Primer lugar
Elizabeth Pérez Tzintzun
Seudónimo: Tsintsuni.
CUENTO:
(CASTELLANO)
EN BUSCA DE LA RIQUEZA
TSINTSUNI
Lo que enseñes a tus hijos.
Será
tuyo y no de otros
Para dar vigor a tu pueblo. - No sé, hijo, pregúntale a tu abuelita. Yo ahorita
estoy muy ocupado- le dijo su papá cuando Oscar le preguntó qué o quiénes eran los
gnomos y siguió escribiendo. Aquella tarde, cuando estaba jugando con Ricardo, escuchó
al abuelo de su amigo hablar de los gnomos. Ahora todo quería saber y conocer para tener
también que contarle a sus compañeros, así ellos verían que él también sabía
algunas historias. Hacía mucho tiempo de aquel día que Oscar llegó a su casa. -Ya llegué, mamá Amalia- le dijo a su abuelita que
estaba preparando la comida. -Ya hijo; ya llega pues; y ya te vienes a comer- le dijo
su abuelita. - Abuelita ¿por qué nunca me cuentas alguna leyenda o
algún cuento del pueblo? ¿Cómo era antes
San Marcos? Dice Rica, que a él sus abuelitos le cuentan muchas cosas de antes. Se sabe
muchos cuentos. -Ay hijo, yo quisiera, pero ya ves que me cuesta trabajo
platicar en Castilla- y siguió amasando la masa. -No le hace, abuelita; al cabo ya estoy aprendiendo en purhe.
Rica y los niños de la escuela me están enseñando. Así ya vamos a poder platicar más
cuando no estén mis papás dijo a la abuelita y, abrazándola le dio un beso. San Marcos Xanaruo tenía sus propias costumbres como
otros pueblos y la gente hablaba en porhe. Desde
que los papás de Oscar se conocieron en la escuela superior, tenían por costumbre
platicar en español. Su mamá decía que era mejor que Oscar hablará en español para
que así ya no rehuyera a los mestizos y pudiera jugar con los hijos de sus compañeros de
trabajo cuando fueran a visitarlos. Luego la gente diría que ella y su esposo, siendo
profesores en un pueblo de mestizos no le enseñan un poco el español. -Ya después él aprenderá a hablar en porhe.
Si es que quiere y si no, tanto mejor-solía decir. Cuando Oscar ya tenía la edad para ir a la escuela, iba
con su mamá a Santa Anita donde ella trabajaba. Pero ya después asistía a la escuela
del pueblo. Al principio sentía mucha tristeza. Nadie quería
platicar ni jugar con él porque algunos no le entendían y otros no podían o les daba
pena hablar en español. Nadie se quería sentar junto a él. Después, el maestro sentó
con él a Ricardo. Se empezaron a llevar a bien porque el muchacho también hablaba en
español y en porhe. Le dijo que él le enseñaría a hablar en porhe. -No te apures; vas a enseñarte pronto. Cómo yo aprendí
pronto, nomás oyendo. Nomás no tengas miedo de hablar. Al principio se reían de él porque mezclaba palabras en
español. Quería mucho que lo dejaran ir a jugar con sus amigos.
Soñaba con todo lo que platicaban de donde había ido o de donde irían aquellas tardes:
o en tiempo de aguas, ir a recoger hongos cuando pasaba la lluvia. Nunca le daban permiso
porque a veces le decía su mamá: esos niños van a esos lugares porque en su casa
no los quieren, por eso no los cuidan y porque no tienen juguetes. Tu aquí tienes todo.
¿A qué sales? Si quieres invita a tu amiguito Rica para que venga a jugar aquí. Pero Oscar empezó a salir a escondidas con sus
compañeros. Así conoció los manantiales Xanindirhu, Peronirhu, Kupantarhu, Atisirhu,
Tarhimurhu, Konchitirhu y Itsirhu Karhaku y vio cómo algunos se estaban cubriendo
de tierra. Cuando llegó a su casa, le contó a nana Amalia: -Ay, hijo, no andes saliendo a escondidas; al rato, te
puede pasar algo y tu mamá se va a enojar mucho le dijo. -¿Y por qué ya nadie va a limpiar los manantiales?
