Mi Oscuro, Satánico Amor

—Magistra Peggy Nadramia—

Veo una puerta, y quiero pintarla de negro. Soy de las cosas que en la noche hace "bump!" Nací Satanista. No puedes clavarme a ninguna pared; de hecho, arrancaría ésos clavos y te los arrojaría de vuelta. Dime cuán negativa soy, dime cuán llena de odio estoy. No sólo eres estúpido —estás equivocado.

Drácula amaba a sus novias. El Dr. Frankestein amaba a su criatura. Mi amor satánico arde ferozmente; es perfecto y sin compromisos.

Primera y necesariamente, me amo a mí misma. Soy mi propio Dios, después de todo, y no tengo ningún Dios ante mí. Soy lo más importante en mi mente. Siempre me traigo flores. Algunas veces me doy cuenta que pude haber hecho algo mejor; a veces cometo errores. Es maravilloso cómo aprendo de éstas cosas; es excitante tener una oportunidad para ser un mejor Yo. Aún cuando me niego algo a mí mismo, sin gratificación alguna, siempre es para disfrutar de algo aún más satisfactorio y que valga más la pena. Por esto odio de forma tan pura e irrevocablemente cualquier cosa que sea un desperdico de mi tiempo, energía y atención.

Junto conMigo, amo a Aquel Que No Es Yo, es decir, mi esposo. El es, en cierta forma, la conciencia en la cual veo un maravilloso reflejo de mi propio Dios, de mí misma. Su amor por mí lo califica con el mejor de los gustos y la mejor capacidad para discernir, después de todo; obviamente sabe qué es lo mejor para él. Mis células responden a sus feromonas, y estar alrededor de él, me proporciona un elevado sentimiento de felicidad y bienestar. La forma de su rostro es la visión más querida para mí en éste mundo. El es mi mentor, mi maestro, mi mejor amigo. He puesto mi entera confianza en él, y la acepta sólo como puede hacerlo un hombre de verdad. Sus esperanzas, sueños, metas son también los míos, y por esto odio cualquier cosa que lo angustie o se interponga en su camino. Este odio, es también negro y puro, y como la pólvora, puede arder tan brillante y ferozmente como mi amor.

Después, amo a mi tribu, mis allegados, aquellos que son como yo. Pueden ser amigos o familia, pero en mi corazón son mi tribu, y la Llama Negra arde en su interior. Iluminan mis días y me alegran con sus logros y sus éxitos; hacen del mundo un lugar más interesante para vivir, y sólo un Satanista sabe lo que vale ése don. A veces están lo suficientemente cerca para compartir calor, o alimento, o simplemente compañía; a veces están lejos, con su voz en la línea telefónica, o sus palabras sobre una hoja de papel. Pero siempre están aquí, parte de mí, mi gente. No puedo sentir indiferencia hacia los que afligen a mi tribu. Aquel que los ataca Me ataca; el que pone obstáculos en su camino se gana mi ira, mi enemistad, mi odio.

Como una Satanista por naturaleza, estoy felizmente libre del prejuicio Judeo-Cristiano-Islámico contra los animales no-hu- manos y así es como nunca he dudado que lo que siento y he sentido por mis mascotas es pura y simplemenete amor. Las amo más de lo que amo a muchas personas; valoro sus vidas mucho más. La Llama Oscura de Satan arde oscura y suave en los animales, en su forma más oscura y pura. Me erizo y estremezco ante las leyes que otorgan a niños destructivos, indeseados y horribles más derechos que los que tiene mi perra. Ella es mi propiedad, y sólo yo puedo protegerla como tal. Un producto de miles de generaciones de procrear para domesticarlos, para compatibilidad con los humanos, no está un pelo alejada de su instinto salvaje. Así como aprecio su vida, igualmente desencadeno mi odio en aquellos que sean crueles con ella. Les pelo mis colmillos.

Amo todo lo que me pertenezca, todas mis cosas. Amo mis libros, mi música, mi vajilla china, my cafetera, mi impermeable, mi vieja y suave blusa verde. Odio a cualquiera que robe, destruya o desordene mis cosas, ¿por qué no habría de hacerlo? ¿Qué valor podría darle alguien, que excediera el que le tengo a mi mug, a mi perfecta bolsa de cuero?

En contingencia con todo esto, amo al mundo. Es tan bello, un lugar perfecto para mi Dios, es decir, Yo. Amo las montañas, el mar, los acres de árboles sin una sola casa, la hileras de casas antiguas y encantadoras, los museos, la niebla, mi delicioso alimento, las tardes apacibles, las noches estrelladas. Si tan sólo no hubieran todos éstos bastardos anti-vida que quieren joderlo todo, que se odian tanto a sí mismos que tienen que destruir la fuente de su propia sustancia. Los odio. Sólo en las profundidades de la Llama Negra en mi corazón se puede saber cuánto los odio y lo que le han hecho al mundo, estos quemadores de libros, éstos abusadores de niños, ésta gente que, como Charlie dijo, matan cosas que son mejores que ellos. Cuando preguntan por qué odiamos a los Cristianos, ¿podrían entender la respuesta a menos que amen como amamos, amar con éste oscuro y Satánico amor de la vida y del ser?

©1996 Peggy Nadramia
©1998 Traducción y puesta en formato HTML por Tezcat,
Reproducido con permiso del Autor.



La versión original de Mi Oscuro, Satánico Amor puede hallarse en:

Sitio Oficial de la Church of Satan


| intro | satanismo? | archivos | scriptorivm | grimoires |
| cámara ritual | tentatorivm | taverna | forvm | portales |
| templo de tezcat |

Hosted by www.Geocities.ws

1