Reportero: Gerardo L�pez Moya

Uno de los fen�menos musicales m�s intensos, inexplicables ante la falta de contexto, son los conciertos de Arturo Meza. Viaje por el tiempo dando saltos para atr�s hasta la Edad Media y luego a la ciencia ficci�n m�stica. La rabiosa denuncia ante la violencia silenciosa e impune, reflexiones en torno a la mexicanidad ind�gena, la condici�n humana, imperfecta pero con anhelos y esperanzas. Social-existencial, simple-abstracto, coloquial-erudito, religioso-blasfemo.
En 18 discos y sus multiplicados conciertos ha surcado l�neas entre voz y m�sica a o�dos y corazones ajenos de ida y vuelta y de mil formas. Sus primeras canciones grabadas fueron poemas de Nezahualc�yotl, pero ya hab�a sido miembro de decibel, fundador de Krol Voldaperet, colega de Jorge Reyes.
Su vocaci�n netamente musical, ambiciosa hasta lo sinf�nico, paso por SUITE KORADI (disco de los 70`s que se grab� con el primer sinte que llego a M�xico), un r�quiem, y a�n espera orquesta para ser grabado el �Circulo de fuego negro�.
�El g�nero de canci�n all� por el 75 me parec�a menor. Yo escrib�a y hac�a m�sica, pero no hac�a canciones, tampoco me parec�a importante lo que iba a yo a decir. Fue hasta el 84 que grab� el SIN TITULO, que contiene �No me dejes caer�, �Pandilla de carniceros�, �Debe haber un lugar�, digamos cl�sicos underground, que sirvieron para que la maquinaria arrancara y no se detuviera�.
La independencia, soberan�a sobre la propia voluntad, ha generado frutos tan dis�miles como una novela y un libro de cuentos de aliento rural- m�stico- m�gico, m�sica para cuentos infantiles ind�genas le�dos por Claudio Brook, un disco musicalizado a poetas regiomontanos (Jos� Eugenio S�nchez, Arnulfo Vigil, Margarito Cuellar, ...), hasta el profundo negro del doble A LA SINIESTRA DEL PADRE, el inusitado y reciente regreso al rock de blues grosero N�MESIS, un disco homenaje por el centenario de Jorge Luis Borges, y cl�sicos tan representativos como �70 centavos� y �Ayunando entre las ruinas�.
La historia de 25 a�os que apunta a la leyenda tiene or�genes insospechados. �Mi primer grupo fue norte�o. Yo ten�a 12 a�os y mi maestro de guitarra, Manuel Ceja, un se�or ya grande, tocaba el acorde�n y cantaba; el Cuachangas, un alba�il alcoh�lico muy buena gente, tocaba el guitarr�n, y yo la guitarra. Mi primer concierto fue en una cantina, pero como no pod�a entrar por ser menor de edad, toc�bamos luego afuera. Era m�sica de Los Alegres de Ter�n, Los Broncos de Reynosa, aprend� mucho de la gente mayor. Dur� con ellos dos a�os, ellos le siguieron�.
Meza deja a su padre m�dico y su mam� enfermera en Tocumbo, Michoac�n, y parte a M�xico a estudiar medicina, pero se le �atraves� la literatura� y se dedica a escribir algo que �l llama �sensaciones en vez de poes�a�.
Arriba del escenario se transforma en sacerdote en trance: invoca sue�os siderales, pasajes g�ticos, profec�as. La ternura del lenguaje de nuestros indios, se detiene en la gresca urbana, matazones y una violaci�n.
Regresa al amor como �ltimo primer refugio de los desamparados hombres de antes y de ahora. La poes�a y la guitarra. La gre�a y los jeans, las arrugas y los ojos.
Son 25 a�os de bregar a contracorriente. Desde que asisti� a las grabaciones del primer disco de Chac Mool, se decidi� a no tratar jam�s con esos entes llamados productores y disqueras, y se decidi� a hacerlo solo. El �ltimo de los mohicanos que no entrar� jam�s a la radio, r�cord poco reconocido de independencia y que carga con ventura esa cruz de rebelde adolescente. Que al diablo llama diablo y a la hipocres�a, Iglesia, pero no le teme a las trompetas ni a venerar a la Virgen Mar�a.