le preguntó. -Los manantiales y nosotros ya estamos igual; dormitando y
esperando que llegue ya la muerte. Ahora en nuestros pueblos ya se están olvidando a los
manantiales, ya nadie va a limpiarlos ni por fuera ni en el fondo, ya no hay niños que se
bañen ahí, que le den vida y jueguen ahí,
unos ya ni los conocen, ya nadie quiere platicar con ellos. Se están tapando, poco a poco
se están muriendo porque ahora ya hay agua que llega entubada a las casas. Las muchachas
ya no van a traer agua porque ya hay agua que llega entubada a las casas. Las muchachas ya
no van a traer agua en cántaros ni a lavar a los manantiales; sólo algunas. Aquí sólo quedan tres
lugares adonde van a lavar y a sacar agua, ya nadie entra en donde hay
pozos, y son ellos los que se están cubriendo de tierra. Los papás grandes así están
porque muchos niños ya no se sientan a escuchar su palabra y su conocimiento; ahora se
sientan frente a la televisión, escuchan su grabadora, otros, así como me pasaba a mí,
que ahora a los niños se les enseña en Castilla y nosotros ya no podemos platicar con
ellos porque no podemos hablar así. No es igual porque con nuestra palabra sentimos más
el recuerdo de lo que queremos decir. Por eso me da tanto gusto ver que están
enseñándote a hablar en porhe para poder platicar mejor. Esta bien hablar en
Castilla; pero igual en porhe para que no se pierda como algunas costumbres que se
están perdiendo ya, así como los manantiales que se están tapando, sin saber si de
nuevo los vamos a necesitar. También se está perdiendo la palabra y el conocimiento de
los abuelos. Cuando salían de la escuela, llegaban a escuchar al
abuelito de Ricardo. Sentado en una sillita al pie del zapote. Y cuando ya veía que ya
iban a llegar sus papás. Oscar se iba corriendo a su casa. Un día, Oscar llegó tarde a su abuelita, angustiada,
salió a buscarlo y cuando, ya tarde lo encontró: -Qué susto me diste, hijo, ¿dónde andaban? les
preguntó. -Es que nomás fuimos a la Kerenta respondió
Oscar. -Vente pues y, vámonos a la casa, tus papás ya no van a
tardar en llegar. ¿Y qué es lo que andaban haciendo en la
Kerenta? Preguntó. -Ibamos a buscar la mina. Pero ya no fuimos porque estaba
cubierto todo de zacate por donde dicen que es el camino. Es que yo les conté de los tarhetskuicha
lo que me habías contado y Kuíma nos dijo que conocía el camino y que no era cierto que
ahí asustaban y ni que jalaran a los niños y que él nos iba a llevar a conocer. Fue entonces cuando nana Amalia recordó que Oscar le
preguntó un día qué eran tarhetskuicha. Lo que recuerdo es que eran hombrecitos. Con grande
barba, todos los días bajaban en la tarde y caminaban por la calle con toda la gente del
pueblo y nadie les decía nada. Vivían en aquel cerrito, donde se ven aquellas dos
peñas, donde está la peña más grande, es ahí donde está la mina donde vivían. Cada
noche se veía a lo lejos que prendían fuego y se oía el caracol; y a veces música. Mi
papá me contaba que los gnomos tenían un toro de piedra y que era a él a quien
ofrendaban y, cuando la luna estaba grande, era cuando le tocaban música para que no se
llevara la piedra. Lo tenían siempre cubierto de flores. La gente del pueblo subía cada
año a llevarle coronas de flores, porque se decía que era por eso que en el pueblo
había buenas reses, como no había ningún otro lugar, y toda la gente tenía de todo, a
nadie le hacía falta algo, y por eso nadie molestaba a los gnomos porque habían sido
