Fábrica de bigotes de chocolate! Nicolai chasquea sus dedos y señala a Leo, este se queda mirando al tercer polaco espera unos segundos, lo saluda levantando las cejas y el polaco le devuelve el saludo. LEO ¡Bueno, vamos para el cine, que Martín nos debe estar esperando! EXT. CINE. DIA Martín y Aldana están por entrar al cine. Martín mira la tienda de calzoncillos. Niega con la cabeza. La mira nuevamente. Le da dinero a Aldana, ésta entra al cine y Martín cruza la calle y entra a la tienda. EXT. ENTRADA DE EDIFICIO. DIA Leo, Domitila, Paula y los Polacos salen del edificio. Están todos abrigados, menos Leo, que está en remera. DOMITILA Sería bueno que consiguiéramos dos taxis... Leo, ¿tenés un Tic Tac? LEO Sí tomá... ah no, los dejé en la campera. DOMITILA ¡Uy! Pero hace frío. Andá a buscar la campera y de paso traé los Tic Tac. Tengo el mal sabor del Ventolín. LEO No, no hay tiempo. DOMITILA ¡Vos estabas resfriado! ¡Andá a buscar la campera! Alexei gira su cabeza hacia ellos y los observa. LEO ¡No, no tengo frío! ¡No me va a pasar nada! ALEXEI ¡¿Cómo?! ¡La negligencia es la principal causa de enfermedades! ¡No puedo permitirle que salga tan desabrigado! ¡En Polonia, quitarse un abrigo puede significar nada más ni nada menos que la muerte! ¡Tome, use mi sobretodo! PAULA Oh, deben tener leyes muy estrictas. LEO ¡No, en serio, no es necesario! ALEXEI ¡Por favor! ¡Insisto! LEO ¡Pero usted se va a quedar sólo con ese saco! ¡No puedo permitirlo! PAULA Agarrálo. Nadie le puede decir que no a mi primo si se empecina con algo. LEO (resignado) ¡Bueno, deme ese sobretodo! Alexei se lo da. Leo se lo pone. LEO ¡Uh! ¡Es un hermoso sobretodo! ALEXEI ¡Le perteneció a mi abuelo! ¡Ese sobretodo fue su única pertenencia durante su larga estadía en los campos de concentración nazis! ¡Sí, decía que ese abrigo le había salvado la vida! ¡Lo protegía del frío, del viento, inclusive del fuego! ¡Los nazis orinaban sobre ellos, y mi abuelo, por las noches, lavaba el sobretodo a escondidas, poniendo en juego su vida, con la única esperanza de poder, antes de morir, entregárselo a su hijo, mi padre...! Se va juntando gente alrededor. ALEXEI ...¡quien juró, sobre la tumba de mi abuelo, que cuidaría el sobretodo con su vida y no permitiría que volviese a impregnarse en ningún tipo de líquido nazi, excepto chucrut, que es esa mancha marrón del forro! ¡Y así, de generación en generación, mi familia ha confirmado ese juramento de la misma forma que lo hará mi primogénito y su descendencia hasta el fin de los siglos! La gente que los rodea aplaude y comienza a retirarse. LEO ¡Es una historia muy emotiva! ¡No puedo aceptar su sobret...! ALEXEI ¡Tsch! LEO ¡Pero...! ALEXEI ¡Tsch! LEO ¡Es que...! ALEXEI ¡Tsch! PAULA Quedátelo. Nadie le puede decir que no a mi primo. LEO (tomándose el mentón) ¿Con que nadie le puede decir que no? Paula, Domitila, tómense un taxi y espérennos en el cine. Necesito que me prestes un segundo a tus primos... Ah, ahí viene uno. Leo para el taxi con un gesto similar al saludo nazi. Los polacos se sorprenden y Alexei mira a Leo con sospecha. INT. TAXI. DIA Leo está sentado en el asiento del acompañante, acalorado y sudando mucho. Atrás van los polacos. EXT. ENTRADA DE EDIFICIO. DIA Hay seis timbres con nombres de familias. Leo está con los polacos. Toca el que dice "Romagnolli". Leo suda mucho. VOZ DE MUJER (portero en off) ¿Quién es? LEO Hola, señora. ¿Es esta la casa de Leandro? VOZ DE MUJER (off) Ajá. LEO ¿Se