|
Siendo párroco de Bucaramanga, murió asesinado a
los 78 años, a la media noche del 31 de 0ctubre de 1834, por los
hermanos Higinio y José Ignacio Bretón, el primero de ellos
condenado a la pena capital y el segundo a 10 años de presidio
en la ciudad de Cartagena.
Este par de ladrones penetraron al dormitorio del presbítero donde
descansaba, pretendiendo encontrar las arcas repletas de oro, pero como
no encontraron nada, enfurecidos lo asesinaron a cuchillo.
Esta casa fue construida por los esclavos de los mineros. Las paredes
son de tapia pisada (tierra cernizada mezclada con sangre de res y melaza
de panela) y bastante gruesas; el techo de los dos pisos es de madera
y cañabrava amarrados con fiquetones; retorcían el fique
sin procesar, bejucos de montaña y tiras de cuero de res; tiene
dos balcones, uno por dentro y otro por fuera, hacia la calle o plaza
principal, miradores tallados en madera de óptima calidad; en la
planta baja anterior hay dos piezas en las cuales funcionaban las oficinas
españolas; mas adentro dos piezas donde vivían los esclavos;
mas hacia adentro otra pieza donde se presume eran encarcelados y azotados
los esclavos y finalmente una caballeriza. En la planta superior vivían
las autoridades españolas; el piso es totalmente de ladrillo cocido.
Ese lugar tiene mucho valor histórico; fue la sede del Gobierno
Español; por lo tanto a este sitio llegaba el oro que los indios
y esclavos extraían del Río de Oro, lo procesaban en barras,
para enviarlo a España. El Libertador, SIMÓN BOLÍVAR
se alojó en esta casa por varios días de paso para Bucaramanga
y Ocaña.
|
|