MIOMATOSIS
UTERINA
INTRODUCCION
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La
miomatosis uterina es la presencia de uno o varios tumores benignos formados por fibras
musculares del �tero o matriz. Se considera la tumoraci�n m�s frecuente del aparato
genital femenino. Tambi�n se le denomina Leiomiomas o fibromas uterinos.
GENERALIDADES
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Los
miomas se originan en el cuerpo del �tero aunque tambi�n lo pueden hacer con menos
frecuencia en el cuello y en ocasiones en el ligamento ancho (Leiomioma
intraligamentario). Inicialmente todos los miomas son intramurales y a medida que
transcurre el tiempo se hacen submucosos o subserosos. Los del cuerpo uterino pueden ser
intramurales, submucosos, subserosos. Los submucosos y los subserosos pueden peduncularse
y los primeros a veces protruyen a trav�s del c�rvix recibiendo el nombre de mioma
naciens el cual se infecta con frecuencia o se confunde con p�lipos endocervicales o
endometriales. Los subserosos deforman el contorno del �tero llegando a comprimir
�rganos vecinos si crecen exageradamente.
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Pueden
ser �nicos pero generalmente son m�ltiples (66%) y var�an de tama�o entre unos cuantos
mil�metros y 20 - 25 cms. de di�metro; su peso var�a entre unos cuantos gramos y hasta
65 kilogramos; su forma es redonda aunque algunos lo son lobulados y est�n rodeados de
una seudoc�psula compuesta de tejido conectivo que hace f�cil enucleaci�n. Est�n
compuestos de fibras musculares lisas arremolinadas, dispuestas en diferentes direcciones,
de distinto tama�o, fusiformes y con n�cleos elongados. El Leiomioma submucoso tiene un
alto contenido de fibra muscular lisa mientras que el subseroso lo es en tejido fibroso.
Son duros, bien circunscritos de color p�lido o ros�ceo y protruyentes cuando se cortan.
Adquieren su vascularizaci�n del tejido vecino a trav�s de venas y arterias que se
distribuyen y entran al azar, excepci�n hecha de los miomas pediculados, siendo esta
irrigaci�n muy rica principalmente alrededor de ellos, lo cual hace que en ocasiones
sangren profusamente en el momento del acto quir�rgico (Miomectom�a) de no tenerse
cuidado con la hemostasia.
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Se
desarrollan, en ocasiones, como respuesta a los altos niveles de estr�genos que algunas
pacientes tienen en edad f�rtil y regresan en los a�os posteriores a la menopausia;
adem�s responden a los an�logos de la GnRH. El n�mero de receptores de estr�genos en
los miomas es superior al del miometrio que los rodea. La conversi�n de estradiol en
estrona en los miomas se realiza en una forma m�s lenta que en el endometrio. Sin
embargo, muchos miomas peque�os no crecen en presencia de elevados niveles de
estr�genos. Tambi�n tienen receptores para progest�genos y en algunos casos tienen
acci�n hematopoy�tica.
CLASIFICACION
Tipos
de Miomas:
ETIOLOGIA
a) Se
cree que son causados por una excesiva estimulaci�n de los estr�genos (hormonas que se
producen en los ovarios), que act�an sobre una o varias c�lulas de las fibras musculares
del �tero susceptibles a responder en forma exagerada, dando lugar a la proliferaci�n
desmedida y la formaci�n de tumores.
b) C�lulas
de origen proveniente de nidos celulares embrionarios persistentes.
c) El
tumor se formar�a a partir del m�sculo liso de los vasos sangu�neos.
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POR QUE SE DICE QUE ES UNA TUMORACION BENIGNA?
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Por
que a diferencia del c�ncer, su crecimiento est� limitado a un solo �rgano (�tero) y
no tiene la capacidad de liberar c�lulas que, al ser transportadas por la corriente
sangu�nea o linf�tica, dar�an lugar al desarrollo de tumores en otros �rganos
distantes (met�stasis)
b) Raza:
Es m�s com�n en las mujeres negras que en las blancas y m�s en las orientales que en
las sajonas.
c) Paridad:
Mientras m�s embarazos a t�rmino, menor frecuencia de miomatosis. Esto probablemente se
deba al efecto protector de la hormona progesterona, que se mantiene elevada durante el
embarazo. De all� que sea frecuente observar miomatosis en mujeres con esterilidad, que
han retrasado la edad de su primer embarazo, o en las que no han deseado tener hijos. Si
existe embarazo hay que valorar con mucho cuidado el crecimiento de los fibromas, por la
posible alteraci�n que puede producir en la madre o el embri�n.
d) Obesidad:
Por cada 10 Kg. De exceso de peso, aumenta el riesgo de padecer miomatosis en un 21%, ya
que el tejido adiposo produce una hormona semejante a los estr�genos (estrona), que
parece estimular el desarrollo de Miomas.
