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LA CULPA de OCHOA

El Universal, Caracas, Venezuela. 09 de marzo de 2002


 

Los bolivarianos han resultado unos revolucionarios con gusto por lo autobiográfico. Ahora  las librerías  ofrecen una gran producción de relatos sobre cómo se fraguaron  los cuartelazos de 1992. La historiografía bolivariana ha ido mostrando desde los seudónimos de guerra de los revolucionarios hasta sus aventuras de alcoba. Y a medida que las distintas versiones van confirmando las anteriores, la claridad sobre la responsabilidad de los hechos de aquel año va quedando develada.

Ya es lugar común que la politización de un grupo de oficiales corrió por varias décadas de la mano de organizaciones de la ultraizquierda. Ahora que se conocen los esquemas organizativos, los corretajes, la participación de altísimos oficiales personal y jerárquicamente próximos al ministro de la defensa. Ahora que los revolucionaros jactanciosamente evocan sus reuniones, encuentros, planes, viajes conspirativos a lo largo del país además de sus giras internacionales. Ahora quedó clara una sensación que siempre existió pero que en aquellos días de apuros y diarios rumores pasó a segundo plano. Me refiero a la responsabilidad personal del para entonces ministro  Fernando Ochoa Antich.

Dado el actual conocimiento del proceso, no puede el general retirado argumentar “alguna” falla en la inteligencia militar, o una suicida prepotencia de CAP. Hoy en día es claro que  existió un abierto, masivo y prolongado trabajo erosivo anti democrático dentro de las Fuerzas Armadas. Sus máximos jefes no hicieron nada para impedirlo, delegando  la formación política de los jóvenes oficiales en Douglas Bravo, Kleber Ramírez, los encapuchados de la UCV,  Pablo Medina. Después vino Ochoa, y en su condición de Ministro hasta mando de tropas les otorgó a los jefes de la conspiración.

Ochoa anda penitente en las marchas de la oposición, mientras los bolivarianos hechos gobierno continúan su plan para desbaratar la institución jerárquica militar, la cual despectivamente califican de “ejercito prusiano

 

 

 

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