Condensado  del artículo

Piramidiota se presenta a concurso empresarial *

del autor Umberto Nobile, en elescepticodigital, 2002

(http://digital.el-esceptico.org/index.php)

 

 

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Los piramidiotas

 

 

Los egiptólogos utilizan el término piramidiota para referirse a esos personajes autodenominados piramidólogos, elucubradores dedicados a fantasear sobre los misterios de las pirámides. Algunos de estos individuos afirman que la forma geométrica piramidal genera o acumula una suerte de energías sutiles muy beneficiosas para cualquier organismo que se sitúe bajo su influjo. Pues bien, uno de estos individuos, Gabriel Silva Vargas, se ha presentado a un concurso de TV que forma parte del programa Mi Cartera (se emite los sábados en Tele 5 España), adornado de sus extravagantes teorías.

 

El proyecto del Sr. Vargas recibe el pintoresco nombre de Piramicasa (www.piramicasa.com)**. El señor Vargas pretende construir casas piramidales, cuya especial forma, siempre según sus teorías, resulta beneficiosa para sus habitantes en un sentido llamémosle paranormal. La verdad, lisa y llanamente, es que el mencionado Silva Vargas pretende vender casas mágicas, así tal cual. Este señor Vargas no es un arquitecto excéntrico ni un iluminado al uso. ¡Que va! Es algo mucho más desagradable y peligroso.

 

Aquellos que en su día frecuentaron una lista de Internet llamada Biohazard (lista de correo especializada en temas paranormales) sabrán perfectamente que se trata del mismo Gabriel Vargas que en dicha lista afirmaba que la tierra es hueca y que los ovnis provienen de su interior; que están tripulados por intraterrestres arios y nazis... que los negros son de una especie diferente a los blancos; de hecho vienen de Júpiter (¿o era Venus?) y que las relaciones interraciales son nocivas porque degeneran las razas.   El señor Vargas se caracteriza por su feroz antisemitismo y su racismo declarado (el se ha definido a menudo como racista). Sólo  hay que hojear algunos de los mensajes que emite en su lista de correo.

 

"Con la inmigración brutalmente forzada de Judíos y Negros, las razas se vieron mezcladas de modo muy conveniente al mercado. Esta "diversidad revuelta" produjo toda clase de pestes pandémicas y crónicas, que alimentaron el comercio de la medicina y la farmacopea alopática. Aparecieron los tipos humanos llamados Zambos: mezcla de Cobrizo-Amarillos (aimaráes y coyas), con Negro; y los Mulatos: mezcla de Negro y Blanco o Negro y Criollo (el Criollo es mezcla de Cobrizo y Blanco). Los hebreos sólo se mezclan en cuidadas proporciones con Blancos, pues la incompatibilidad genética con otras razas se hace muy evidente en la primera o segunda generación.  La raza judia alienta la mestización de todas las demás razas, como quien mezcla vacas para hacerlas más productivas y mansas, pero sus dirigentes son muy cuidadosos de la propia, que originada en clonaciones prehistóricas (leer el Génesis bíblico) necesita de la Aria para realimentarse."

 

¿Espeluznante verdad?


A continuación otro ejemplo:  "...y éste no era el objetivo del III Reich. Ni ganar una guerra como quien gana un partido de fútbol, ni dominar o destruir a la humanidad. El objetivo prioritario era el mejoramiento del Reino Humano mediante la reproducción responsable, es decir, todo lo contrario de lo que hace la civilización del mercado. Y si se produjo la guerra fue por esa oposición de intenciones: Unos que quieren dominar todo imponiendo sus pautas, y Otros que no quieren dejarse dominar...  ¿quién es el verdadero enemigo de todos los pueblos? ¿Los que impusieron el Patrón Oro, o los que optaron por el Patrón Trabajo? ¿Los que alientan el mestizaje irresponsable cuyos efectos vemos hoy mejor que nunca, o los que propusieron la reproducción responsable y el cuidado de las razas?"

 

Se podrá argüir que la catadura moral o la ideología política de un promotor empresarial no tienen porqué afectar a la calidad del proyecto que defiende. Perfectamente. Ocurre sin embargo que el proyecto del señor Vargas, defensor de la pureza racial, es absolutamente fraudulento pues se basa en algo que sencillamente no existe: la tan manida “energía de las pirámides”. Toda la jerigonza pseudocientífica y la verborrea esotérica, que rebosa el proyecto de piramicasa, es un burdo bulo, un engañabobos, destinado a los consumidores de la New Age más tonta, lerda, acrítica y palurda.

 

Resumiendo, Gabriel Silva Vargas, presenta un proyecto de casas piramidales, energéticas y demás, que parte de la tergiversación de la egiptología, con todo el corolario de memeces de rigor. Lo de siempre pero convertido en esta ocasión en macronegocio de la construcción y supuestamente legitimado por el llamado a la voluntad popular desde la tribuna que, en esta ocasión, le ha brindado el programa “Mi Cartera” de Telecinco.

 

 

* http://digital.el-esceptico.org/leer.php?id=560&autor=188&tema=31&bu=gabriel%20silva

 

** Nota del revisor:  en el sitio WEB de Gabriel Silva no es posible encontrar el aval de algún médico de España o institución de ese país, pero sí fotocopias de avales emitidos en diversos centros nacionales de salud de Cuba dando fe de la efectividad general ¿? de las pirámides.