***Las elecciones colombianas. ***Horacio Serpa dándose un barniz chavista

Los competidores en la carrera electoral presidencial colombiana  del 2002, ya están en pleno arranque. Por lo menos tres candidaturas parecieras ya confirmadas: Horacio Serpa, Noemí Sanin y Álvaro Uribe. Además, dos ministros de Pastrana renunciaron buscando la nominación conservadora.

Horacio Serpa es abogado, santandereano, de familia humilde. Fue juez en provincia, la zona petrolera de Barrancabermeja, donde se le recuerda por su pasión política y sus eventuales contactos con la guerrilla. Demostró sus capacidades como hombre de gobierno durante la crisis política que vivió Colombia como consecuencia del llamado Proceso 8000, el intento de enjuiciar a Ernesto Samper Pizano. Serpa fue el operador político que desde la tribuna de oradores del Congreso o desde la oficina palaciega, manejó públicos y privados hilos para neutralizar y perseguir a quienes pedían la destitución de Samper. Serpa hizo suya la defensa de Samper. Serpa se la jugó convirtiéndose en el antagonista de los sectores estadounidenses y colombianos (empresarios antioqueños especialmente) que aupaban la salida de Samper. 

Cuando el gobierno Pastrana presentó públicamente el Plan Colombia en el año 2000, Serpa se apresuró a denunciarlo. Al poco tiempo viajó por primera vez a Washington para  hacerse conocer y cambiar su imagen lesionada por el caso Samper. Luego de dos visitas a los Estados Unidos, Serpa modificó la opinión sobre el Plan Colombia, comenzando a argumentar a favor. Más recientemente, Serpa ha declarado que en caso de continuar la violencia guerrillera deberán reconsiderarse los diálogos de paz. En las últimas semanas Serpa sumó el tema Hugo Chávez en su agenda proselitista: en Bogotá y en Washington ha dejado sentir simpatías hacia el filón populista del chavismo.

El virtual candidato liberal es objeto de variadas críticas. Le acusan de haber estado cercano a la guerrilla, mientras algún columnista liberal lo censura por no saber hablar inglés. Por su parte, Serpa está en la nada fácil tarea de lavarse la cara ante Washington, mostrarse fuerte ante la guerrilla y las autodefensas, ganar apoyo entre los sectores empresariales que antes confrontó, manteniendo a su vez la vena de hombre popular,  de vida modesta, cercano a las causas sociales y que reacciona ante la dirigencia tradicional del Partido Liberal. El viernes hablaremos de Doña Noemí...

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AL CIERRE: El electo Alejandro Toledo declaró que apoyará la creación del ALCA.