La Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA), la Academia de Siquiatría de Puerto Rico, el Consejo Estatal de Planificación de Salud Mental y la Unión General de Trabajadores, coincidieron en que por causa de las aseguradoras se han perjudicado los servicios de salud mental que se prestan en la Isla. Indican a su vez, el incremento desmedido en costos, no ha permitido que se preste el tratamiento adecuado a los pacientes recipientes de estos servicios 1. 25 de abril de 2003 Capitolio- La Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA), la Academia de Siquiatría de Puerto Rico, el Consejo Estatal de Planificación de Salud Mental y la Unión General de Trabajadores, coincidieron en que por causa de las aseguradoras se han perjudicado los servicios de salud mental que se prestan en la Isla. Indican a su vez, el incremento desmedido en costos, no ha permitido que se preste el tratamiento adecuado a los pacientes recipientes de estos servicios. Estas declaraciones fueron hechas en vista celebrada por la comisión de salud, que investiga la prestación de servicios de salud mental por parte de las aseguradoras u organizaciones de servicios de salud. La doctora Sara Huertas, quien representó la Academia de Siquiatría, expuso que "se han demostrado serios problemas tanto en Puerto Rico como en los Estados Unidos en el acceso y la calidad de servicios de salud mental prestados a través del modelo conocido como Cuidado Dirigido". También expresó, que al añadirle a esta fórmula filosófica compañías con fines de lucro, el resultado no ha sido eficiencia o costoefectividad, sino racionamiento de servicios. Esto queda evidenciado en el desenfrenado aumento en gastos en salud en Puerto Rico. "Tanto en el pasado como en el presente, no han existido servicios de emergencia de salud mental en el sector privado. Los hospitales privados de siquiatría sólo proveen unos servicios de admisión a su hospital, pero no de estabilización de emergencia, sin proveer ni administrar medicamentos cuando son necesarios", añadió. Por su parte, la doctora Dalila Aguilú, Directora de la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción, sostuvo que las compañías aseguradoras son expertas en limitar el acceso en denegar servicios que otros proveedores brindan a su población, que en ocasiones operan facilidades en condiciones de hacinamiento que atentan, no solo contra la seguridad de las personas, sino contra su dignidad como seres humanos. Mientras, Pilar Christian Mariani Profesora Emérita en Terapia Ocupacional del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico, señaló que las compañías asuguradoras no cumplen con la Ley 408, ni con el contrato que firmaron con ASES. Esbozó además la profesora Christian, que el Consejo tiene serias reservas de que puedan lograrse significativas mejoras en el actual modo de prestación de servicios de salud mental, en un sistema donde la salud fiscal de los proveedores es el principal criterio utilizado por las compañías privadas vs. la calidad de servicios. Finalmente, Juan Eliza Colón expuso que sin embargo, se presiona e insiste en la llamada reorganización de la Adiministración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA), a lo que se opone "tenazmente" por considerarla una política equivocada. Entiende Eliza Colón, que si se cierran los centros de servicio que actualmente operan bajo esa Agencia, la crisis que enfrentarán los 700 mil pacientes de salud mental en Puerto Rico, se verá multiplicada