FACTORES
DE PROTECCION
b) Eso
de anticonceptivos: Sobre todo aquellos basados �nicamente en derivados de la
progesterona (Ej. Depropovera, Progestasert, Norplant)
c) Tabaquismo:
Por cada 10 cigarrillos consumidos al d�a disminuyen las posibilidades de padecer
miomatosis un 18% y por cada 20 cigarrillos las posibilidades disminuyen hasta un 66%.
Esto se cree que es debido acierto efecto antiestrog�nico causado por las substancias
existentes en el tabaco.
SIGNOSINTOMATOLOGIA
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Depender�
en gran medida de la localizaci�n, tama�o i n�mero de los miomas. Aunque m�s del 50%
de los Leiomiomas son asintom�ticos.
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Subserosos:
Su sintomatolog�a se relaciona con la compresi�n de �rganos vecinos. Si comprimen
vejiga pueden dar s�ntomas de infecci�n urinaria (ardor al orinar, micci�n frecuente y
en poca cantidad, etc.), o incluso incapacidad para contener la orina. Si comprimen el
intestino grueso podr�n ocasionar constipaci�n, dolor durante la evacuaci�n o incluso
oclusi�n intestinal. La compresi�n sobre las arterias o venas de la pelvis condicionar�
4el desarrollo de varicosidades, inflamaci�n de miembros inferiores o sensaci�n de
pesantez p�lvica.
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Intramurales:
Interfieren con la contractilidad uterina, comprimen los plexos venosos y arteriales y, a
la larga condicionan la presencia de menstruaciones prolongadas y abundantes, sangrado
intermenstrual y dolor durante la menstruaci�n, adem�s de estar relacionados en muchos
casos con esterilidad e infertilidad.
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Submucosos:
deforman el interior de la cavidad uterina y son los que con mayor frecuencia pueden
ocasionar aumento en el sangrado menstrual y c�licos. Son un importante factor causal de
esterilidad y pueden crecer tanto que salen a trav�s del cuello uterino (aborto o parto
del mioma)
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El
sangrado anormal es quiz� el m�s importante de los signos producidos por la miomatosis.
El sangrado intermenstrual (metrorragia) es at�pico de los miomas a no ser que se
encuentre un tumor submucoso y pediculado.
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La
magnitud de la hemorragia suele ser progresiva anemizando a las pacientes y se vincula con
la expulsi�n de co�gulos que pueden causar dismenorrea secundaria.
MECANISMO DE PRODUCCION MENORRAGIA, METRORRAGIA Y DOLOR
2. El
crecimiento progresivo de los miomas submucosos, el adelgazamiento del endometrio, la
necrosis y la ulceraci�n de �ste son el mecanismo de producci�n de la metrorragia.
3. Hasta
un 30% de las mujeres con miomas experimentan dolor abdominal, �ste generalmente se debe
a una degeneraci�n aguda; tambi�n puede ocurrir por la torsi�n de un ped�culo de un
tumor subseroso o por el prolapso de un mioma submucoso a trav�s del c�rvix. El dolor
cr�nico es at�pico y deber�n descartarse otras patolog�as como Adenomiosis, enfermedad
inflamatoria p�lvica, el s�ndrome de intestino o col�n irritable y la cistitis
intersticial.
DIAGNOSTICO:
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CLINICO
(
Anamnesis, ex�men f�sico y ginecol�gico) El diagn�stico cl�nico se basa
principalmente en la sintomatolog�a de la cual se ha hablado previamente y en los signos
encontrados al ex�men ginecol�gico. Cuando el ex�men p�lvico es satisfactorio es
f�cil hacer el diagn�stico de �tero miomatoso al palparlo aumentado de tama�o,
irregular, m�vil, central y no doloroso.
EXAMENES:
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Ultrasonograf�a p�lvica es el recurso
imagenol�gico de confirmaci�n m�s �til con este prop�sito, sin embargo, es muy
importante asegurarse de la calidad del estudio. Para el informe de ultrasonograf�a ya no
es suficiente se�alar s�lo datos compatibles con miomas uterinos. El volumen uterino, el
n�mero de los miomas, su localizaci�n con respecto al endometrio, la valoraci�n de los
anexos y un rastreo r�pido de los ri�ones deber� constituir la informaci�n est�ndar.
