JUAN P. GARRAHAM,
PEDIATRA DE LA MATERNIDAD
Por el Dr. Rodio Raíces
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Juan Pedro Garraham nació el
14 de septiembre de 1893.
Se recibió de médico
en 1915, con Diploma de Honor, habiendo cursado estudios en la Facultad
de Ciencia Médicas de la Universidad de Buenos Aires.
A continuación ingresó
en el Servicio de la Cátedra de Pediatría del profesor Centeno,
formulando la adscripción a la misma.
A partir de 1919 fue sucesivamente Docente Libre y Profesor
Extraordinario.
De 1921 a 1928 actuó como pediatra de la Maternidad
del Hospital Rivadavia cuyo jefe era, desde 1918, el eminente Profesor
Alberto Peralta Ramos.
Desde 1928 hasta 1942 estuvo como
Jefe del Departamento de Puericultura del nuevo Instituto de Maternidad,
del que hizo un servicio modelo para la atención de recién
nacidos, prematuros y lactantes, que Garraham planificando y realizándolo
todo con maestría y cariño. Por este suceso, inédito
hasta entonces en nuestro país, se constituyó en el fundador
o padre de la Neonatología argentina. Todo esto bajo la tutela de
la Sociedad de Beneficencia de la Capital, entidad que en 1930 la separación
de la Maternidad, del Hospital, dándole vida autónoma.
Además fue un diligente instructor de las primeras
Visitadoras de Higiene recibidas en la Argentina, y un esforzado médico
escolar.
Luego de la trayectoria consignada, al Dr. Garraham se
lo nombró Profesor Titular de Pediatría, en 1942, pasando
a desempeñarse como Director del Instituto de Pediatría y
Puericultura de la Facultad de Medicina, situado en el Hospital de Clínicas,
debiendo abandonar el Hospital Rivadavia donde se había afincado
durante más de veinte años y donde había formado tantísimas
generaciones de “médicos de Niños”.
Y como si este honor fuera poco, se lo hizo miembro de
número de la Academia Nacional de Medicina, ocupando el sillón
Nº 35, desde el 11 de mayo de 1943.
También fue presidente de la Sección Argentina
de la “American Academy of Pediatrics de Chucago, y presidente de la Sociedad
Argentina de Pediatría, de la Sociedad de Higiene y de la Sociedad
de Neonatología. Así mismo se le dio el diploma de miembro
honorario de la Facultad de Medicina de la Universidad de Santiago de Chile,
de la Sociedad de Puericultura de Buenos Aires, de la Sociedad Italiana
de Neonatología y de diversas Sociedades de Pediatría como
las de Madrid, Uruguay, Chile, Brasil, Perú, Colombia, Venezuela,
Cuba y México, figurando como miembro correspondiente la Sociedad
de Pediatría de París
Además, fue miembro y relator oficial de numerosos
congresos y reuniones científicas nacionales y del extranjero.
Por añadidura varios de sus numerosos artículos
fueron publicados tanto en revistas de Sudamérica, Norteamérica
y Europa, contribuyendo a su mayor fama.
Los libros editados constituyeron otros galardones importantes
de su vida: Tuberculosis, Raquitismo, Vitamina K, Historia de la
Cátedra, Lecciones de Pediatría, y Acrodinia. Pero la obra
más destacada ha sido –sin duda alguna– su Medicina Infantil, que
alcanzó una tirada total de más de treinta y cinco mil ejemplares,
siendo el texto obligado donde estudiamos tantos estudiantes argentinos
y de países de habla castellana.
Murió en Buenos Aires, el 3 de abril de 1965.
La gloria alcanzada por Garraham no sólo deriva de su actuación de más de veinte años en el Hospital Rivadavia, donde creó una nueva especialidad, sino de su vocación docente y su hombría de bien, esa innata cualidad que no muchos han podido ostentar .
Hogaño, un hospital de Pediatría de nuestra Ciudad lleva - orgulloso - su nombre, y una copia de su retrato fotográfico adorna el Salón de Notables del Museo Histórico del Hospital Rivadavia, cuyo interior alberga otro más chico, hecho a lápiz del natural por Marie Elizabeth WREDE.=