Volver al Observatorio de Conflictos 

Indira Gandhi
Discurso en la Séptima Conferencia de Jefes de Estado o Gobierno de Países No-Alineados, Nueva Delhi, 7 de marzo de 1983.

Cuando asumió las riendas del gobierno en 1946, mi padre, Jawaharlal Nehru, declaró la determinación de la India de “mantenerse lejos de los bloques o grupos de poder, alineados uno contra otro, que han conducido en el pasado a guerras mundiales y que pueden nuevamente conducir a desastres en una escala aún mayor.” Luego, el explicó que de lo contrario “las relaciones exteriores dejan de estar en vuestras manos para estar a cargo de algún otro, hasta el punto y en la medida que no se es independiente... De manera que nuestra política será no sólo mantenernos lejos de los alineamientos, sino también tratar de hacer posible la cooperación amistosa. Nos acercamos al mundo entero sobre la base de la amistad.”

A medida que más países se volvían libres, se incrementaba rápidamente el número de quienes creían en la coexistencia pacífica y deseaban mantenerse al margen de las alianzas militares. Era natural para estos países no-alineados el unirse, no para formar otro bloque sino para alzar las voces de los millones de explotados mediante un movimiento moral y político.

El propio crecimiento en la membresía de nuestro Movimiento --veinticinco en Belgrado, cien hoy-- prueba que el no-alineamiento es sentido como una necesidad por un gran número de gente en varios continentes.

Su significancia no debe ser medida por el número de divisiones militares o el de megatones de poder destructivo que comandamos sino por la intensidad con la que deseamos la paz y la libertad, el desarrollo y la justicia internacional.

Otros gobiernos tendrán opiniones contrastadas sobre lo que es correcto y lo que no lo es. Nosotros, los no-alineados hemos elegido la paz, la cual seguramente es la opción correcta e inevitable. Hemos buscado y continuamos buscando la amistad con todos, excepto con los gobiernos que son racistas o amenazan la libertad difícilmente conseguida por otros. El no-alineamiento no es algo vago, ni negativo, ni neutral.

No-alineamiento es independencia nacional y libertad. Sostiene la paz y el evitar la confrontación. Alienta el mantenerse lejos de las alianzas militares. Significa igualdad entre las naciones y la democratización de las relaciones internacionales, económicas y políticas. Quiere la cooperación global para el desarrollo sobre la base del beneficio mutuo. Es una estrategia para el reconocimiento y preservación de la diversidad mundial.

...La humanidad se está balanceando al borde del colapso del sistema económico mundial y de la aniquilación a través de una guerra nuclear. ¿Si ocurrieran estas tragedias, podría alguno de nosotros, grande o chico, rico o pobre, del norte o del sur, de este o del oeste, escapar? Déjennos analizar la crisis económica. Nosotros los del mundo en desarrollo no tenemos margen de seguridad. Seremos las peores víctimas en cualquier retroceso económico. En este mundo interdependiente, en el que no se puede “mover una flor sin poner en problemas a una estrella”, aún los más influyentes no son inmunes a tales disturbios.

...El desarrollo, la independencia, el desarme y la paz están relacionados estrechamente. ¿Puede haber paz junto a armas nucleares? Sin paz, decía mi padre, todos nuestros sueños de desarrollo se convierten en cenizas. Se ha señalado que nuestros gastos militares mundiales son veinte veces más que el total de asistencia al desarrollo. Cada día, cada hora, se incrementa el tamaño y la letalidad de las armas nucleares. Un misil nuclear cuesta cuatro billones, lo que es más que el producto nacional bruto de 53 países. La amenaza de la serpiente está difundida. La humanidad observa con miedo aterrador, esperando contra toda esperanza que no atacará. Nunca antes la Tierra ha enfrentado tanta muerte y tanto peligro.

