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4 / El Mundo
/ Lunes / Caracas , 01 de Agosto de 2005 |
Mirando el vecindario
BID: Balance de una batalla
La elección
como presidente del Banco Interamericano de Desarrollo del
colombiano Luis Alberto Moreno fue una interesante ocasión
para medir el estado de la política en el vecindario.
Si bien Moreno posee títulos universitarios e historial
laboral en el área económica, su principal carta es la
actividad diplomática en los EEUU desde que fue designado
embajador por el gobierno de Andrés Pastrana.
La negociación de la primera versión del Plan Colombia fue su
primera victoria notoria como diplomático, por lo cual, su
candidatura al BID era esencialmente de origen político y no
técnico, y su apoyo estadounidense venía desde la Casa Blanca
hasta el ex presidente Clinton, quien en persona le hizo
campaña en varios países.
El presidente del BID es electo en dos procesos simultáneos.
Se requiere mayoría accionaria y el apoyo político medido en
una mayoría de votos de los países de la región. Estados
Unidos, Canadá y México sumaron sus votos (40,9% accionario),
garantizando prácticamente la selección de Moreno. El apoyo
político al candidato colombiano, medido por la votación
individual regional, le vino de Centroamérica y el Caribe
(salvo Haití y Surinam), de su socio Ecuador, y de la escisión
del Mercosur (Paraguay y el gobierno socialista uruguayo).
El presidente Alejandro Toledo mantuvo el respaldo a su
candidato, el reconocido economista Pedro Pablo Kuczynski, el
cual obtuvo su único voto.
El gobierno de Lula da Silva movió sus piezas a favor de João
Sayad. Brasil planteó a sus socios del Mercosur la candidatura
de Sayad como una opción grupal, pero sólo Argentina lo
acompañó, y a regañadientes. El gobierno de Néstor Kirchner se
muestra crecientemente descontento por la actitud de Brasil al
que acusa de querer ser un jugador en la política mundial (la
reforma de la ONU, v.g.) a expensas de sus vecinos. Por Sayad
también votaron Chile y Bolivia socios del Mercosur cada uno
de ellos con razones de agradecimiento ante Brasilia.
Haití, país donde está desplegada una fuerza de paz de la ONU
comandada por Brasil, también dio su apoyo a Sayad. Venezuela
tras fracasar con su propio candidato sumó su voto a Brasil.
Pese al publicitado avance de la izquierda en el vecindario y
la intensa diplomacia económica de Brasilia y Caracas, el
candidato del gobierno izquierdista brasileño o el abanderado
de la revolución venezolana no lograron sumar apoyos políticos
que hubiesen obligado ir a una segunda vuelta. El Caribe,
Uruguay y Paraguay prefirieron anotarse desde la primera
votación al candidato apoyado por Washington.
En el interior de Colombia, la salida de Moreno de la Embajada
en Washington pudiera significar un barajo de la política
interna. El presidente Álvaro Uribe ofreció la misión en EEUU
al ex presidente Andrés Pastrana quien aún no se ha
pronunciado. El ingreso de Pastrana al gobierno sería un
fortalecimiento de la posición política de Uribe al sumar a su
causa al sector del conservadurismo que hasta ahora rechaza la
reelección.
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