No necesariamente esperemos Navidad, Año Nuevo,, Semana Santa, ni sufrir una catástrofe natural o la muerte de un ser querido  para orar o ponernos en reflexión.

Este comentario es para inspirarnos a estar "SIEMPRE" dispuesto a la oración; a estar cerca de Dios.

Si amamos a Dios, busquémoslo un momento cada día; en el silencio de nuestra habitación, en la soledad de nuestra alma o en el vacío de nuestro corazón. ¿Por qué no acudir a quien nos ama tanto?, Busquemos su mirada, su sonrisa, su alegría, su paz, su perdón; a cualquier hora, cualquier día, en cualquier lugar. El, siempre está con nosotros.

Enmendemos nuestros actos en los años de vida que nos queda, dominemos las presiones de corrupción de este mundo moderno de morbo y erotismo, que solo degrada a la mujer como instrumento de placer, cuando la mujer es el ser amado por mandato Divino. Como madre de Jesús, como madre de familia, como esposa, hermana, hija, como ser humano; como el prójimo mas intimo, como el ser que quizá nos acompañe en nuestros últimos días.. Y con esta realidad ¿qué aprenden nuestros hijos?¿nuestros nietos?¿qué concepto guardarán para su madre, sus hermanas o su esposa?

Cuando los niños quedan solos en casa, tienen el perturbador Internet con sus alcances pecaminosos.. Y el intruso pornográfico y violento que es la televisión, que irrumpe hasta en la mente de los adultos,. Absorbe, apabulla, envenena, no nos deja hablar, no pregunta, no escucha, se lo habla todo. No estoy contra el Internet, la TV , ni los avances científicos que nos traen progreso, diversión, cultura, pero censuramos sus programas, controlemos su uso, salvemos la mente de nuestros inocentes, si aun es posible. Recuperemos nuestro equilibrio afectivo, nuestra madurez.

Ya hemos vivido lo suficiente, como para entender los mandatos de Dios. Acatemos su voluntad y vivamos en paz, con amor, tolerancia y mucha fe e n el futuro. Así lo deseamos para nuestra Gran Familia, Beatriz y yo (Dic.03 Enero 04)

ADRIÁN

AGRR-CMFB-256

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