El poder destructivo contenido en almacenes nucleares puede eliminar la vida humana, incluso toda la vida, muchas veces y prevenir su reaparición en el futuro. Es terrorífica por su vivacidad la descripción que hacen de esto los científicos. Sin embargo, algunos estadistas y estrategas actúan como si no hubiera mucha diferencia entre esto y las primeras piezas de artillería. La carrera armamentista continúa a causa de la búsqueda de poder de algunos hombres, y también a causa de que a su sombra florecen muchas industrias e intereses. Más recientemente, se ha propagado la noción de que son utilizables armas nucleares tácticas en “guerras limitadas”. Poderosos estados propagan la insostenible doctrina de la disuasión. Nuevas áreas son puestas dentro del alcance de los grupos estratégicos, los bloques y alianzas militares. Están siendo establecidas nuevas bases y facilidades. Por esto es que nuestras respuestas deben ser más seguras, más veloces y más cortante.

El deseo de paz es universal incluso en aquellos países que producen armas nucleares y en aquellos donde son desplegadas. El Movimiento No-Alineado es el mayor movimiento pacifista de la historia. Da la bienvenida a las manifestaciones espontáneas de los pueblos. Pero los gobiernos persisten en proponer, practicar y seguir los autodenominados intereses estratégicos, esferas de influencia, equilibrio de poder, relaciones tutelares que son una reminiscencia de la antigua teoría del derecho divino.

La paradoja de nuestra época es que en tanto las armas se vuelven crecientemente sofisticadas, las mentes permanecen prisioneras en ideas de tiempos más simples. Técnicamente, la época colonial ha terminado. Pero el deseo de dominar persiste. El neocolonialismo viene envuelto en todo tipo de disfraces --en la tecnología y las comunicaciones, en el comercio y la cultura. Hace falta determinación e integridad para resistirlo. Hay presiones políticas y económicas intensas. La limitada viabilidad económica, de hecho la propia supervivencia de muchos de los no-alineados, especialmente de aquellos con poca población, está amenazada mediante barreras artificiales. En el comercio, la transferencia de tecnología y el acceso a recursos. Estará en nuestra habilidad delinear medidas para auxiliar a estas naciones pequeñas a mantener su independencia y no-alineamiento.

Sólo con coexistencia puede haber existencia. Nosotros observamos la no-interferencia y no-intervención como a leyes básicas de la conducta internacional. Sin embargo diferentes formas de intervención, abierta o encubierta, tienen lugar en Asia, en África, en América Latina. Todas son intolerables e inaceptables. La interferencia conduce a la intervención y una intervención frecuentemente trae otra. Ninguna potencia individual ni grupo de potencias tiene la justificación o autoridad moral para interferir o intervenir de esa manera. Ustedes no pueden condenar una instancia y perdonar la otra. Cada situación tiene sus propios orígenes. Cualesquiera sean, las soluciones deben ser políticas y pacíficas. Todos los estados deben sostener el principio de que la fuerza o la amenaza de fuerza no sea usada contra la integridad territorial o la independencia política de otro estado.

...Nuestros planes para una vida mejor para cada uno de nuestros pueblos depende de la paz mundial y de la reversión de la carrera armamentista. Las negociaciones confinadas a un círculo estrecho de potencias nucleares han hecho poco progreso. Nosotros somos estados no-nucleares, que queremos a la energía nuclear utilizada solamente para la paz. Pero nosotros también tenemos el derecho a vivir y a ser oídos. En el nombre de la humanidad y en bien de todos nosotros, convoco a las potencias nucleares a dejar de lado el uso de armas nucleares en cualquier circunstancia; suspender todas las armas nucleares, y reanudar las negociaciones por el desarme con la determinación de llegar a un acuerdo.

...El nacionalismo no nos aparta de nuestra común humanidad. Qué maravillosa oportunidad es la nuestra con un conocimiento inmenso y una creciente capacidad. Déjennos alcanzarlo, aunque sea en medio de peligros. La fe en el futuro ha traído a tantos a través de continentes y océanos para encontrarse aquí. Nosotros estamos aquí porque creemos que las mentes y actitudes pueden y deben ser cambiadas; y la injusticia y el sufrimiento pueden y deben ser disminuidas. Nuestro mundo es pequeño pero hay lugar para todos nosotros para vivir juntos y mejorar la calidad de las vidas de nuestros pueblos en la paz y la belleza.

Traducción Luis César Bou

 

Volver al Observatorio de Conflictos

1