ellos los que habían traído aquí la piedra y si ellos se fueran, se lo llevarían. Un día la gente hablaba preocupada porque decían
que los gnomos se habían ido y se habían llevado la piedra y que pasarían cosas malas
en el pueblo. Ya hacía mucho que los gnomos no bajaban porque los niños desobedientes
habían empezado a tirarles cosas o a esconderles sus cosas cuando por las mañanas ellos
dormían, en la orilla. Se decía que ellos trabajaban de noche y por eso dormían por la
mañana, pero nadie sabía que hacían y donde trabajaban. Empezaron a no consentir que
llevaran a los niños a la Kerenta, cuando subían a llevar coronas. Por eso yo
nunca vi la piedra. Nadie supo por donde se fueron. Y en el pueblo pronto comenzaron a
perderse las reses y algunos amanecían muertos sin que nadie supiera quien los mataba. Luego supimos que los gnomos habían llegado a Cherani;
que estaban en un cerrito, y que ahí estaba ya el toro de piedra junto a una cueva. Se
supo hasta entonces que eran caminos subterráneos lo que ellos hacían bajo los cerros y
que cuando uno se acercaba a donde ellos vivían ahora le dicen la mina- había
muchos caminos y dicen que por uno de esos caminos es que se fueron para llegar a Cherani. Unos señores y muchachos entraron porque se decía que
había mucho dinero y oro que los gnomos encontraban al hacer los caminos y que guardaban
en algún lugar. Sólo algunos pudieron salir, los que se fueron por el camino derecho y
que no llegaron muy lejos porque se les apagaban las antorchas de ocote con que se iban
alumbrando y comenzaron a sentir frío y a escuchar ruidos, fue entonces que se regresaron
y los que se fueron por otros caminos, nunca pudieron volver. Desde entonces ya nadie entró porque decían que
espantaban. Cuando alguien se acercaba, oía como si lo llamaran y dos muchachos así se
fueron como si se los hubiera llevado la mirinkua y ya nunca salieron, así lo contaron
los amigos con los que andaban, por eso la gente del pueblo dijo que lo taparían con
aquella piedra de uiramu que estaba ahí. Un día vinieron extranjeros y fueron ellos los
que quitaron de ahí aquella piedra con intenciones de entrar y ver hasta donde llegaba
aquel camino subterráneo, pero no pudieron entrar porque había muchos murciélagos,
hacía mucho frío y había malos olores. -Y los gnomos que hacían ahora en Cherani? Agregó-
yo si quisiera ir por ellos. Ya no vivieron mucho tiempo ahí, pero nadie sabe a
donde se fueron. Algunos dijeron que les habían mandado un mensaje con la luna aquella
noche que sólo el cerrito se vio iluminado. Dicen que había llegado la hora de marcharse
y se fueron por aquel camino que los llevaba hasta el mar. Otros cuentan que todavía
viven ahí dentro, pero ya no salen porque los niños no obedecen y no los dejan vivir en
paz. Ahora ya estoy grande y nunca fui a ver a aquella
piedra. No hace mucho todavía, que iba la gente a verla y le llevaba coronas y flores. Nunca olvidaría aquel día que su nieto se fue sin
permiso y corriendo subió hasta la kerenta y entró para siempre en la mina.
JAPINTINI JIRINANTANI
TSINTSUNI
Imankari uátsitichani jorhentaaka
Eska
chitiaka no márutiruicheri
Parikari chiti iretani uinapirantaaka
I -No sé, hijo; pregúntale a tu abuelita. Yo ahorita estoy
muy ocupado arhispti tátimpa eka Oscari kurhamarhipka ampespi o néspi tarhetskuicha,
ka chúnkumani karani enka imani uni japka. Ima inchatirhu, eka Rica jinkoni chanani jámani
japka, kurhachakuspti Ricairi tata kerimpani tarhetskuichani uantaani. Iasi
