****Las exigencias de las FARC y del gobierno Pastrana **** El fin de las negociaciones secretas  ****Cicerón ha vuelto

 Hace un año el gobierno de Andrés Pastrana y las FARC intercambiaron unos sobres de manila, debidamente cerrados, conteniendo las aspiraciones de cada uno de ellos dentro del proceso de negociaciones de paz. En junio pasado el Miami Herald publicó declaraciones de un grupo de militares colombianos en situación de retiro, quienes denunciaron planes de Pastrana para ceder ante la guerrilla.

Confirmando los temores militares, el domingo pasado se conoció el petitorio de las  FARC. Esta organización filtró a una estación de TV el contenido de sus exigencias. El gobierno inmediatamente censuró a las FARC por romper el secreto pactado, y por su parte, hizo públicas las exigencias gubernamentales.

Las FARC exigen un cese del fuego bilateral por tiempo definido y prorrogable. Esta decisión deberá ser atendida por las fuerzas militares y por los cuerpos policiales del DAS,  Dijín, Sijín, el B-2 y por la Fiscalía.  Suspensión de patrullajes, de operaciones militares y de inteligencia contra las FARC, las cuales reclaman su dominio territorial en los sitios donde actúa (creación de nuevas áreas desmilitarizadas). Verificación nacional. Cese a la extradición de colombianos. Fin de los “paramilitares,” a las masacres, torturas y desapariciones. Cierre de medios de comunicación que hagan apologías de los “paras”. Fin del desplazamiento forzado, detenciones arbitrarias, justicia sin rostro y ejecuciones extrajudiciales. Cesar las  privatizaciones de empresas públicas. Implementar mecanismos concertados para los cultivos ilícitos. Castigo de corruptos.

El gobierno exige el cese del fuego y de las hostilidades (secuestros, extorsiones, ataques a la infraestructura económica del país, etc.). Verificación internacional con designación de un mediador para facilitar discusiones. Fin de la participación de las FARC en actividades asociadas al narcotráfico. Concentración de los miembros de las FARC en una única ‘área de reconciliación’. Se entenderá que todo guerrillero que permanezca fuera de dicha área no se acoge al acuerdo.  Liberación inmediata de todos los secuestrados.

Abierto el juego, las negociaciones han llegado a su final. Tanto la dirigencia del grupo terrorista como el debilitado y por terminar gobierno colombiano han dejado en manos de la opinión pública la continuidad del proceso y los eventuales acuerdos. Las exigencias de las FARC resultan inaceptables para importantes sectores colombianos, mientras las exigencias del gobierno son impracticables por un grupo que sobrevive en la guerra y el terror.

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AL CIERRE: Desde el MRE cuentan que el célebre Cicerón está de regreso. Ahora en versión digital se lee en www.angelfire.com/home/ciceron/index.htm