JOSÉ STALIN : GRAN MARXISTA-LENINISTA, CONSTRUCTOR DEL SOCIALISMO

EN LA URSS Y DIRIGENTE DEL PROLETARIADO INTERNACIONAL




El 5 de marzo recién pasado se cumplio 40 años de la muerte de José Stalin. Durante los 30 años que ejerció el mando supremo del Partido Comunista (Bolchevique) y de la URSS, fue atacado por los enemigos del país soviético; la burguesía, la socialdemocracia y los trotskistas, los que lo acusaban de haber instaurado un régimen totalitario en el cual se hacía su voluntad y que realizaba purgas sangrientas de su opositores.

Estas burdas acusaciones nunca fueron tomadas en cuenta por la clase obrera de los países socialistas, la que hacia suyas las grandes realizaciones del país socialista, el que a través de los planes quinquenales se transformaba de un país agrario atrasado en una potencia industrial. Teniendo una admiración y cariño por José Stalin, afecto que se acrecentaron con el triunfo del Ejercito Rojo sobre la Alemania nazi.

Cuando las fuerzas del socialismo se acrecentaban en el mundo a costa del debilitamiento del capitalismo, Nikita Jrochov, quien se hizo de la Secretaria General del PCUS en 1954 y de la dirección del Estado soviético en 1955, ataca, en 1956 en el XX Congreso del PCUS, en la persona de José Stalin los fundamentos políticos e ideológicos de la dictadura del proletariado, de la construcción del socialismo y la teoría leninista de la Revolución Proletaria, lo que hace posible el fortalecimiento del oportunismo de derecha en el movimiento comunista internacional, que hace suyo las tesis revisionistas de la "vía pacifica al socialismo", debiendo los marxistas-leninistas de los países capitalistas agruparse en nuevos partidos Comunistas (salvo raras excepciones como el Partido Comunista Do Brazil, del cual fueron expulsados los revisionistas), algunos de los cuales no estuvieron libres de errores políticos, como fue el caso del Partido Comunista Revolucionario chileno, que lo llevaron a su disgregación durante la Dictadura.
La caída de la URSS y de los regímen de los países del este europeo, los revisionistas tratan de justificarla recurriendo a  las viejas acusaciones trotskistas al culpar de las causas de dicha caída al "socialismo burocrático stalinista" imperante en los 75 años de existencia de la URSS, ocultando que la declinación de la Unión Soviética y de las Democracias Populares se inicia a la muerte de José Stalin en 1953, cuando Jruchov inicia sus reformas revisionistas. Reformas que fueron incrementadas en el periodo de Brezhnev, las que propiciaron la ganancia capitalista y un mayor estimulo económico a los trabajadores y cuya culminación llego con Gorbachov y su Perestroika, con los resultados ya conocidos.

Para los revisionistas las reformas capitalistas de Jruchov y Brezhnev estaban destinadas a establecer la "democracia socialista" terminando con el "régimen burocrático stalinista", pero lo único que lograron fue hundir en una crisis económica-politico-social a la Unión Soviética. Para éstos la Perestroika perseguía sacar al país soviético de dicha crisis, restableciendo la "democracia socialista", pero que Gorvachov no había sabido implementar, permitiendo que los burgueses tomaran el poder.

Toda esta gasfiteria política del revisionismo sólo perseguía endosar a José Stalin los resultados del oportunismo jruchovista, que los llevo a traicionar la Revolución de Octubre, buscando salir inermes del juicio político de la clase obrera y salvar todas su tesis del revisionismo jruchovista sobre la conquista del poder político de la clase obrera por la "vía pacifica" y de la utilización del Estado burgués para la construcción del socialismo.

Los marxistas-leninistas estamos abocados a un estudio exhaustivo de la experiencia socialista en la URSS. Nosotros, la O.C.R.,partimos para ello separando la época de gloria del socialismo la que se inicia con la Revolución de Octubre hasta 1953 año de la muerte de José Stalin, con la del revisionismo jruchovista y cuyas consecuencias ya conocemos. Lo que nos interesa es profundizar en las causas que permitieron el surgimiento del revisionismo al interior del PCUS, el cual se estuvo incubando en el periodo stalinista. Nuestras primeras conclusiones es que éste no surgió como causa directa por la existencia de un aparato administrativo del Estado Soviético o por el hecho que el Partido a través de sus cuadros dirigiera la Unión Soviética, lo que el revisionismo y los trotskistas llaman el "burocratismo stalinista" atacando con esto la dictadura del proletariado y el rol dirigente que Partido Comunista desempeño en la etapa socialista.

