DAME ESO, TENGO UN NUEVO JUEGO PARA TI...

(... mi señora, por piedad, ya no puedo más...)

Mi cuerpo esta totalmente limitado por las duras cadenas ya el látigo ha hecho estragos en mi espalda, mi posición ante mi victimaria es totalmente humillado, encima ella me hace sostener en mi boca el látigo con que me ha golpeado inmesericordemente.

Para ella soy menos que un perro. Solo me saco de mi celda para divertirse.

Desde mi posición puedo ver la hermosura de mi ama y su interminable poder sobre mi, aunque siento desfallecer me atterra pensar que me pasaria si caigo al suelo en este momento, nada la detendria para que moliera a puntapies.

Seguramente ahora querra descansar el cansancio que le causa estar de pie y a mi me tocará refrescar con mi lengua la planta de sus pies. Sus pies alli guardados por horas dentro de ese par de finos zapatos de tacón y el calor de las medias de ceda que los hacen sudar, cuando menos podre calmar un poco esta sed que me esta matando...