Del amor hablan los valientes.

Desde hace 12 a�os, al ritual acuden los �ltimos anarquistas, automarginales, extravagantes, radicales heroicos. De variad�sima condici�n y edades, igual y se conmueven m�s que las viejitas del Club del Tango...A esa horda de idealistas gritones que siguen fielmente en cada tocada a Arturo Meza, que quieren y exigen un mundo mejor, les puede interesar esta Summa teor�tica del juglar sabio y loco.

Lengua: En tu m�sica tratas temas poco convencionales, como la hiperviolencia; conceptos poco usuales, como el amor, el coraz�n, el alma. Ambos te asustan, parecen pasados de moda. Este lenguaje no es exclusivo de ascetas hind�es o punks, pero a los medios y a la m�sica (comercial) le son m�s atractivos la sensualizaci�n, el placer, verse bien...�Tu propuesta se qued� en los 60`s (risas), te quedaste solo con esos sue�os de amor y paz...?

Arturo: Lo que pasa es que el amor puede ser muy contundente, es para valientes, no para cobardes ni mediocres. Si hablo de este mundo global, de un sistema que es un fracaso, viene de alguien que quiere un mundo amoroso. Decir que los grandes emporios econ�micos han generado comunidades de grandes profesionistas, obreros calificados y no tan calificados, escoria humana, que han generado un sistema bastardo de cosmos, el dinero, es tambi�n por amor.
Para este siglo � no nos quedamos en el pasado � estamos proponiendo un nuevo discurso a partir de nuestras acciones peque�as y humanas. Ya hemos visto que la uniformidad es un fracaso y quienes detentan el poder nos quieren tener uniformados en todos los niveles, el pol�tico, econ�mico, religioso. Las m�s grandes pugnas son por eso, porque quieren que estemos uniformados. Pero no se han dado cuenta de la diversidad: todos somos diversos, diferentes c�mulos, diferentes islas, y de esa diversidad puede nacer una verdadera unidad. Que nos acepten a los no uniformados, de eso se trata.

Lengua: Dices que por un lado habr�a que ser m�s radical: no solo hablar de amor, fraternidad, solidaridad, sino meter estos conceptos a nuestras vidas personales; y por otro lado respetar la diversidad...

Arturo: S�, que nos acepten la propuesta. Un acto uniforme es toda la campa�a pol�tica que termin� y tragarnos todos eso, cuando en el fondo pudi�ramos nosotros quiz� proponer un M�xico-Naci�n, trabajar de manera aislada. Por ejemplo, podemos proponer: en este sector de Monterrey o Nuevo Le�n vamos a crear casas que se van a llamar casas Nuevo Le�n, o casas Zapata o Jesucristo, o donde va a haber un peque�o modelo de gobierno, que nadie nos propone.
Todos hablan de que nos van a venir a ayudar, pero �cu�ndo has visto que un partido pol�tico promueva una casa de abasto, un hospital para indigentes o una casa hogar, comedores populares? Nadie lo tiene en sus planes, es s�lo una guerra de papeleo. Y ellos quieren meternos a esa corriente uniforme. Podr�amos hacer casas Zapata, edificios gobierno que s�lo se usan a determinado horario, donde podr�amos albergar a tanta gente; gente que puede cocinar...industrias autogestivas de productos diversos.
Hay mucho campo sin cultivar y est�n ah� los presos condenados a volverse homosexuales y peores criminales en lugar de hacerlos entes productivos. Nadie tiene una propuesta de ese tipo.
Yo tengo esa propuesta y no soy miembro de ning�n partido pol�tico ni ando levantando banderas de la uniformidad. Yo soy un disidente, como todos nosotros, pero que no tenemos alguien que...o s� tenemos, ah� est� el levantamiento zapatista en el sureste, pero se tratar�a de que todos los partidos propongan un modelo de pueblo, ciudad. Saber qu� es lo que quieren, y c�mo lo van a lograr.