iámintu ampe uékasirenti mitini ka miiuni parana imajtu jatsini ampe ánkuapirini
pámpirimpechani, isi tsa exepinti eska imajtu mítispka maru uantakuichani. Iónisi
úptia ima jurhia eska Oscari niantapka tsáimpo. -Ya llegué, mamá Amalia- arhispti nana kérimpani imaka
ankonaku jatsintani japka. -Ya, hijo; janonkuachkia: y ya te vienes a comer arhispti
nana kerimpa. -Abuelita ¿por qué nunca me cuentas alguna leyenda o
algún cuento del pueblo? ¿Cómo era antes San Marcos? Dice Rica que a él sus abuelitos
le cuentan muchas cosas de antes. Se sabe muchos cuentos. -Ay hijo, yo si quisiera, pero ya ves que me cuesta
trabajo platicar en Castilla ka chunkumaspti tsireri jíjkuni. -No le hace, abuelita; al cabo ya estoy aprendindiendo en
purhe. Rica y los niños de la escuela me están eneñando. Así ya vamos a poder
platicar más cuando no estén mis papás arhispti nana kerimpani ka
kamajkchakuparini, putinarhikuspti. San Marcos Xanarip pintekuichani jatsikurhinaspti
eska márutiru iretecha ka kuiripu porhe uantasirenti. Ekatki Oscariri
tatimpecha mínarhikupirapka, keri jorhengukurhikuarhu, turhisi jimpoksi pintespti
uantontskuarheni. Amampa uantasirenti eska sántiru sésispka eska Oscari turhisi jimpo
uantapirinka jimpoka isi no cherhiapirinkia turhisichani ka upirinti chanani
pámpirimperi uajpechani jinkoni ekaksi nipirinka porhempiani. Ka tátsikua kuiripu
uantanapirinti jimpokana ima ka uampa jorhentpirispka turhisicheri iretarhu ka noksi
sáni jorhentani uajpani isi uantani. -No inte tatsiku jorhenkurhikurhia ia porhe
uantani. Ekachka uékaka; ka eka no, sántiru sésia jorhenasirenti uantani. Eka Oscari jatsiripkia para jorhenkuarhikuarhu nirani,
amampani jinkoni nirasirenti, Santa Anita, jinika ima anchikurhinka. Jo peru tátsekua
iretarhkusi nirainti ia jorhenkuarhikuarhu. Uénani jámani menku xáni kómu korhokasirenti. Nbone
jiasirenti ima jinkoni uantontskurhini ka ni chanani jimpokaksi mantani no
kurhankukusirenka ka mántanksi no úni o kuratsinki turhisi uantani. None jiasirenti uaxakjani jinkoni. Tatsiku
jorhentpiri, Ricarduni jima uaxakataspti. Sésiksi uénaspti pájpirani jimpoka Ricardujtu
mitispka turhisi jimpo uantani ka porhe. Arhispti eska ima jorhenbtapirinka porhe
uantani: -Asi uantania; sóntkurisi jorhenkurhiaka. Na ji sóntkuni
jorhenkurhipi kurhachakupiparini. Nomasi asi jama chémuni uantani. Uénani jámani teresmarhusirentiksi jimpoka turhisi
inchatasirenka. Uekasirenti eskaksi jiarhatapirinka nirani pichpirimpechani
jinkoni chanani. Menkusi tsánarhintainti imaka tsa uantantani jarhainka nani
enkaksi nipka o nipirini inchatirhu jimpo: papaloti kátani, turhumpa uarharhani, kanica
chanani, itsirhu jikuani ka xarhiani o, ementeri tereku nirani pikuni
jarhukutini eka kamatapirinka janini. Aampe jiankuneni jimpoka amampa arhispka menta: esos niños van a esos lugares porque
en su casa no los quiere, por eso no los cuidan y porque no tienen juguetes. Tu aquí
tienes todo. ¿A qué sales? Si quieres invita a tu amiguito Rica para que venga a jugar
aquí. Jo peru, Oscari uénaspti sipantinku nirani
pámpirimpechani jinkoni. Isisi miiupti itsicharhu: Xanintirhu Peronirhu, Kupantarhu,
Atisirhu, Tarhimurhu, Kónchitirhu ka Itsirhu Karhaku ka exespti náksisi máru tumintani
jápia. Eka niántapka ánkuspti nana Amaliani. -Ay hiju, asi jama isi nirani sipatinku; tátsikuri isku
ampe úkurhinchaka ka mámati na xani ikia arhispti. -¿Ka antisi nótiru ne nirajkia itsichani ampomantaani?
