En un artículo
anterior me referí a las coincidencias que de vez en cuando gratifican
nuestra vida. Una de ellas ocurrió la pasada semana, sucesivamente tres
amigos merideños, dos personalmente y el otro por envío desde Caracas, me
hicieron llegar su último libro recién salido de la imprenta. Me refiero a
Guerrilla y Plan Colombia. Hablan las FARC y el ELN (178p. producciones
Karol, Mérida), Nuestro Siglo XIX (863p. Editorial Venezuela) y El
pez...muere por la boca(98p.,Caracas), respectivamente de Alberto Garrido,
Edilberto Moreno y Edgar C. Otálvora. Consecuentes amigos, los tres están
vinculados a nuestra universidad y a la vida venezolana en su quehacer
cultural, con naturales matices comunes y diferenciales en cuanto a su
actividad política, diplomática y periodística.
Alberto
Garrido, nacido en Argentina y llegado muy joven a Mérida en donde cursó
estudios de liceo y universidad, trabajó en el rectorado y brillantemente
dirigió diarios y revistas locales en los cuales tuve puertas abiertas.
Aunque labora profesionalmente en Caracas y escribe en diarios y revistas
nacionales ha conservado su vinculación con Mérida donde mantiene su
residencia. Sus tres últimos libros constituyen obligado material de
consulta para el debido enfoque del gobierno venezolano actual y sus
personeros.
Edilberto
Moreno Peña, nativo de Las Piedras, aunque como buena parte de nuestros
políticos consagrados, tiene una larga actuación dentro y fuera del país en
la que se han alternado bien desempeñados cargos gubernamentales, exilio y
cárcel, siempre ha encontrado tiempo para cultivar sus inclinaciones
literarias e históricas iniciadas en publicaciones anteriores. Continuada
demostración de tal afinidad es este discurso de incorporación a la Academia
de Mérida, merecida distinción alcanzada cuando honesta y tranquilamente
disfruta su tercera edad en la ciudad serrana.
Edgar C.
Otálvora, nativo de ese inagotable cantero intelectual merideño que es la
zona del Mocotíes, también hizo estudios y pasantía laboral en la ULA.
Publicó dos obras históricas: "Eustoquio" y "La Paz Ramónica", cumplió
eficientes actividades diplomáticas en Colombia t Brasil y ahora, radicado
en Caracas a la par de sus estudios de postgrado, desarrolla una intensa
labor periodística y documental evidenciada en este libro que viene a
integrarse al imprescindible material de consulta para nuestra historia
política. Dadas sus inquietudes y capacidad de trabajo confío en disfrutar
pronto sus incursiones en el campo de la creación literaria.
Igualmente
debemos resaltar que junto a ellos, otros merideños como Domingo Alberto
Rangel, Rigoberto Henríquez Vera, Simón Alberto Consalvi, Carlos Esteban
Chalbaud y Asdrúbal Baptista continúan dando su aporte intelectual tanto en
libros como en diarios y revistas de circulación nacional.
Se está
prolongando excesivamente la dura penitencia que sufrimos por los errores
cometidos en la conducción del país. La agravación de los vicios existentes
y el surgimiento de otros nuevos con sus negativas repercusiones en la vida
nacional pueden resumirse en una frase: Venezuela de país de inmigrantes se
está transformando aceleradamente en un país de emigrantes. Mientras que
antes tuvimos una importante industria cafetalera, generadora de divisas y
primordialmente de una fundamental cultura ecológica, hoy al aumento
despilfarrado del petróleo le estamos sumando la exportación de nuestra
población joven, lo que ineludiblemente gravitará en el futuro del país.
Por todo lo
expuesto, en medio de este agonioso panorama, nos tonifica la responsable
participación de la intelectualidad merideña en la búsqueda de un destino
mejor. |