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Fuente  Diario La Tercera, 13-12-2001, Chile.

 

 

Ejercicio ayuda a prevenir síndrome de fatiga crónica

Sebastian Urbina

 

 

            Entre los virus que facilitarían la presentación de este síndrome destaca el de la mononucleosis. Fundamental para estos pacientes es evitar situaciones y personas estresantes, no hacer más de lo que pueden y dedicar su tiempo a actividades placenteras.

 

            Uno de los síndromes de origen desconocido en medicina, es el de fatiga crónica. Innumerables estudios han intentado explicar las causas de este cuadro que se caracteriza por un cansancio intenso de larga evolución, sin que exista debilidad muscular objetiva ni causa física o sicológica aparente. Ahora, investigadores del                    Hospital San Bartolomé de Londres, encabezados por el siquiatra Peter D. White, han demostrado que con un examen de sangre y una evaluación del estado físico se puede predecir quién desarrollará la enfermedad. Los expertos confirmaron además que ciertas infecciones virales -en especial la mononucleosis- pueden                    gatillar el síndrome de fatiga crónica en ciertas personas.

 

            White y su equipo estudiaron a 250 personas que habían tenido ya sea mononucleosis o una infección respitaroria viral del tipo faringitis. El seguimiento duró seis meses después de que la infección había sido diagnosticada. En la ocasión se comprobó que aquellos que habían presentado mononucleosis tenían el doble de                   posibilidades de presentar fatiga crónica.

 

            Para entender por qué algunos pacientes que sufrieron mononucleosis presentaron el mencionado síndrome y otros no, los investigadores les hicieron exámenes de sangre y registraron variables como la velocidad de instalación de la fatiga crónica, el consumo de antibióticos u otros medicamentos y cuántos amigos y confidentes tenía el paciente. Ninguna de estas alternativas parecía jugar un rol relevante. Sólo una variable marcó                    la diferencia: las personas con un bajo nivel de actividad física dentro de los primeros meses siguientes a la infección eran más proclives a presentar el mencionado síndrome. "El estudio también indica que la fatiga crónica después de una mononucleosis podría ser parcialmente prevenida o tratada con un temprano y gradual               retorno a la actividad física", explica el doctor White.

 

            El médico Jorge Mauricio Alamo, reumatólogo de la Clínica Dávila, advierte que "la existencia de este síndrome es discutible. Para algunos existe, mientras que en otros casos uno ve que sus síntomas coinciden con cuadros reumatológicos como la fibromialgia. Aunque se observa con cierta frecuencia la aparición de este                    síndrome después de un cuadro viral". Respecto de las posibles terapias, el doctor Alamo afirma que "hay respuestas variables a los tratamientos. Algunos pacientes pueden andar bien con ejercicio, pero cuando los dolores musculares son agudos pueden empeorar con esta indicación. Lo importante es descartar otras enfermedades como infecciones o tumores para tranquilizar al paciente explicándole que no tiene nada grave. También hay que ver que no existan cuadros sicosomáticos, depresión o estrés". Alteraciones del sueño .

 

            El doctor Ennio Vivaldi, del laboratorio de Fisiología del Sueño de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile ha estudiado este síndrome que, entre otras características, lleva a la persona a tener un sueño que no es reparador.

 

            "Durante sus etapas de sueño profundo estos pacientes presentan una actividad cerebral propia de la vigilia, como es el caso de las ondas alfa. Por eso, aunque hayan dormido despiertan con la sensación de no haber descansado", explica este profesional.

 

            De acuerdo con el especialista, es muy importante que la gente conozca este tipo de patología y comprenda a quiénes la padecen.  "No hay que andar tratando de flojo a quienes se quedan dormidos por esta causa. Incluso, estos pacientes despiertan rabia en sus colegas o incluso en su familia, quienes le critican su poca actividad.                    Esto es tan absurdo como querer que un depresivo ande animado o hacer correr a quien tiene una pierna fracturada. Por esto es importante tratar con respeto a estos pacientes".