Lengua: la sensualidad, aprehender el mundo a trav�s de los sentidos, el placer, no est� peleado con ser bueno, solidario, con el amor a los semejantes. �Qu� crees que pueden hacer los j�venes, para ser m�s espec�fico y demag�gico, en medio de tanta informaci�n y de esta tendencia hacia lo inmediato y la cultura del �tener�?, �a poco habr�a que ir m�s a la Iglesia?

Arturo: Yo creo que vivir tu tiempo. Si tu has elegido ese camino, del gozo, del placer, ll�valo al final, lo importante es ser uno. Yo eleg� escribir, hacer m�sica y he sido muy dichoso haciendo eso. Creo que ahora mucha gente est� encontrando su lugar, algunos muy tard�amente. Hace poco conoc� a un tipo que se dedicaba en Tepoztl�n a ser publicista y se fue a hacer telares y me lo encuentro de marcharte en el tianguis; est� feliz, dej� la etiqueta, las grandes entrevistas.
Cada quien tiene que encontrar su sitio. Algunos andan ac� arriba en la punta del embudo pas�ndosela bien, pero es un camino que nos lleva a conocernos a nosotros mismos. Es doloroso, por que el que se la pasa muy bien, al d�a siguiente tiene una cruda terrible, por la borrachera, por que se qued� sin lana, por que contrajo sida, por que no supo ni con qui�n...e inicia su camino de dolor, y el dolor es un mensajero de depuraci�n, un ascensor hacia la alta espiritualidad, y hacia all� vamos todos.
Que vivan en su tiempo su momento y si eligen transformarse 180 grados, adelante. Yo no tengo la f�rmula, sino que s�lo sean ellos mismos. Y el entorno biogen�tico y el plasma c�smico te ayudar�n a transformarte. Cuando t� decides por voluntad propia qu� quieres hacer, el karma te atiende y fortalece y te da. Es el gran secreto. Mucha gente no cree en eso, pero si quieres ser el gran carpintero, se te da; el vendedor m�s rico, lo eres. Con voluntad y fortaleza.

Lengua: Ha de haber esperanza, definitivamente, al ver a la raza c�mo se prende hasta las l�grimas con este discurso que es m�s sentimiento. Vibran con tu m�sica y tus ideas...

Arturo: Lo que dec�as, �qu� hacer con esto? A m� se me ocurri� en una ocasi�n all� en la Ciudad de M�xico hacer un d�a de campo. Est�bamos en un concierto en el Teatro Ju�rez y les propuse que por qu� no �bamos a la semana siguiente todos al Museo de Antropolog�a. Es decir, bajarme del escenario y habitar un mismo piso, y fue maravilloso. Esa reuni�n dur� dos meses, seguimos haciendo carne asada; despu�s yo me desafan� por otros compromisos. Pero se pueden hacer cosas, romper la barrera y convivir, viajar juntos; y no s�lo las canciones: hermanar cosas, fusionar las carnes y las esperanzas, las posibilidades de la amistad, m�s que vivir as� como en la onda virtual: escuchas un grupo en tu casa pero es virtual, no es tu cuate. No es tu compa... Yo les dec�a: �aqu� estamos juntos en este concierto, pero cuando se acaba todos se dispersan ...y a m� me interesa que se conozcan�. Y ha pasado: he sido causante de muchas uniones, gente que se ha casado por mi m�sica, para m� eso es un gran logro, realmente he cumplido mi misi�n (entre risas), peque�a pero interesante. Religi�n es uni�n, yoga es uni�n; soy un yogui, un religioso, por que uno mueve corazones a trav�s del canto. La gente que viene a un concierto son perlas aisladas que mi canto intenta engarzar, y que luego cada uno se lleve ese collar para que lo fortalezca, para que cuando se vean en la calle sean como hermanos y amigos y no como enemigos.

Lengua: Una �ltima pregunta tipo Televisa: �qu� onda con los aplausos, que la raza grite tus canciones?

Arturo: El aplauso es como la sonrisa de un ni�o: totalmente devastadora y una manifestaci�n de alegr�a, y yo la reflejo en la siguiente rola que voy a cantar. O sea, me dan algo y yo s�lo la aviento de espejo. No me quedo con nada, para no engordar y padecer despu�s egos inflados.