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15-Julio-2005
 
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Remberto Dámaso

El primer encuentro (I)

Eso fue un día 16 de abril del año pasado, iba yo por aquí para abajo, para el taller, a darle una vuelta a las 3 y cuarto de la mañana mas o menos, cuando vi que del sur venía una luz.

 
 
Dámaso muestra la lámpara
que usó esa noche

Yo iba preparado para alumbrarme, porque estaba un poco oscuro, con este tipo de lámpara. Al ver la luz, aquí mismo le hice una seña con la luz, la encendí y la apagué.
Seguí caminando y me sorprende que me contestan la luz, me vuelvo a parar y le vuelvo a hacer señas. Creo que es una avión que viene en vuelta del sur del Jíbaro. Pero me voy dando de cuenta que se viene deteniendo por aquí la luz, y digo, bueno, no es un avión, es un helicóptero, porque no había sonido.
Quedo asombrado cuando entonces empieza a emitir unos sonidos extraños, música fina, muy fina, con un centellear de muchas bombillitas en colores, como si fueran un arbolito de navidad. Me apuré corriendo, para abajo, para ir al lugar donde se había detenido. Descendía y se detiene en esa dirección ahí, del taller. Yo bajo por aquí, rápido, alumbrándome con mi lámpara y llego. Estaba la cerca esa ahí.

 
Del otro lado de la cerca
bajó el ovni
 

Él se para ahí, y yo lo empiezo a alumbrar con mi lámpara. Aquellas luces tan lindas me atraían, y en eso sale una luz más fuerte, en blanco, PUFFFF, y se apaga mi lámpara.
Me da como un escalofrío, trato de mirar para atrás, porque aquí existe otra lámpara dentro del taller, que me está iluminando todo esto por aquí. Esta lámpara se apaga también, y quedamos totalmente oscuros. La luz estaba bastante clara, y entonces echa como una niebla... se mantiene como a un metro del suelo, más o menos, y cuando sopla la niebla aquella trato de localizarle puertas, si tiene remaches, si tiene algo. Aquel platillo era grande, redondo, en forma de un huevo, como un plato ahí al lado del otro, como si fueran dos sombreros tapados.
Entonces siento como un escalofrío, como que me están... alguien tengo atrás, como que me están midiendo. ¿Qué pasa? Me siento desabrío, porque la lámpara la había dejado en una posición y no podía mover la mano, no podía mover la otra mano, me sentía inmóvil.
Centelleó la luz que me apagó la lámpara, la lámpara mía se enciende de nuevo, se enciende la luz del taller, y entonces él bota un poco de humo por abajo. Cuando lo hace, al poco momento que deja de botar el humo, empieza un sonido fuerte y un calor que me da, empieza a tomar altura y se detiene la música y el centelleo, y parte hacia en vuelta del norte.
Yo me quedé todo desabrío, yo estaba solo, yo quería que alguien hubiera visto aquello, no haberlo visto yo solo. Bueno, subo para la casa, y le hago el recuento a mi esposa. Me quedé totalmente desabrío, porque hubiera querido haber aprendido o haber visto algo más. Si aquello se hubiera podido lograr y yo pudiera haber tenido testigos de lo que yo veía, lo que yo había visto hubiera sido una cosa fácil de comprobar.

El ovni bajó del otro lado del taller

Pero bueno, pasaron horas, llegó el día, y me fui con los compañeros de la Academia de Ciencias, y sin hacerle el cuento a más nadie, le conté todo a ellos. Vinieron aquí y tomaron muestras, que el suelo se achorró, la hierba adonde estaba tomaron muestras, ellos se dedicaron después a ir en vuelta del aeropuerto, hablar con los compañeros que estaban de sereno, ir a la torre de transmisión, esta que se encuentra en alto aquí, en la ciudad de Sancti Spíritus, y el compañero que estaba de guardia le comunicó a ellos que él había visto un equipo similar cerca de ahí, de la torre, y que se había dirigido a esta zona.
Entonces, ya yo me quedé un poco más contento, porque habían otras gentes que vieron el equipo esa noche, dos serenos, uno del aeropuerto y uno en el otro lado.

Continuará...

 
 
 
 
 

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