encuentra él? VOZ DE MUJER (off) No, mi hijo acaba de irse a entrenar. LEO Ah, porque yo tenía una cita con él. VOZ DE MUJER (off) ¿Cómo es su nombre? LEO Eh... Toni... Mazca... lzoni... VOZ DE MUJER (off) ¿Y por qué asunto lo busca? LEO Por un asunto de vajilla, yo soy su consejero. VOZ DE MUJER (off) ¿Qué tipo de consejero? LEO Uno muy bueno, señora. Un NIÑO(12) sale del edificio y Leo detiene la puerta antes de que se cierre. LEO Ah, está bien. Acá me abren. (a los polacos) ¡Vamos! INT. PALIER. DIA Leo toca el timbre de una puerta, sale una SEÑORA (47). LEO (secándose la transpiración) Hola, señora. Mire, estos señores son grandes coleccionistas de vajillas y están interesados en la suya. ¿Podría traernos, por ejemplo... un vaso? SEÑORA Mire, yo a usted señor Mascalzoni no lo conozco... LEO Vamos señora, que estas personas tienen mucho dinero y no pueden estarse esperando. SEÑORA ¿Usted está loco? No, yo tengo que esperar a mi hijo. LEO (rogando, enojado) ¡Señora, por favor! Los polacos miran a Leo atentamente. SEÑORA No, no, yo... LEO (a Alexei) ¡Nie chce mi dac mojej insuliny! ALEXEI (a la señora) ¡Prosze pani, na Boga, prosze pryniesé natyhmiast jego insuline! La señora entra asustada y vuelve rápidamente con un vaso que le da a Leo. Los polacos miran extrañados. LEO (secándose el sudor) ¿Vio? No fue tan difícil. Leo toma el vaso y su cara sonriente se va desfigurando a medida que se le resbala el vaso. SONIDO DE VASO ROMPIÉNDOSE. EXT. CINE. DIA Aldana, Paula, Domitila y Martín están en la puerta del cine. Él tiene la campera en la mano y puesta una remera. MARTIN ¿Para qué quería Leo a tus primos? PAULA No sé. Supongo que está relacionado con el regalo para su sobrino. DOMITILA Claro. (cambiando la voz) Sobrino, mira lo que te traje... Unos extranjeros que hablan alto. (volviendo a su voz) Y no quería decepcionarlo esta vez. PAULA No, nadie regala a los primos polacos de una amiga. Digo que quizás los haya involucrado en algún absurdo plan para conseguir algo de Romagnolli. ALDANA ¿Un vaso, por ejemplo? PAULA Por ejemplo. DOMITILA ¿Cuándo le vas a decir a Alexei de mi problema de asma? PAULA ¡Ah! ¡Ahí están! Llega un taxi. De la parte trasera bajan los polacos. Leo queda en el asiento del acompañante pagando. PAULA (señalando a los que nombra) ¡Martín, Aldana, Alexei, Nicolai...! MARTIN/ALDANA/ALEXEI/NICOLAI ¡Hola! Martín y Aldana saludan al tercer polaco levantando las cejas y éste devuelve el saludo. Leo baja del taxi. Los polacos empiezan a mirar mal a la tienda de calzoncillos. MARTIN (a Leo burlándose) Lindo sobretodo. Leo le hace un gesto con la cara para que se calle. Martín nota la cara de Leo sudada y lo mira con sospecha. MARTIN ¿Qué te pasa? ¿Por qué transpirás? Leo va a hablar. Hace una pausa. Abre la boca para decir algo. DOMITILA (interrumpiéndolo) Parecés engripado. LEO (señalando a Domitila) Tengo gripe, por eso transpiro. ALDANA Y no vas a ser el único. (a Martín, señalando su abrigo) ¿Por qué no te ponés la campera, mi amor? LEO ¡¿Mi amor?! ¡¿Estás saliendo con una infanta?! Los polacos dejan de mirar mal a la tienda de calzoncillos y se dan vuelta hacia Leo. PAULA Una infanta sabría que... Paula le dice algo a Leo al oído, este abre bien los ojos y asiente con la cabeza. LEO Buen punto. Leo observa a Martín con sospecha. LEO ¿No tenés frío? MARTIN ¿Cómo no voy a tener frío? DOMITILA ¿Y por qué no te ponés la campera? MARTIN Porque hace frío, y... en el cine hay calefacción... y