1.      Mi imaginación es una fantasía simple y en broma. La vida que nos muestra tantas caras, solo tiene una con la que puedo bromear, cambiar penas y preocupaciones por alegrías y compartirlas con ustedes. 

Espero que ninguna de nuestras “Guardianas de la Bahía” se de por aludida. Solo busqué el buen humor y la sonrisa. Pero no quiero pecar de cándido. En imaginación nuestras “saposoas” nos llevan el juego de Té, digo... nos llevan la delantera “siempre”. ¿Cómo creen que se originan los entripados domésticos? (Púchicas, se me escapó)

2.      “Si algunos de los “muñecos de la ciudad” que lea mi “poe”, no ha sentido, deseado, imaginado o alucinado compartir con esa fantasía; en algún momento de su atribulada vida, que se haga socio al toque del club de Mentirosos, “La Verdad Desnuda”.Ya saben donde queda, si... en el piso 9) Los espero. Eviten aglomeración y sobre todo “no empujen” 

3.  “Toma mientras”.- Es una poesía conversadas con mi mujer y aceptada –desde luego- como una broma (Gracias mujer)

Imaginariamente muchas de nuestras papayitas querrán tirarme al mar, para que me sacudan las olas(ojo, no dije bolas) no por sentirse aludidas, sino por la inscripción masiva de chancaqueros, en el Club de Mentirosos, porque con la riquísima experiencia que ellas se traen desde el milenio pasado (uy curuju,  ya van dos milenios) sobre los secretos de la media vuelta, la vuelta entera , con sus recutecos y demás goces(ojo, tampoco dije poses) en el privadísimo terreno del “somier”, deben saber que este, no solo sirve para matar la paloma, sino también para dormir y soñar como lo hice yo y que “mis sueños, sueños son” (Adrián de la Barca)

Bueno pues, aunque no soy poeta ni versos compongo,

            Aquí está tu calzón, dime donde lo pongo.

Adrian

AGPR.CMFB-256

Oct. 2003

TOMA MIENTRAS

Pa’ inspirarme en este escrito, tuve que pensar en el baño

Controlándome contrito y ajustando bien el caño

No vaya a ser que después me sorprenda un buen soponcio

Y en la noche estés feliz dedicándome un responso.

Al saber que habías venido muy oronda esta mañana,

Se erizaron mis neuronas como carne de gallina,

mientras que tu muy tranquila, pretenciosa y con gran pana,

Regresabas decidida a cuadricular mi vida.

¿No te acuerdas ya cretina de mal trato que me dabas,

con tus poses altaneras de pachá y perdonavidas,

con tus aires prepotentes de inmaculada y divina,

despreciando mi cariño, sin darme tu a cambio nada?

Siento unas ganas de aullar, como un piel roja ofendido,

De indignación y protesta por tu ruin atrevimiento,

Cuando impasible comentas sin piedad ni sentimiento,

Que el amor que yo te he dado, ya lo has echado al olvido.

Cuando fingiendo dulzura me acaricias el cachete,

Se me revuelven las tripas de humillación e impotencia,

De no poder zarandearte hasta calmar mi impaciencia,

Ni de ablandarte las nalgas aunque se me hinche el juanete.

Lo que si yo necesito para quitarme este trauma,

Es tomar mate de malva, uña de gato y un quete,

Porque mi próstata llora, mi columna clama calma,

Y yo no puedo agarrarte pa’ aplicarte  un torniquete.

Pero ya me estoy curando y veras pronto querida,

Que te voy a “reventar” dejándote adormecida,

Con tu pucho entre los dientes y de cubito ventral,

Pa’ que te quemes la lengua por hablar de mi tan mal.

No voy a quedar contento sin tomar mi previsión,

De no poder darte al momento, mi primer cachetadón,

Pues vas a perder el habla, la caspa y la orientación,

La memoria, tus antojos, tu sostén y tu calzón.

Del segundo soplamocos, de los que hoy se dan muy pocos,

Vas a perder tus amigos, tu cartera y hasta el hambre,

Dejaré solo contigo, dos alergias y un calambre,

Pa’ que sepas que los buenos, como yo, hay muy pocos.

Pero al fin querida mía, ya estoy tranquilo en mi finca,

Sosegado, recompuesto y dispuesto a perdonarte,

Sino perderé mi tiempo y de mi vida una parte,

Y por si fuera muy poco, perderé también la tinka.

Tu que creíste en Jesús como el divino Maestro,

Ven al hogar que tuvimos, para volver a empezar,

Volvamos pronto al lugar que no dejó de ser nuestro,

Porque Jesús nos lo dio y nos quiere perdonar.

Han pasado algunas horas, de silencio paz y calma,

Y siento que se me fueron todos los brios del alma,

Y es la luz de la mañana, en mi mundo tan pequeño,

Que me despierta y me dice: ¡Esto fue tan solo un sueño!

Retornar al índice general