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Ser protestatario hoy en día, es más
exigente que en el pasado. Para hacer la revolución se requieren niveles de
ingreso suficientes para financiar anuales viajes a Davos, Seatle o Río,
para impedir el atraque de algun barco ballenero japonés, o simplemente para
romper los vidrios que alguna sucursal de McDonalds en Moscú. Porque
McDonalds se ha transformado en el símbolo del neo colonialismo llamado
globalización, y por eso, los revolucionarios del siglo XXI quiebran
vidrieras de McDonalds.
Pero creo sinceramente que en el caso
venezolano, las McDonalds han triunfado porque sin proponérselo forman
parte del “ser venezolano”.
Cualquier economista (graduado eso sí,
antes de que incluyeran matemática y econometría en el
pensum),
sociólogo o politólogo profesor de la UCV, e inminente candidato a ministro
del gobierno revolucionario, tendrá que convenir que el modelo “combos” es
parte indisoluble de nuestra identidad nacional...y cuidado, probablemente
un análisis histórico nos señale que el combo nació en tierras patrias...y
los gringos se robaron la idea. Debo recordar que antes los muchachos con
intenciones musicales no organizaban bandas ni grupos: organizaban combos.
Hoy en día hay combos para todo lo
que, usted estimado lector, podría imaginar. Creo que incluso, lo
excepcional es poder comprar algo sin que esté atado a algun otro producto
complementario.
Cerca de la Iglesia de La
Chiquinquirá en Caracas, ofrecen un combo solidario formado por pollo,
carne molida, carne para guisar, carne para desmechar y bistés. En diciembre
pasado, el mismo establecimiento desplegó una pancarta ofreciendo un combo
con carne de cerdo, res, gallina y tocino: el combo hallaca lo llamaba.
En algunos supermercados, aquella
famosa bolsa con verduras y un poquito de hierbas, el caraqueñísimo
“compuesto”, se ha convertido en el combo para el sancocho. Un pastelito de
queso con un juguito también es un combo. Hasta mi concuñada Maite,
estrella en materia de pastelería y repostería, ha incluido en su menú
algunos combos de dulces y tortas para la fiesta de los niños.
Pero combos no existen sólo en el
sector alimentario.
Ayer Olga mientras procuraba
algunos materiales de papelería en un drug store caraqueño, encontró un
práctico combo navideño, contentivo de platos de plástico verdes, platos de
plástico rojos, cuchillos, tenedores y cucharas verdes y rojas, un mantel y
servilletas de papel con motivos navideños.
Combos de teléfonos celulares con
tarjetas de prepago, también han sido vistos. Hoy por cierto, en uno de los
periódicos encontramos el aviso de una óptica que ofrece un combo: examen de
vista y lentes “al aire”, a un muy módico precio.
Incluso los medios de comunicación
se apresuraron a calificar de combo, a los sobre que han estado recibiendo
los altos mandos militares y que contienen un panfleto, una “prenda íntima”
y un video.
Los combos son tan criollos que la
nueva Carta Magna, la revolucionaria Constitución de 1999, la Bolivariana
mejor dicho, ha elevado el combo a lo más alto de la pirámide legal,
llevándolo hasta donde nunca el combo había llegado. El combo ahora tiene
rango constitucional, soberano y bolivariano.
El combo presidencial, inspirado
como ya se explicó, en la tradición combera nacional, está formado por un
presidente seleccionado a voto y un vicepresidente que nadie sabe de dónde
sale. Vicepresidente que sin que nadie lo conozca, podría ser el Presidente
de la República por dos añitos, en caso de que “el soberano” decida sacar al
Presidente por la vía del llamado referéndum revocatorio. Es decir. Después
que usted pide el combo, no hay forma ni manera de que le cambien las
papitas medianas por unas grandes. Se come las medianas y se acabó.
Claro que en un Mac Donalds uno
queda con la certeza que las papitas son papitas y la coca cola es coca
cola. Pero en el caso de la combo-vicepresidente nada está claro. Dicen que
es profesora universitaria, pero al parecer apenas ahora está por obtener un
postgrado en (adivinan???) el Cendes de la UCV. También dicen que es una
administradora nata. Pero sólo se sabe que era asistente administrativa
(adivinen???) en la UCV. También dicen que tiene una gran experiencia
internacional...en gestiones para endeudar al país.
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Saludos para todos. Nos seguimos
hablando... y hasta la próxima vez.
PD:
Por cierto, mi concuñada tiene hasta una página en la web con sus combos.
Pueden visitarla.
Otra PD:
Prefiero usar el término “prenda íntima” y no “pantaleta” u otro nombre para
esa prenda íntima femenina, ya que todavía no he podido grabar en disquetes
todo el contenido del disco duro de mi computadora, y ahora uno nunca sabe
cuando el Ministro de la Defensa se le va ocurrir mandar a buscarl
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