**** Tras 50 años de historia brasileña, FHC fue el primer presidente electo que logró concluir su mandato. En el segundo gobierno, la suerte no lo acompaña.

Debía suponerse que la selección de un sucesor para Fernando Henrique Cardoso FHC, fracturaría la coalición que lo acompañó en sus dos victorias electorales. Pero lo que está ocurriendo en Brasil es una verdadera hecatombe en los más altos escalones  de la dirigencia política. Las tres patas del mueble de Cardoso, sus aliados el PFL y el PMDB, así como el partido de Cardoso el PSDB tambalean en medio de señalamientos de corrupción política y administrativa.

En primer lugar Antonio Carlos Magalhães, el político que ocupó los más importantes cargos en Bahía y en Brasilia, en dictadura y democracia, líder del PFL y ejemplo del estilo de mando de los “coroneles” brasileños. ACM está en la mira, después de haber presidido el Senado y de haber jugado al “presidente de verdad” del Brasil en constante choque  con FHC.  ACM está señalado de haber amañado una votación en el Senado. Se le acusa de haber ordenado modificar el panel electrónico de votaciones, para conocer el voto de cada senador durante el debate para desaforar al para entonces Senador Luis Estevão, empresario, parlamentario por Brasilia y parte del PMDB, señalado de corrupción en la ejecución de obras públicas.

La segunda pata fracturada la representa Jader Barbalho. Senador y exgobernador de Pará  con altas cuotas de poder en los organismos federales que atienden a la Amazonía. Barbalho logró ser presidente del PMDB luego de largas luchas internas, de las cuales uno de las víctimas resultó el expresidente Itamar Franco. Barbalho también obtuvo la actual presidencia del Senado tras derrotar a Magalhães, quien se declaró en campaña para destruir la carrera política de su sucesor. Barbalho está siendo acusado de corrupción administrativa en organismos de financiamiento en la Amazonía.

El PSDB no se salvó. Magalhães acusó de corrupción a cercanos colaboradores del FHC, y ahora, el joven Senador del PSDB José Roberto Arruda podría ser desaforado acusado  de participar en la maniobra de Magalhães en la votación del Senado. FHC mandó a decir desde Québec que no defenderá a Arruda.

La actual crisis reabre espacios electorales para Itamar Franco quien ha coqueteado con la izquierda. Igualmente pudiera ser la oportunidad para un político y empresario de éxito, ajeno a los pleitos de la corte de Brasilia y compañero de FHC: el gobernador reelecto de Ceará, Tasso Jereissati, o de su alter ego, el ex ministro Ciro Gomes.

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AL CIERRE: Los sindicatos protestan, los empresarios piden la renuncia, los campesinos cocaleros marchan hasta La Paz. El país se le salió de las  manos a Hugo Banzer!!!