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4 / El Mundo
/ Lunes / Caracas , 21 de Noviembre de 2005 |
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Mirando el vecindario
¿A qué vino Kirchner?
El viaje del
presidente Néstor Kirchner para cumplir una visita al Presidente
venezolano, a sólo dos semanas de su más reciente encuentro en
Argentina, ha sido interpretado como una movida de emergencia de la
diplomacia caraqueña para compensar los adversos resultados de la
reciente Cumbre de las Américas.
El intento de mostrar un Mercosur unido, rodeando al Presidente
venezolano en momentos en que éste mantiene un sonoro conflicto con
México y refuerza su discurso anti Washington, no contó con el apoyo
de Brasil. Diversas fuentes informativas dieron cuenta de
infructuosas presiones ejercidas desde Caracas y Buenos Aires para
lograr que el presidente Lula asistiera a esta imprevista “minicumbre”.
En Argentina, donde se sabe del poco agrado con que Kirchner atiende
sus compromisos diplomáticos, causó curiosidad el particular interés
puesto en atender los requerimientos caraqueños.
Como se recordará, Kirchner y Chávez se han reunido bilateralmente
en los últimos cuatro meses en Buenos Aires, Brasilia, Salamanca,
Mar del Plata y ahora en Venezuela.
La agenda del nuevo encuentro incluiría el ingreso de Venezuela al
Mercosur y la construcción de un gasoducto suramericano. Aunque
ningún gobierno miembro ha podido explicar de qué se trata,
supuestamente ya el Mercosur aprobó el ingreso “pleno” y “político”
de Venezuela, y en adelante deberá cumplirse la negociación técnica
de los términos “comerciales”. El gasoducto para conectar el Caribe
con Buenos Aires y Montevideo, ya está siendo evaluado por Petrobras,
en cuanto a su factibilidad técnica y financiera. Ya que el costo de
esta idea se estima preliminarmente en US$ 18 mil millones, y
afectaría toda la geopolítica energética de la región, Brasil está
moviéndose con pies de plomo. En definitiva, el estado actual de
tratamiento de los dos temas no justificaba una cumbre presidencial.
Otros asuntos que serían objeto de atención durante la visita de
Kirchner se refieren a contratos de compras (ascensores, barcos,
etc.) sobre los cuales ya los presidentes firmaron una declaración
en agosto. El gran tema con el cual el gobierno Kirchner ha
justificado su viaje, es la posibilidad de obtener que Venezuela le
compre más bonos de deuda pública, según declaraciones del ministro
de Planificación, Julio de Vido. Argentina está pulseando con el
FMI, necesita dinero fresco para ir a la mesa de negociaciones, y
mantener a la vez los niveles de gasto público.
Mientras Kirchner procura petrodólares venezolanos, su canciller,
Rafael Bielsa, en un encuentro con el gobernador de Colorado, EEUU,
informó que está promoviendo “activamente” un incremento de las
exportaciones argentinas hacia Estados Unidos y de las inversiones
estadounidenses hacia Argentina, y anunció que en el 2006 viajará
una “importante” misión comercial a ese país del norte.
En tanto, la diplomacia brasileña marca distancia de Caracas. Ya
está al aire la señal de TV-Brasil, el canal oficial para
Latinoamérica que el Gobierno brasileño creó en contravía del
Telesur .
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