Los tumores peque�os de menos de 2 cms. generalmente pasan inadvertidos, y es imprecisa
en la identificaci�n de miomas pedunculados que se extienden hacia el ligamento ancho lo
mismo que en la diferenciaci�n de miomas y leiomiosarcomas; con frecuencia se confunde
con la adenomiosis y se han encontrado estudios completamente normales hasta en 22% de
pacientes con miomatosis.
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Histerosalpingograf�a es �til para el estudio de
pacientes con miomatosis que concomitantemente presentan infertilidad. La presencia de
miomas submucosos pedunculados o no, de p�lipos que dan im�genes de defecto dentro de la
cavidad uterina; la dificultad en el paso o la obstrucci�n completa al medio de contraste
en el �tero o las trompas son importantes ante la sospecha de una miomatosis.
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Resonancia magn�tica se considera hoy la t�cnica
de imagen m�s precisa para la detecci�n y localizaci�n de leiomiomas. Localiza con
precisi�n los miomas teniendo como referencia el endometrio. Permite hacer diagnostico
diferencial con otras estructuras p�lvicas como los ovarios, con la adenomiosis. Detecta
aumento de vascularidad dentro o alrededor de los miomas.
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Laparoscopia diagnostica es �til ante la
presencia de masas que ocupan las fosas il�acas para hacer el diagnostico diferencial
entre miomas subserosos pedunculados y masas anexiales. Tambi�n en el caso de �tero
bicorne.
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Tomograf�a computarizada que ha demostrado su
utilidad en otros aspectos, esta cuestionada en la valoraci�n de miomas uterinos. Esto se
debe a los criterios inespecificos disponibles para el diagnostico de patolog�a benigna.
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Histeroscop�a ha demostrado ser un recurso
indispensable , en particular para la valoraci�n de una hemorragia uterina anormal. La
histeroscop�a detecta tumores submucosos con precisi�n y permite definir si la
intervenci�n quir�rgica debe realizarse por esta v�a o por v�a abdominal.
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DEGENERACION ROJA: La presencia de necrosis y
hemorragia intratumoral, constituye la degeneraci�n roja.
DIAGNOSTICO
DIFERENCIAL
Depende
en buena parte de la edad de la mujer, de su deseo de embarazo, s�ntomas, tama�o y
dem�s caracter�sticas de los tumores. La mayor�a de las veces no requieren tratamiento,
sobre todo si son asintomaticos o si la paciente se acerca a la menopausia.
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Las
mujeres asintomaticas, aquellas cuyos s�ntomas no son tan intensos, quienes no deseen
operarse, pueden manejarse de manera expectante realiz�ndose un control peri�dico cada
6-12 meses mediante examen ginecologico y una
ecograf�a p�lvica.
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El
tratamiento farmacologico comprende varias sustancias a utilizar. Los f�rmacos
antiinflamatorios no esteroideos (naproxen, ibuprofeno) pueden controlar la menorragia por
inhibici�n de la s�ntesis de prostaciclina, iniciando su empleo uno o dos d�as antes de
empezar la menstruaci�n para el alivio de s�ntomas como dismenorrea, dolor p�lvico y
menorragia. Los anticonceptivos orales de estrogenos-progestagenos en dosis bajas tambi�n
son eficaces para controlar las menorragias.
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Los
progestagenos (progesterona) a dosis de 20-30 mg. Diarios durante 3-4 meses mostr�
involuci�n en tama�o de los miomas en un 25-50%. El mayor problema para el tratamiento
con estas sustancias es la cantidad de receptores para ellas en los tumores lo cual
modifica sustancialmente el tratamiento.
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La
mifepristona (RU486) es un esteroide sint�tico con actividad antiprogesterona, tambi�n
es utilizado en el tratamiento de la miomatosis. Su utilizaci�n durante periodos
prolongados mostr� reducci�n de los miomas hasta en un 87% de su volumen a la vez que
induc�a amenorrea. El uso de RU486 parece promisorio para tratar los leiomiomas.
