Chile refuerza su Armada


Diario Ojo - Noviembre 2003


Ministra recibió en Francia el primerode dos submarinos

El bautizo, ayer, del primero de los dos submarinos franco-españoles “Scorpene” encargados por Chile marca el inicio de una ambiciosa renovación de su Armada y el estrechamiento de la cooperación entre los tres países en el terreno militar.

El “O’Higgins”, que es el nombre que se le dio al submarino en honor al padre de la independencia chilena, “va a ser el submarino más moderno” de Latinoamérica y se entregará en la segunda mitad del año próximo, señaló a la prensa la ministra chilena de Defensa, Michelle Bachelet, que presidió la ceremonia de bautizo en el puerto de Cherburgo (noroeste de Francia).

“Con este nuevo submarino no sólo vamos a mantener y mejorar nuestras capacidades navales, sino que es un tipo de buque más eficiente que requiere menores dotaciones y todas sus capacidades van a aumentar la eficiencia”, subrayó Bachelet tras visitar el interior del “Scorpene”, fabricado por los astilleros españoles Izar y los franceses de la Dirección de Construcciones Navales (DCN).

Se trata de un buque -el primero totalmente nuevo que se incorpora desde 1984 a la flota de la Armada chilena- de propulsión convencional diesel-eléctrica de 66,4 metros de eslora, 6,2 metros de manga y 1.550 toneladas de peso en superficie que puede sumergirse a más de 300 metros y desplazarse a una velocidad superior a los 20 nudos (cerca de 40 kilómetros por hora).

El trabajo de construcción de las dos unidades que Chile encargó al consorcio en diciembre de 1997 -el segundo, el “Carrera”- debe ser entregado en 2005 por un monto de 450 millones de dólares.
“No existe ánimo agresivo”
El comandante en jefe de la Armada, Miguel Angel Vergara, destacó que “es un submarino más silencioso” que los antiguos, lo que es “muy importante” para no ser detectado, gracias a amortiguadores que separan el casco de los equipos y evitan el escape de ruidos.

Está armado con seis tubos lanzatorpedos para utilizar los 18 proyectiles pesados: torpedos “SUT266” y “BlackShark” y misiles “SM 39”.

Bachelet insistió en que detrás de la compra de los “Scorpene” o de la renovación de la flota no hay ninguna “carrera armamentista”, porque “Chile cree que la paz es lo más importante” y no es “un país que tenga ningún ánimo agresivo”, sino que trabaja “en una línea de cooperación con nuestros vecinos, y eso es lo que hemos priorizado”.

“Estamos contentos con nuestro ‘statu quo’ y desarrollamos a nivel de las marinas, con Perú, con Argentina, una estrecha relación de cooperación. Tenemos proyectos para construir embarcaciones en conjunto”, precisó la titular de Defensa al reiterar que la compra de las naves no tiene carácter ofensivo.

Hosted by www.Geocities.ws

1