Kurhamarhispti. -Itsicha ka jucha márkuinksisi jaka ia; kúintaskani ka
uarhikuntirku erokaparini ia. Iási juchari iretecharhu itsicha mirikurhinaaxati ia,
notiru ne nirasintia amaparhutaani ka ampomantaani, nótiru ne uáchi sapicha tsaka jima
jikuaka tsaka tsípiraaka ka chánaraaka máruksisi nótiru minarhikuajtia, notiru ne
imaka uantontskurikuaka. Umirhuxatiksi, nintaxatiksi ia sánkani arhini jimpoka iási
jatsikurhinaskia itsi taecharhu, inteka túbuicha jimpo janojhka. Marikuicha notiru
nirasintia itsi pitanani kámokuichani jimpo, ka nitiruksi nirajkia jupani itsirhu;
máruichatirku ia. Ixu tanipurutirkusi ninanjtia jupanani ka itsi pitanani nótiru
ne ichakusintia pósuicharhu, tspási túmintani jati ia. Tati kératichajtu isisi
jati jimpoka uápurhu uáchicha nótiru uaxakasinkia kurhachakuani tsairi uantakua,
iásksi televisionisi jarhajtia uaxatani, ka grabadorechani kurhantiani, marutiruichas isi
eskani ji na japkia, uáchicha turhisi jorhentanasintia ka jucha no úni jarhania
uantontskurhikuani jimpokaksi no úsinkia ísi uantani ka no ijtkuinia jimpoka juchari
uantakua jimpo ménku ma tsipintasinti uantantani ka ínimintu ma korhonini eka ma
miantajka. Jimposini ménkuni xáni tsipini jaka jimpokari tu jorhenkurhini jaka ia
porhe uantani ka isiksi sántiru sesi uantontskurhini. Sésijti mitini turhisi
uantani: pero istu porhe, paraka no tsítakurhiaka eska maru pintekuicha na
tsítakurhini jaka ia, isi eska itsicha na ómintani jaka ia no lmititini jucha tatsikuksi
uetarhincha mentiru. Istuksi tsítakurhixati ia tati keraticheri uantakuicha ka
eiankupirakuicha. Ekaksi uénteecha jorhenkuarhikuarhu, niántarirentiksi,
Ricairi tata kerimpani kurhachakuni. Uaxantsiku sapichurhu uaxakatini, urhuatarhu
jantukutini ka eka exenkia eska tátimpecha niántapirinkia, Oscari ménku
uiriapantasirenti. Ma jurhia, Oscari ióntaspti ia niántani ka nana kerimpa
uantaniaparini ueákuspti jirinantani ka, eka iontakuarhu exentapka ia: -Xantini chérakua hiju, ¿nanijtsisi jámeni? Kurhamariaspti. -No jucha kerentarhusi nipi arhispti Oscari. -Juchkia kókani nintani, pápaticha antiru ionta ia
janonkuani. ¿Ka ampejtsisi uni jameni kerentarhru? Kurhamarhispti. -No jucha minasindi jirinantani niraini. Jo peru antiruksi
nípia jimpoka jukari iomarhaspka jimaisikana ninajka, no ji ankuaspi tarhetskuicheri,
ánkupka ka Kuimajtsini arhi eska ima miiupka ka eska no isispka eska cherpisirenka ka
uáchichani antsitani, ka imajtsinisi pápirintia miiurani. Jiájkanisi nana Amalia miántaptia eka Oscari kurhamarhipka
ampespi tarhetskuicha. -Saniskusini miántajka no tsa achati
sapirhatispi. Ménku xániksi tisimini, mántani pauanksi kétsisirenti inchatiruiri ka
uanaruranksi jámani ménku iamintu kuiripu ka none ampe arhiani. Arima juáta
sapichurhuksi irekaspti, jimaka tsa erakurhijka tsimani kerentecha, imaka
sántiru keka kerenta jimasi jati minasi, jimaka tsa irekapka. Mántani chúri
eraakurhisirenti chipiri tixarani ka utusi kurhakurhini ka ménchani kúskakua ampe.
Tati juchitirini arhisirenti eska tsa karhiri anantsini tsakapuirini jatsipka
ka imanksisi tixatakuinka ka eka nana Kukuta keri jarhainka jiájkanksinasi
arhirhakuinti ka uarhakunksi parakana no pántapirinka tsakapuni. Mékuksina tsïtsïki
jatsikukutini jatsisirenti. Kuiripu mántani uexurhini karharhasirenti kanaku
tsitsikiri pákuani ka tsïtsïki, jimpoka uantanasirenka eska ima jimposi iretarhu xáni
sesi járharati karhiri anantsicha japopti, notiru nanina jarhaspti isi jarhaticha
ka iamindu kuiripu mánkuini ampe jatsikurhispti; none ampe uéparhanchasirenti
jimposi none ampe arhiainti tarhetskuichani jimpokana tsási juánupka ixu
imani tsakapuni ka ekana tsa nintapirinka, pántapirintiksina. Ma jurhia, kuiripu ménku isi uantaxamentia