Ya Lenin había fustigado a Trotski y a Bujarin por sus tesis "democracia en la producción" lo que ahora los revisionistas y trotskistas llaman "socialismo democrático". "En el transito al socialismo - los alecciona Lenin - es inevitable la dictadura del proletariado, pero esta dictadura no la ejerce la organización que comprende a la totalidad de los obreros industriales... el Partido, por así decirlo, recoge en su seno a la vanguardia del proletariado, y esta vanguardia ejerce la dictadura del proletariado ("Los Sindicatos, el momento actual y los errores de Trotski" tomo 32 Editorial. Cartago 2o.Edición). Y esto porque el proletariado se encuentra fraccionado por los resabios burgueses y pequeños burgueses, degradados y falto de una disciplina política.

La existencia de un Estado Proletario conlleva- cuando se da en las condiciones de la URSS - el peligro que surjan una clase burocrática y que ésta se apodere del aparato estatal, cuando el Partido pierde la perspectiva socialista y la confianza en las fuerzas revolucionarias internacional. Y en la Unión Soviética esto acontecio a la muerte de José Stalin, cuando elementos como Jruchov, Beria y Mikoyan, los que ante la debilidad ideológica de Malenkov, Vorochilov, Bulganin y otros del Presidium del PCUS se impusieron a Molotov el que defendió los principios marxistas -leninistas hasta la expulsión del PCUS en 1957, junto a Malenkov y Kaganovic que se le habían unido en su lucha contra Jruchov, al que no pudieron derrotar por encontrarse aislados de las bases del Partido, bastándole a Jruchov llamar a Moscú a sus adeptos del Comité Central para revocar el acuerdo del Presidium que lo desplazaba del Poder.

Y esta clase burocrática se había empezado a gestar como consecuencia de las medidas que se debieron tomar para enfrentar la emergencia nacional que significaba hacer frente a la invasión hitleriana. Cuando se debió centralizar toda la vida de la Unión Soviética en mandos jerarquizados, que significo entregar autoridad a personas por encima de lo estipulado en la nueva Constitución Política de la URSS aprobada en 1937, en desmedro de una mayor integración del pueblo soviético a la dirección del Estado. Situación que habría continuado al terminar la II Guerra Mundial, ante la necesidad de reconstruir el país.

Jruchov y sus secuaces se apoyaron en aquellos funcionarios que se habían acostumbrado al puesto que se le había entregado en el Partido y en el Estado, los que estaban dispuesto a hacer todo por conservarlo, incluso el atentar contra la vida de José Stalin, cuando éste inicia una campaña rectificadora. La muerte sorprende a Stalin al inicio de ésta, quedándo el camino libre a estos revisionistas comenzando la decadencia de la URSS, devorada por la clase burocrática que el jruchivismo alimento.

Del surgimiento del revisionismo no se puede culpar a Stalin, así como del desarrollo de los burócratas, por las medidas políticas porque a nuestro entender eran las que se tenían que llevarse a cabo para salvar al país soviético. La deficiencia estuvo en no haber captado a tiempo los efectos secundarios de dichas medidas, lo que también se debió a las responsabilidades que Stalin tuvo que asumir por causa de la guerra, lo que lo mantuvo aislado del pueblo soviético y a que los revisionistas nunca actuaron abiertamente ante él. La limpieza del Partido que se hizo del 34 al 37 para eliminar a los zinovietistas, trotskistas y bujarinistas - los que recibieron su castigo de acuerdo a la gravedad de su falta, sumió a los disidentes en un silencio mortal, los que favorecidos por el conflicto bélico, lograron sobrevivir sin ser descubiertos ante la ausencias de una lucha ideológica en el Partido, en el cual se integrara al proletariado, al igual que en los juicios de Moscú.

José Stalin pudo haber incurrido alguna vez en uno u otro error de apreciación con relación a algún problema surgido en el proceso de construcción socialista en la URSS o correlación a aspectos de la táctica del movimiento comunista internacional, pero estos nunca fueron de principios, razón por la cual no tienen ninguna transcendencia en la caídas de la URSS.

Los ataques a su persona por parte de la burguesía imperialista, de los revisionistas y trotskistas, no lograran destruir nunca su gran obra y mucho menos enlodar su vida. la que entrego al servicio de la Revolución Proletaria Mundial. Para todo Marxista-Leninista es tarea de honor defender a José Stalin y su obra.

E.B.H.


publicado en "Causa Obrera" Mayo de 1993