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UNA CUMBRE DESCUMBRADA
y Ballestas como anzuelo
Revista ZETA 13 de diciembre, 2001
Cada
día resulta más inútil, incluso para los presidentes de pequeños países
centroamericanos, venir a Venezuela para tomarse una fotografía con Hugo
Chávez. Cuando la Cámara de Representantes ya le aprobó a George Bush la
autorización para negociar el ALCA, y sólo falta el pronunciamiento del
Senado, en el continente todos los países están más interesados en ver cómo
se engranan con la economía global, en vez de la integración política y la
defensa de Cuba que pregona el presidente venezolano.
Ricardo Maduro, presidente electo de
Honduras acaba de regresar a su país, tras unas vacaciones en el extranjero
luego de su victoria. Maduro informó a los medios que ya había hablado por
teléfono con George Bush, con quien se reunirá personalmente antes de la
toma de posesión. Maduro igualmente ya entró en contacto con sus colegas de
México y el recién electo presidente de Nicaragua Enrique Bolaños. El nuevo
presidente hondureño así como Bolaños han mostrado muy poco interés en
acercarse al gobierno venezolano. Ninguno de los dos nuevos presidentes
vendrá a Margarita, a la III Cumbre de la Asociación de Estados del Caribe
AEC, los presidentes aún en ejercicio de dichos países tampoco vendrán.
La reunión de Margarita está siendo promovida
por el presidente venezolano desde abril de 1999, cuando Chávez con dos
meses en Miraflores, viajó a Santo Domingo para ofrecer un programa
petrolero paralelo al Pacto de San José, con lo cual anunció el inicio de la
ayuda petrolera al gobierno cubano. En las últimas semanas, temiendo un
sonoro fracaso en la convocatoria de Chávez a sus colegas caribeños, la
Cancillería venezolana inició una operación de emergencia. El Canciller Luis
Alfonso Dávila y el exsocialcristiano y actual embajador en Bogotá, Roy
Chaderton, realizaron visitas personales a varios países del área,
procurando garantizar la presencia de los jefes de estado del Caribe y
Centroamérica. A mediados de la semana pasada se especulaba en medios
diplomáticos sobre la decisión de México y Colombia de no asistir a la
cumbre presidida por Chávez. A última hora, la decisión de extraditar al
terrorista del ELN José María Ballestas, habría sido el estímulo para que
Andrés Pastrana renuentemente viniera a Margarita. Los presidentes de
Venezuela y Colombia habrían hablado vía telefónica el domingo y Chávez
probablemente le comunicó a Andrés Pastrana la inminente decisión sobre el
secuestrador colombiano.
No obstante los enormes esfuerzos
diplomáticos, la cumbre de Margarita es un virtual fracaso. Salvo Belice y
Costa Rica, ningún presidente centroamericano vino al encuentro, lo cual es
especialmente grave en el caso de la decisión del mexicano Vicente Fox de
desatender la convocatoria. Se supone que Venezuela, Colombia y México son
socios y actúan de común acuerdo ante la comunidad de países del Caribe. Ya
es obvio que México no quiere seguir jugando en el mismo equipo que Caracas,
Fox está trabajando en una alianza comercial con Centroamérica, denominada
el Plan Panamá-Puebla que abarca desde el istmo panameño hasta el sur
mexicano. Igualmente, Fox está muy activo en sus planes de integración
comercial con los países caribeños del CARICOM. Por su parte, Colombia se
resiente por las múltiples violaciones de Caracas a los acuerdos comerciales
existentes con Venezuela en el marco de la Comunidad Andina.
Sin Fox en la platea, el escenario quedó
libre para que Fidel Castro haga gala de su especial ascendencia sobre el
presidente venezolano. Ya desde el fin de semana, las avenidas margariteñas
mostraban banderas cubanas y afiches con el rostro de Fidel Castro, dejando
saber quién es realmente importante para la diplomacia chavista.
Mientras los ministros de relaciones
exteriores del Caribe realizaban sus reuniones previas el día lunes, en
Porlamar se mantenían cerradas las principales zonas comerciales atendiendo
al paro cívico. Las imágenes de conflictividad social que muestra el país
gobernado por Hugo Chávez y sus reiterados ataques contra la integración
comercial y el ALCA, sirvieron de telón de fondo para la cita de Margarita.
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En octubre de 1993 se celebró en Puerto España, la Reunión Cumbre
Presidencial del G3 y de Caricom, a la cual asistió Ramón J. Velásquez
en su condición de Presidente de Venezuela. En esa cumbre, Velásquez,
Cesar Gaviria y Salinas de Gortari decidieron crear una organización que
reuniera a México, Colombia y Venezuela -los de mayor desarrollo dentro
de la Cuenca del Caribe- y los miembros del Caricom. El 24 de julio de
1994 se produjo en Cartagena, Colombia, la Reunión Constitutiva de la
Asociación de Estados del Caribe, Miguel Angel Burelli firmó por
Venezuela la creación de la AEC. En agosto de 1995, a la primera cumbre
presidencial asistió Rafael Caldera.
La Asociación de Estados del Caribe es una
organización multilateral para atender temas de comercio, transporte,
turismo sustentable. Los miembros plenos de la asociación son: Antigua &
Barbuda, Bahamas, Barbados, Belice, Colombia, Costa Rica, Cuba,
Dominica, República Dominicana, El Salvador, Grenada, Guatemala, Guyana,
Haiti, Honduras, México, Jamaica, Nicaragua, Panama, St. Kitts & Nevis,
Santa Lucia, St. Vincent & the Grenadines, Suriname, Trinidad & Tobago y
Venezuela. Los miembros asociados son Aruba, Francia, Guadalupe,
Martinica, y las Antillas Nederlandesas. |
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