uantaniaparhini jimpokana tarhetskuicha nintaspkia ka tsakapuni pántasptiksina ia,
ka no sesi ampena iretarhu ukurhipirintia. Ionisi uptia eka tarhetskuicha notirhu
kétsinkia jimpokana uáchi sapicha no kurhanticha uénaspkia isku ampe kuaniraani o
ampe jiskakuani ekana tsa kuini jarainka tsíperi, jarhukutini. Uantanasirenti eska churikuirisi anchikurhinka jimpoksisi
tsíperi kuinti, jo peru none mítispti ampe ka naniksisi ánchikurhini. Uénasptia
notiru jiarhatpini eska uáchi sapirhaticha kerentarhu pájtanarpirinka eka ninenka
kánaku pánaani. Jimposini ji no meni exepkia imani tsakapuni. None mitispti naniasiksi niraspi. Ka ixu iretarhu sóntku
uénania karhiri anantsicha tsitakurhini ka máruksi uarhirini erantisirenti ka none
mitini ne uántikuasireni. Tatsikuksi mítispkia eska tarhetskuicha Cheraniosi
niárapkia, eskaksi ma juata sapichurhu, ka eska jima japkia karhiri anantsi
tsakpuiri ma keri porhotarhu maikanta apomukuni. Mitinasptia eska tsa
xanaruksisi uni japka juatecharhu ketsiku isi ka eka sanitu inchamukunenka jimaka tsa
irekapka iasi arhinasinti minasi- uániku xanarhuicha jarhaspti, ka ma imani xanaru
jimpoksinasi nípti Cheranio antarani. Máru achati ka tumpicha inchanispti jimpoka
uantanasirenka eska kánikua tumini japka jima ka tiripiti ampe enka tarhetskuicha
jima exentenka xanaruni uni jámani ka eskaksi patsaspka nani. Marukuksisi ueninbtapti tsakana
xanarhu jurhimpitirhu isi nípka ka nóksina iauani niarani jimpokana kueramu patakurhisirenkia
ima jimpokaksi erantupenka ka uénasptina ia tsirakurhini ka isku ampe
kurhaakurhini, jiajkanksinasi kuanatsintaptia ka tsakana marutiru xanaruichani
jimpo noksi meni antantasptia. Jianjkantkisi notiru ne inchaniptia jimpokana
chérpisirenka. Ekana ne antamukuirenka kurhasirentina eskana ne uékuni ka tsimani
tumpichana isi niraspti eska mirinku pani ka notiruksina meni uenintania, isiksi
uantantaspti tsa jinkonkaksi jamenka pichpiricha, jimposi kuiripu
uantapti eska mikanantapirinkia ima keri uirhamu jimpo imaka jima japka. Ma jurhia
jurhasptiksi maru turhisicha ka tsasi pikuntaptia imani uiramuni uékaparini
inchanini ka exenksina nanisi antanteni ima xanaru, jo peru nójtuksi uspti inchanini
jimpokana uáni uasiksicha jamasirenka, jukarina tsirakurhisirente ka no sesi
jaminini. -¿Ka tarheskuikcha ampe uspia Cheranio arhistitiru-
jichkani koruni nipirinka piantaani. Notiruksina ioni irekasptia jima, jo peru, no ne
mitijti naniasiksi niraspia. Mántanksi uantasirenti eskaksina uantakua axaminaspka nana
Kukuta jinkoni ima churi eka juata sapichurku erantutapka ka marutiru nani no.
Niárasptina ia paraksi nintani ka ima xanarhu jimpoksina nintaspti imakana k'ri
japontarhu jameri niárajka. Marutirhuicha uantasinti eskaksi útasi irekaxaka inchaniku
ka notiruksina uérasintia jimpokana uáchicha jukari no kurhantisinkia ka noksina
jiárataasirenti sesi irekani. Iasi keriskia ka antiruni meni miki ia imani
tskapuni exeni. Utasi no ioni jimpo, kuiripu nirasirenti exeni ka kanakuichani ka
tsïtsiki ampe pákuani. II Iasï mandani uéxurhini, animecha jimbo, nana Amaliani
exehasïrendi eha nona karharani jarhajka kerendarhu
tirihenitsïtsïki kamaharhitini. Minasïrhu uaxamukusïrendiha uandatsïkurhini, uatsï sapichuni
kurhaaprini eha iamindu kuiripu uandahajka esïka jima kurhahakurhijka. Ima kutsiïmiti jandiajkusï
jarhasïndi uandatsekurhini ka tachani jasï ambe amahenchakua ka takukukata ma, porhepecha
jimbo, kejtsïtani eka iamindu kuiripu camposanturhu anima sapichani kejtsïtakuani
jámeha. No meni mirikurhipirindi imani jurhia eka nimakuajemba
sïpakuarhipka ka uiriapani kerandarhu karharani ka mentku minasïrhu inchahasïpti.
|