CASOS
CUBANOS INVESTIGADOS POR:
Enrique
Pérez Gutiérrez
Profesor de Física
Un fenómeno
y 4 axiomas
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Imagen
tomada del documental
"OVNIs...¿En Cuba?"
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Cada
vez que se realiza un nuevo análisis sobre los OVNIs, acuden
a mi mente aquellos recuerdos en esa maravillosa tarde de verano
de 1954.
Me
encontraba contemplando a las tres de la tarde junto a cuatro compañeros
de estudio y un familiar, el globo aerostático que el Padre
Goberna de nuestro Colegio Belén había lanzado al
espacio con una cesta de instrumentos para la investigación
meteorológica. La silueta del aeróstato se destacaba
en un cielo despejado, terso y azul; a unos 800 metros sobre la
altura del Cabaret Tropicana. De improviso un objeto redondeado
y blanquecino como una perla entró desde el norte a enorme
velocidad, "frenando" bruscamente frente al globo...!
Todos nos quedamos atónitos! El "plato volador"
- como se llamaba en esa época- comenzó lentamente
a dar vueltas alrededor del globo, como un perrito que otea a otro,
y de repente salió disparado con rumbo sur con increíble
velocidad.
Desde
aquel avistamiento inolvidable, no dejamos de discutir y analizar
lo ocurrido durante muchos años. Estudiantes de la escuela
Electro-mecánica de Belén, acostumbrados a las leyes
de la física, la tecnología y la ciencia, no encontrábamos
respuestas a cuatro ideas fundamentales.
1.
No era una luz ni un reflejo luminoso. Era un objeto de contornos
perfectamente definidos. De haber sido una luz, se hubiera difuminado
con aquel sol radiante que estaba a nuestra espaldas. La prensa
de la época reportaba casi a diario avistamientos de luces
nocturnas.
2.
El objeto se comportó como un sistema no-inercial, es decir,
como un objeto que anula la ley d la inercia; deteniéndose
y arrancando bruscamente a enorme velocidad. No hubo una progresión
creciente o decreciente de la velocidad, sino un disparo súbito,
imposible para nuestras naves aéreas.
3.
Cuando se detuvo frente al globo, permaneció en levitación
y reposo absoluto, desafiando la ley de gravitación, sin
ruido ni estela de humo, ni motor aparente alguno.
4.
Su comportamiento al dar vueltas alrededor del globo mostró
a las claras una marcada intencionalidad que implica necesariamente
una inteligencia.
¿Origen
extraterrestre? Nadie puede demostrarlo categóricamente a
pesar de los numerosos indicios desde antes de 1947. La demostración
definitiva se tendrá cuando aterricen en el Zócalo
de México, en el Memorial de Washington o en la Plaza de
la Revolución de la Habana y abran sus escotillas ante los
camarógrafos. Mientras tanto en este 55 aniversario del caso
de Kenneth Arnold, continuamos investigando.
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