para disfrutarla más, ingreso desabrigado. (sacando las entradas) Y entremos antes de que me congele. LEO Ah, tomá. Yo también saqué entradas. Leo, mirándolo con sospecha le da las entradas y todos entran. INT. HALL DEL CINE. DIA Entrando al hall hay a la derecha: el baño de mujeres, la boletería, donde TRES SORDOMUDOS (18) le hacen gestos al BOLETERO (55), y el baño de hombres. Al frente: el TIQUETERO (60) y la entrada, cerca de éste se encuentran Leo, Martín y compañía. Y a la izquierda: un local de venta de gaseosas y pochoclo, atendido por DOS CHICAS(25), que conversan con un HOMBRE FORNIDO DE SEGURIDAD(45). BOLETERO (enojado) Miren, léanme los labios. Los sor- do-mu-dos tam-bién pa-gan. Pa-gan. El boletero hace gestos de pagar y los sordomudos siguen gesticulando. LEO Dales las entradas que sobran. PAULA No, no lo hagas. A mí me incomodan los sordomudos. Además, ¿cómo sabemos que no están actuando? LEO ¡Fuego! ¡Fuego! Los sordomudos siguen con sus gestos. El boletero levanta la vista, el de seguridad se asoma, y los polacos miran preocupados hacia los costados. LEO ¿Ves? ¿Quién se va a dedicar a ir por los cines inventando que es sordomudo para que lo dejen pasar gratis? DOMITILA Sí, se harían pasar por ciegos o algo así. LEO No, no me refiero a eso. Sino que nadie hace esas cosas, y tiene más sentido hacerse el sordomudo que el ciego. Por lo menos pueden leer los subtítulos. DOMITILA Por eso. Los ciegos son los que se pierden la mayor parte. Es más lógico que no les cobren. BOLETERO Voy a lla-mar a se-gu-ri-dad. ¡Seguridad! ¿Ven có-mo lo ha-go? ¡Se-gu-ri-dad! El hombre de seguridad se acerca y cuando está llegando, Martín se le da entradas a los sordomudos. MARTIN Tomen. A nosotros nos sobran. Los sordomudos toman las entradas, hacen gestos de gracias, le sacan la lengua al boletero y le dan las entradas al tiquetero, mientras este las controla, los sordomudos y los polacos, que quedaron enfrentados, se miran. DOMITILA Unos tanto y otros tan poco. LEO En cierta forma son similares. ALDANA Generalmente los extremos se tocan. El tiquetero corta las entradas y los sordomudos entran. PAULA Todo muy emotivo. Dame mi entrada y la de Domitila que vamos al baño y a comprar gaseosas y palomitas de maíz. MARTIN (dándole dos entradas) Tomá. Recuerda la proporción pochoclera. Un pote salado... PAULA Cada dos dulces. Vamos, Domi. Paula y Domitila van al baño y el resto va ingresando. El tiquetero detiene a Aldana. TIQUETERO Lo siento. La película es para mayores de trece. LEO Disculpe, ¿una menor de trece sabría que...? Leo le dice algo al tiquetero al oído, este abre bien los ojos y asiente con la cabeza. TIQUETERO Perdón. Adelante. INT. LOCAL DE GASEOSAS Y POCHOCLO. DIA DOMITILA Mira Pau, una promoción de los superamigos. PAULA Uy, ¿a ver? ¿Cómo es? VENDEDORA Con la compra de un vaso..."grande" de gaseosa y uno..."grande" de pochoclo, te llevás un muñeco a elección. Están Superman, Batman, Robin, la Mujer Maravilla, Aquaman, los gemelos y el mono. PAULA Entonces llevo... seis de pochoclo dulce... tres salados y... ocho cocas. Todo..."grande". VENDEDORA Cincuenta y un pesos. Paula saca un billete de cien, la otra vendedora va trayendo el pedido y Domitila lo va agarrando. PAULA (extendiendo el billete) Quiero un muñeco de cada personaje. VENDEDORA (tomando el billete) Hoy toca Superman. PAULA ¡¿Qué?! VENDEDORA Hoy toca Superman, mañana Batman, cambia todos los días. PAULA ¿Me van a dar ocho muñecos