NÚMERO II (3)

  

   Esta fotografía data del 10 de abril de 1070 y fue publicada por la "Documentation Catholique", del 3 de mayo, nº 1962. Junto a Pablo VI aparecen de izquierda a derecha: Georges Jasper, Sephard, Konneth, Smith y Max Thurian, representantes respectivamente del Consejo Ecuménico de Iglesias Cismáticas, de los anglicanos, de los luteranos, y de Taizé. Todos ellos colaboraron en la elaboración del "Novus Ordo" de la misa, promulgado por Pablo VI para la Iglesia Católica.

 

 

   ARZOBISPO ITALIANO APOYA A MONS. LEFEBVRE  

   Viva impresión ha causado en los medios católicos argentinos la noticia publicada por la revista "Roma" en su número 49, por la que se informa que un arzobispo italiano —Monseñor Arrigo Pintonello— ha expresado abiertamente su apoyo a Monseñor Marcel Lefebvre: "Habéis sido el primer obispo que se atrevió a levantar la voz sobre una situación religiosa insostenible".

                                          (Conforme cita de "L'Aurore", de París, del 12 de junio de 1977)

 

UNA DE LAS MÁS DIFUNDIDAS DEVOCIONES DEL PUEBLO CRISTIANO

SANTA TERESITA DEL NIÑO JESÚS

   En medio de la terrible perturbación que a todos los católicos nos causa la situación actual de la Iglesia militante, dominadas sus estructuras y ocupadas sus mayores dignidades por hombres que aparecen profesando una fe equívoca o hasta con signos evidentes de apostasía, Recordamos con alegría que el 3 de octubre se celebra la fiesta de Santa Teresita del Niño Jesús (1873-1897), cuya devoción se ha hecho una de las limas populares en toda la cristiandad.

   Santa Teresita, pequeña religiosa carmelita de Lisieux, que a sí misma gustaba llamarse "pequeña", consumió su corta vida terrena en la práctica de las virtudes más arduas, la caridad y la humildad; y en la profesión del amor más dulce, el de la Santísima Virgen María.

   "No espero en la tierra recompensa alguna. Lo hago todo por Dios. De esta manera nada puedo perder, y me hallo siempre bien pagada del trabajo que me tomó en ayudar al prójimo". Obras Completas, página 1091. Editorial El Monte Carmelo, Burgos 1964.

   Para comprender el concepto que ella poseía de la humildad, basta transcribir la carta que le dirigió a Sor Genoveva el 7 de junio de 1897, meses antes de morir:

   "Hermanita muy amada: no busquemos nunca lo que parece grande a los ojos de las criaturas. Salomón, el rey más sabio que hubo jamás en la tierra, habiendo considerado los diversos trabajos que ocupan a los hombres debajo del sol: la pintura, la escultura, todas las artes, comprendió que todas esas cosas estaban sujetas al deseo, y exclamó que no son más que «vanidad y aflicción del espíritu». La única cosa que no es deseada es el último lugar; ese último lugar es lo único que no es vanidad ni aflicción del espíritu.

   "Sin embargo «el camino del hombre no está en su poder», y a veces comprobamos que estamos deseando lo que brilla. Coloquémonos entonces humildemente entre los imperfectos, estimémonos como almas pequeñas a las que Dios ha de sostener a cada instante. Cuando El nos ve bien convencidas de nuestra nada, nos tiende su mano; si queremos sin embargo, tratar de hacer algo grande aunque sea bajo pretexto de celo, Jesús nos deja solas. «Pero desde que yo dije: Mi pie ha vacilado, vuestra misericordia, Señor, me confortó» (Salmo XCIII). Sí, basta humillarse, soportar con dulzura las propias imperfecciones: he ahí la verdadera santidad. Cójamenos de la mano, hermanita querida, y corramos al último lugar: nadie nos lo disputará..." (ídem, páginas 905/6).

   Y en cuanto al amor de Santa Teresita por la Santísima Virgen, sin necesidad de comentarios, reproducimos las líneas que escribió, pocos días antes de morir, al dorso de una imagen de Nuestra Señora de las Victorias:

¡Oh María, si yo fuera la Reina

del Cielo y vos fueseis Teresa,

quisiera ser Teresa a fin de que vos

fueseis la Reina del Cielo!"

(ídem, página 943)

 

 

 

CULTO A BUDA EN UNA IGLESIA CATÓLICA  

   El "Supplement-Voltigeur", nº 48, de "Itineraires", del 15 de mayo de 1977, nos informa de un hecho sorprendente del cual no hemos tenido noticia a través de los medios de información argentinos.

   El lunes 7 de marzo de 1977, en la iglesia Saint-Germain de Rennes, la más antigua y bella de su diócesis, con pleno conocimiento de la autoridad eclesiástica, se llevó a cabo una ceremonia de culto a Buda. El acto estuvo a cargo de seis monjes budistas revestidos con sus ornamentos y armados de sus instrumentos (gong, trompas, tambores, etc.).

   La estatua de Buda fue colocada en el mismo corazón del templo, en lugar del crucifijo de Nuestro Señor Jesucristo... Posteriormente, el 21 de marzo, el cronista religioso Jean Bourdarias escribió en "Le Figaro" que en Rennes, el vicario general, Monseñor Riopel, precisó que no hubo una celebración budista sino un concierto de música religiosa budista organizado por la "Maison de la Culture". Los comentarios huelgan.

 

   Esta fotografía fue publicada por "Sounds of Truth and Tradition" (TNT) — Winter 1975-76 Nueva York. El hecho que registra ocurrió en la iglesia "Holy Trinity", en Washington, durante la "m i s a" dominical celebrada por el Padre James M. English, S. J. — El celebrante, sus acólitos y todos los asistentes observan una demostración de equilibrismo que, en carácter de "ministro extraordinario", realiza frente al altar una joven mujer semi-vestida y sus asistentes ataviados como habitualmente lo hacen en sus demostraciones circenses.

 

   Gran repercusión ha tenido la disertación pronunciada por el Rvdo. Padre Raúl Sánchez Abelenda en el local de "Patria Grande", Entre Ríos 181, el pasado 10 de setiembre.

   El Padre Sánchez Abelenda, de encomiable trayectoria en los medios universitarios, expuso con notable precisión el tema de la evolución de la herejía modernista desde sus orígenes hasta Pablo VI.

 
 

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"FIDELIDAD A LA SANTA IGLESIA

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