Published in Juventud Técnica 

 Regresar a Rationalis

 

 

Apr 7 2023

8 min read

 

 

Las contradicciones de la llamada medicina bioenergética

 

 

Por Arnaldo González Arias

 

Ante todo, para saber a conciencia de lo que se habla y hacerlo con claridad y conocimiento de causa, es indispensable conocer a qué nos referimos cuando se menciona la “medicina bioenergética”. Sin embargo, una revisión de diversos sitios en la WEB que se dedican a promocionar la tal medicina no aporta mucha información al respecto.

Por ejemplo, un artículo de 2020 firmado por el Dr. César Alberto Medellín Maldonado (1), experto en homeopatía, acupuntura y medicina natural, da la siguiente respuesta. Cito: “La palabra Medicina Bioenergética se está utilizando solo para referirse a las medicinas que no tienen que ver con la Medicina Química, pero al adentrarse en la física cuántica y la química, se reconocerá que la palabra Bioenergética pertenece a la Biología, ya que se refiere a las interacciones de la energía dentro de los seres a nivel atómico molecular celular y orgánico”.

Pero la energía a que se refiere el párrafo anterior no podría ser energía química (es decir, almacenada en los enlaces químicos), pues inmediatamente antes se ha declarado que la Bioenergética no tiene nada que ver con la Medicina Química — que tampoco define — .

Entonces ¿a qué tipo de energía se refiere? Simplemente no dice nada más. En adición, añade una serie de mentiras flagrantes sobre otras terapias no demostradas, cada una mayor que la anterior. Cito: “Todas las medicinas funcionan tratando de restablecer el equilibrio llamado Salud. Sólo se diferencian en el nivel en el cual actúan, por ejemplo, la Homeopatía trabaja a nivel cuántico atómico, la Medicina Química a nivel de reacciones moleculares o la Acupuntura interviene en la circulación del campo energético corpóreo”.

Lo único al parecer razonable en ese párrafo es que la palabra Bioenergética pertenece a la Biología. Pero, en realidad, la bioenergética reconocida por la ciencia se refiere a la “energía obtenida de la biomasa como fuente alternativa a los combustibles fósiles”, siempre a partir de procesos muy bien conocidos. Este no es un tema biológico convencional, sino más bien químico o termodinámico. Existen revistas científicas dedicadas al tema, congresos, etc (2). Así que aquí tampoco logra el Dr. Medellín “tocar la campana”.

Una definición diferente, que tampoco explica nada, aparece en el sitio Dar Salud (3) — donde ni siquiera aparece algún médico responsable de lo publicado —. La definición propuesta dice lo siguiente: “La medicina biológica o bioenergética es una especialidad de la medicina que trata el organismo como un todo; es decir, cuerpo, mente y espíritu, mediante la activación de su propio mecanismo de regulación. Para lograrlo se apoya en diferentes técnicas terapéuticas manuales…etc.” y muestra una foto al efecto (figura 1) y la lista de las “terapias” que ofrece: Electroacupuntura, Moxibustión, Acupuntura, Ventosas, Digitopuntura o Masaje Tuina, Auriculomedicina, Sueroterapia y Biopuntura. Y, desde luego, nada en absoluto acerca de cómo funciona la supuesta activación del mecanismo de regulación.

      Figura 1. Tomada del sitio Dar Salud (ref. 3).

 

En particular, la “terapia” representada en la figura 1 fue desvirtuada completamente en 1998 por vía experimental y los resultados publicados en el Journal of the American Medical Association, la revista médica de más amplia difusión en el mundo (4). El experimento se ideó para verificar las supuestas habilidades perceptivas de los practicantes del reiki japonés (imposición de manos), quizás la terapia energética más divulgada. Se realizaron 280 ensayos, de los cuales acertaron solo 123 (44%), cifra incluso menor que una selección aleatoria. La figura 2 muestra un esquema de la disposición del experimento.

 

Figura 2. Adaptada de la ref. 4.

 

Otro artículo, publicado por la Dra. M. del C. Morales Okata en una revista aparentemente científica, Medisur (5), se las apaña para llenar siete cuartillas sin definir lo que considera medicina bioenergética o presentar un solo resultado de algún ensayo clínico, aunque sí incluye muchas citas de filósofos de la antigüedad y elogios a la medicina tradicional de diversos países, más algunas pinceladas sobre política médica.