iguales? Encima de Superman, que es el más aburrido. ¿Qué gracia tiene un superhéroe que nada lo afecta? VENDEDORA (mirando la caja registradora) Está la kryptonita. PAULA Sí, lo que no abundan son las kryptoniterías donde comprarla. Además dijiste a elección. VENDEDORA (revisando la caja) Podés venir a comprar el día que quieras. (mirando a Paula) ¿No tenés un peso? PAULA (ofendida) No. VENDEDORA (a la otra vendedora) ¿Me das una bolsa de cincuenta? La otra vendedora le pasa una bolsa con cincuenta monedas de un peso. Saca una y le da la bolsa. VENDEDORA Tu vuelto, gracias. PAULA (respirando profundamente) Mirá. Ya sé que las monedas también tienen valor. Pero... VENDEDORA Entonces quedátelas. PAULA ¡¿Qué pasa hoy?! ¡¿Los planetas se alinearon en mi contra?! ¡Tengo ocho muñecos de Superman y 49 monedas de un peso! VENDEDORA ¡Seguridad! Domitila ya no puede cargar más vasos y la otra vendedora trae más, y los muñecos. PAULA No, si la voy a pasar genial. (acercándose, con las monedas, a los muñecos) Miren, Supermanes, hay seis monedas para cada uno, y la restante la obtendrá el que... Entra el guardia de seguridad y toma a Paula de un brazo. PAULA ¡No me toque! ¡Tengo inmunidad diplomática! SEGURIDAD Último escándalo. El próximo, afuera. PAULA (con voz calma y pausada) ¿No nos ayuda con los vasos? SEGURIDAD Sí, por supuesto. INT. BUTACAS DEL CINE. NOCHE Leo y Martín están tomando las gaseosas. Leo se levanta y se va. Martín se levanta y se va. INT. BAÑO. NOCHE Entra Leo, desabotonándose el sobretodo rápidamente. Se dirige a los mingitorios. Los dos primeros tienen carteles de clausurados, va al restante. Entra Martín, ve los mingitorios clausurados y se acerca a Leo. LEO Oh, por favor. Leo se retira del mingitorio y le ofrece el lugar a Martín. MARTIN No, no, no. Gracias. LEO Insisto. MARTIN Yo insisto aún más. LEO Este... Bueno, gracias. Leo trata de cubrir los calzoncillos nazis con el sobretodo. El mingitorio tiene 4 bolitas de naftalina. MARTIN Sabias que por ley debe haber cuatro bolitas de... Martin ve los calzoncillos de Leo. MARTIN ¡Los calzoncillos nazis! ¡Los compraste, asesino! Martín empuja a Leo, que cae torpemente y se toma de los pantalones de Martín. MARTÍN Perdón, pero... ¿cómo pudiste? LEO Sí, me siento como una escoria. Leo al levantarse baja levemente el pantalón de Martín y ve los calzoncillos de éste. LEO ¡Ah! ¡Vos también! ¡Debería darte vergüenza...! ¡Ouch, me dolió! Leo se pasa la mano por la cadera y luego la mira con asco. LEO ¡Oh, no! ¡El sobretodo de Alexei! ¡Inepto! Cuando me tiraste manchaste el sobretodo del polaco loco. Deberías haberlo oído hablar de él. Cuando se entere vas a lamentarte de haber nacido. MARTIN ¿Y ahora por qué tengo yo la culpa? Vos fuiste el idiota que se cayó. LEO ¡¿Hola?! ¡¿Porque vos me empujaste?! MARTIN Yo no me voy a hacer cargo de tu falta de equilibrio. LEO (serio, golpeando con su dedo el pecho de Martín) Vos se lo vas a contar. INT. BUTACAS DEL CINE. NOCHE Leo y Martín se acercan a sus asientos. Vienen discutiendo. LEO Paula, necesitamos hablar con vos... Ja, ja. Si te ponés a pensarlo es muy gracioso. Ja, resulta que... MARTIN Leo orinó el sobretodo de tu primo. LEO Eso no es cierto. PAULA ¡¿Orinaron sobre el saco de mi primo?! ALEXEI ¡¿Qué?! ¡Denme el sobretodo! Leo se lo da, Alexei lo toma. Se escucha shhh. ALEXEI ¡Esto está sucio! ¡Oh, es orín! LEO Fue él. Y mire, usa ropa interior antisemita. MARTIN Mentira. Además, él también usa ropa