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HA'PI o HAPI
Era el dios Nilo, su esposa era Nekhbet. Era representado como un hombre obeso de color azul o verde intensos,
con senos caídos, un cinturón de pescador
y plantas acuáticas sobre la cabeza (lotos para el Alto Nilo, papiros para el
Bajo). Apenas tuvo culto, los egipcios se conformaban con hacer ofrendas para que el
río en su inundación anual alcanzase en nivel
requerido para una buena cosecha.
Se creía que el río Nilo tenía sus cuatro fuentes en algún lugar de las cataratas de Asuán. Brotaba de los abismos y se dividía en dos
ríos, uno que iba hacia Egipto y el otro hacia Nubia.
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HATHOR
Diosa del cielo del amor y de la alegría. Era hija de Râ, y se la hacia madre de Horus.
Se decía que el sol se introducía en su seño cada noche para renacer al día siguiente: Por eso se la representaba a veces como
una vaca (su animal sagrado) o como una mujer con cabeza de vaca y unas grandes trenzas.
Protegía especialmente a las mujeres y todo lo que las concernía. Su benevolencia alcanzaba a vivos y muertos y como señora de
Occidente protegía las necrópolis. Tenía su templo principal en Dendera.
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HEQET o HEKET
Diosa con forma o cabeza de rana, se la adoraba en la ciudad de Her-uret y después es Abidos. Primitivamente se la
asociaba a Khnûm como creador. Simbolizaba el grano en estado embrionario cuando empieza a germinar.
Era una de las diosas que estaba presente cada mañana en el nacimiento del sol y por esto pasó a ser también una protectora de
los nacimientos. Su culto fue importante durante el Periodo de las Pirámides
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HORUS
Dios halcón, hijo de Osiris e Isis, era una de las personificaciones del dios-sol, como sol naciente de la mañana. Su esposa era la diosa
Hathôr, la señora del cielo. Su arma era la lanza.
Se le solía representar en forma de disco solar, planeando en forma de halcón sobre un faraón teniendo en sus garras un anillo y
un espantamoscas. Su culto estaba muy extendido en los comienzos de la civilización egipcia y su
jeroglífico, el halcón, (o un círculo
solar con alas) sirvió en origen como símbolo de cualquier divinidad masculina, al igual que la serpiente lo era de todas las diosas.
Su nombre significaba "el muy alto", lo que podía entenderse como una primitiva función como dios del cielo. En periodos posteriores el sol
y la luna son llamados los "ojos de Horus" o se le ve también como la personificación de la estrella Orión. Terminó confundiéndose con Râ
y usurpando sus funciones. Dios que lo veía todo, era el que permitía que los humanos viesen a su vez y era el patrón de los ciegos y de
los músicos.
Según el mito osiriano, era muy débil cuando nació. Fue criado en la soledad para escapar a la maldad de Seth, y pudo salvarse de los
muchos peligros que le
amenazaban gracias a los sortilegios de su madre Isis.
Cuando creció combatió contra Seth y en el combate este le arrancó un ojo. Esta lucha acabó cuando los dioses hicieron comparecer a ambos
ante su tribunal. Seth trató de demostrar que su sobrino era sólo un bastardo. Horus probó la legitimidad de su nacimiento
y los dioses condenaron al usurpador Seth a restituirle su reino. Horus se convirtió en faraón de los dos
Egiptos y en su dios nacional. Desde entonces, todos los faraones llevaban el título de Horus vivo y quedó legitimado así el hecho
de que la condición de faraón pasase de padres a hijos. Tenía su templo principal en Edfú, pero fue adorado
en todo Egipto con otros nombres formando parte de triadas, como dios principal, príncipe consorte o dios niño. A veces estos otros Horus
tenían distintas genealogías e historias. Se le atribuyeron como hijos los llamados "cuatro hijos de Horus", que a veces se decía que
fueron paridos por Isis, otras que fueron pescados por Sabek por orden de Ra y sacados del agua en una flor de loto.
Estos cuatro hijos eran Amsiti (cabeza humana), Hapi (cabeza de cinocéfalo), Tuemeft (cabeza de chacal) y Kebhsneuf (cabeza de
halcón). Eran los encargados, junto con cuatro dioses más, de cuidar de las vísceras de los difuntos y estaban presentes en el juicio de
Osiris.
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HU
Dios con forma de hombre o de esfinge, acompañaba al sol en su barca. Era la divinidad de la
abundancia, y también la personificación del sentido del gusto, el Sentimiento y la Sabiduría.
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