Lo más parecido a una definición aparece en el siguiente párrafo: “La bioenergética parte del principio de que todo cuanto existe es conciencia o energía en diversas manifestaciones; considera al ser humano como una unidad de conciencia producto de la interacción de diferentes campos energéticos en los niveles físico, emocional, mental y espiritual, y concibe la enfermedad como consecuencia de la fricción entre estos diferentes niveles de conciencia; uno de sus propósitos es eliminar estas fricciones y permitir el libre flujo de energía en el sistema”. Note que, según esta definición, ¡la sustancia, lo material, no existe!, pues “todo cuanto existe es conciencia o energía”. Tampoco dice nada acerca de cómo se logra en la práctica “eliminar esas fricciones” o cuáles son las energías que deben “fluir libremente”.

Ante la verborrea banal y anticientífica de quienes promueven estas terapias no faltan críticas, tanto en la prensa internacional como en sitios médicos de prestigio. Se pueden consultar en las referencias al final (6, 7 y 8).

Una característica bastante común a todos los artículos y sitios WEB dedicados a estas terapias es que, quizás a propósito, quizás por ignorancia, se entremezclan términos con diferente significado sin hacer distinciones entre la eficacia de unos y otros, aunque la realidad es que las “pruebas” disponibles sobre la validez de las diferentes medicinas alternativas varían mucho para cada opción terapéutica.

Sobre la acupuntura, por ejemplo, hay unos 30 mil artículos en las principales revistas indexadas y 150 revisiones de datos, incluyendo las de la colaboración Cochrane — aunque esto no es evidencia de su eficacia, puesto que la mayoría de las revisiones arrojan resultados negativos —. La quiropraxia y el ayurveda cuentan con 160 ensayos y tres revisiones cada una, pero en el caso de la terapia reiki, los campos magnéticos y las terapias de toque, la ausencia de publicaciones es casi total: 8. (Lo que tampoco es un índice de que no se hayan estudiado; lo más probable es que los resultados no fueran aceptados por no cumplir los requisitos de publicación, por estar sesgados, o posiblemente ni siquiera se enviaron a publicar por no llenar las expectativas de sus promotores). En el caso de las terapias con campos magnéticos estáticos hay infinidad de resultados negativos, muy contundentes, desde hace 200 años o más (9).

Un artículo mucho más reciente (2019), publicado en la Revista Cubana de Salud Pública por un grupo de médicos del Hospital Manuel Fajardo, de Santa Clara (10), provincia de Villa Clara, argumenta en contra de una crítica a la pseudociencia publicada previamente en la misma revista por el Dr. F. Rojas Ochoa (11).

El artículo del Hospital Fajardo maneja una serie de criterios a favor de las terapias alternativas, y considera que “para calificar como pseudocientífico un movimiento se necesita realizar un análisis filosófico inagotable, sobre la base de la perspectiva dialéctica y, emplear como referentes un grupo de conceptos cuestionables en dependencia del contexto en que se analicen”, lo cual es totalmente falso. Para calificar cualquier pseudociencia como tal — en el campo de la medicina o en cualquier otro campo de la ciencia —, basta con la ausencia de pruebas que demuestren sin lugar a dudas lo que afirma quien propone el nuevo resultado. De hecho, este artículo cojea de lo mismo que otras publicaciones similares: no cita un solo ensayo clínico, aleatorizado o no, en apoyo de sus argumentos.

Como hemos dicho en otras ocasiones: presentar la evidencia o carga de prueba sobre una novedad científica (the burden of proof) corresponde a quien la propone, no a quien la critica.

También llama la atención que en muchas ocasiones se trate de justificar la validez de las medicinas alternativas usando argumentos filosóficos, como es el caso de los artículos citados con anterioridad. Los resultados científicos no se validan con filosofías, sino con experimentos y teorías que cumplan las reglas básicas de la investigación científica. En el caso de las ciencias médicas, con ensayos clínicos (y siempre que sea posible, aleatorizados).