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La
utilizaci�n de los androgenos como la testosterona a dosis de 25 mg. IM tres veces a la
semana durante 3-4 meses tiene un efecto similar a los progestagenos. Otros androgenos
como la gestrinona produce una reducci�n en el tama�o de los miomas que dura hasta un
a�o despu�s de suspendido el tratamiento. Los efectos secundarios como acn�,
hirsutismo, seborrea y aumento de peso desaparecieron al suspender el tratamiento.
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Los
an�logos de GnRH al unirse a los receptores causan un aumento breve de la secreci�n de
gonadotropinas, as� como de estrogenos, seguido de regulaci�n descendente de los
primeros, con decrecimiento ulterior de FSH Y LH. Una a tres semanas despu�s de iniciar
el tratamiento ocurre un efecto de hipogonadismo hipogonadotropo y como consecuencia de
ello vienen los efectos de hipoestrogenismo y si la terapia es muy prolongada
osteoporosis. La disminuci�n de tama�o uterino es entre 25 a 80%, m�ximo a las doce
semanas. Pronto ocurre recrecimiento con retorno de los s�ntomas y la menorragia a cuatro
meses de suspendido el tratamiento. El uso de an�logos de la GnRH puede ser �til para
interrumpir la hemorragia y facilitar un funcionamiento hemodinamico optimo antes de la
intervenci�n quir�rgica. Las pacientes que no desean intervenci�n quir�rgica pueden
recibir tratamiento coadyuvante con an�logos de la GnRH a largo plazo y
estrogenos-progestagenos.
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Tama�o
uterino similar a 12-14 semanas de gestaci�n
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Ovarios
no evaluables al examen f�sico o a la ecograf�a
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Menorragia
progresiva y severa
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Compresi�n
de �rganos vecinos
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Dolor
p�lvico agudo
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Infecundidad
o aborto habitual
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Mioma
naciens
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MIOMECTOMIA LAPAROSCOPICA: Sustituye a la
miomectomia abdominal en casos seleccionados con ventajas para la paciente como evitar el
dolor de una incisi�n abdominal, aminorar el tiempo de hospitalizaci�n y bajas tasa de
infecci�n postoperatorias. Consiste en resecci�n del mioma a trav�s de incisi�n
abdominal ante tumores grandes o mediante Laparoscopia si son mas peque�os; se indica en
pacientes que desean continuar descendencia y sean menor de 35 a�os.
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COAGULACION LAPAROSCOPICA: (Miolisis) es un
sustitutivo seguro y viable de la miomectomia o la histerectom�a en mujeres que ya no
deseen procrear. Debe realizarse tratamiento previo con agonistas de la GnRH para
disminuir el tama�o de los miomas hasta en un 30% por un tiempo de mas o menos seis meses
y luego se coagulan o se realiza lisis de ellos con l�ser de Nd:YAG.
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Distorsi�n
de la cavidad endometrial que afectan el establecimiento del embarazo y su mantenimiento.
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Elongaci�n
y distorsi�n de la cavidad endometrial puede impedir el transporte de espermatozoides.
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Afecci�n
del sost�n vascular del tejido endometrial que cubre los miomas submucosos
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Compresi�n,
inflamaci�n y ulceraci�n del endometrio produce alteraciones bioqu�micas en l�quido
uterino que alteran viabilidad, transporte, disposici�n de espermatozoides, sost�n del
blastocisto, anidaci�n y mantenimiento del embarazo temprano.
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Obstrucci�n
de los cuernos por la presencia de miomas en la porci�n intestinal.
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Alteraci�n
de los mecanismos neuromusculares delicados que regulan la uni�n uterotub�rica.
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Distorsi�n
del trayecto normal de la trompa de Falopio y alteraci�n de la relaci�n anat�mica entre
la porci�n distal de la trompa y el ovario.
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Obstrucci�n
de la luz de la trompa, ante la presencia de miomas intraligamentarios.
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Desplazamiento
del cuello uterino por la presencia de miomas subcervicales o cervicales posteriores.
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Botero
J, Jubitz A, Henao G: Leiomiomatosis uterina, Obstetricia y Ginecolog�a cuarta edici�n.
572-575 1989
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Frederickson
H, Wilkins-Haug L: Utero Leiomiomatoso. Claves en Obstetricia y Ginecolog�a. Primera
edici�n 30-32 1993
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Mattlingly
R, Thompson J, Te Linde R: Leiomiomas Uterinos. Ginecolog�a operatoria. Sexta edici�n.
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Gonz�lez
Merlo: Ginecolog�a.
�
Hhttp://www.erha.com.mx/informa/erha10/tratamiento.htm
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