interior antisemita. Martín baja levemente los pantalones de Leo. ALEXEI ¡Svástica! ¡Lo sabía! ¡Criminales, arruinaron mi sobretodo! ¡Malditos nazis! Alexei tira el sobretodo en las escaleras. Se escucha shhh. ALEXEI ¡Nicolai! ¡Dame tu encendedor! NICOLAI ¡Pero...! ALEXEI ¡Dámelo! ¡Han deshonrado a nuestra familia! Nicolai le alcanza un Zippo. Alexei lo prende y lo arroja al sobretodo, que se enciende de repente. ALEXEI ¡Vamos! Los polacos se acercan a Alexei, Domitila trata de detenerlo. DOMITILA ¡Esperen, no se vayan! ¡Alexei mi asma! Alexei se quita de encima a Domitila y se va con los otros dos polacos. Domitila queda expuesta al humo del sobretodo. El guardia de seguridad se acerca por las escaleras. PAULA (a Leo y Martín) ¡¿Vieron lo que hicieron?! SEGURIDAD ¿Quién hizo esto? Todo el cine, incluyendo a los sordomudos, que están en unas butacas cercanas, señala a Leo, Martín, Paula y Domitila. Aldana continúa sentada en su asiento. PAULA (al de Seguridad) No tengo idea de lo que están diciendo. (enojada, a los sordomudos) Gracias, ¿eh? ¡Malagradecidos! Los sordomudos empiezan a gesticular. SEGURIDAD Se los advertí. PAULA (señalando el fuego) ¿Qué? ¿Por esto...? Déjeme decirle algo... Si echan a cada persona que inicia un fuego en una sala de cine, bueno, es obvio, no van a haber más personas que prendan fuegos... pero, ¿a qué precio? SEGURIDAD ¡Vamos, afuera! Los sordomudos siguen gesticulando. PAULA (a los sordomudos) ¡Shhhhhhh! El guardia le pone una mano en la espalda y con la otra le indica la salida. PAULA Un momento. Yo soy la hija de un diputado. SEGURIDAD ¿Ah, sí?, ¿De cuál? PAULA De ese alto, de bigotes... No, no, es verdad. Espere... SEGURIDAD ¡Afuera! Martin va a buscar a Aldana. El guardia se lleva a Leo, Paula y Domitila. Más abajo Martín sube las escaleras con Aldana. ALDANA Mirá, Martín, lo nuestro no va a funcionar. Creo que vos y tus amigos se perdieron el tren de la madurez y... Martín la mira asombrado. En las primeras filas del cine, junto a las escaleras, se encuentra una MUJER(33) que gira la cabeza abruptamente hacia Aldana y Martín. MUJER ¡Aldana! ¿Hija qué hacés acá? ¿Y a usted no le da vergüenza salir con una chica de 10 años? MARTIN Disculpe, creí que tenía 27. ¿O una niña de 10 sabría que...? Martín le dice algo a la mujer al oído, esta abre bien los ojos y asiente con la cabeza. EXT. CINE. NOCHE Paula, Martín, Leo y Domitila comienzan a caminar. Domitila se detiene y respira profundamente varias veces. DOMITILA Esperen... Un momento... ¡Estoy curada! Creo que fue el humo del sobretodo, que de alguna forma combinó sus compuestos químicos con el orín, creando una solución que curó mi asma. Sí, casi demasiado fácil... ¡Esperen! Domitila trota unos metros y se va caminando con los demás. PAULA ¿Y conseguiste el vaso de Romagnolli para tu sobrino? LEO Ni preguntes. MARTIN ¿Por qué no le regalás unos calzoncillos nazis? Es impresionante lo que abrigan. LEO No es mala idea. ¿No piensan que necesito una nueva voz? Todos lo miran extrañados LEO Una voz... o un acento. Los cuatro se alejan caminando. Leo va probando diferentes voces y acentos. INT. HABITACIÓN. NOCHE Leo está frente a su SOBRINO(12), con los calzoncillos nazis extendidos. LEO ¡Feliz cumpleaños! SOBRINO Es un calzoncillo. LEO Corrección, es un excelente calzoncillo. SOBRINO Está usado. LEO Intenté conseguir uno nuevo, pero ya no había. SOBRINO Tiene el símbolo nazi. LEO Eh... es de Romagnolli. SOBRINO Tío, ¿sos gay?