En resumen:

  • Fundamento teórico de la medicina bioenergética: No hay. En todo caso, espiritual, según algunos de sus promotores.
  • Evidencia experimental positiva: al parecer, ninguna. Negativas sí las hay, y bien fundamentadas.

De aquí que si nos atenemos a los criterios filosóficos contemporáneos acerca de lo que es la ciencia (y no a los de hace 2000 años), parece ser que para calificar las terapias bioenergéticas el término anticiencia se ajusta mejor que el de pseudociencia (12).

Hay dos aspectos principales de las llamadas terapias bioenergéticas que pueden causar daño, tanto a las personas en particular como a la sociedad en general. El daño a las personas puede ser tanto por vía directa — iatrogenia — como indirecta, al dejar de recibir el paciente alguna terapia de efectividad conocida por atender la terapia no demostrada. El daño a la sociedad — y muy especialmente en un país donde la medicina está completamente socializada — está condicionado por la insistencia de algunos en tratar de reproducir una y otra vez investigaciones que con anterioridad ya han arrojado resultados negativos, en ocasiones desde hace cien años o más. Los resultados negativos nunca se reportan, o a veces se enmascaran como “resultados promisorios”. Y no en pocas ocasiones se concluye que “son necesarias más investigaciones”.

En lugares donde los recursos económicos escasean tal comportamiento es muy censurable, pues causa pérdidas de tiempo, esfuerzos y valiosos recursos, que son de propiedad social y no de quienes organizan las investigaciones.

 

Referencias

1- ¿Sabes lo que es la medicina bioenergética? Conoce los detalles. https://www.topdoctors.com.co/articulos-medicos/medicina-bioenergetica-que-es

2- Bioenergía y otras, www.geocities.ws/rationalis/bioenergias/index.htm

3- Medicina bioenergética. Dar Salud. https://darsaludips.com.co/medicina-bioenergetica/

4- Rosa, L.; Rosa, E.; Sarner, L. & Barrett, S. (1998) A Close Look at Therapeutic Touch. JAMA, 279 (13), 1005–1010.

5- La medicina bioenergética. Integración a la atención primaria de salud. Revista Electrónica de las Ciencias Médicas en Cienfuegos ISSN:1727–897X Medisur 2008; 6(1) Especial CTS. https://medisur.sld.cu/index.php/medisur/article/view/408/6013

6- El timo de la medicina alternativa, https://www.muyinteresante.es/salud/6956.html

7- La verdad sobre los tratamientos de la medicina alternativa, American Cancer Society, https://www.cancer.org/es/noticias-recientes/la-verdad-sobre-los-tratamientos-de-la-medicina-alternativa.html

8- Medicinas alternativas: perpetuación de la ignorancia o utilización de información histórica. Editorial. https://www.redalyc.org/journal/3438/343855203001/html/

9- Apuntes para una historia sobre las terapias alternativas en Cuba. II. Terapias magnéticas y electromagnéticas — Anales de la Academia de Ciencias de Cuba Vol. 3, №2, Año 2013, http://www.geocities.ws/rationalis/magnet-opt/apuntes para una historia/index.htm

10- Revista Cubana de Salud Pública, Vol. 45 | №3 | 2019. Carta al editor. https://revsaludpublica.sld.cu/index.php/spu/article/view/1554/1390

11- Ochoa FR. Contra la pseudociencia y las medicinas con apellidos. Rev Cub Sal Publ [Internet]. 2018;44(2). Acceso: 05/04/2018. Disponible en: http://www.revsaludpublica.sld.cu/index.php/spu/article/view/1245/1047

12- Educación y pseudociencias, El Escéptico, anuario 2021, www.geocities.ws/rationalis/aqui-alla/educacion/Educacion%20y%20pseudociencias/Educacion%20y%20pseudociencias.pdf

 

La Opinión

Pseudociencias

Medicina Bioenergética

Cuba

Terapias Bioenergéticas

 More from Juventud Técnica

Juventud Técnica es una publicación cubana dedicada a la divulgación de temas de ciencia, tecnología y medio ambiente. ¿Qué buscamos? La ciencia para la equidad.

 Juventud Técnica

Mar 9, 2021


Read more from Juventud Técnica

Juventud Técnica

548 Followers

Ciencia para la equidad.