-
Sólido. Ejemplo: cubo de hielo, los glaciares.
-
Líquido. Ejemplo: agua
-
Gaseoso. Ejemplo: la bruma, la niebla y las nubes.
Puede a su vez presentarse de dos maneras según su
constitución:
-
Pura:
cuando tiene una composición definida y que se mantiene de forma
constante, como el agua por ejemplo.
-
Las sustancias puras se clasifican en
Compuestas, cuando se encuentran formadas
por diferentes tipos de átomos , y que por diferentes medios químicos se
pueden obtener otras más simples. Siguiendo el ejemplo del agua, se
obtiene Hidrógeno y Oxígeno.
-
También encontramos las sustancias
Simples o
Elementos, son aquellas que están formadas por el mismo tipo de
átomos, y que por medios químicos no se pueden obtener sustancias más
sencillas. Por ejemplo el Hidrógeno y el oro.
-
Mezcla: es
el resultado de la unión de dos o más sustancias puras. Por ejemplo el
aire, que se encuentra formado de una gran variedad de gases.
Los Minerales y el crecimiento de las plantas
Entre los minerales que se encuentran en la naturaleza, hay un grupo que las
plantas necesitan consumir en grandes cantidades, ellos constituyen
los nutrientes esenciales para su óptimo, son:
el Carbono (C), el Oxígeno (O), el Hidrógeno (H), el Nitrógeno (N), el
Azufre (S), el Fósforo (P), el Potasio (K), el Calcio (Ca), el Magnesio (Mg)
y el Hierro (Fe). Existe otro grupo de menor consumo pero
que no dejan de ser necesarios como el Manganeso (Mg), el Boro (B), el Cinc
(Zn), el Cobre (Cu), el Cloro (Cl), el Sodio (Na), el Selenio (Se), el
Cobalto (Co), el Niquel (Ni) y el Silicio (Si).
Las
plantas obtienen estos minerales en el sustrato, a través de sus raíces
mediante absorción. Cuando el sustrato carece o es insuficiente la provisión
de nutrientes la planta mostrará signos de ello, como la caída de hojas en
forma inusual, hojas amarillentas, frutos que no progresan, etc. |